Mi amor de hermanos
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Debo decir que ahora tengo 22, todo empezó hace 10 años. Mi padre trabajaba en una empresa fuera de la ciudad donde vivíamos, y mi madre hacia turnos dos veces a la semana en su trabajo y llegaba hasta tarde en la noche.
Yo tengo cabello guerito, ojos color miel y en ese entonces, mis senos eran pequeñitos, apenas tenía caderas y siempre he tenido buenas nalgas. Mi hermano Miguel, estaba en la edad de la pubertad y aveces yo lo sorprendía viendo videos porno o revistas porno. MI hermno era muy promiscuo, pero a esa edad yo no sabía ni que era eso.
La primera vez me dijo que nos bañaramos juntos, ya que las noches cuando mi mamá no estaba en casa ella nos pedía que nos bañaramos antes que ella regresara. Yo tenía dudas, pero como era mi hermano le dije -vale!-, fue la primera vez que le vi su verga, aún era pequeña y delgada, ya tenía vellos púbicos arriba y en sus huevitos. Luego yo me desnudé con un poco de verguenza frente a él, mi cuquita apenas tenía pelitos tiernos pequeños. Pero mi hermano no dejaba de verme mi cuquita. Luego dijo que cada uno limpiara al otro, primero fue él. Me paso sus manos por todo el cuerpo, en mis senos, entre mis nalgas y frotó también mi rajita, sentí un fuerte calor en el cuerpo, pero crei que era normal.
Luego, me tocó a mi, le pase el jabón en todas partes, me pidió que le restregara el pene, lo tome y lo empecé a limpiar, fue cuando en mis manos se comenzó a erectar hasta ponerse parado, yo me reí y le pregunté que le pasaba. -Es que me excité con tus manos- me dijo.
-Quieres ayudarme a desinflamarlo?- me preguntó
-puess…si- le contesté
-Cierra los ojos y abre la boca- me dijo.. Vamos apurate!!
Primero me puse de rodillas en la tina del baño, el fue colocando su pene en mi boca, sentí como su pedazo de carne entraba en mi boquita, casi al ras. Abri los ojos y quise retirarme, pero el me tomó de la cabeza y me dijo que yo había prometido ayudarlo. Me calmé.
-Ahora empieza a chuparlo, como cuando chupas una paleta- me dijo Miguel
Comencé a chuparlo como si fuera un dulce o paleta, su carne estaba caliente y dura, yo observé que eso la causaba mucho placer a mi hermano, él cerraba constantemente los ojos.
-Espera, ahora me toca a mi moverme- me dijo
Me dijo que me quedara quieta, el comenzo a meter y sacar su verga de mi boca, hubo un momento que me metía su verga completa. El se comenzó a excitar mucho.
-Chupa!! chupa!!- me decía. Asi que cada vez que me la metía en la boca yo succionaba. Miguel emitió un buen grito y luego varios pequeños, sentí un liquido tibio salir de su pene y entrar en mi boca, como no lo esperaba me ahogó un poco cuando succioné, saqué su verga de mi boquita y comencé a toser y tragar su semen (aunque no sabía que eras eso en su momento). Terminamos de bañarnos y nadie preguntó nada, había un silencio entre los dos. Al final me dijo que no le dijera nada a nuestra mamá, y asi lo hice.
Las siguientes semanas se repetía constantemente nuestros baños juntos. Yo le daba mamadas a su pene y me tragaba su semen. Pero una de esa primeras veces, llegó a mi habitación cuando estaba vistiendome y me dijo que quería pagarme lo que yo le daba en la ducha. Un poco ignorante le dije que estaba bien, al final yo estaba también muy caliente porque cada vez mi hermano me tocaba más mi partes íntimas en la ducha.
Me pidió que me acostara y abriera las piernas, el me sacó mi braguita, -cierra los ojos!- me volvió a pedir Miguel, luego él se metió entre mis piernas y comenzó a lamer mi coñito, su lengua estaba caliente, me hizo estremecer cuando tocó mi clitoris (que no sabía que asi se llamaba esa parte), luego como si fuera un perrito me lamió toda mi rajita, yo sentía que me estaba ahogando, gemía y sentía que estaba a punto de orinarme, pero no era eso, mi hermano me estaba llevando a mi primer orgasmo de mi vida. El siguió comiendose mi pastelito y finalmente lo tomé del cabello y lo jalé con fuerza, creo que me quedaron unos cabellos en los dedos, tuve un tremendo orgasmo, que grité y grité hasta que me pasó. Luego vino a mi un sentimiento de verguenza y cerré mis piernas y me puse una toalla cubriendome mi rajita. Miguel estaba nervioso y salió casi corriendo de mi habitación.
Los días pasaron y Miguel y yo nos dabamos sexo oral en la ducha, yo le comía su pene y el se metía entre mis piernas abiertas para lamerme mi cuquita, ambos nos provocabamos diversos orgasmos, por lo regular eran dos cada uno. Las duchas tardaban hasta una hora.
Comento que no había malicia en lo que hacíamos, Miguel ni novia tenía en ese momento. Nos parecía tan normal y corriente. El primer año y medio nunca lo hicimos fuera de la ducha, solo allí.
Cuando Miguel tuvo novia, yo tenía 15 y él 17, yo sentí celos, le preguntaba si hacía con ella lo que a mi me hacía, él me decía que no, pero yo sabía que no era cierto.
En cierta ocasión, yo sabía que él veía videos porno, asi que controlé cuando él lo hacía en su habitación, asi que entré intempestivamente y los sorprendí, el no pudo apagar el video, asi que yo lo ví, había un hombre penetrando a una mujer al estilo normal, él hombre arriba y la mujer abajo. Nos quedamos viendo el video hasta que el hombre termino en una gran corrida sobre los senos de la chica.
-Quieres probar hacer eso?- le dije a Miguel
-Deveras quieres hacerlo?- ahora me preguntó él a mi.
Me acosté en la cama y Miguel me quitó la braguita, yo ya tenía más vello púbico, y él ya era un experto mamador, sobre todo de mi cuquita, asi que llevarme a un rico orgasmo no le era dificil, pero él sabia que esta vez no me llevaría a uno. Luego de comerse mi cuquita, me hizo algo que jamas me había hecho, me besó los senos y los pezones, luego me besó en la boca, fue mi primer beso y me gustó que fuera Miguel. Luego se subió en mi y ayudándose con la mano me fue clavando su verga en mi virginal rajita, me dolió mucho, pero yo quería ser de mi hermano, me penetró y luego se puso a moverse encima, el dolor se convirtió en placer y yo aullaba de gozo cada embestida que me daba él.
Me hizo correrme facilmente dos veces, como él había estado masturbandose en la cama viendo los videos porno, alcanzó su climax hasta después de casi media hora entrando y saliendo de mi rajita. Solo me cogió en la pose del misionero, pero fue suficiente para mi primera vez. Al correrse Miguel la sacó y me echó su semen sobre mi vientre. Yo no sabía que lo hacía para no preñarme.
Luego las futuras duchas se convirtieron en sesiones de sexo duro. Empezabamos comiendonos nuestros sexos en la ducha y terminabamos follando en su habitación o en la mia. Comenzamos a ver los videos porno de Miguel para copiar otras posiciones y todas eran un gran descubrimiento para ambos, cogíamos con todas las ganas, yo llegaba a varios orgasmos y Miguel se corría hasta tres veces.
Asi duramos, hasta que en el colegio comenzaron a darnos clases de educación sexual, alli me enteré que sexo entre hermanos se llama incesto y que es prohibido, mi hermano y yo nos sentimos culpables y hasta lloré varias noches, crei que nos podían meter a la carcel o algo asi. Ya no volvimos ni a bañarnos juntos. Luego cada quien tuvo su novio o novia.
Alli terminó nuestra relación "incestuosa" con mi hermano. Ya ni hablamos del tema entre los dos.
pecado o naturaleza??
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