Mi cuñado y mi sobrina 3. (Final 1)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Acostadoyflojo.
Despues de la primera vez que sucedio lo que ya habia contado las escenas se repitieron algunas veces.
Casi todas fueron echas en la noche y dentro del cuarto de juegos que era el lugar mas seguro de toda la casa.

Mi esposa trabajaba siempre 2 horas mas que yo, y eso me daba chance de algunas veces tener a mi hijastra para hacer cosas ricas, muchas veces un sexo oral del cual era experta, su boquita alrededor d mi pollon gordo y sus manitas alrededor d el subiendo y bajando.
Hasta que lograba eyacular gran cantidad de leche el cual ella se bebia con gusto sin dejar ni una gota.

A todas esas mi hija menos siempre staba con mi suegra en donde pasaba el rato hasta que mi mujer fuera por ella.

Lo que contare sucedio un dia sabado en el que yo no fui a trabajar, y por eso tenia la casa para mi solo.
Valeria ya contaba con 10 años y mi hija 6 años y medio.

Temprano mi mujer se alisto para irse a trabajar, dejandome instrucciones para la comida, horarios y todo relacionado con las niñas y al finalizar se fue.

Daban las 9am cuando pude sentir unas manitas que acariciaban mi cuerpo por encima del cuerpo, metian la mano por entre las sabanas y tocaban mi pene por sobre el boxer, cuando me desperte era mi valeria quien queria jugar con papito y me deje hacer, ella misma me quito el boxer y me saco toda la sabana quedando totalmente desnudo con mi pene duro y grueso mirando al cielo.

Ella acerca sus labios a mi cabeza y le da un beso, acto seguido abre la boca y enguye el glando y comienza el tan delicioso trabajo bucal que mi nena saber hacer

– oh bebe, que rico lo haces.
Uff que fantastico, asi mi vale haslo como tu sabes, trata de comertelo todo.
Siiiiiii oh que rica boquita tienes.

Diciendo ste monton de cosas producto de la gran exitacion y placer que yo tenia mientras mi beba trataba de complacerme en todo cuanto le pedia.
Paso un buen rato en su trabajo bucal hasta que no aguante mas y explote

– Aaaaah dioooooos, que rico.
Cometelo bebe, asi, no dejes ni una gota.
Cometelo todo.
Ahí va, ya sale la lechita, ahí va.
Si.
Tomalaaaa siiiii aaaaah

Mis gritos no se hacian esperar y mientras eyaculaba en la boca de valeria mi cuerpo convulcionaba sin poderme contener.
Al final quede sin fuerzas, fue un trabajo de casi 30 minutos de los cuales disfrute, me dormite un poco mientras valeria seguia lamiendo mi pene q iba quedando sin ereccion y despues lamia mi abdomen, mi pecho, acariciaba mis piernas, besaba mis labios, mi cara.

Como reaccion a eso mi pene empezo a despertar de nuevo, ella al percatarse solita toma mi pedazo de carne y lo situa en la entrada de su vaginita y se deja caer suavemente.

– ah papi, me gusta mucho, aaaaaah siiii
– si bebe.
? Te gusta tener a papi dentro.
!? A papi tambien le gusta estar dentro de ti mami bella.

Cuando ya todo mi pene staba totalmnte dentro de mi bebita ella empezo a subir y bajar sacando me pene hasta mas alla de la mitad y luego dejandose caer, una y otra vez una y otra vez y otra vez.
Eso era la gloria de todas las glorias.
Yo la toma con mis manos de sus caderas y empece a marcar la velocidad de sus movimientos.
Y al tiempo que ella subia yo movia mi cadera hacia abajo y cuando ella bajaba yo subia mis caderas.

– ah papi, me gusta, se siente rico lo que me haces.
Es muy satisfactorio jugar a esto contigo.
Siempre quiero hacerlo
– oh mami, si, lo que tu digas, ooooh que rico, que sabroso.
A sigue haciendolo, lo haremos siempre que quieras te lo prometo

Nuestros movimientos eras cada vez mas acelerados, mas fuertes, nuestras manos acariciaban nuestros cuerpos.
Por un lado yo acariciaba ese cuerpecito blanco, delgado de pompas llenitas, apenas unos botones de senos, cabellos rizos y una vagina apretadisima, rosada con un clitoris diminutos
Ella acariciaba cn sus manitas mi pecho peludo y mi abdomen poco pronunciado, tambien lograba acariciar mis gruesas y peludas piernas y se que a ella le exitaba mi cuerpo

La tome y le di la vuelta sobre la cama, me situe sobre ella con las piernas abiertas y clave totalmente mi pene en ella.
Y mi sudor caia sobre ella, mis caderas subian y bajaban sobre ella mientras mi gruesa verga entraba y salida de su vaginita.

Estuvimos asi durante no se cuanto tiempo haciendo el amor y amandonos como un hombre y una mujer deben amarse.

Era tanta mi exitacion en aquel instante que me descontrole y mis movimientos se volvieron un poco salvajes al punto de lastimarla un poco

– hay papi me esta doliendo.
Asi no, mas suave, me gusta mas suave
– ah lo siento mi amor, aguanta, ya no tardo mucho en regarte todo mi semen.
Ah, si.
Alli viene.
Aqui sale.
Aaaaaaaaah! Si, tomalo, es tuyo.
Dioooooooos

Me regue dentro de ella como nunca antes, mi semen lleno su cueva vaginal y algun poco brotaba fuera d ella por la comisura que quedo al sacarle mi pene completamente.
Y nuevamente volverselo a meter hasta el fondo una y otra vez hasta que perdio dureza.

La debilidad era extrema para mi.
Vi el reloj que marcaba ya la una de la tarde, habiamos pasado casi 4 horas haciendo el amor.
Me disponia levantarme de sobre ella, y al ir sacando mi pene de su vagina escucho

– papi que estan haciendo.
!!???

Era mi hija que nos miraba con los ojos bien abiertos por la curiosidad del acto que habia estabo presenciado.

Pero esa es otra historia.