MI FAMILIA SEMBRO LA SEMILLA DE LA PERVERCION ( el tío Fabio y mi nuevo amiguito Mateo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Al día siguiente de mi Debut anal, me levanté temprano para irme a lavar la cola, ya que todo era un enchastre, fui caminando hasta los baños del camping, pero al entrar a la zona de duchas se encontraba el señor del remolque, se estába bañando y se veía todo su cuerpo desnudo lleno de bellos y sobre todo se veía ese enorme pene blanco y cabezón, me invitó a ducharme, pero le dije que sólo me iva a lavar la cara, no quería que me vea con mi tanguita puesta.

Cuando volví a la carpa mis tios ya se habian levantado y lavado la cara con agua de un vidon, me invitaron a ir al balneario del río, entonces fuimos y eramos los únicos que estamos ahí, mi tío se metio un rato al agua, mi tía se sacó el corpiño para quedar con sus pechos al aire y yo me puse a jugar con la arena.

Como a los 30 minutos aparece el señor del camping con un niño, más o menos de mi edad, se sentó en la arena junto a nosotros nos empezó a hablar de qué el niño vivia cerca del camping con su abuela y varios hermanitos, y que como pasaban algunas nesecidades el siempre lo traía y le daba de comer, ahora lo traía para que juegue con nosotros, quería ver si podía jugar conmigo, jugamos un ratito en la arena, pero mi tio lo invito a meterse al agua, como el agua estaba fría no me quise meter y me quedé con ruben y mi tía.

Se pusieron a charlar y Ruben le empezó a acariciar los pies y las piernas a mi tía, llegando en ocasiones hasta su diminuto bikini, ella solo se reía y se pellizcaba los pezones calentando al tipo al máximo.

Mientras mi tío jugaba con el muchacho en el agua, yo veia como mi tía lo seduce al Ruben y me da bronca porque era muy puta con sus tetas al aire y Ruben observando, a la vez me parecía muy exitante.

Entonces no sé qué le dijo al oido, ella le pidió que se siente a su lado, le dijo que solamente podíamos jugar tocarnos un poquito y alguna que otra lamidita pero nada más, porque yo le pertenecia a su marido, entonces Ruben se para de la silla y le dice el niño, que se llama Mateo, que estaba dentro del agua: "juga tranquilo que es mi amigo, juga tranquilo que no pasa nada," entonces se volvio a sentar y le dijo que podrían intercambiar que el otro nene chupa y coje también, sino mira cómo está jugando ahora, en ese momento nos quedamos un ratito callados mirando cómo el niño se quedó quietecito junto a mi tío durante un rato luego éste se empezo a frota contra mi tío hasta que en un momento los dos empezaron a besar en los labios.

Mi tía me llamo para que me siente en sus piernas me pidió que me baje un poquito el short para mostrarle mi tanguita y mi colita hermosa a aquel hombre, el acarició y la masajeo un poquito, pero cuando intentó llegar a mi agujerito yo me saqué entonces me dijo mi tía que me bajara delante de el entonces agarró mi mano y la empezó a meter por debajo de su shortcito por la parte de la pierna, intentando llegar a agarrar su pene.

Aún está un poco pegajoso y algo blandito pero el me sacó la mano tranquilamente bajo su short junto con el boxer dejando su pene al aire, era realmente un pene muy enorme, muy grande, el más grande que yo habia visto creo que mediría unos 20 centímetros, pero sobre todo era muy gorda hasta mi tía se sorprendio al verlo, y dijo que mejor nos acostamos en la arena por si venía alguien, nos veía.

Ni bien nos tiramos en la arena yo me puse a chuparle la pija, pero no me entraba de tan gorda que era y mi tía me corrió a un lado y me mostró como ella si se la metía entera, se acomodaba de espaldas al agua para que su marido no viera lo que hacia, pero en el agua también estaban muy entretenidos y ni prestaban atención, entonces ella se acostó al lado de Ruben y me dijo que vigile que nadie venga, y ella solita empezó la dura tarea de meterse esa verga gorda en la conchita, en eso veo que una familia se acercaba y le abise rápido a mi tía quien rápidamente se vistió y me mando a llamar a mi tío se prácticamente se estaba cogiendo a Mateo en el agua, todos volvimos al camping, en el camino escuchaba como mi tía le decia a su marido que me entregue que total el primero ya había sido él.

Cuando llegamos al camping Ruben propuso que los niños entremos en la carpa con mi tío a jugar, que no había ningún problema, y que después piense si me compartia con él o no, mi tío aceptó y cuando estaba entrando a la carpa vi a mi tía casi corriendo hacia el remolque.

En la carpa nos desnudamos y Fabio nos sacó alguna que otra foto dándonos besos y practicándo sexo oral pero luego largo la cámara para unirsenos al sexo, primero entre los dos se la chupabamos a mi tío pero como no la tenía muy grande nos terminábamos dando lenguetazos entre nosotros, después se recostó boca arriba y yo le puse mi colita en la boca para que me la empiese a dilatar con la lengua, Mateo se le cabalgó ensima de la verga y me llamo la atencion que ni siquiera se quejo, ni siquiera hizo un gesto de dolor, fue como estar mirando la tele, se la metió sin siquiera escupirla, mucho menos una cremita, y se movía como una baquerita domando un caballo, ella noto mi asombro y me agarró de la nuca y nos besamos, esto parece que le calentó mucho porque me metía la lengua hasta la garganta casi, en eso se escuchaban gritos y gemidos, que venían de afuera, me vino al instante la imagen de mi tía a la mente, gozando como la zorra que era de esa pija enorme, a la vez lo tenía al tío Fabio mamandome el culo y cogiendoce a ese niño frente a mi, entonces con Mateo nos miramos cómplices por escuchar esos gemidos y empezamos a gemir para que mi tío no la escuche a su mujer.

Fabio nos hizo bajar y nos puso en cuatro patas una al lado de la otra, y me refiero a nosotras en femenino porque en ese momento éramos dos nenas jugando y explorando con un macho, entonces me empezó a penetrar sin cremita ni nada, y obviamente yo no quise ser menos que mi amiguita y me aguante.

Fabio tomó valor y me la metia a su antojo mientras yo gemía como una putita, entonces paso a Mateo y le daba muy fuerte, ya que ella en su afán de superarme le pedía más y más, entonces yo le pedí que me guarde un poquito para mi y se la sacó y le la volvió a meter, me estaba cogiendo como loco, descargando toda su furia en mi ano, casi no soportaba mas, sentía que me iba a sacar los intestinos para afuera y sentí algo muy caliente, era la lechita que estaba descargando mi tio, adentro mío, apenas término se acostó y dejandome el oyito vacio.

Entonces Mateo me sorprendió prendiéndose a mi cola succionándola hasta sacar un poco de lechita, me tumbo y quede acostada boca arriba, se me abalanzó y me compartió la leche con un beso.

Yo estaba que esplotaba de calentura y sentí que Mateo se quería meter entre mis piernas, yo la mire extrañado, entonces se acercó a mi oído y me dijo que lo deje entrar que estaba muy caliente y necesitaba cogerme, yo entonces no puse resistencia y me deje hacer, el me abrazo tiernamente y me penetró mientras me besaba, yo tenía la cola resbaloza y su pequeño pene entró sin resistencia alguna.

Sentía sus envestidas y sólo dejaba de besarme para decirme que no aguantaba más y que después yo podía metérsela a el, yo le aclare que sólo me gustaba que me la den a mi, entonces me beso y abrazo con fuerza porque ya estaba acabando, no duro casi nada, cuando lo sacó todo blandito me dijo que si lo chupaba un poquito estaba listo para otro polvo.

Me agache y se la empecé a mamar, sentí las manos de mi tío acariciándome la cola y me puso de costado para chuparme el pito, pero yo lo hice que suba a comersela a Mateo también, enseguida la tenía dura de vuelta, entonces Mateo se cogió a Fabio en cuatro patas.

A penas acabó Mateo a Fabio se le puso bien dura y otravez comenzó todo, sólo que esta vez costo un poco más que acabe fabio, primero subí yo y me hice cojer la colita, después subió Mateo y nada, a pesar de sus movimientos veloces, entonces las dos nos pusimos a masturbarlo un rato cada una para no cansarnos, hasta que acabó algunas gotitas.

Cuando salimos de la carpa ya estaba oscureciendo la pansa me dolía pero de ambre y Marta estaba sentada al lado de Ruben como si nada hubiera pasado, aunque si se la notaba sudada y cuando me senté en sus piernas le sentí mucho olor a sexo, pero Fabio hizo como si no se hubiera dado cuenta, comimos unos sándwich y tomamos unas cervezas.