Mi hermanita. Primera parte
Todo empezó con una inocente propuesta de mi hermana menor, se me fue la mano y terminó bastante bien.
Soy Miguel, actúalmente tengo 18 y esto pasó el año pasado cuando tenía mis 17 recién cumplidos. No me considero guapo pero tampoco me han dicho ni me he dicho feo nunca, simplemente soy estándar. Mi hermana, Evelyn —Eve de cariño— por su parte tiene 14, en pleno desarrollo pero con una hermosa cola, leves pecas, pelo lacio y castaño, ojos marrones claros, tes blanca y de 1,63 cm de altura. En su momento, ella tenía 13 y yo 17, ella era inocente y yo realmente no la veía como algo más que mi bella hermanita, a quien le tenía y tengo muchísimo cariño, pero sin duda ese cariño de hermano cambió este último año a algo más de amante. También tengo otra hermana pero de ella no voy a hablar dr momento.
Todo empezó el año pasado en uno de los primeros días de invierno cuando ella se me acercó a la tarde-noche para retarme a jugar videojuegos, algo que no rechacé y así, terminamos por ir a jugar a la Play un rato. Mamá y Papá, aunque presentes, los últimos años habían estado fuera durante muchas horas del día casi siempre por cuestiones de trabajo, así que los veíamos más que otra cosa a la tarde o cuando comíamos; ese día estaban ambos para la cena. Terminamos de jugar y mi vieja nos llamó para la comida, mi madre hizo uno que otro chiste sobre novios a mi hermana y todos reímos ante su molestia e incomodidad, incluso ella. Pasó la noche y a las once de la noche ella me llamó para ver alguna película que haya en Netflix.
Antes de continuar les explico que mi casa está compuesta por un pasillo de entrada que da a un patio interno sin techo, desde el que se entra a mi casa con un living bastante grande como recepción. Pasando el living hay un pasillo con una puerta corrediza que, de entrada, da a la puerta del baño; hacia la derecha quedan las habitaciones de mi hermana y la mía (enfrentadas), además del lavarropa y esas boludeces en un cuartito; hacia la derecha se haya el comedor con la cocina pegada y la habitación de mis padres.
Mis padres se habían ido a la cama cansados del trabajo, así que nosotros tomamos el living con libertad y buscamos que ver. No había nada bueno o que no hayamos visto, así que puse algún clásico del cine. A mi hermana no le gustan los romances así que, no sin antes proponer una de acción o aventura, terminé poniendo una de terror no tan vieja a petición de ella. Realmente ninguno estaba tan asustado, noté que ella pegaba ciertos saltitos por sustos con screemers pero no era nada del otro mundo. Casi por el final apareció una escena de índole sexual de dominación y sadomasoquismo que puso un poco incómodo el ambiente, pero fue algo rápido, rematado por un inoportuno screemer que no se veía venir; me asusté levemente, pero mi hermana directamente se acercó rápidamente y me abrazó fuertemente con miedo y los ojos cerrados.
—Tranquila, Eve. Es una película y ya pasó, no seas bob- —dije mientras acariciaba su cabeza, interrumpiendome a mi mismo tras notar como ella no estaba usando corpiño y lograba sentir sus pechitos poco desarrollados.
A decir verdad creo que ella se dio cuenta de eso y fue lo que hizo que se separase rápido.
La película acabó y cada uno se fue a su habitación. Una hora después fui a la cocina a preparar un té de manzanilla para descansar y cuando volvía con la taza me choqué con mi hermanita, dejando caer sin querer el té caliente sobre su pecho y zona abdominal.
—Perdón Eve, no te vi —expliqué nervioso mientras abría la puerta del baño y recogía los pedazos de la taza.
—No pasa nada, Migue —me dijo levantándose un poco la remera para no quemarse.
Ella se metió al baño a limpiarse, y tras limpiar mi desastre me fui a mi pieza. Supongo que ella se cambió y todo eso. Más a la madrugada no podía dormir, y escuchaba leves sonidos que venían de la pieza de mi hermana, ella solía jugar con su celular a la madrugada hasta dormirse. Me levanté y con mi harapienta ropa para dormir fui a su pieza, tocando la puerta y pasando después de que su angelical voz de niña me dejase pasar.
—¿Qué pasa? —me preguntó.
—Es que no puedo dormir y quería ver que onda con vos. Deberías dormirte, ya sabes que Mamá no quiere que estés a estas horas con el celular.
—Ya me iba a ir a dormir —intentó hacer una broma sin sentido de gracia, pero me reí por cortesía.
Apagué la luz de la habitación y me dispuse a salir, pero ella me detuvo cuando estaba por pasar por la puerta.
—Es un poco raro pero, ¿Queres que te ayude a dormirte abrazandote? A lo mejor te ayuda —sugirió con naturalidad.
Era una propuesta inocente que yo claramente acepté sin dudarlo mucho. Fuimos a mi pieza y nos acostamos, yo contra la pared y ella del otro lado, para que pudiese irse una vez me duerma yo.
—Hasta mañana Eve.
—Hasta mañana —dijo para luego darme un beso en la nuca.
Yo me quedé mirando a la pared y flexione mis piernas mientras ella me abrazaba por detrás, lo que hice fue evitar quedar en cucharita, solo por sí las moscas, lograba sentir levemente como ahora si tenia corpiño, pero aun se notaban sus pechitos un poco, aun así no le di importancia alguna. No sé en qué momento me dormí, solo sé que cuando me desperté estábamos dados vuelta. Mi brazo estaba por encima de ella y yo estaba a su espalda, pegado a ella a tal punto de sentir mi pene con la clásica ereccion matutina contra su colita.
Me quedé pasmado, no sabía que hacer. Tenía intenciones de moverme pero mi miedo a despertarla y/o mis ganas de quedarme así me superaron. No sé cual de las dos era la más presente, pero estoy seguro que ambas estaban. Intenté extender mi mano hacia mi mesa de luz para ver la hora en el celular pero al más mínimo movimiento Evelyn se movió un poco, automáticamente tras sentir como chocó su culo contra mi pene me hice el dormido y noté que ella se había despertado en ese momento. Se giró para verme, luego vio la hora en mi celular y me regreso su vista. Notó mi ereccion y como estaba contra ella. Probablemente haya sido curiosidad, pero me tocó mi miembro sobre el pantalón y tras yo hacer un leve movimiento como si estuviese dormido alejó su mano;luego apoyo un poco su trasero contra mi y se fue. Mi corazón latía a mil por hora y estaba más efecto que antes, minutos después me levanté y fui a la cocina. La mañana transcurrió con naturalidad, con leves roces verbales de su parte alegando que duermo como un tronco. Mi querida y tierna hermanita estaba invadiendo mis pensamientos más sucios y curiosos, pero el resultado de estos los voy a contar en otro relato. Espero les haya gustado.
comosigue por favor
Excitante tu relato amigo y que morbo, me dejas intrigado, cuéntame como sigue la historia, saludos 😁 😁 😁 😁
Que hay de malo en follar a tu hermana?
Con tal y no nos dejes con cojonera por saber como siguió la cosa
Me encanto! Ojala pudiera contactarte para que nos podamos dar ideas mutuamente!
Que lindo tener un hermano mayor asi…
Buen comienzo men , ya quiero leer la continuación , siga asi
Es muy entretenido este primer capítulo de tu historia. Espero la segunda parte sea el inicio de un buen incesto con tu hermana, y que no pierdas la forma de narración para que no de pereza leer.
Saludos.
Y para cuando la continuacion……se ve que va a estar buena !!