MI HIJA, ODIO Y ENVIDIA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por KARLITA-MARIPOSA.
Hola a todos. Soy de Chile … y primero debo presentarme. Me llamo Karla, soy una mujer casada de 34 años. Tengo 13 años de matrimonio, pero me siento muy extraña, sola, tonta … y por si esto fuera poco, no me siento mujer últimamente con el imbésil de mi marido, que prefiere tirarse a otra mujer … una verdadera zorra. Nunca pensé que me referiría así de esta tipa, pero se lo merece.

A ver, con mi marido tengo una hija única, que ya es una mujer … tiene 17 años y es toda una hembra. Sabe todo lo que tiene que saber en la cama, y yo le enseñé muchas cosas.
Cuando ella tenía 15 años, una buena edad para que se iniciara sexualmente, la sorprendí en su habitación con su novio, ella le estaba haciendo una mamada, pero era tan niña y tan tonta que no sabía cómo hacerlo, pues yo, que estaba espiándola, porque me encanta mirar y excitarme mmmmmm … noté que su novio, que era un poco mayor, estaba muy aburrido. Entonces yo simplemente entré a su habitación y mi hija se puso de pie avergonzada y me intentó explicar: – Mamita, yo …
Pero yo le dije: – Mi amor, no te preocupes, ya tienes edad para tirar … es la ley de la vida … pero déjame que te enseñe.

Bueno, y esa noche le di a mi niña una gran lección de sexo … con todas sus posiciones y movimientos, le enseñé a chuparla como corresponde e incluso le enseñé a ser obediente con su hombre … hasta le enseñé la forma de gemir para excitar más y hacer sentir mejor a su pareja. Todo esto se lo enseñé, usando a su novio … por supuesto jajajaja. La dejé muy bien instruida en la cama y el morbo. Incluso le pasé algunas películas para que aprendiera más. El tema es que esta tipa, en solo 2 años, quedó hecha una verdadera zorra. Yo la veía con un hombre una semana, y con otro a la semana siguiente, y después con otro mmmmmmmm … a veces, no llegaba a la casa. Yo sabía muy bien en lo que estaba metida, y nunca me preocupé porque, en realidad, yo a su edad fui igual o peor, así que solo salió a su madre. De hecho, la tuve a ella a los 17 años y me casé a los 21.
El tema es que … esta tipa se metía con puros hombres mayores, pero nunca pensé en lo que eso iba a terminar.

Una noche, en Noviembre del año pasado, empecé a notar que mi marido estaba muy distante conmigo, y hacía tiempo que la situación entre nosotros como pareja no iba bien. Y además esta tipa me dijo esa noche que no llegaría a la casa y que no la molestara. Entonces, mi marido esa noche me dijo que se iba a dormir a la habitación que es para las visitas, y yo le creí, y no me importó, porque la cosa no estaba bien entre los dos. El tema es que, no sé por qué, a eso de las 3 de la mañana, me desperté para ir al baño, y la habitación de las visitas, donde supuestamente estaba mi marido, está camino al baño, así que inevitablemente tuve que pasar por ahí. Pero … la sorpresa es que la pieza estaba abierta y no había nadie dentro. Entonces, pensé que mi marido había salido, pero, mirando desde lejos el living de la casa, noté que estaba sobre un sofá la cartera de esta tipa, y ella siempre sale con su cartera. Por supuesto, ahí con mi sexto sentido de mujer y madre, empecé a sospechar algo, porque sé la hija que tengo, una zorra que se ha metido incluso con hombres casados, sin ningún tipo de vergüenza. Así que, pensé lo peor de ella … y cuando me dirigí hacia su habitación, confirmé mis sospechas. Esta puta jamás salió de la casa, sino que esperó a mi marido en su pieza y éste cayó redondito. Noté que estaban a media luz, hablando en voz muy baja, con un tono muy
excitante mmmmmmmm …. maldita zorra, ella le decía: – Te quiero papito, te deseo, quiero ser tuya … trátame como quieras.
Y mi marido le decía: – No se trata de que quieras ser mía … tú eres mía, te guste o no. Tengo derechos sobre ti.
Y mi hija estaba fascinada … muy excitada, le decía: – Síii … sí papito. Haz lo que tienes que hacer, y que pase lo que tenga que pasar.
Ahhhhhhhhh me acuerdo y me da mucho odioooooo … maldita zorra, de la peor calaña, robándome a mi marido, qué se ha creído.

Él la desvistió con mucha violencia, le rasgó su fondo de dormir y la dejó totalmente desnuda, con sus enormes tetas al aire … y el estaba en puro calsón, luego se lo sacó y mostró su enorme miembro que estaba en plena erección mmmmmmmmmm …. esa polla que es mía, que yo la chupé antes, que me penetró como salvaje y que le dio vida a esa zorra que tenía al frente ….. ahhhhhhh que rabia. Ahora esa tipa estaba a un paso de quitármela, de mamarla y … sentirla en su concha.

Cuando estaban los dos descalzos y desnudos, él la tomó por atrás, le tiró el pelo por atrás de su cabeza y le sobaba la polla en sus nalgas …. mmmmm esta puta gemía silenciosamente mmmmm ahhhhhhh, mientras mi marido le decía: – Prepárate para lo que se te viene.
Y ella solo respondía con un mmmmmmmmmmmmm.
La sobaba en su culo con su enorme miembro y le preguntaba: – Cómo la tengo, responde zorra, cómo la tengo …
Y la muy puta le respondía: – Muy dura papito mmmmmm … me encanta.
Hasta que él se puso por delante de ella y le dijo: – Chúpamela.

Y ella … le hizo caso, se arrodilló con una perra y escuchaba como hacía sonar su maldita boca Gloooppp Gluuppp Gluuuuuuppp Ñammmm … esa era mi hija, la mujer que me estaba levantando a mi marido. Estaba totalmente hincada en el suelo chupando la polla que le dio el ser … no tuvo ningún reparo en follar con su padre … maldita zorra.
Luego, mi marido tomándola de los cabellos y tratándola como se merece la lanzó sobre su cama y él se lanzó sobre ella y yo espiando todo, cada detalle, pero no sé por qué lo hacía … por un lado, sentía odio y envidia por esta zorra de mi hija, una descarada de la peor especie … pero, no sé, algo me impulsaba a seguir viendo esa follada mmmmmmm era una película porno como las que veo yo, pero en vivo y en directo … y con más intriga y morbo.

Veía como mi marido besaba y chupaba las mejillas de esta zorra, lamía sus labios mmmmmmmm lo mismo que me hacía a mí ahora se lo hacía a esa tipa. Y ella estaba excitadísima, en las nubes, gimiendo y respirándole con la boca abierta a su propio padre … él le decía: – Eres una puta, lo sabías.
Y ella respondía: – Síiii, soy tu puta …
Y en eso … noté que llegaría el momento más sabroso para ella, y para mí también, porque a esas alturas tenía el chocho muy húmedo por la película que estaba viendo. Mi marido la tomó de sus dos putas piernas y se las abrió muy fuerte y ella exclamó: – Ayyyyyy mmmm así me gusta.
La muy zorra salió igual a su madre en eso de que le gusta que la maltraten. Sentía odio, envidia … pero, no sé, también sentía orgullo por enseñarle tan bien a mi hija a ser una verdadera amante en la cama. Eran sentimientos encontrados. Tenía dos sentimientos opuestos, pero válidos … entonces veía que mi marido le abrió las piernas a esta perra y se la clavó hasta lo más profundo de su concha … y la muy zorra exclamó con fuerza: – Ahhhhhhhhhhhh mmmmmmmm aahhyyyyy.
Veía claramente el acto sexual, lujurioso y descarado, pasional y animal, entre mi marido y la zorra de mi hija, mi rival.

Veía cómo mi marido, acostado encima de mi niña la tenía de piernas abiertas y bombeándola con fuerza, violencia, decisión y dominación … igual como lo hacía conmigo en otros tiempos, ahora se tira a esta puta, que no perdió oportunidad de engañar a su propia madre.
Mi marido la bombeaba PAFF, PAFF, PAFF, PAFF ….. escuchaba el ruido de sus huevos enormes contra las débiles nalgas de mi niña, esa zorra mal nacida …. Ayyyyy ya no sé qué pensar.
Bueno, y después noté que mi marido depositó su semilla en el vientre de mi hija … él exclamó muy fuerte, muy recio, muy varonil: – AHHHHHHHHHHHHH. Y ella exclamó con un gemido de puta nueva: – ahhhhhyyyyy mmmmmmmmmm mmmmmm.

Yo, dentro de mi chocho húmedo, llegué a sentir cómo mi marido le inundó el vientre de leche a Constanza, su propia hija, la zorra que se encargó de distanciarnos aún más como pareja, porque, desde esa noche, ellos comenzaron un romance.
Luego vi cómo mi marido sacó su polla del interior de esta tipa, para luego besarle los labios apasionadamente y decirle: – Te amo.
A lo que ella respondió: – Yo también papito.
La muy desgraciada lo tomó como hombre, como pareja … no como su padre. Descarada.

Eso fue a comienzos de Noviembre … y desde esa noche, se siguen dando a escondidas. El gran problema es que … hace dos meses exactamente, esta desgraciada le dijo a mi marido en su habitación: – Papito, estoy embarazada de ti … qué hago.
Y él le dijo que tuvieran a su hijo y que me dijera a mí que era producto de una “noche loca”, en una de sus tantas salidas, y que no sabía quien era el padre. Y por supuesto, esta descarada me dijo al día siguiente exactamente lo mismo que le ordenó su padre, que estaba embarazada y que tenía dos meses, claro … de Noviembre a Enero. O sea, ella quedó preñada esa noche. Desgraciada.

Siento odio y envidia por mi propia hija, que ahora es amante de mi marido, es mi rival. La odio. Ese hijo debería ser mío, no de ella. No sé con qué ojos veré a ese bebé … como mi nieto, o como fruto de una traición.