Mi hija, un verano donde todo comenzó.
Fue una tarde de verano, con mucho calor .
Todo comenzó un fin de semana, soy viudo desde hace 4 años por lo cual me quedé al cuidado de mi hija Ana, ahora con 6 años es una niña hermosa, piel blanca cómo la leche, cabello castaño, es bajita para su edad como su madre y delgada.
Pues todo empezó un sábado, era verano y me pidió que la llevara a nadar a un balneario cerca de casa. No lo ví mal, ya que ese fin no tenía ningún plan. Cómo veces anteriores llegamos justo cuando abrían ya que me gusta aprovechar antes de los tumultos. Cómo siempre iba solo con ella y por lo mismo de ser temprano no había mucha gente en los vestidores, ella siempre ya llevaba un trajecito de baño quesu mana le ponía debajo de su ropa solo para sacarsela y entrar rápido a la regadera. Ese día como siempre se quito si ropita, la guardamos y nos fuimos directo a la regadera. Cuál fue mi sorpresa que ya había un par de hombres ahí. Uno era un hombre como de mi edad, unos 35 años y el otro ya era más grande, calculo unos 55 años, el más joven al verme entrar con mi hija la vio y le sonrió y de inmediato salió, pero el hombre mayor no, se quedó sentado cerca de las regaderas y fue más mi sorpresa que se quito el traje de baño , , mi hija al ver esto se quedó soprendida y lo miraba, yo le decía que no hiciera eso pero era más su curiosidad, el hombre a su edad se veía conservado, atlético y con buen rabo. No sé si tenía erección pero el pene se le veía algo grande y también volteaba de reojo a vernos. Mi nena volteaba también pero al ser inocente no disimulaba lo que veía. Terminamos y nos fuimos directo a la alberca. Así pasamos todo el día, hasta la hora de salir regresamos a las regaderas para enjuagarnos, y no había nadie. Al enjuagarme con el bañador mi hija me veía y me preguntó porque yo no me quitaba el traje de baño, me di cuenta que tenía esa imagen del aquel hombre, asi que solo le dije que al ser su padre no podía estar sin ropa frente a ella y que ella también por lo mismo se bañaba conmigo con su trajecito. Note que se quedó dudosa y nos fuimos a casa.
Ya en casa nos pusimos a cenar y al ir a la cama la notaba pensativa, así que le pregunté
-nena que te pasa, todo el día has estado muy pensativa
-nada papi -me dijo pero yo note que mentia
-sabes que puedes confiar en mi -le dije para saber que pasaba
-es que me quedé pensando en algo que viven las regaderas pero me da penita -dijo con una risita nerviosa
-a ver cuéntame nena
– es que ya ves que en la regadera habia un señor sin ropita jiji
-si claro – en ese momento sabía a qué iba , pensaba que está conversación la tendría al menos en un par de años
-vi que tenía algo diferente que lo que yo tengo, y con muchos pelitos ahí abajo, y pues quiero saber para que sirve eso y porque yo no tengo ni pelitos
Me quedé en shock con tantas preguntas, no estaba preparado para contestar todo …
-ah, pues mira, los niños y hombres son diferentes a las niñas y mujeres, los hombres tienen una cosita y las niñas otra, son para lo mismo pero al crecer sirven para otras cosas.
Se quedó pensando un poco y yo pensaba que seguramente le dejé más dudas
-que otras cosas?
Sabía que no debí decirle – pues son cosas que vas a aprender en el colegio.
Mi hija siempre ha sido muy curiosa y no se queda en paz
-dime tu papi, me gustaría saber ahora
– pues bien, cuando somos mayores sirve para hacer bebés
-como se hacen los bebés con eso, papi
-pues mira, cuando uno es mayor, la cosa del hombre que se llama pene debe entrar en la cosa de las mujeres, que se llama vagina, cómo lo que tú tienes.
Quedó soprendida y con una risita contesto – papi, no creo que algo así entre en mi vaginita- y al decirlo alzó su calzoncito para verse ya que solo traía un blusón de pijama.
Tragué saliva, ya que fue inesperado para mí, ya que pude ver su pubis lisa, blanca y suave y un poco de su pequeña rajadita.
Trataré de contestar con la misma sonrisa de complicidad – ahora no porque estás muy pequeña, recuerda que te dije que solo los adultos lo hacen.
Me miró insatisfecha con mi respuesta y dijo con inocencia – papi, tú pene va a entrar en mi vaginita algún día ?
Volvi a tragar saliva y le contesté que no, que eso solo lo hacían parejas de personas que se quieren mucho.
Con la misma inocencia me preguntó si entonces yo tenía algo como el señor y con los pelitos, en ese momento fue cua do me puse más nervioso.
-si nena, yo tengo algo parecido y al ser mayor ya tengo pelitos.
-papi, me dejarías ver?
-no nena, eso no es correcto.
-papi,por favor- me decís con su vocecita dulce.
– si yo hago eso se podría malinterpretar y posiblemente nos separan si alguien se entera- dije esperando que no insistirá.
-papi, pero yo no le diré a nadie, será solo para ver cómo es.
No sé si fue el diablo que me invadió o que cosa pero accedí, solo le dije que no debía tocarlo ni acercarse. Me contestó que si y le dije que se sentara frente a mi y yo me puse de pie, baje el pantalón deportivo y mi boxer, nos acabamos de bañar así que estaba seguro que no habría malos olores.
Al verlo abrrio más los ojos.
-papi, ahora que lo veo , de verdad no creo que algo así entre en mi vaginita- me dijo con una carcajada y me ruborice, después de nuevo el demonio me hizo decirle- y aún crece más para hacer bebés…
Abrió la boquita como sorprendida y me preguntó – para que son esas bolsitas?- refiriéndose a mis testículos.
-Son para guardar a los bebés
-jaja ahí estaba yo?
-si amor.
-puedo olerlos?
Lo pensé un poco y pensé que no tenía nada de malo. Tome mi pene con la mano y lo alcé para que los testículos quedarán libres. Acerco su nariz y sin tocar directamente olfateo- huelen bien papi
Yo sentí un shock eléctrico pero con la vergüenza y miedo mi pene no reaccionó.
Después de eso me dijo que le llamaba mucho la atención que ella no tenía pelitos y quería ver cómo se vería ella con pelitos ahí abajo. Lo pensé un poco y busque imágenes en Google con vaginas con vellos, las vio pero no quedo contenta.
– Yo quiero verme yo.
Fue cuando el diablo termino de poseerme y le dije- a ver baja tu calzoncito- y me acosté en el sofá, puse mi pene entre mis piernas para que no rozara su vaginita y le dije que se sentara en mi pubis. Ella lo hizo y al hacerlo pude ver su sexo como, abrió sus piernas al pasarlas de un lado a otro y vi esa vaginita, abultadita, y cos los labios un poco entre abiertos , con un botoncito diminuto. Se sentó y le di gusto verse así , pero no se quito de inmediato.sus vaginita rozaba directo mi pubis y decía que sentís cosquillitas, al parecer le gustaba esa sensación y para mí era algo extraño , ella se movía instintivamente y no pude aguantar. La levanté de las cintura y me levanté para colocar mi ropa. En ese momento mi pensé salió de mis piernas, pero al hacerlo salió disparado un hilo de precum, sentí una vergüenza como nunca, pensaba el porque me habia pasado eso, ni erección tenía, sentía culpan y vergüenza…
Al verlo mi hija pregunto que era esa cosa…
CONTINUARA …
Qué malo meveehas medio exitada deseo leer lo demás
Sigue amigo está muy bien