Mi nenita Honey

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hace 2 años que vivo con mi pareja ella tiene una hermosa nena de cariño le decimos Honey, ella tiene 8 añitos. Mi pareja Ale tiene 25 años, mide 1.55 delgada bien proporcionada pechos medianos y lindas nalgas, es morenita, ella tuvo a la nena muy joven, yo tengo 42. Honey es una niña hermosa tiene el cabello rizado y oscuro casi negro le llega debajo de la cintura, su piel es muy clarita con unas lindas mejillas rosas, sus ojitos son aceitunados a veces verdes a veces miel con labios carnosos y rojos, es muy hermosa parece una muñequita.

Cuando conocí a Ale era una chica muy alocada se la vivía de fiesta y yo me divertía con ella, siento que en cierta forma ella me usaba, por lo que yo no la tomaba en serio. Con el tiempo la relación se fue haciendo más fuerte ya que nos veíamos muy seguido y al ser joven pude hacer que cediera de la vida alocada que llevaba. En este momento tengo estabilidad económica por lo que le propuse que viviéramos juntos, hasta ese momento ella no había mencionado a su nena, siempre estuvo al cuidado de su abuelita, por lo que fue una sorpresa para mí. Yo era soltero no tenía ningún compromiso, no había tenido buenas relaciones, mido 1.85 piel morena clara, cabello castaño, delgado.

Las lleve a vivir a mi casa, las primeras semanas fueron un poco difíciles para Honey, por el cambio de vida la nena hacia muchos berrinches, la casa tiene 3 habitaciones, pero solo estaba mi recamara que se convirtió en la de Honey, Ale y yo dormíamos en el estudio en un sofá cama, estábamos de luna de miel por lo que no nos importaba mucho dormir. Después de varias semanas amueblamos la otra habitación para la nena, ella estaba feliz porque la decoramos como ella quiso.

Ale dejo de trabajar para que la nena se estabilizará en su nueva casa, pero Ale se desespera mucho con la nena, así que cuando yo llegaba de trabajar le ayudaba con Honey para que ella se tranquilizara y pudiera descansar, un día cuando cenábamos la nena me pregunto que, si quería ser su papá, hable con su mamá y estuvo de acuerdo con que Honey me llamara papá, yo me volví loco con mi nueva nenita y ella se encariño tanto como yo.

Un día Honey enfermo, tenía temperatura y su mami la llevo al médico, cuando llegue a casa Ale estaba muy desesperada con la nena le gritaba y regañaba, pregunte qué pasaba, el médico le había recetado supositorios para la temperatura y la nena no dejaba que se los pusieran, me acerque a la nena y le explique que era necesario que le pusiera su mami los supositorios para que se aliviara y dijo que si se iba a dejar, pero no se dejó, Ale me pidió que la ayudara a agarrar a la nena para poder ponerle la medicina pero la nena se retorcía y no se dejaba ni bajar sus calzoncitos, Ale se desesperó y salió enojada del cuarto, me quede consolando a Honey, le dije que era importante ponerle el medicamento, la nena me abrazaba fuerte yo acariciaba su espalda para calmarla, de repente me dijo si me voy a dejar pero me lo pones tu papi porque mi mamá me lastima, yo solo quería ponerle la medicina, Honey se bajó su pijamita y vi sus braguitas, otras veces la había visto en ropa interior era mi nena se me hizo normal, pero realmente no la había visto desnuda, aunque no pensé mal solo era una niña de 6 años, así que bajo despacito sus braguitas, se acostó en la cama y me pregunto si le iba a doler yo le dije que no, que se pusiera flojita

Estaba nerviosa así que frote su espalda para que se relajara, estaba parado a un lado de la cama y la nena me abrazo una pierna y puso su carita entre mis pierna, eso me hizo sentir una sensación de placer que de inmediato me calentó, la nena me dijo ya papi ya pónmelo, le dije levanta tus nalguitas y las levanto, tuve que abrir sus nalguitas ella apretaba su culito nerviosa, yo le dije que no lo apretara, se veía tan rico su pequeño culito rosa con sus nalguitas paradas y ella apretando su cara entre mis piernas, pase mi dedo por su culito para que dejara de apretarlo y por fin metí el supositorio a su culito, le dije mi amor baja tus nalguitas me senté a su lado después de unos minutos no pude soportar las ganas de ver entre sus nalguitas de nuevo, le dije nena voy a ver si no se salió abre tus piernitas por favor, mi nena abrió sus piernas y pude ver su pequeña vaginita rosa cerradita, le dije voy a tocarte para revisar, y pase mi dedo entre sus pequeños labios y toque su clítoris, me dijo me dan ganas de hacer pipí, le dije no tienes que aguantarte un poco, su vaginita ya se había mojado y yo estaba muy caliente, me contuve y le dije que se pusiera de nuevo su ropita.

Salí de la habitación y busque a Ale le dije que ya la había convencido y que se lo puse rápido para que no hiciera berrinche, me senté a cenar con ella, pero seguía muy caliente lo tenía muy duro y pensaba en cómo se sentiría meterlo en su vagina pequeña, en como apretaba su culito, me volvía loco no era correcto pensar en Honey de esa forma, era mi hijita, era una niña de 6 años, no una mujer.

Le dije a Ale que fuera a dormir a la nena que me daría un baño, quería bajarme lo caliente pensé que solo era eso y dejaría de pensar en la nena, salí del baño me acosté solo con la toalla cubriéndome y llego Ale ella siempre es muy caliente se me lanzo y de nuevo se me puso duro me froto sus pechos en mi verga, la lamió delicioso y se lo metí todo gemía muy rico, la voltee de perrito abrí sus nalgas y vi su culito, pensé en el culito de Honey y me puse más caliente empecé a meterle el dedo por el culo hasta que lo abrió y no pude resistir metérselo, a ella no le gusta por el culo pero esa vez se dejó, me dijo si papi métemelo y volví a pensar en Honey, se lo metí despacito y me imagine que era la mi nena fue demasiado bueno.

Yo quiero mucho a Ale y adoro a Honey, pero hay momentos en que pienso en Honey y me pongo muy caliente …