Mi Padrastro me sedujo a los 14

Cuando yo tenia 14, mi cuerpo se había desarrollado más que la mayoría de mis compañeras del Cole. Si no sobresalía por mis calificaciones, vaya que si sobresalía por mis nalgas y mis tetas uwu..
Mi Padrastro me seduce

Algo que tienen los hombres maduros y que los diferencía de los chicos de nuestra edad, es que ellos (aparte que cogen mas rico uwu) es que la experiencia que tienen, se los lleva de calle para conquistar a una chica.

Especialmente a una chica caliente y con ganas como yo.

Resulta que hace poco, cuando yo tenia 14, mi cuerpo se había desarrollado más que la mayoría de mis compañeras del Cole. Si no sobresalía por mis calificaciones, vaya que si sobresalía por mis nalgas y mis tetas uwu.

Y los profes, vaya que daban constancia de eso. Algunos de los mas mayores me coqueteaban diciéndome piropos atrevidos y muy audaces, cosa que a mí eso me ponía super caliente, tan así, que ya me había dejado manosear un poco por ellos.

Lo mismo sucedía con los papas de algunas de mis compañeras, cuando nos llevaban a nuestras casas de regreso del cole, por alguna extraña razón a mi me tocaba siempre sentarme junto a los papas.

Así que de vez en vez ellos se atrevían a manosearme las piernas muy discretamente, ya que, al sentarme, la faldita del uniforme se me subía hasta arriba de los muslos, así que los viejos pervertidos, se aprovechaban y me metían mano, cosa que la verdad, a mi me encantaba, pero no podía descararme tanto, bueno, no todavía je je.

En ocasiones alguno si que lograba tocarme entre las piernas y me avergonzaba que ellos notaran que yo ya estaba toda mojada. No decían nada solo me miraban discretos a ver como reaccionaba cuando sus dedos me tocaban el sexo.

En algunas ocasiones si que no me podía aguantar y sin poderlo remediar, mi mano se deslizaba sobre sus piernas hasta llegar a tocar su bulto, el cual yo apretaba con ansias, eso sí que me ponía bien caliente.

En ocasiones, yo era la ultima en ir a dejar, y ellos se aprovechaban de mi calentura y me la daban a mamar, eso sí que las sensaciones que aquello me provocaba eran de otro mundo. Entonces me metían mano en el sexo hasta que me arrancaban tremendos orgasmos y ellos se terminaban en mi boca,

Sobra decir lo delicioso que era todo eso, por lo menos, a mí, a mi edad, ya me encantaba demasiado.

El caso es que, por alguna razón, mi padrastro empezó a notar, y yo no sé por qué, que yo era ya una chica muy caliente, no sé cómo, pero según él, se me notaba lo puta, y el no se detenía para comentármelo.

Una tarde, luego de cambiarme el uniforme por una faldita corta, que me encantaba porque se me veían las nalgas bien paraditas y una blusita de tirantes muy escotada, que permitía ver mas de lo necesario mis lindas bubis, paraditas, redondas y sobre todo, se me notaban los pezones demasiado, ya que en verdad que los tenia algo grandes y se me paraban enseguida por cualquier cosa.

Como siempre, me metí a la cocina a prepararme un bocadillo para entretenerme antes de comer.

En esa ocasión, mi padrastro por primera vez, también entro y se colocó detrás de mí, enseguida sentí su enorme bulto acomodándose entre mis nalgas, ya que estaba de pie con las piernas un poco separadas.

Yo sin querer, me estremecí todita a causa de ese contacto y me quedé inmóvil sin poder reaccionar, tratando de procesar que es lo que estaba pasando, jamás mi padrastro me había hecho algo así y… y yo me sentía con ganas, con ganas de…

Entonces el me abrazo por la cintura, pegándome más hacia él, o sea pegándome más su bulto, quizá asegurándose que yo lo sintiera bien, y vaya que lo estaba sintiendo ufff.

Yo estaba paralizada, ese contacto de su bulto contra mis nalgas ya me estaba poniendo bien caliente, hasta me daban ganas de moverme, pero me daba vergüenza y ya estaba toda colorada.

En ese momento fue que salió a relucir toda la experiencia de un hombre maduro, cachondo, seductor, ante la falta de experiencia de una ingenua novata (bueno, no tanto je je) pero si muy caliente.

~Bb, ¿sabes que, para tu edad, ya estas demasiado bien desarrollada? ~ me decía con una voz suave, su boca pegada a mi oído, sintiendo su cálido aliento provocándome mil sensaciones.

 

El seguía diciéndome cosas bien cachondas que me estaban poniendo caliente a mas no poder y yo sin poderme mover.

 

~Nadie diría que tienes 14, estas buenísima bb~ me decía subiendo las manos lentamente de la cintura hacia mis seños. Yo temblando de excitación. Sentía como me empezaba a mojar, los jugos se me salían incontrolables.

 

~Te parece? ~ Respondía yo coqueta, insinuante.

~Si, ya eres toda una mujer~ respondía seductor y sus manos ya rodeaban mis senos delicadamente.

~Sí? ~ mi voz se quebraba y temblaba al responder, era casi un susurro.

~No se si te des cuenta, pero a leguas se te nota que eres una putita caliente y con muchas ganas~ Me decía al tiempo de frotarme los pezones con la yema de los dedos, haciendo que mi sexo empezara a palpitar en una clara seña de que ya necesitaba algo más.

~De verdad? ~ respondía ya con claras muestras de excitación en mi voz.

 

Inesperadamente, sin que yo me lo hubiera imaginado, el tomo una de mis manos y lentamente la llevo hacia su bulto. Yo no pensé hacer nada, pero inesperadamente mi mano, de una manera increíble, como si pensara por cuenta propia, de repente se cerro sobre su bulto y lo apretó de una manera por demás descarada e insinuante.

 

Ya no había retorno, todo estaba claro y mi padrastro lo sabía, siempre lo supo. Desde hacia un par de años en que el se metía a mi cuarto, me desnudaba todita y yo me dejaba besar y manosear a su antojo ya desde los 12 ufff.

 

Y ahora yo, con ese cuerpo increíble, la cara de puta, no lo niego y las tremendas ganas a flor de piel, seria yo muy pendeja si dejaba pasar esa oportunidad.

 

Sin decir palabra, solo me puse de rodillas frente a él y mirándolo a los ojos, esperé a que el reaccionara.

 

No espere mucho, enseguida se bajo los pantalones se saco su tremendo animal y sin más, lo agarre con las dos manos y me lo metí a la boca.

 

Se sentía delicioso, su enorme pedazo de carne caliente palpitando dentro de mi boca, cada vez más dura y babosa por los jugos que se le habían salido de la excitación, me encantaba su sabor, así que me dedique a disfrutar de la rica mamada que le estaba dando.

 

Mi padrastro se retorcía de placer, me tomaba de la cabeza y me la empujaba hacia adentro lo más que podía moviéndose como si me cogiera la boca, que rico se sentía. Nomas no me gustaba que me la metiera tanto, ya que la tenia bien grande y gruesa y me hacia que me atragantara y tosiera.

 

Empezó a moverse mas despacio y al mismo tiempo metía mano bajo mi blusa y me frotaba los senos y me pellizcaba los pezones, bien rico, con suavidad.

 

Yo sentía mis jugos salirse y resbalarse por mis muslos hasta caer al suelo, el sexo me palpitaba incontrolable, como pidiendo a gritos…

 

Mi padrastro me levanto y me recostó sobre la mesa, de un tirón me saco los calzones y, sin decir palabra, metió su cara entre mis piernas y me empezó a chupar el sexo, maravillado por la cantidad de jugos que me salían, aprovechando para bebérselos todos, y chupándome bien rico mi clítoris, se bien que a los hombres les encanta, ya que lo tengo bien grande, uff.

 

Me imagino que a los hombres les gusta chupármelo, porque se les figura que es un pene, a los hombres les gusta chupar pene, aunque digan que son muy machitos, ¿verdad? Por eso es el éxito de los trans y tvs.

 

En fin, luego que mi padrastro me saco tremendo orgasmo, de tan delicioso que me lo chupo, que hasta lo salpiqué todito, me cargo y me llevo a la recamara, en el camino yo me colgué de su cuello y me deje llevar.

 

Sin más, me encuero todita, se me quedo mirando embelesado, con gran admiración, en verdad que era la primera vez que me veía desnuda desde hacia ya dos años. No podía creer como mi cuerpo se había desarrollado de tal manera, en tan poco tiempo, que a él le parecía increíble.

 

Así recostada boca arriba, se acomodó sobre mí y al tiempo que me mamaba las tetas, me la fue metiendo de a poco, haciendo que yo me pusiera tremendamente caliente nuevamente.

 

No aguante mucho, lo empuje hacia un lado quedando el ahora boca arriba, enseguida me monte sobre el y yo solita, sin poderme contener, me senté sobre el metiéndomela poco a poco hasta que mis nalgas toparon con su vientre. Entonces me empecé a mover como loca desesperada, haciendo que mi padrastro se excitara lo máximo.

 

Me tomaba de la cintura y el a su vez hacia movimientos rápidos acoplándose a los míos, Era una verdadera delicia coger así con él. Sobre todo, que su enorme y gruesa verga me llenaba completita totalmente.

 

Poco después, se incorporo y me puso de a perrita, que es lo que mas me encanta, ya saben, entonces me empezó a dar duro como dios manda, yo me retorcía de placer y le movía el culo como verdadera puta caliente que soy.

 

Mi padrastro ya no aguanto mucho, se vino tremendo, no en balde nos estuvimos dando tremenda cachondeada en la cocina. Yo rápidamente me zafe de el y como aun tenia la verga dura, como pude me la acomode por detrás y yo solita me le empecé a meter en el culo. Ahhhhhh que delicia, las que no lo han probado se los recomiendo chicas.

 

El hizo esfuerzos por complacerme así que me empezó a dar duro hasta que yo me termine loca de placer. Eso fue sensacional.

 

A partir de ese día empezamos a coger como conejos casi a diario, todas las veces que podíamos. Fue una época de recuerdos inolvidables.

 

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