Mi papá
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Me llamo María, tengo 25 en este momento.
A pesar de que estoy casada, sigo enamorada de mi padre y seguimos siendo amantes.
Recuerdo que cuando tenía 8 años, mi padre para mi lo era todo, estaba siempre con él, a donde iba él, iba yo, cuando jugábamos a las muñecas, yo era la mamá y él el papá.
Yo cuando veía a mi padre abrazar a mi madre, me metía en medio de los dos, me molestaba que mis padres se abracen, lo quería solo para mi.
Mamá se iba a trabajar y yo me sentaba en sus piernas y me sentía la reina del mundo entre los brazos de mi padre.
"María, me voy a duchar", me dice una tarde, mamá estaba trabajando, "nos podemos duchar juntos papi?", le dije, recuerdo que él me miró y me dijo que vale, nos duchamos juntos.
Yo cuando lo vi desnudo, esa cosa que le colgaba entre sus piernas y vi que entre mis piernas no colgaba nada, que había una raja, le pregunté que era eso, y que era lo mío, y él me explicó, que eso era el pene del hombre y que lo mío era la vagina de la mujer, que cuando yo fuera grande, y tuviera novio, me iban a meter el pene en la vagina y me iba a gustar mucho, "si papi?, y por que no metes tu pene en mi vagina y me haces disfrutar mucho?", le dije, dejando que mi padre me pase la esponja por todo el cuerpo, "no María, eres muy pequeña y yo soy tu padre", me dijo, lavando mi culete, "pero papi, mete tu pene en mi vagina y deja que sienta lo que tu dices que se siente", le decía yo viendo ahora como se duchaba él, vi como se lavó su pene, "me dejas lavarlo a mi?", le dije, "no María, eso lo lavo yo", me dijo, "venga papi, deja que te lave el pene" le insistí, "venga, vale, lava mi pene", me dijo, dejando que lo coja y me asuste cuando tire de su cuerito para atrás y apareció como una enorme ciruela, "te dolió papi, te hice daño?", le dije al ver eso, "no hijita, no me hiciste daño, eso es el glande, así se llama", me dijo, "que bonita que es", le dije acariciando la cabeza de la polla de mi padre y noté como se empezaba a poner dura, "bueno, bueno ya está", dijo mi padre evitando que le vuelva a tocar la polla, "papi, por que se empezó a poner dura?", le dije a mi padre sin dejar de ver su polla, que estaba poniéndose dura, "es normal hija, cuando al hombre le tocan el pene, esa es la reacción", me dijo, "me dejas seguir tocándolo papi?", le dije sin poder apartar mis ojos de su polla.
Yo no se que le habrá pasado a mi padre que me dijo que si, que se la siga tocando y que le de besos mientras él me tocaba el coño.
Me acuerdo que sus ojos me miraban con deseo, fue una mirada que jamás me voy a olvidar, me hizo abrir la boca y metió su polla en mi boca, diciendo como debía de chuparla.
Recuerdo que mientras él me decía como chupar su polla, sus manos no dejaban de acariciar todo mi cuerpo, "María, mira que de esto no debe enterarse nadie, si tú dices algo, a papá se lo llevan y no me vuelves a ver nunca más", me dijo, moviendo su cuerpo y hacía que su polla entre y salga de mi boca.
Yo cuando escuché eso me asuste, "no papi, nunca se lo diré a nadie", le dije y él volvió a meter su polla en mi boca e hizo que se la siga chupando.
Recuerdo que apenas me cabía en la boca, sentía sus dedos en mi culete y en mi vagina, yo estaba en la gloria sintiendo como mi padre me acariciaba, "entonces me vas a meter el pene en mi vagina para que disfrute como me dijiste que se disfruta haciendo eso?", le dije dejando de chupar su polla, recuerdo como me miró mi padre, "venga, vale, vamos que te voy a meter el pene en tu vagina", me dijo, saliendo los dos de la ducha y nos fuimos a su dormitorio.
Me hizo acostar boca arriba, me empezó a acariciar mi vagina, sentía como me la empezó a besar, a lamer, recuerdo que sentía unos besos fuertes y profundos que me hacían gritar de placer, como la abría con sus manos y pasaba su lengua por dentro haciendo que me retuerza de placer.
Como se acomodó sobre mi, y empezó a pasar su polla por mi vagina para arriba y para abajo, yo lo miraba, estaba temblando y no sabía porque, veía a mi padre mover su polla contra mi coño, restregarse, como con una mano me abre mas las piernas y con la otra guía su pene hasta apoyarlo a mi vagina y siento como empieza a hacer fuerza y mi vagina se abría, "papi, me duele", le dije, sintiendo como a medida que hacía mas fuerza, mas me dolía mi vagina, hasta que siento algo como que me hubiera quemado, como que algo se rompió dentro mío, un dolor tan fuerte que me hizo gritar y también sentí como el pene de mi padre desaparecía dentro de mi vagina, "me dolió mucho papi", le dije con lágrimas en mis ojos, "ya va a pasar mi amor, tú relaja el cuerpo y vas a ver como te va a gustar", me dijo, moviendo su cuerpo sobre el mío y empecé a sentir una sensación extraña al sentir como el pene de mi padre entraba y salía de mi vagina, "ahora eres mi mujercita", me dijo sin dejar de mover su pene.
Yo estaba en el cielo con lo que mi padre me decía y me hacía.
Sentía una extraña sensación con su pene entrando y saliendo de mi vagina, me gustaba mucho, me gustaba ser la mujercita de mi papá, hasta que mi padre empezó a meter y sacar mas rápido y fuerte su pene de mi vagina y escucho un fuerte grito de parte de él, y siento una cosa caliente y líquida que me estaba dejando dentro de mi vagina, como a medida que seguía moviendo su pene dentro mío, eso que me había dejado, se me escurría por entre mis nalgas.
Recuerdo que mi padre me folló e hizo que le chupe la polla hasta los 9 años.
A los 9 años me hacía chupar su polla y se empezó a correr en mi boca, al principio no me gustaba, me daban ganas de vomitar, hasta que me fui acostumbrando y después ya me gustaba que se corra en mi boca y lamer su polla después que me había llenado la boca de leche.
Me encantaba sentir a mi padre lamer mi coño hasta que hacía que me orine, lamer mi ano, como poco a poco me iba metiendo primero un dedo y luego dos dedos en mi culete, cuando tenía 10 años, casi 11, ahí me penetro por el ano, fue lo mas increíble, lo mas hermoso, sentir los gemidos de mi padre metiendo su polla por mi culete, "hijita mía, siento como se te abre el ano, que placer le estas dando a papá", me decía metiendo muy despacio su polla por mi ano, yo estaba feliz de que mi papá se sienta así conmigo, "sigue papi, si a ti te gusta a mi también me gusta", le decía sintiendo como mi padre pasaba un brazo por debajo de mi tripa y haciendo fuerza hacia él, aplastaba mis nalgas contra su cuerpo, como me levantaba literalmente clavada en su polla por el culete.
La sacó tan despacio como me la había metido, me hizo acostar boca arriba, levantando mis piernas, pensé que me iba a follar por el coño, pero no, me la volvió a meter por el ano.
Él me tenía cogida de los pies y sentía como su polla entraba y salía de mi culo.
Yo me sentía la niña mas feliz del mundo haciendo esto con mi padre, hasta que se empezó a correr en mi culo también.
Yo siempre estaba dispuesta a darle placer a mi papá, o bien sea por la boca, por el ano, por el coño, nunca le dije que no a nada.
Fui creciendo y mi padre no dejaba de follarme, yo quería que se separe de mi madre y pasar a ser ahora yo su mujer, pero no lo logré, él siempre me decía que algún día me iba a casar y que no quería quedarse solo, "no papi, yo siempre voy a ser tu mujer", le dije siempre.
A los 20 tuve novio, pero no disfrutaba lo mismo que cuando follaba con mi padre, él tenía ese punto que me llevaba a los mejores orgasmos de mi vida.
Ahora estoy casada y sigo teniendo relaciones con mi padre, cuando mi marido me dijo que quería tener un hijo, se lo dije a mi padre y le pedía que sea él el que me preñe, cuando estoy con mi padre lo hago que se corra dentro de mi coño, se que el hijo que voy atener va a ser de él, porque a mi padre lo amo con todo el corazón.
Muy buena hija .. dar satisfacción .es lo mejor sigue escribiendo .me gustó