mi prima muy caliente 1
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por vamp2000.
Mi prima muy caliente
he leído relatos de los compañeros de aquí y no quiero decir
que no son ciertos, pero voy a contarles algo que a mi sucedió
que es real, tan es así que mejor voy a cambiar el nombre
de mi prima por otro ficticio:
Durante mucho tiempo mi prima que llamare Claudia y yo nos
quedábamos al cuidado de mi abuela, vivíamos en su casa
mi prima es mas grande que yo por 2 años, vivimos con mi abuela
por un lapso de 12 años, nos vimos desde chicos cuando yo
llegue a los 13 años ya conocía algunas cosas sobre el sexo,
me hacia las pajas ya un poco seguido.
Claro pensando en mi prima y como se veía, no era fea aunque
no era una belleza de póster, ya se había empezado a desarrollar
era un poco mas alta que yo, ya tenia sus senos aun pequeños
pero ya los tenia, se le habían torneado las piernas , además
de que ya tenia su cintura formada en fin ya se veía como una
mujercita apetecible, pero por la educación de mi abuela
ya la había espiado, mientras se bañaba pero, un día mi abuela
tuvo que salir desde temprano, llegaría tarde así que nos
dejo encargados los quehaceres y salio.
Mi prima traía su falda hasta la rodilla me gustaba que trajera
falda porque nunca había sabido que lo hiciera en la escuela
pero por lo menos en la casa no usaba calzones yo no perdía
oportunidad de estando sentada enfrente de mi abría las
piernas a propósito, me dejaba ver un buen espectáculo
de vulvilandia, cuando se paraba detrás de mi abuela y yo
enfrente se levantaba la falda, me toreaba yo no decía nada
pero con esas escenas es que me hacia las pajas.
Bueno ese día traía su falda una playera blanca y sus zapatos, nos quedamos limpiando la cocina, entonces
voltea muy seria, me dice con sus ojos inquisitivos
-oye, te haces pajas
-¿por qué preguntas? De las pajas
-por saber
aunque yo ya sospechaba, que ella también me había espiado
-algunas veces y tu
-yo si, porque quieres ver
yo ya entre excitado y extrañado le dije
-si
se levanta la falda y clásico no traía calzones acerca sus
dedos a su cuevita, me dice:
-tu también, quiero ver
-bueno
me baje los pantalones y los calzones saque mi instrumento
que ya empezaba a erectarse, lo tomo con mi mano
-ándale no seas miedoso, ni modo que le diga a alguien
-empecé ligeramente a hacerme la paja, ella veía con cara
de curiosidad
entonces le dije
-tu también
sin dejar de mirarme, se empezó a meter un dedo
recargándose en la estufa
-vamos a la sala, al sillón
yo accedí
-cuando llegamos, los dos seguimos haciéndonos la paja
sin dejar de ver al otro
-déjame tocarlo
-bueno si me dejas tocarte
-si
ella llevo su mano, toco el tronco, me acaricio la punta
de la cabeza con sus dedos, yo por mi parte le toque sus pelitos y empecé a meter el dedo poquito, cuando ella me toco la cabeza respingue de placer y de excitación ella a su vez hizo lo mismo, cuando introduje el dedo.
-Quiero ver que lo hagas
Me dice, se acerca a lo que le digo
-cuidado te va a disparar
-no me importa
-conste
-oye me dejas probarlo
yo sentí que estaba en el cielo
-claro
acerco su cabeza yo levante la pelvis para acercarlo mas.
Ella con curiosidad se acerco mas saco la lengua y saboreo
la punta hizo una cara muy rara
me dijo
-sabe salado
abrió la boca, se lo metió sentí la parte calida y estuve
a punto de venirme se despegó
-no es como yo creía
-sigue con tu boca
-no te toca a ti
-yo me acerque olía raro pero me gusto el olor
saque mi lengua, se la pase por su cuevita ella se movía y
gemía de placer.
Me despegue, le dije
-te gusto
-mucho
-yo te lo hago a ti y tu a mi
-bueno
sentados en el sillón yo metiéndole un dedo y ella apretando
mi miembro y sube y baja
-no tan apretado
-bueno
no duramos mucho ninguno de los dos y no recuerdo quien lo
dijo primero pero los dos lo dijimos
-¡más rápido!
de repente nos venimos los dos
quedamos satisfechos y semirecostados en el sillón
-ahora con tu boca me dijo claudia
-y tu también
-no se
dice claudia
-no me gusto como sabe
-a mi tampoco
aunque realmente no sabia si me había gustado o no yo lo quería
era la sensación de su boca y el placer de la mamada
-bueno esta bien accedió
-pero tu primero a mi
-bien
me hinque en el piso y ella así recostado se corrió a la orilla
del sillón, yo puse mi boca en su cuevita inexperto como
era en ese momento lo único que atine a hacer fue lengüetearla
e intentar meter mi lengua en su ranurita así estuve, hasta
la lengua se me escaldo mi prima me tomaba de los cabellos
y gemía de pasión empujaba sus caderas para recibir mas
hasta que se tensó, ahogo un grito y se vino.
-así estuvo bien
-si
-te toca
-espérame tantito que siento las piernas de chicle
-no te hagas, te toca
-espérame tantito
-esta bien
-pero no te hagas ¿eh?
después de un rato me dijo
-está bien a ver
me levante, ya tenía la cosa bien parada la tomo con su mano
cálida y suave, empezó a hacerme la paja me retire
-que te pasa
-dijimos con la boca
-bueno…… está bien
-se armó de valor, se la metió toda en la boca, empezó a mover
su lengua yo sentía que me iría al cielo, instintivamente
empecé a moverme como si le hiciera el amor a mi prima en la
boca
-¡quita los dientes¡ ¡me lastimas!
no contesto pero me hizo caso en el paroxismo de mi placer,
baje las manos, la tome de los cabellos para que no se retirara,
empecé a sentir que me venía, me vine dentro de su boca,
se lo trago todo la saque de su boca y un poco extrañada se
me quedo viendo.
Cuando recupere un poco la compostura le dije
– disculpa ya
que estaba seguro que hasta me pegaría
-¿sabes? que creo que le agarre el gusto no sabe mal después
de todo.
Nos recostamos en el sillón los dos, nos quedamos viendo
hacia el techo.
-me gustó mucho Claudia y a ti
-a mí también
-me dejas metértelo un poquito
-no eso si ya no, porque no debemos
-ándale
-no mejor seguimos así
-jugando le agarre uno de sus pechos sobre la playera como
no hiciera nada, metí la mano debajo, se movió pensé que me
quitaría la mano
-estas muy frió
-aguántate
llegue hasta el sostén, lo retire un poco, puse mi mano en
su seno, sentí su pezón calientito, que se empezaba a poner
durito.
Ella llevo la mano hasta mi pija, la empezó a sacudir, me
decía
-es que sabes con esta cosa me puedes hacer un niño y no debemos
yo mientras me hiciera la paja no me importaba no meterla de momento
-ayúdame a mi
empecé a meterle pero esta ves dos dedos y hacerlo mas rápido
-¡no tan rudo!…….
me duele
– hazlo rápido que ya estoy mas caliente
-bueno
-ella se vino primero, porque me hacia la paja muy lento y
suavecito pensé que me dejaría así.
Pero bueno la termino yo pero no estaba esperando porque quería experimentar otra cosa ya que termine se volteo, acerco su cara a mi pija, empezó la paja más rápido cuando me vine acerco la cara para que me viniera en su cara solo
cerro los ojos, abrió la boca fue lo que alcance a ver antes
de cerrar los ojos y convertirme en un etcétera.
Cuando los abrí algo del esperma lo tenía sobre los ojos
y las pestañas, más en sus mejillas.
-sabes que ya me gusto sabe rico.
Yo no entendí pero ya le había gustado tragarse el esperma.
En el transcurso del día nos hicimos como dos pajas mas ayudando
al otro.
Regreso mi abuela y todo volvió a la normalidad, supuestamente.
ya que cada vez que mi abuela se dormía, como tomaba pastillas,
ya no era posible que se despertara, Claudia venia a mi cama
o yo me dirigía a la de ella, nos hacíamos la paja yo la de ella
y ella la mía por lo menos dos, regresábamos a cama de cada
quien, nos dormíamos, lo mas que me dejo hacer en ese tiempo
fue poner mi pija sobre sus nalgas y tallarla ahí para venirme
sobre su espalda mientras le masajeaba su cuevita para que
ella también se viniera.
Un año exacto después de la primera vez mis tíos se cambiaron a otra colonia, sacaron a Claudia de la escuela para ponerla en otra por lo mismo ya no viviría mas con mi abuela.
La despedida ese día fue que pude venirme encima de sus tetas
ella se lo embarro todo en sus pechos como si fuera crema.
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