Mi primera vez con una niña 4ta Parte
Continua la anecdota de mi relacion con mi sobrina, ahora de 9 años. Meli…
Otra parte más de mis anécdotas con mi sobrina de 9 años, Meli.
Perdón por la tardanza y espero que sigan disfrutando de Meli tanto como yo lo hago.
Meli aún tiene 9 años y después de la noche de su cumpleaños nuestra relación iba espectacular. Meli seguía igual de cariñosa y amorosa como siempre y le encantaba “jugar” conmigo y ser novios.
En esta ocasión nos encontrábamos en la casa viendo la tele. Era un día muy caluroso en Monterrey, alrededor de 35-40 C, y en ese entonces no contábamos con aire acondicionado, por lo que estamos muertos de calor y sudando a todo lo que da.
Yo estaba sentado en el respaldo de la cama, mientras que Meli estaba acostada boca abajo enfrente de mí viendo la tele. Meli traía una blusa de tirantes holgada, estaba descalza y tenia unos shorts tan cortos que podía ver su ropa interior, unos calzoncitos amarillos con estampado. Yo no podía quitar la mirada de Meli, veía como movía sus piernas de arriba abajo y con cada movimiento me permitía ver más sus hermosas pompis y casi casi su tesoro. Meli estaba sudando tanto, que podía ver las gotas de su sudor pasar de su cuello a la espalda y por alguna razón estaba tan excitado y erecto que necesitaba tocarla. Hace algunos días yo me había propuesto sentir la boca de Meli en mi pene, ya que nunca lo había hecho, y el día de hoy quería que fuera ese día.
Me levanté sobre la cama, me acerqué a ella, me puse sobre su pequeño cuerpecito y empecé a besarla en la espalda lentamente. Mientras la besa podía sentir su suave piel y su sudor en mis labios, luego pase a su cuello hasta terminar en su oreja. Meli se remolineaba mientras yo hacía esto.
Yo: Tienes mucho calor verdad?
Meli: Si, bastante. (Con cara acalorada y a la vez con un poco de placer)
Yo: Te gustaría ir a la alberca?
Meli: Si! ¿Me llevas por favor novio?
Yo: Claro que sí, pero ¿podríamos jugar antes de irnos?
Meli: A que quieres jugar?
Mientras hablábamos yo estaba restregando mi miembro por fuera del short, las piernas y el culo de Meli. Me levanté y regresé al respaldo, pero esta vez me acosté. Jale los pies de Meli para que quedará arriba de mi en una posición de 69. Comencé a tocar su culito y a chupar su entrepierna. Le quité el short y el calzón, y seguí chupando con una intensidad y rapidez que hacía que Meli se remolineara y gimiera. La cabeza de Meli quedaba casi perfectamente en mi entrepierna y ella ya había empezado a masturbarme un poco. Ya sabe que me encanta.
Después de un rato le dije a Meli que lo probara, ella no sabía que hacer por lo que le di la instrucción de que abriera la boca y lo chupara como paleta. Wow, que sensación tan rica estaba viviendo, la lengua de mi sobrinita de 9 años sobre mi pene, estaba en el paraíso. Obviamente Meli no sabía lo que hacía y solo la estaba lamiendo, pero esa sensación de su lengua es inimaginable. Poco a poco, me fui moviendo y empecé a usar la boca de Meli para masturbarme, todo mientras yo seguí disfrutando de su vaginita. Llegó un punto en el que ya no pude más, y terminé en su boca. Ella inmediatamente se paró, escupió y empezó a toser, supongo que no se lo esperaba.
Yo: Te gusto?
Meli: Si, me gustó como sabía. Pero me canse de tener la boca abierta.
Yo: A mi me encanto, vamos a limpiarte la cara para irnos a la alberca.
En donde vivimos tenemos una alberca comunitaria para uso de la colonia. Casi nunca la usamos, pero tenía que agradecerle a Meli por lo que hizo y a parte podría verla todo el día en traje de baño y tal vez toquetearla en un lugar público.
Meli llevaba un traje de baño de una sola pieza con tirantes de color celeste, tenia unas ondulaciones en la parte del pecho y un vestidito que era solamente para verse bien, porque no cubria ni media pompis. En sus piecitos llevaba unas sandalias rosas y llevaba una dona inflable y una pelota para jugar. La vista que tenía enfrente era hermosa, después de todo lo que hemos pasado ya era imposible no verla con ojos de lujuria.
Cuando llegamos a la alberca, me di cuenta que éramos los únicos, estaba vacía. Nos metimos al agua y empezamos a jugar. Meli se veía hermosa en su traje de baño, me encanta ver su cuerpo al hacer tantos movimientos. Se podía ver su rajita por su traje de baño mojado, sus riquísimas pompis y sus pezoncitos duros por el agua fría. Durante todo este tiempo de juego yo aprovechaba para tocar, acariciar o restregarme en su cuerpecito, pecho, brazos, axilas, piernas.
Meli: Se te puso dura
Yo: Si, perdóname novia, es que te ves muy hermosa en tu traje de baño
Meli se sonrojo y puse una sonrisita
Meli: Jiji gracias, me gusta.
Voltee para ver si no había nadie, la agarre, la puse de frente hacia mí y le di un beso muy apasionado. Los besos de Meli ya habían dejado de ser torpes, pero eran deliciosos. Mientras la besaba hice a un lado su traje de baño y metí mi pene erecto. Meli gritó de sorpresa, y yo empecé a moverla de arriba abajo mientras seguiamos en la alberca. Tenía a mi sobrina de apenas 9 años pegada a mi cuerpo, mis manos en sus glúteos, ella con sus piernas alrededor de mi espalda baja y yo con mi pene adentro de su vagina, todo mientras le hacía el dulce amor en un lugar público. La sensación que te puede dar una niña tan adorable e inocente como Meli es indescriptible.
Se veía a Meli extasiada también, disfrutándolo un montón. Es una suerte que no había nadie porque los gritos de Meli eran fuertes. Llegué al punto en que tenía que terminar y cuando estaba por terminar, saque mi pene de su vaginita. Meli se veía tan cansada que la cargue fuera de la alberca, la seque y regresamos a la casa.
Muchas gracias por seguir leyendo mis anécdotas con mi sobrina. Tengo muchas otras vivencias con ella, pero son muy parecidas entre sí y pueden resultar repetitivas. Por lo que no sé si seguirlas relatando. Si quieren saber más sobre Meli o nuestra relación, pueden preguntarme, me encanta hablar de mi sobrina. Correo: [email protected]
Me encantó, continúa escribiendo.
Saludos, espero que sigan disfrutando al maximo de ese placer que por fortuna tienes con la hermosa Meli.
Leí tus experiencias y me la he pasado de lo mas delicioso recordando las mias tambien, de continuo ando con erecciones como si fuera un adolescente.
Un tributo de semen para Meli de parte de mi amiguito. 😜
Hola me gustaron tu historia, cuenta más
Continua escribiendo de como te cojes
Si continúa escribiendo más
Eyacule al leer tu relato.
Tengo una sobrina con la cual quisiera vivir esa experiencia.
Sigue publicando más, amigo
Sólo paso a sondear si estás bien. Es una lástima que no enviaste más relatos porque son bien morbosos.
Da gustazo que un hombre sea así dominante con las nenas pero tierno, llevando dulcemente a las criaturas hacia el sexo y cogiéndolas super a gusto, sin forzar.
Casi asegurado que un nene o nena querrá repetir la cogida o chupada así, por si aún no vamos a la cama. Siempre soy tan puta con los chicos como con cualquier tipo pero dando mi mayor cariño, y te cogen que ves estrellas 😄 ahi quedamos a puros besos y ni gana tengo de que me la saquen si no es porque al otro día tienen escuela y obvio las mamis los vienen a buscar pero bueno, quedan vaciados y saben que las cristuras clavan lindo conmigo y está la clave de que siempre me los traigan.
Cuanto daría por tener una novia o esposa como tú, la pasaríamos de lo lindo viviendo experiencias muy morbosas.