Mi primera vez – Parte 4 – La invitación
Cuarta parte de mi historia real acerca de mi despertar sexual. Cada vez más cerca a mi primera relación sexual..
La invitación
Pasaron algunos días de aquel encuentro con mi tío y yo seguía en las nubes; no había momento en que me pusiera a pensar en lo que había pasado… en recordar todo lo que hicimos… todo lo que me hizo sentir. La culpa que sentí se fue borrando y en su lugar empecé a sentir mucha emoción y muchas ganas de repetirlo. Todas las noches me tocaba hasta hacerme venir pensando en mi tío, en sus manos y recordando todo lo que me hizo sentir con sus caricias. Estaba totalmente enganchada a mis deseos… y bueno, todo eso empezó a hacer mella porque fueron días en que estuve muy distraída en todo. En la escuela varias veces me llamaron la atención por “andar en la luna” y por algunas tareas que no hice. De hecho, mis amigas se preguntaron si me pasaba algo, porque eso no era normal. Yo no quería decirles el lío que me traía con mi tío… era demasiado como para andarlo contando. Me presionaron tanto que tuve que inventarles que había un chico que me estaba pretendiendo y obviamente mis amigas exigieron que les platicara todo.
Les dije que se trataba del sobrino de una vecina, que seguido iba de visita y así nos habíamos conocido…que mi mamá y la susodicha vecina eran buenas amigas y que convivíamos mucho y por eso empezamos a vernos más. Era importante llegar al tema del sexo para poderles decir todo lo que me pasaba y ver qué me decían ellas, así que les inventé que varias veces nos habíamos quedado solos por ratos y que en esos momentos el chico se había “acercado” más de la cuenta y en una vez primero me besó. Jajajaja mis amigas gritaron y se emocionaron… hasta me reclamaron que por qué no les había dicho nada antes. Les dije que pensé que no era nada importante y que no pasaría nada. Me exigieron que les contara todo; así que mientras les platicaba los pormenores, iba inventando la historia de tal forma que todo lo que había pasado con mi tío, me había pasado con ese chico.
Les dije que después de un par de besos bastante normales por así decirlo, pasamos a besos con caricias… que me había tocado las bubis y después las nalgas… y que yo me atreví a tocar sus nalgas también. Luego, que la cosa subió de todo cuando el supuesto chico metió su mano en mi blusa para tocar mis senos y después en mi pantalón, para tocar mi vagina… para luego, en otra ocasión, llegar al punto en donde me masturbó hasta hacerme venir.
Jajaja recuerdo la cara de mis amigas y lo locas que se pusieron; no lo podían creer. Fue cuando una de ellas preguntó si yo había hecho lo mismo con el chico y si agarré y acaricié su pene, a lo que yo exaltadamente contesté con un rotundo ¡No!. La misma amiga me recriminó y me dijo que era una tonta por haber dejado pasar la oportunidad y le respondí que ella qué iba a saber y contestó que sí sabía y todas la confrontamos diciéndole que estaba mintiendo. Fue cuando nos platicó que justamente un par de días atrás ella y el chico con el que sale estuvieron solos en su casa y que “lo hacen”. Que se quedaron a nada de coger pues ya estaban casi desnudos y listos para hacerlo cuando su mamá llegó a la casa y casi los sorprende. Dijo que antes de que su mamá llegara, se habían besado y se habían dado un faje tan cañón que se calentó y por eso accedió a tener relaciones. Que dejó que el chico la tocara por todos lados…dijo que le tocó su zona íntima, que la masturbó y le hico sexo oral. ¡Nooooooooo! Exclamamos todas al escuchar eso. Que después de chupar su vagina le pidió que hiciera lo mismo con su pene y así lo hizo. ¡Aaaaaaahhh nooooo guácala!!!!!! Gritamos entre risas y gestos de asco. Obviamente le preguntamos cómo era… que nos diera todos los detalles… de más está decir que hizo una descripción muuuuuy detallada del miembro del muchacho, de cómo lo tocó, cómo lo masturbó y como se la mamó.
Todas estábamos atónitas ante tales declaraciones… a pesar de expresar mi disgusto por lo que mi amiga nos estaba platicando, por dentro estaba más que interesada en saber todos esos detalles; saber cómo es, qué y cómo hacer… la curiosidad me mataba. Al terminar su relato, mi amiga volvió a reclamarme por dejar pasar la oportunidad con el supuesto chico, pero que ahora que ya sabía más, que no dejara pasar nuevamente la oportunidad cuando ésta se presente. Le dije que estaba loca, pero que les platicaría si pasaba algo, pero habría que esperar hasta que el ficticio muchacho volviera a visitar a su tía. De más está decir que después de esa plática, mis hormonas volvieron a alocarse y me calenté a mil… y ahora, además de los recuerdos de aquel encuentro con mi tío, mi mente empezó a fantasear con la idea de cruzar esa línea y que ahora yo tuviera la oportunidad de conocer lo que mi tío esconde en su pantalón. Ya alguna vez me hizo sentir su paquete aquel día que fue toda la familia a comer a mi casa, en ese abrazo que me dio cuando fue a despedirse de mi y me tomó desprevenida por la espalda y acercó su cuerpo al mío mientras me daba un beso de despedida. Pasaron varios días y mi mente seguía aferrada a la idea de poder conocer el pene de mi tío, de tenerlo cerca… poderlo tocar… quería saber cómo era… cómo se sentía; pero, ¿Cómo??? ¿Cómo hacer para poder lograrlo? Ni modo que llegara y le dijera a mi tío -Enséñame tu pene-.
Esa parte me tenía frustrada porque por más que pensaba no se me ocurría nada.
Llegó el fin de semana y con él la noticia que podría ser la clave y la respuesta a mi alocada y descabellada idea: ¡Una pequeña reunión y comida en casa de mis tíos! ¡Sí!!!! ¡Esa podría ser la oportunidad que tanto había estado buscando! Sé que suena como cuento y obviamente no sería fácil. Entendía que tal vez, si las cosas se dan, podría pasar… nada lo aseguraba. Como fuera, yo empecé a prepararme mentalmente (según yo), tratando de tranquilizarme y de domar mi cuerpo, que ya se había convertido en un ente habido de seguir explorando y aprendiendo cosas nuevas… de seguir experimentando sensaciones que me llevaran a nuevos lugares y nuevos niveles de placer.
Finalmente y después de una espera de un par de días que se me hicieron eternos y durante los cuales me masturbé varias veces al día pensando en todo esto, llegó el tan esperado momento de ir a casa de mis tíos para la reunión familiar. Como era de esperarse nos reunimos todos, incluidos mis abuelos. Llegamos desde temprano, pasado el medio día, para según ayudar en lo que pudieran necesitar mis tíos. Al llegar saludé a mi tía y mis primos. Mi prima Regina (que es 2 años menor que yo) me saludó con mucha emoción porque ya había planeado que nosotros los chicos hiciéramos una tarde de películas para no aburrirnos con la plática de los adultos. Mi primo Luis (2 años mayor que yo) estaba enojado porque quería salir y mis tíos le dijeron que podría hacerlo hasta después de haber comido y compartido la mesa con la familia, por lo que su saludo fue bastante cortante y frío. Cuando me acerqué a mi tío mi corazón empezó a acelerarse y un pequeño temblor se apoderó de mis piernas… ¡No puede ser! Estuve casi toda la semana preparándome para este día y justo cuando me apersono frente a mi tío mi cuerpo me delata. Traté de disimular:
_¡Hola tío!_ lo saludé con entusiasmo
_¡Hola mi princesa hermosa!_ respondió de la misma forma entusiasmada y me dio un fuerte abrazo, y aunque podría decirse que era su forma normal de abrazarme, dentro de mí se sintió se diferente. Me apretó fuerte y aún sin soltarme susurró al oído: _Hoy te ves más hermosa que nunca_
Esas palabras me desarmaron y de inmediato encendieron el fuego de mi interior.
Cabe señalar que ese día elegí un outfit especial para la ocasión, que en cierto modo mandara la señal: un top azul cielo ceñido a mi cuerpo que hacía resaltar mi busto en todo su esplendor y que además de dejar descubiertos mis hombros, también dejaba visible una parte de mi viente; un bra strapless en el mismo color del top. Un mallón en color rosa pálido que se pegaba totalmente a mi figura, apretando y levantando mis nalgas de una manera que hacía evidente su tamaño, redondez y firmeza, además de marcar audazmente la forma de mi zona genital. Obviamente era consciente de ello; cuando elegí el atuendo después de probarme mil prendas me di cuenta que ése sería mi cómplice perfecto al ver cómo hacía notar esa parte. La pantie que elegí ayudaba mucho pues era mucho más pequeña que las que normalmente usaba; no era tanga, pero era lo suficientemente pequeña y se acomodaba perfecto para el mallón que había elegido, era en color azul muy claro con pequeños encajes blancos. Unas calcetas blancas y unos tenis del mismo color completaban mi outfit conquistador. Mi cabello, que es castaño, lacio y largo hasta los hombros lo llevaba en una cola de caballo amarrada con un coqueto moño azul.
De hecho mi mamá sí me echó una mirada inquisidora cuando me vio bajar vestida así, pero afortunadamente no me dijo nada, estaba más preocupada por apurarnos a todos para no llegar tarde a casa de mis tíos.
Lamentablemente, mi tío estaba tan ocupado en la cocina (porque una de sus cualidades es que es muy buen cocinero) ayudando que no me hizo caso, además mi prima estaba impaciente por pasar un rato conmigo y nos fuimos a la sala de TV a empezar a ver las películas que ya había programado. Después de un buen rato nos llamaron a comer. La comida transcurrió con relativa normalidad, lo más relevante fueron un par de veces que mi tío y yo cruzamos la mirada y nos sonreímos mutuamente. La comida fue afuera en una terraza muy bonita que tienen mis tíos, con acceso directo a un jardín muy grande y lindo. Cuando llegó el momento del postre mi tía ofreció café a lo que mi papá, mi abuelo y mi tío se apuntaron. Mi tío se levantó y dijo que él se encargaba de traer el café y las indumentarias correspondientes. Apenas ingresó a la casa cuando mi mamá cayó en cuenta que no le pidió a mi tío leche deslactosada para mi papá porque la leche entera le cae mal. De inmediato pensé que era mi oportunidad y de inmediato me ofrecí para ir y decirle a mi tío:
_¡Yo voy!, yo le digo a mi tío_ hice una pausa pensando en que tal vez fue muy notoria mi emoción, por lo que agregué: _Y de paso me sirvo tantita agua natural_ y con eso salí del paso. Me apresuré para alcanzar a mi tío y pasar el recado. En el camino empecé a sentir esa sensación de nervio en el estómago; me puse nerviosa. Llegué a la cocina y mi tío ya estaba preparando las cosas del café y cuando me vio en la puerta de la cocina me miró con asombro, como si no me esperara. Luego me regaló una sonrisa al tiempo en que con su mirada recorría mi figura en su totalidad. Le sonreí y le dije el encargo:
_Tío, dice mi mamá que si por favor puedes llevar leche deslactosada para mi papá_
_Claro que sí mi amor. ¿Me ayudas a sacarla por favor? Está en la puerta del refri_ me contestó tiernamente. Caminé hasta el electrodoméstico en cuestión y abrí la puerta para sacar la leche pero no la vi. No la encontraba… estaba pensando en tantas cosas al mismo tiempo que mi mente no me dejaba ver.
_¿Dónde está tío? No la veo_ le pregunté. Se acercó y me indicó en dónde estaba la mentada leche. La tomé y cerré la puerta del refri. En ese momento mi tío me tomó de la mano que tenía libre y mirándome directamente a los ojos me preguntó:
_¿Estás bien?… ¿Estás enojada?_ Antes de que pudiera contestarle, continuó:
_Después de lo que pasó me quedé muy preocupado. La verdad es que nunca ha sido mi intensión hacerte sentir mal ni que te sientas comprometida a nada. Eres un gran tesoro para mí y lo que menos quiero es lastimarte de ninguna forma. Sentí que ciertamente hubo complicidad entre los dos, pero el adulto aquí soy yo y debí pensarlo bien antes de hacer nada. No sé si solo estás jugando o me estás poniendo a prueba o no sé; solo sé que no quiero hacerte daño y no quiero dañar el cariño que hay entre nosotros, sobre todo tu cariño, que para mí es invaluable_
Wooooow. Sus palabras me dejaron fría… nunca imaginé que me fuera a decir algo; ciertamente me sorprendió. Por unos instantes me quedé sin saber qué decir y desde luego que también lo quiero y me importa su cariño, pero también quería seguir con lo que ya había iniciado.
_No tío, no pasa nada_ hice una pausa… _Estoy bien. La verdad es que también he pensado mucho en lo que pasó… sí fue algo muy intenso que de momento me sacó mucho de onda_ hice otra pausa y continué:
_Y bueno… sé que se podría decir que no está bien y todo eso, perooo… también sé que me gusta mucho; me gusta sentirme así… y me gusta cómo se siente_
Mi tío esbozó una leve sonrisa al escuchar eso; me miró fijamente y me dejó continuar:
_Mis amigas están haciendo lo mismo con sus novios y con chicos que han conocido, pero yo no me siento cómoda de pensar en hacer todas estas cosas con alguien desconocido o con alguien con quien no tengo confianza. La verdad es que contigo me siento más que bien; siento que me cuidas, que me proteges y nadie en el mundo me trata como tú… ni siquiera mi papá_
_¿En verdad hermosa?… ¿En verdad está todo bien entonces?_ me preguntó insistentemente.
_Sí tío. Estoy bien y está todo bien_ le contesté y me acerqué a él. Con ambas manos tomé su mano derecha y lentamente la puse sobre mi pecho. Así la contuve mientras yo misma oprimía un poco para que me sintiera bien.
_De hecho, si tu quieres… me gustaría que las cosas no cambiaran y siguieras haciéndome esas cositas tan lindas que solo tú sabes hacer…_
Mi tío no pudo evitar sorprenderse… sonrió y preguntó:
_¿Estás segura?_
_Sí tío… estoy segura. La verdad no hay nadie con quien quiera hacer estas cosas más que contigo. Solo contigo me siento bien…_ hice otra pausa al tiempo que solté la mano de mi tío y me acerqué a él y lo abracé… con un cariño y una ternura legítimos; como una sobrina abraza cariñosamente a su tío favorito.
_Y no hay nadie en el mundo que yo quiera que me enseñe más que tú… quiero aprender contigo tío, solo contigo_
Debo decir que me dio un gusto enrome de ver que ahora, el que estaba petrificado era mi tío… porque su abrazo fue muy simple y se quedó mudo por un instante. Pegué completamente mi cuerpo al suyo y lo abrecé más fuerte… quería que se diera cuenta que le estaba diciendo la verdad.
_Mi amor_ contestó _¿Es verdad lo que me dices?_
_Sí tío, es verdad. Eso es lo que quiero_
_Wow. La verdad es que esperaba otra cosa muy distinta a esta. Me dejas sin palabras mi princesa hermosa_ Contestó.
_Para mí es muy importante lo que me dices y lo que me pides. Haces bien en no confiar en cualquiera y ciertamente no cualquiera puede ser el que tenga el honor y la suerte de estar contigo en esa forma. Me siento halagado y una parte de mí está loca por decirte que sí y hacerlo… pero también hay otra parte que me hace pensarlo. No quiero que sea algo de lo que te puedas arrepentir… que después puedas desear haber hecho todo esto y descubierto estas cosas con alguien más… con alguien de tu edad_
_No tío. Estoy segura… quiero que seas tú el que me enseñe, el que me quiera y lo haga con el amor que solo tú tienes y que solo tú sientes. Con nadie me siento como contigo… por favor, no me digas que no_ le contesté con voz entre cortada al ver que al parecer mi tío estaba arrepintiéndose y que la posibilidad de que todo acabara era muy latente. Sentí tanto miedo que me dijera que no… sinceramente nunca pensé en esa posibilidad.
_¡Mi princesa hermosa!_ contestó y me abrazó con fuerza. _Bien sabes que no puedo decirte que no. Te adoro, te amo y nunca nunca nunca de los nuncas te voy a hacer daño. Para mi esto es algo increíble, algo importante… y si es tu deseo y quieres que yo forme parte de este paso tan importante, así será mi amor. Lo haré… te amo y lo haré con todo el amor del mundo_ continuó y culminó con un gran beso en mi cabeza y luego otro en mi frente. Acarició mis mejillas y mi cabello y me volvió a abrazar… abrazo que yo correspondí. De repente sentí que una de sus manos me soltó y bajó lentamente hasta llegar a mis nalgas. Era su mano derecha y con ella agarró mi nalga izquierda con fuerza… la apretó y masajeó con intensidad.
¡Sí!!!!! Grité en mi mente. En mi interior estaba dando brincos de felicidad al saber que todo seguiría y que ahora lo haríamos con consentimiento. En ese momento, su otra mano se movió y agarró mi otra nalga, igualmente con fuerza y con intensidad. Me tomó firmemente por la parte baja de mis nalgas y hasta alcanzó a meter un poco los dedos de ambas manos en la zona de mis muslos y mi entre pierna.
¡Wooow! Eso se sintió riquísimo.
_Te adoro_ me susurró al oído
_Y yo a ti más_ le contesté
Nos separamos un poco, su mano derecha soltó mi glúteo y tomó mi barbilla… miró fijamente a mis ojos, acarició mi boca… suavemente su pulgar acarició mis labios. Me tomó por la parte de atrás del cuello y me besó en la boca. Fue un beso breve pero profundo… me permitió conocer el sabor de su saliva. Instantáneamente su beso hizo que el interior de mi sexo se mojara y estallara en mí una gran descarga que recorrió hasta la última parte de mi cuerpo. De nuevo estaba volando.
Aunque el resto de la sobre mesa fue bastante normal, yo estaba muy emocionada y feliz por que las cosas con mi tío estaban bien y porque nuestras travesuras furtivas continuarían. Mi prima Regi insistió mucho para que nos fuéramos a ver las películas y aunque sí quería verlas y pasar el rato con ella, mi interés estaba centrado en estar con mi tío. Después de mucho insistir, mi mamá me pidió que le hiciera casi a mi prima y nos fuéramos a ver las películas… y así lo hicimos. Nos acomodamos en la sala de TV que tienen mis tíos en su casa. Es muy acogedora y está al fondo en la planta baja. Las horas pasaron y ya al atardecer mis papás y mis abuelos empezaron a despedirse y me llamaron para que hiciera lo propio. Mi prima me pidió que no me fuera:
_¡No Eli! ¡Quédate a terminar de ver las pelis!_ estábamos haciendo maratón de la saga Crepúsculo. Ella no las había visto y estaba emocionada. De hecho yo solo había visto la primera y un pedacito de la segunda. Su idea me pareció por de más maravillosa… era lo que justamente necesitaba para ver si podía tener oportunidad de estar nuevamente con mi tío. Ya otras veces había ocurrido lo mismo de que mi prima pidiera permiso para que me dejaran quedarme, por lo que no tendría porque haber problema. Mi prima corrió para pedirle permiso a mi mamá y a mi tía de que me pudiera quedar; mi mamá me volteó a ver y me dijo que como yo quisiera, que yo decidiera.
_¡Sí! ¡Me quedo!_ fue mi respuesta
_Pero tendrás que pedirle a Regi que te preste algo para dormir porque no trajiste nada y no viniste preparada para quedarte_ añadió mi mamá
_No te preocupes tía, yo le presto ropa a mi prima. ¡Gracias!_ le dijo mi prima a mi mamá mientras corría a abrazarla.
Después de unos minutos todos se despidieron y mis padres y mis abuelos se retiraron. Mi tía se quedó en la cocina terminando de guardar y acomodar algunas cosas, mi primo no estaba en casa ya que después de la comida se había ido con sus amigos a no sé dónde y mi tío de repente había desaparecido de la vista. Fuimos a la cocina a servirnos palomitas y refrescos para seguir con el maratón de películas y le pregunté a mi tía por mi tío, porque no lo veía por ningún lado.
_Está en su despacho hija, creo que lo contactaron de su trabajo y está haciendo algo_ me respondió cariñosamente mi tía.
Mi tío es arquitecto y tiene su empresa se dedica a la construcción y lo contratan mucho para hacer varias obras. En su casa, también en la planta baja, a un costado de la puerta de entrada está el despacho de mi tío. Me gusta entrar porque tiene muchas cosas muy bonitas relacionadas con su trabajo: cuadros, repisas con maquetas y detalles muy monos. Decidí ir a buscarlo, le dije a mi prima que se adelantara y que en un momento la alcanzaba, pero se negó:
_No, voy contigo_ dijo ella
Qué más remedio, pensé. Fuimos y ahí estaba él… sentado en su escritorio revisando algo en su computadora.
_¿Podemos pasar tío?_ le pregunté con un tono infantil mientras me mecía como una niña pequeña y al ver esto, mi prima hizo lo mismo.
_¡Mis princesas hermosas! Claro, pasen_ contestó el con una gran sonrisa en el rostro
_¿Qué haces tío?_
_Estoy revisando unas cosas del trabajo hija. Uno de mis clientes principales de Monterrey me buscó porque necesita que le mande una información porque al parecer hay oportunidad de que salga otra obra_
_¡Qué padre tío!!… ¿Allá mismo en Monterrey?_
_Sí_
_¿Y vas a ir?_ lancé la pregunta con mucha curiosidad
_Lo más seguro es que sí, pero tengo que confirmarlo_
_¿Si vas me puedes traer algo papi?_ le preguntó mi prima al tiempo que se acercó a él y se sentó en una de sus piernas y lo abrazó por el cuello.
Me pareció una jugada magistral, por lo que antes de que mi tío pudiera contestar hice exactamente lo mismo:
_¿Y a mí también tío??_ di la vuelta al escritorio y me senté en la otra pierna y también lo abracé por el cuello.
_Vaya vaya vaya, ¡Qué niñas convenencieras!_ exclamó mi tío mientras se acomodaba para tratar de abrazarnos a ambas y no tirarnos. Me percaté que con su brazo derecho abrazó a mi prima por la cintura; hizo lo mismo conmigo con su brazo izquierdo, pero no pasó mucho desde que abrazó mi cintura cuando bajó su brazo y con su mano agarró mis nalgas y las empezó a acariciar. Era perfecto porque estaba justo del lado de la pared y no podía verse nada de lo que estaba haciendo… así que me relajé y disfruté del momento… dejé que me tocara y me acariciara a sus anchas.
_No sé, todo depende de cómo se porten para que les traiga algo_ dijo mi tío mientras continuaba abrazándonos y acariciando mi trasero.
_Deben portase bien y ser niñas buenas para que les traiga algo_ añadió
_¡Yo siempre me porto bien papá_ le recriminó mi prima
_Jajajajaja sí cómo no_ le contestó mi tío en tono sarcástico
_Yo también me porto bien tío_ interrumpí mientras apretaba mi abrazo
_¿Ah sí????_ contestó igual con sarcasmo
_Jajajaja ahora resulta que las dos son niñas buenas y se portan bien_ dijo mi tío entre risas
_Bueno bueno… ya veremos. Como les dije, tienen que portarse bien, de lo contrario no les traeré nada_ añadió
_¡Sí papá! Te lo prometo_ le contestó mi prima y le dio un beso en la mejilla
_¡Sí tío!!_ contesté. Me acerqué y besé su mejilla y luego disimuladamente acerqué mi boca a su oído y le susurré: _Te prometo que seré una niña buena_
_¡Niñaaaaaaas! ¡Ya están listas sus palomitas!_ gritó mi tía desde la cocina, con lo cual se rompió el momento.
_¡Ya vamos!_ le respondió Regina, que de un brinco se levantó y corrió a la cocina. También me levanté y dirigí mis pasos fuera del despacho de mi tío y justo al llegar a la puerta me detuve y volteé a verlo… estaba sentado mirándome con una cara de travieso que no podía ocultar. Pude notar que su mirada se paseaba por todo mi cuerpo… especialmente en mis nalgas (ese mallón es magnífico). Le sonreí con toda la complicidad que pude mostrarle y él respondió de la misma forma y finalizó lanzándome un beso. Me retiré a seguir viendo las películas con mi prima.
Ya entrada la noche hicimos una pausa para relajarnos y fue el momento en que le pedí a mi prima que me prestar una ropa para dormir porque ya me quería cambiar y ponerme cómoda.
_¡Va! Vamos a mi recámara para que veas qué te quieres poner_ me dijo y corrimos a su habitación. Para esas horas mi tía ya estaba en su recámara y noté que mi tío aún no subía, por lo que me imaginé que seguía en su despacho… esa era buena señal. Mi primo aún no llegaba, lo cual era aún mejor, porque a veces es un poco encimoso conmigo (por obvias razones) y podría ser un problema para mis planes.
Mi prima empezó a sacar varias de sus prendas para que pudiera elegir algo… muchas blusas y playeras… incluso sacó una pijama de pantalón largo. Obvio nada de eso me servía… yo quería algo que me hiciera ver sexy… que mostrara mis atributos y fuera de “fácil acceso”. Regina es 2 años menor que yo pero es bastante grande para su edad (13), somos casi de la misma talla… y digo casi porque mi busto es mucho más grande que el suyo al igual que mis nalgas. Entre tanta cosa elegí una playerita de tirantes de una tela blanca muy delgada y ligera; era perfecta. Finalmente tomé un short azul celeste de tela de algodón, cortito y también muy ligero. Procedí a cambiarme, me quité el top, el bra y el mallón, me puse la ropa de mi prima y al verme al espejo me sorprendí lo bien que me quedaba. La playera me quedaba entallada y hacía evidente el tamaño de mis senos… los pezones se alcanzaban a ver por lo delgado de la tela. El short me quedaba muy parecido al mallón… pegadito al cuerpo, resaltando el tamaño y redondez de mis nalgas… de hecho apenas y las alcanzaba a cubrir. De frente también remarcaba mi área genital. ¡Era perfecto!
Mi prima también se cambió y me dijo que bajáramos para seguir con las películas. En el camino pasamos a la recámara de mis tíos para decirle a mi tía que continuaríamos con nuestro maratón de cine nocturno. Ella ya se había bañado y ya estaba metida en la cama; nos dio las últimas indicaciones acerca de que tomáramos lo que quisiéramos de la cocina sin hacer desastre; que laváramos todo lo que usemos y se despidió dándonos las buenas noches. Mientras mi tía nos daba sus instrucciones, con la vista miré con detalle para confirmar que mi tío aún no subía.
Bajamos y nos volvimos a acomodar y por un buen rato seguimos viendo las películas. En algún momento llegó mi tío y nos preguntó si queríamos algo o si ya habíamos cenado.
_Ya tío, gracias. Bueno al menos yo estoy llena de tanta cosa que comimos viendo las pelis_ le contesté
Mi prima no pudo contestar al momento por un gran bostezo que le dio: _No papi, yo tampoco tengo hambre_ por fin pudo contestar
Tanto mi tío como yo nos percatamos que mi prima ya se estaba quedando dormida y aunque yo también ya tenía sueño, estaba aguantando… por si algo pasaba.
_Ok, entonces voy a subir por unas sábanas y unas mantas para que estén más cómodas y por si se quedan a dormir aquí_ dijo mi tío. De hecho muchas veces antes ya nos habíamos quedado a dormir ahí en la sala de TV.
_Sí tío. ¿Por favor podrías ver si hay alguna almohada que también puedas traer?_ le contesté
_Claro mi amor, en un momento traigo las cosas_ dijo él y subió.
¡Dios! Empecé a ponerme nerviosa, sabía que las cosas empezaban a acomodarse para que mi tío y yo tuviéramos otro encuentro… pero aún no sabía cómo y qué iba a pasar. Por lo pronto, ya me había cambiado y trataba de estar lista… solo era cuestión que mi prima y mi tía se durmieran y que mi primo no llegara jajajaja. Después de unos minutos bajó mi tío con varias sábanas, un par de mantas, una colchoneta y un par de almohadas.
_Aquí están. Les traje una colchoneta por si quieren usarla_ dijo mientras acomodaba las cosas en uno de los sillones. _Tu tía ya se durmió y tu primo se quedará a dormir en casa de uno de sus amigos_ agregó. Eso fue música para mis oídos.
_Ok tío_ le contesté y le regalé una enorme sonrisa y lo miré con complicidad.
_Voy a cerrar las puertas y a apagar mi compu_ dijo
_Sí tío_ fue mi respuesta
Mi corazón empezó a latir más rápido y la sensación de nervios se hizo presente en mi estómago… era una sensación extraña, porque no me desagradaba. Voltee a ver a mi prima que ya se estaba quedando dormida; ya tenía los ojos cerrados pero no confiaba que ya durmiera del todo. ¡Por favor que ya se duerma! Pedía en mi mente. Los nervios estaban convirtiéndose en impaciencia porque veía que el sueño de mi prima aún no era profundo y no quería que echara abajo mis planes.
Pasaron unos minutos y mi tío no regresaba… la tele tenía el volumen muy bajo, prácticamente era solo la imagen y yo ya moría de desesperación. De repente, un ronquido interrumpió el incipiente silencio que había en la habitación. ¡Por fin! Me dije a mi misma al ver que el sueño de mi prima ya era profundo. Con mucho cuidado y sin hacer ruido, me levanté y lentamente salí de ahí. Como si fuera un ladrón, caminé cuidadosamente mientras observaba todo a mi alrededor. Pasé por las escaleras y todo estaba apagado y en silencio… fui al comedor y la cocina e igualmente, todo apagado; la sala estaba igual, salvo un pequeño halo de luz que se escapaba de la puerta del despacho de mi tío, que estaba levemente entre abierta. Mi corazón dio un sobre salto y esa extraña sensación de mariposas en el estómago se hizo presente nuevamente. Era chistoso, porque a diferencia de las veces anteriores, ahora sabía y era consciente de lo que iba a pasar.
Lentamente y con el corazón latiendo a mil, me fui acercando a la puerta del despacho; una vez que estuve ahí, con mi mano izquierda la abrí poco a poco, hasta que me permitió ver a mi tío. Estaba sentado en su escritorio, muy atento a su computadora. De inmediato se percató de mi presencia, volteó y me miró. Simplemente se quedó observándome con detenimiento… como tratando de memorizar cada detalle de mi anatomía. Recorrió de arriba abajo toda mi figura y suspiró. Me sonrió y solo dijo: _Hola_
_Hola_ le contesté y le regresé la sonrisa. Avancé lentamente hacia él. Al darse cuenta hizo su silla un poco para atrás para permitirme el paso. Me acerqué hasta él y fingiendo un poco de interés en lo que hacía me incliné para mirar el monitor de su computadora, al tiempo que le pregunté:
_¿Qué haces tío?_
_Estoy terminando de hacer lo que te platiqué hace rato. Ya tengo casi todo listo_ contestó. Luego, con su mano derecha me tomó por la cintura y me acercó hacia él, indicándome el camino para que me sentara en sus piernas. Me dejé guiar. Me acomodé de tal forma que quedé frente al monitor de su compu; él, colocó sus manos en mis muslos.
_Está bonita esa casa de la foto_ le dije mientras señalaba una imagen en la pantalla
_¿Te gusta?_ preguntó
_Sí, está muy bonita_ contesté
Lentamente empezó a subir sus manos, de mis muslos pasaron a mi cintura… lentamente recorría mi cuerpo y mi corazón empezaba a exaltarse. Siguió subiendo hasta que llegó a mis pechos. Tomó uno en cada mano y los apretó con delicadeza. No pude evitar cerrar los ojos y de inmediato empecé a respirar hondo… preparando mi mente para lo que venía. Su movimiento hizo que dejara de inclinarme y me hiciera hacia atrás… lentamente me llevó hasta que me recargué en su pecho. Coloqué mis manos en los descansabrazos de su silla y me puse a su entera disposición. Acto seguido, mi tío besó tiernamente mi cuello desatando con ello otra descarga que recorrió toda mi espalda. Sus manos empezaron a acariciar más intensamente mis senos… los apretaba, los juntaba y los aprisionaba en sus manos. Luego dejó de apretarlos y con sus dedos acarició mis pezones… a pesar de hacerlo por encima de la playerita, podía sentir su caricia. De inmediato mis pezones se pusieron duros, lo cual facilitó a mi tío el poderlos agarrar, acariciar y jalar delicadamente.
Mi respiración se tornó más profunda y mi corazón latía tan fuerte que hasta pensé que mi tío podría sentirlo al estarme acariciando los senos. Mi cuerpo empezó a temblar… estaba ahí, totalmente entregada a las sensaciones.
Después de un momento de estar así, mi tío bajó sus manos y las medió por debajo de la playera y regresó al lugar donde estaba… tomando y acariciando vehementemente mis niñas y haciendo que con el simple contacto de sus manos con mi piel abriera la llave de mi sexo que empezó a mojarse. Mi respiración profunda empezó a transformarse en leves jadeos…y yo me concentraba en no hacer ruido. Siguió tocando, apretando y acariciando a placer mientras besaba mi cuello y alternadamente mis mejillas.
_Eres una niña muy hermosa… estás preciosa mi amor_ me dijo al oído con una voz que retumbó en lo más profundo y me hizo estremecer.
_Me encantas, y esto para mi es un sueño hecho realidad. Desde que empezaste a crecer supe que te convertirías en una mujer muy hermosa… y no me equivoqué. Eres un encanto divino mi amor_ agregó.
_Gracias tío_ fue lo único que pude contestar con mucho trabajo… ya estaba ida y totalmente entregada al momento.
Mientras seguía besando mi cuello y acariciando mis senos, su mano derecha se retiró de mi pecho derecho… se deslizó por debajo de la playera; salió y lentamente se internó por debajo del short. Avanzó sin detenerse hasta mi sexo. Por encima de mi patie empezó a acariciarme ahí… justó ahí en la zona de mi clítoris… lo hacía con un dedo… ¡Dios! De nuevo empecé a sentir que podría desfallecer en cualquier momento…ahí, en sus brazos. Fueron unos instantes en los que me acarició de esa forma, porque después, con un movimiento, subió su mano y la introdujo en mi ropa interior… y nuevamente acarició mi sexo.
_Ahhh_ dejé salir mi primer gemido, el cual traté de contener apretando mis labios.
Él tocó todo mi sexo… suave y gentilmente recorrió toda mi zona con 2 o 3 dedos, la verdad es que no lo recuerdo bien. Lo que sí recuerdo es que en un momento se detuvo un instante para poder introducir unos de sus dedos en mi vagina…justo como aquella vez como cuando “jugamos a las cosquillas”. Lo hizo tan suave y lento que fue mi cuerpo se estremeció y di un pequeño sobresalto en su regazo.
_¿Quieres que me detenga?_ me preguntó casi susurrando
_Nnn n nn no tío… no te detengas_ apenas pude contestarle
_Lo haré con todo el cuidado y todo el amor…voy a cuidarte y tratarte como lo que eres… mi princesa hermosa_ volvió a susurrame al oído
_S ss sss sí tío_
Fue cuando empezó a meter y sacar su dedo de mi sexo, totalmente húmedo y caliente. Lo hizo repetidamente durante unos minutos. Yo simplemente me estremecía… tuve que nuevamente taparme la boca con mi mano izquierda porque ya no podía contener mis jadeos y gemidos.
_Así hermosa, así… disfrútalo… gózalo… deja que el placer te lleve_ me dijo con su boca pegada a mi oído
_Mmmmmm_ seguía ahogando mis gemidos llenos de placer y de nuevo, llegó un momento en que mi vientre vibró entre espasmos avisando que estaba a punto de venirme. Solo atiné a mover mi mano derecha y agarrar la mano derecha de mi tío por encima de mi ropa…como para acompañar los movimientos que estaba haciendo con sus caricias en mi vagina.
_Tío…. Tíooooo_ susurré
_Sí mi amor… sí… déjalo llegar… vente… quiero que te vengas en mi mano mi amor_
_Ahhhhhhh tíoooooo_ fue el gemido que antecedió a la explosión de mi orgasmo… intenso… mojando totalmente la mano de mi tío. Quedé sin fuerzas, sin poder moverme… totalmente entregada al hombre que en ese momento era dueño de mi cuerpo, de mi mente y todas las sensaciones que me abrazaban. Lentamente, siguió acariciando mi vagina totalmente mojada y lubricada… hizo movimientos suaves y recorrió toda mi cavidad a placer. Sacó su mano y la llevó a mi boca y me dijo: _¿Quieres probar y conocer tu sabor?_
En medio de todo lo que sentía ni siquiera lo pensé, tomé su mano con la mía y yo misma chupé sus dedos…haciendo así el momento en que por primera vez probaba el sabor de mis propios jugos sexuales. Después, con gentileza tomó mi brazo derecho y me movió para que me levantara de su regazo… me levanté aún con piernas temblorosas… me giró y quedé de frente a él. Me acercó un poco y con sus manos levantó la playerita hasta dejar totalmente al descubierto mi busto. Se acercó a ellos y empezó a besarlos…
¡Dios!!!!! Todavía estaba tratando de recomponerme después del rico orgasmo que tuve cuando de nuevo mi cuerpo empezó a temblar a causa de sus besos. Tomó mis senos con ambas manos… los apretó… los besó… con vehemencia chupó mis pezones… los acarició y beso en su totalidad. Nuevamente estaba jadeando y tratando de contener mis gemidos… con ambas manos tomé la cabeza de mi tío y empecé a jugar con su cabello mientras él seguía internado en mis chichis llenándolas de besos y caricias.
_Ahhhh… tíooo…_
Se detuvo un segundo solo para preguntarme: _¿Te gusta mi amor?_
_Sí… me gusta…_
Me dio unos últimos besos y chupeteadas y se separó… se puso de pie, tomó una de mis manos y me llevó del otro lado del escritorio. Movió unas cosas que estaban ahí para hacer espacio y me dirigió para que me recostara. Yo me dejé guiar e hice todo lo que me pidió. Me recosté boca arriba y él con sus manos sostuvo mis piernas y las colocó en sus hombros. Recorrió con sus manos mis piernas hasta llegar a mi cadera, tomó el short por los costados y lo deslizó hasta llevarlo hasta los tobillos.
_No te lo quites_ me dijo al momento en que repitió el movimiento con mi pantie, por lo que al llevarla hasta mis tobillos hizo una breve pausa y lentamente separó mis piernas, dejando mi sexo totalmente expuesto ante él. Yo solo lo veía cómo me miraba y observaba. Suspiró profundamente y se acomodó para meterse entre mis piernas. Se inclinó y antes de llegar a mi entre pierna se detuvo para mirarme y me dijo: _Esto también te va a gustar_
Yo solo me limité a ver… no pude contestar nada. Continuó y se inclinó totalmente hasta que su boca tocó la entrada de mi sexo y de inmediato lo besó… lo hizo con cuidado y gentileza… con su lengua recorrió toda mi zona íntima y yo, estaba a punto de desmayarme… mis jadeos eran más intensos y me esforzaba por no gemir… pero era solo cuestión de tiempo. Con una de sus manos se ayudó para abrir los labios y empezó a besar y chupar toda esa zona interior y yo ya no podía; mi cuerpo empezó a estremecerse nuevamente y tuve que asirme de las orillas del escritorio con ambas manos porque ya era muy evidente. Mi tío soltó mi otra pierna y puso su otra mano por encima de mi vientre y empezó a jugar con mis pelos púbicos; mismos que también besó y chupó.
Un calambre fulminante se presentó cuando sentí que con su mano abrió mis labios y metió su lengua y lamió toda la franja de la vulva, deteniéndose en mi clítoris y dándole chupadas y lengüetazos especiales.
_Ahhhh ahhhhhhh_ gemí descontroladamente y mi tío internó por completo su boca en todo mi sexo. Luego, uno de sus dedos volvió a internarse en mi mojada y caliente cavidad vaginal y mientras su lengua acariciaba mi clítoris, su dedo entró y salió una y otra vez… una y otra vez… con suavidad pero marcadamente. Tocando ese punto que antes ya me había hecho venir.
_Ahhhh… tío… tío… tíoooooo… ahhhhhhh_ gemí otra vez. Inconscientemente apreté mis piernas y con mis manos tomé la cabeza de mi tío al sentir que nuevamente me iba a venir, con ello él marcó más sus chupadas y caricias.
_¡Tíooo!_ gemí y sin poder contenerlo más explotó el orgasmo.
_Aaaaahhhhhh_ mis jugos vaginales salieron en torrentes y mi tío lejos de quitarse, siguió besando y lamiendo mi coño. No podía creerlo… me vine en la boca de mi tío y él seguía pegado a mi entrepierna. Apenas y podía coordinar movimiento alguno o articular alguna palabra. Eso ya era demasiado… no podía más. Mi cabeza era un remolino dando miles de vueltas y mi corazón golpeaba con fuerza mi pecho.
Mi tío lentamente dejó de mover su lengua y su dedo y se retiró, no sin antes dar un último beso a mi clítoris. Se detuvo en mis vellos púbicos, mismos que besó y chupó. Poco a poco se incorporó saliéndose de entre mis piernas, nuevamente las tomó con ambas manos y las acomodó en sus hombros y por último, regresó mi ropa interior y mi short a su sitio. Como pude me incorporé y quedé sentada en el escritorio; él se acercó y nuevamente con sus manos me tomó por el cuello y me besó en la boca. Esta vez, fue un beso bien dado… profundo, intenso. Metió su lengua y con eso pude sentir nuevamente mis sabores. Fue un beso caliente y totalmente sexual.
_¿Te gustó?_
_Sí… sí tío… me gustó_
_Espero que lo que sigue también te guste_ contestó. Dio un par de pasos hacia atrás y lentamente desabrochó su cinturón… luego su pantalón y en un solo movimiento bajó sus prendas hasta dejar expuesto su pene. Ver eso me ayudó a regresar en mí… de inmediato recordé aquella conversación con mis amigas en donde platicamos de los penes de los chicos y los pretendientes de ellas. Esta era mi primera vez de estar frente a uno. No pude evitar esconder mi asombro.
Era grande y un tanto grueso… con una cabeza en un color más intenso que ya tenía un líquido saliendo de ella. Me gustó ver que tenía rasurados sus pelos… se veía increíble.
Tomó una de mis manos y dijo: _Ven_
Me acercó a el y me pidió que me hincara.
_Tómalo con una mano_ me indicó
Un poco temblorosa lo tomé con mi mano derecha… lo tomé por la parte baja… y lo miré fijamente.
_¿Es la primera vez que ves un pene?_
_Sí… nunca había visto uno… al menos nunca en persona (y reí por cómo se escuchó eso)_
_¿Donde habías visto uno?_ preguntó con curiosidad
Me dio pena contestar… pero a esas alturas creo que ya no cabía la pena. Tomé valor y respondí:
_En unos videos porno_ sin poder sostenerle la mirada
_Eres una niña traviesa_ dijo. Se inclinó un poco para darme un beso en la boca
_Si ya viste videos porno, entonces ya viste lo que las chicas hacen con los penes…¿Verdad?_
No pude evitar sonrojarme porque evidentemente así era.
_Sí tío_ respondí
_¿Quieres probar?_
Dudé un poco, pero contesté que sí.
_Ok, entonces, lentamente mueve tu mano de arriba abajo… sin apretar mucho… el chiste es que la piel pueda moverse. Solo aprieta lo suficiente_
Seguí sus indicaciones y empecé el movimiento… lo estaba haciendo con mi mano derecha.
_Puedes hacerlo primero lento… y después un poco más rápido… y después lento otra vez_
Así lo hice… me concentré para hacerlo bien.
_Esooo… así mi amor… así… lo haces muy bien_ me susurró mientras me veía detenidamente y con su mano derecha acariciaba mi rostro. Y yo, hincada, también lo veía… sin perder detalle de lo que me dijera o me indicara.
_Sigue así amor… sigue así… vas muy bien_
_Sí tío…_
Seguí jalando…
_¿Te gusta tío???… ¿Lo estoy haciendo bien?_
_Sí mi amor… lo haces muy bien_ me contestó y era evidente que le gustaba lo que estaba sintiendo. Mientras lo hacía, recordé lo que mis amigas platicaron y lo que habíamos visto en las películas porno y me imaginé que a mi tío le gustaría que me lo metiera en la boca… ¡Pero no sabía!!!
Poco a poco me fui acercando y mi boca quedó solo a unos pocos centímetros de aquel glande, rosa y húmedo.
_¿Quieres probarlo mi amor?_ me preguntó tiernamente
_Sí tío… pero no sé cómo… y me da miedo que te vaya a lastimar_ le respondí un tanto preocupada
_No te preocupes preciosa, yo te voy a decir cómo_ me contestó
_¿Te has comido miles de paletas en tu vida verdad?_
Su pregunta me sacó un poco de onda y me arrancó una leve sonrisa.
_Sí tío…¿Por????_ respondí un poco extrañada por esa pregunta
_Es que es justo así; como una paleta. Vas a meterlo en tu boca y vas a chuparlo como si fuera una paleta… con cuidado y sin morder_ me indicó con mucho detenimiento.
_Ok_ le dije aún dudando. Lentamente me acerqué, abrí la boca y poco a poco metí parte de la cabeza… era grande, pero pensé que sí cabría. Chupé como si fuera una paleta esa parte que ya tenía dentro de la boca, después me animé y metí todo el glande y cerré la boca. La sensación era increíble… era una textura que nunca había probado o sentido… y un sabor levemente salado, nada desagradable. Me gustó.
_Ahhh… eso, así hermosa… justo así. Ahora puedes subir y bajar…y chupar como si fuera una paleta grande. Usa tu lengua y tus labios_ me indicó. Traté de hacerlo justo como me decía. Tomé el falo con ambas manos para poder maniobrar bien con mi boca. Empecé a chupar la cabeza por arriba y abajo…la metía y sacaba de mi boca. Luego empecé a besar y chupar el palo que parecía crecer más. Puse una mano junto a la otra y todavía había una pequeña parte sin cubrir.
_Puedes chupar y jalar con tus manos al mismo tiempo_
Seguí jalando con las manos y chupando con mi boca y lengua…lo hice sin parar… cada vez con más confianza y firmeza. Ya no sentía miedo…y me gustaba mucho lo que estaba haciendo… tanto que empecé a mojarme nuevamente.
_Así amor… así… no pares… lo haces perfecto… lo haces riquísimo mi amor_ me dijo y su respiración empezó a ser profunda. Seguí y seguí…
_Ahhhh así mi amor… así…_
De repente con ambas manos me tomó por el rostro y sutilmente detuvo mis movimientos. Saqué su miembro de mi boca y lo miré.
_¿Quieres ver cómo es el orgasmo de un hombre?… ¿Quieres ver cómo me vengo?_
_Sí_ respondí
_Quítate la playera… así cómo estás, solo quítate la playera_ me volvió a indicar
Así lo hice, la playera ya estaba arriba por lo que en un rápido movimiento me la quité, quedando desnuda del torso. Mi tío se acercó y dijo:
_Agárralo otra vez y vuelve a jalar_
Me acomodé, con ambas manos tomé ese hermoso y palpitante miembro viril y empecé a jalar… con firmeza y rapidez… se lo jalé sin parar.
Él empezó a jadear… se acomodó nuevamente y dijo:
_Me voy a venir… me voy a venir mi amor… no pares para que veas cómo me vengo en ti_
Estaba tan caliente y emocionada que, aunque no me lo hubiera pedido no habría parado hasta verlo venirse. Fue cuestión de breves momentos para que mi tío alcanzara el orgasmo y se vino…
Un gran chorro de un líquido blancuzco y tibio salió de su pene y cayó en mi pecho… yo me sorprendí de ver la fuerza con la que salió. Pude sentir como se estrelló en mí. Más chorros salieron después del primero, igualmente de abundantes y calientes. No sé cuántos fueron… pero al final terminé llena de su semen, que escurría por todo mi pecho… en medio de mis senos… goteando de mis pezones…era increíble.
Aún sostenía su pene con mi mano derecha… empecé a notar que la firmeza que tenía comenzó a disminuir. Con mi mano izquierda quise retirar y limpiar lo que quedaba escurriendo en su pene y él me dijo:
_¿Quieres probarlo mi amor?_
No supe qué decir… no estaba muy convencida y mi tío se dio cuenta, a lo que agregó:
_Pruébalo, verás que no sabe mal_
Lo pensé solo un momento y lentamente me acerqué y metí solo la punta de la cabeza y la chupé. Fue sorprendente descubrir que en efecto no sabía mal… saladito y un tanto amargo. Me gustó.
Lo chupé todo y dejé limpio como si no hubiera pasado nada. Mi tío me sonreía y me acariciaba el rostro con sus manos. Ya que terminé me extendió su mano para ayudarme a ponerme de pie. Se quitó la playera que traía puesta y me limpió con ella. Con delicadeza secó todo el semen con el que previamente me había bañado. Recogió la playera que me prestó mi prima y me la dio, me pidió que me la pusiera. Ya que me vestí y él hizo lo mismo con sus pantalones y se acercó, con su mano derecha tomó mi barbilla y me besó apasionadamente.
Nuestras lenguas se enlazaron y compartieron los sabores que previamente probamos uno del otro. Me abrazo mientras me besaba y me volvió a tocar por todos lados, especialmente mis nalgas, ya que metió sus manos en mi pantie para poderlas tocar y acariciar. Al terminar el beso me dijo:
_¿Te gustó?_
Sonreí plácidamente y respondí: _Sí tío… me encantó_
_Me alegra mi amor que te haya gustado… y deseo con toda el alma seguir, pero ya nos tardamos y no quiero que alguien nos vea. Creo que es mejor que ya nos vayamos a dormir; te prometo que habrá más momentos para vernos_
Confieso que la idea no me gustó del todo, pero tenía razón. Estuve tan concentrada en el momento y en todo lo que pasó que perdí la noción del tiempo y de todo.
_Sí tío_ respondí
_Anda, vamos a dormir. Te acompaño_ salimos del despacho y en la salida mi tío apagó la luz y cerró la puerta. Me acompaño hasta la sala de TV para ir por mi prima y poder subir a la recámara. Regina estaba tan dormida que no despertó cuando le hablamos, por lo que mi tío la cargó para poderla subir. Yo apagué la TV y nos retiramos. Llegamos a la recámara de mi prima y mi tío la recostó en su cama y me preguntó si me quedaría ahí con ella, a lo que respondí que sí.
_Ok. Mañana nos vemos. Descansa_ Me dijo y me dio un beso rápido en la boca.
_Duerme rico mi amor_ añadió
_Tú también tío_
_Voy a soñar contigo mi amor_ me dijo. Me sonrió y cerró la puerta.
Me quedé ahí, de pie junto a la cama de mi prima…inmóvil con la mente en plena efervescencia por lo que acababa de pasar. No lo podía creer… era una sensación indescriptible… estaba feliz, muy feliz.
Muchas gracias por leer mi relato; espero que les haya gustado. Con gusto recibo sus comentarios en [email protected].
Que deliciaaaa!!!!!!
Espero la otra parte de esta increíble historia.
Muchas gracias por leer y por tu comentario Bog. Acabo de subir la última parte, espero que pronto la publiquen. Saludos!