Mi primita me dió una mamada (Parte 2)

Sólo para que tengan en cuenta: Mi primita tenía 13 años y yo tenía 15 años cuando esto pasó .

Luego de lo que sucedió al borde de la piscina decidimos meternos a la casa a bañarnos y a esperar la cena. Transcurrían las horas y yo no podía dejar de recordar a mi primita con mi pene en su boca, cómo ella me miraba en ese momento y ese cosquilleo que sentí desde la punta de mi verga hasta los dedos de mis pies.

Cenamos todos en familia, estábamos en reposo y mi tia dice: Bueno, vamos para que se pongan cómodos y sepan dónde van a dormir.

Nos dirigimos a las habitaciones.

Tia: En esta habitación pueden dormir ustedes (Señalando a mis padres) Y tú, mi hermoso sobrino, vas a dormir en la habitación de tu prima.

En ese momento me brillaron los ojos, todas las escenas de videos de incesto que había visto pasaron por mi mente, hasta que mi tia me interrumpió los pensamientos

Tia: Por supuesto, ella dormirá conmigo para que tú estés más cómodo

Sentí gran desilusión, claro, hasta ese momento no tenía idea de cómo iba a terminar todo.

Total que cada quien dejó sus cosas en sus habitaciones y fuimos a la sala de nuevo.

Los adultos estaban hablando, bebiendo alcohol y riéndose, mientras mi primita y yo jugábamos un juego de mesa. Así pasaron un par de horas hasta que ya el ánimo de todos fue bajando y el sueño aparecía en nuestro ser.

Nos dimos las buenas noches en el pasillo y cada quien entró a su habitación.

Estuve indagando un poco la habitación de mi prima hasta que conseguí la gaveta con sus pantaleticas… Ufff… Eso, más el recuerdo de lo que pasó en la piscina me iba a servir mucho esa noche.

Apagué la luz, me quité mi ropa quedando en boxer, me metí en la cama y me hice una buena paja hasta quedarme dormido.

En la madrugada sentí que abrieron la puerta, con mis ojos entrecerrados intento ver quién era y gracias al reflejo de la luz de la calle me doy cuenta que es mi prima. Me siento en la cama y le digo: Qué haces aquí?!

Ella sólo me hace señas de que haga silencio, se acerca a la cama, se mete debajo de la cobija, se sienta a mi lado riéndose y me dice: Es que mi mamá ronca mucho, jajajaja, me despertó y quise ver si estabas despierto.

En eso ella se da cuenta de que una de sus pantaletas está en su cama, me lanza una mirada pícara y me dice: Ummm, parece que alguien ya sabe dónde guardo estoya sabe dónde guardo esto

Sólo alcancé a reírme.

Mi prima me miró y me dijo: Primito, yo no he podido dejar de pensar en…

Yo: Estoy igual 😅

Prima: Si, se nota (Señalando la erección en mi boxer)

Intenté cubrirme, mi primita me detuvo, yo la miré y nos besamos, así sin pensarlo, nos empezamos a manosear. Ella metió su mano debajo de mi boxer y me empezó a pajear, mientras yo subí el topcito que tenía puesto y empecé a lamer y chupar como loco sus tetas.

Nos fuimos quitando la poca ropa que nos quedaba y en cuestión de minutos estábamos completamente desnudos, explorando nuestros cuerpos, descubriendo nuestras bocas con nuestras lenguas y gimiendo bajito. En eso mi prima se detiene y me dice: Allí, en esa gaveta tengo unos condones que me dió mi mejor amiga para cuando llegara este momento.

Sin pensarlo fui a buscar uno, me lo puse y me coloqué en medio de sus piernas, poco a poco fui apuntando mi verga hacia su vagina, se sentía el miedo de ambos en el ambiente, ya estaba cerca de la entrada, ella sólo cerró los ojos y yo empujé y puedo decir que es la sensación mas exquisita que he sentido en mi vida. Un calor que arropaba la punta de mi verga, escalofríos, un correntazo en mi vientre…

Prima: Ay primito… Con cuidado…

Fui metiendo poco a poco mi verga hasta que entró la mitad y ahí empecé con el mete-saca a un ritmo lento

Diosss, qué rico lo apretadita que está mi prima fue lo primero que pensé

Prima: Me duele pero se siente muy rico, primito

La miré a los ojos y nos besamos mientras seguía metiéndole mi verga, sentía que subía al cielo cada vez que ella gemía.

Ella abrió un poco más las piernas, yo aceleré el ritmo.

Yo: Ay primita, ufff, no aguanto más, ya quiero acabar

Prima: Ah, ah, primito, espera… Espera… Ah, umm, ah

Fue cuestión de minutos para ver cómo ella temblaba y me agarraba fuerte los brazos, su vagina se sentía más apretada, arqueó la espalda, ahí no aguanté más y todo mi semen salió

Me acosté a su lado, sólo se escuchaban nuestras respiraciones agitadas. Pasaron unos minutos, ella se paró de la cama, se vistió, me dió un beso y salió de la habitación.

Continuará…?