Mi primo me hace su puta por chantaje
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por trujillano_hot.
Hace ya tres meses desde que me convertí en el maricón de mi primo.
La realidad es que aunque soy feliz sirviéndole, al principio me tuve que obligar, o mejor dicho, me chantajeo.
Empezare explicando como comenzó todo.
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Yo fumaba mota desde los 18 y ahora que tengo 21 ya había vuelto un habito el fumar.
Y es que fumar me relajaba y tengo que decirlo, me ponía muy caliente, tal vez eso ayuda a que todo esto pasara.
Claro que era un secreto que fumaba, si mis padres se enteraban me mataban, pues ya me habían descubierto fumando en la preparatoria y casi me enviaban a rehabilitación, y no los culpo, aunque exageraban con la situación, después de todo entiendo su preocupación, aunque yo por supuesto estaba bien, solo era por diversión.
Dada la situación, solía fumar entre las 3 y 4am.
Un mes antes de que todo empezara, vinieron a vivir a mi casa, mi tía y uno de sus hijos por serios problemas económicos que tenían.
Mi primo siempre me había gustado, y realmente no era para nada atractivo ni muy agraciado (estatura promedio, moreno y quemado por el trabajo, facciones toscas, un vello corporal exagerado, panza prominente), vaya era un tipo cualquiera que nunca dio a sospechar nada (a pesar de tener 30 y seguir soltero), creo que esa pinta de macho heterosexual era lo que mas me prendía de el, y aunque hubiera matado por ser su mujer, ni de chiste me hubiera atrevido a insinuarle mis deseos, no quería ni imaginarme los problemas en los que me metería si se lo hacia saber, y me acusaba con mis padres, no sabia que era peor, si ellos enterándose de que era maricón, o de que fumaba mota a sus espaldas o curiosamente frente a sus caras.
A pesar de la llegada de mi familia, había continuado con mis excursiones al patio en la madrugada para fumar, y era muy cuidadoso en no hacer ruido ni levantar sospechas, y así ocurrían mis madrugadas sin ningún problema, hasta que se apareció el.
-¿Que estas haciendo?- me pregunto, aunque era obvio por el olor y el cigarro casero que estaba fumando mota.
-Nada, solo fumo un cigarro- -A mi no me engañas, estas fumando mariguana, con lo que sabes que le molesta a tus padres el tema de la mariguana.
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sabes que, creo que les diré, tal vez así decidas dejarlo- me espetó.
Yo que para ese momento estaba totalmente colocado y no tenia percepción clara de la realidad, entré en pánico total.
Mi primer reacción fue llorar, no mucho claro, pero mis ojos se humedecieron, y inicie a rogarle que no le fuera a decir a nadie.
-Por favor primo, hazme el paro wey, no le digas a mi madre nada, y yo te hago el paro después con lo que quieras- le dije con desesperación tratando de apelar a nuestra insignificante y inexistente relación de primos.
-Bueno, puede que me calle.
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y viendo bien, creo que si me interesa que me hagas el paro, literalmente! Jajaja.
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y quiero el ¨paro¨ ahora- me dijo mientras se masajeaba un bulto en sus pantalones, del que por mi desesperación no me había fijado.
¿Realmente esta pasando lo que creía que pasaba? mi fantasía desde la infancia, ¿me estaba pidiendo que se la mamara? aunque era algo que quería, estaba drogado al full y me sentía muy incomodo con la escena, aunque también muy caliente.
Mientras pensaba todo esto, sin saber que decir, el se seguía masajeando el bulto, y de pronto me encontré absorto mirando ese paquete que siempre había querido tener; mi primo que se dio cuenta de mi mirada se carcajea (lo que me provoco miedo, no fueran a escuchar mis padres y se fueran a levantar).
-Vaya que es puta la primita, a ver maricón, haz el trabajo rápido sino quieres que vaya ahorita mismo a levantarlos y te vean como estas de drogado- me dice mientras se recarga contra la pared- ¡Apurate puta!- y me tira una cachetada, que mas que cachetada era un puñetaso a mano abierta.
Bueno, creo que tenia que decidir, y después de todo no era algo que fuera a sufrir, solo sería una mamada pensé para mis adentros, Ja! si supiera todo lo que me iba a hacer mi primo en los siguientes días, me hubiera cagado del susto ahí mismo, cabe decir que no había tenido ninguna experiencia antes, en mi ciudad no se puede ser puto libremente, así que la tenia difícil.
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Me acerque a el y me agaché, desabroche el pantalón y quedaron enfrente de mi su boxer blanco, para desgracia mía el color blanco me dejaba ver cuan sucios estaban, con manchas amarillas seguramente de orín.
Me acerco a ellos y empiezo a esnifar su paquete, era un olor rancio, pero extrañamente, era como una droga para mi, le bajo los boxers y empiezo a mamarsela, creo que a el no le gustaba del todo como lo hacia porque decidió tomar control el mismo, y con sus dos manos agarro mi cabeza, y empezó lo que sería una follada en mi boca.
Llego un momento en el que empezó a agitarse, por lo que supuse que se correría en mi boca, pero para sorpresa para de golpe y me dice con la respiración agitada: -eres virgen maricón?- -Si- me tira una cachetada de la nada.
-se dice ¨Si, SEÑOR¨, ¿entendido MARICÓN?- -Si, SEÑOR, soy virgen SEÑOR- -Pues creo que es hora de solucionar esto, ¿no crees putita? -Si.
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SEÑOR.
-entonces no se diga mas, levántate y date vuelta-.
A lo que me empuja contra la pared mientras me quita los pantalones y me baja el calzón.
Lo primero que hacer es empezar a dedearme, cosa que me incomoda, pero prefiero relajar, sabiendo que lo que sigue es peor.
Después de un rato para, y siento la punta de su verga (ni chica ni exageradamente grande, solo grande y morcillona).
-¿Señor, no va a usar condón?- no había terminado la frase cuando me la entierra hasta que ya adentro empieza el mete-saca desenfrenado.
para callar mis gemidos me tapa la boca con su mano, la misma con la que me dedio.
Mientras me jode por el culo aprovecha para hablarme: -Mira putita, te voy a joder sin condón por que quiero que esta noche cuando vayas a dormir así todo drogado, sientas mis mecos corriendo por tu culo adolorido y sepas que eres mi maricona, así que si quieres que te guarde el secreto, y no me refiero a que eres maricón, sino a que fumas mota, desde ahora en adelante, vas a hacer lo que te diga, ¿entendido? si te quiero mamandomela, me la mamas, si te quiero dar por el culo, me das el culo, si te ordeno.
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bueno, ya te diré que mas harás por mi, no te quiero asustar mas jajajaja, pero ahora eres mio, ¿entendido?- mientras me lo dice me lo mete mas al fondo, a lo que sin poder hablar solo asiento con la cabeza, lo cual causa la risa de el.
Y ahora si, vuelve a agitarse, hasta que como lo promete, siento como se corre dentro de mi culo, lo saca y me ordena limpiarselo, aunque era realmente asqueroso, lo hice, después de todo, no tenia muchas opciones, ¿o si?
Mas tarde en mi casa, todavía bajo los efectos de la mota, siento correr su semen(no me había dejado limpiarme, y me ordeno que cerrara el culo para que no se me salieran) por mi ano, que se alivia un poco del ardor con el calor del liquido.
Me acuerdo de lo que me dijo y termino llorando de miedo por lo que sucedería después, mientras lloro, me doy cuenta de lo afortunado que soy por tener a un hombre que decidió hacerme su mujer.
Me seco las lágrimas y sonrío mientras cierro mi ano con la esperanza de guardar el semen de mi macho caliente dentro de mi.
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