MI QUERIDO ABUELO 2, EL NEGRO GABINO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por cojefer61.
Ya habían pasado 2 años, desde aquellas vacaciones en que mi abuelo me hizo el chico más feliz de la tierra, convirtiéndome en su pequeña mujercita.

Yo ya tenía catorce años y estaba más alto y mejor desarrollado, el abuelo decía que tenía el culo más grande y apetitoso, Una noche yo estaba muy caliente y quería que me hiciera el amor, me dice que el también tenía muchas ganas de cogerme pero que iba tener que esperar para más tarde, porque iban a venir unos amigos de él a jugar al truco, cuando llegan me los presenta uno por uno, quedo impactado con un negro llamado Gabino, de aproximadamente unos 50 años, era una belleza, jugaron toda la noche, yo iba y venía sirviéndoles café, note que el negro miraba mi trasero y eso me excitaba, cuando se fueron nos acostamos e hicimos el amor desaforadamente , yo no podía quitar al negro de mi mente, al acabar mi abuelo me mira y dice ¡que paso bebé, estabas más caliente que nunca!.

Yo solo sonreí, Al otro día, mientras desayunábamos, me pregunto ¿qué te parecieron mis amigos?.
, ¡parecen buenas personas abuelo!. conteste, el me miro y riendo dice ¡note como te impacto Gabino y vos a él!.
¡pero ten cuidado, que si te agarra no te vas a poder sentar por un mes!.

Siguió riendo, mientras salía hacia el pueblo para hacer unas compras, como iba a tardar varias horas, me puse a limpiar, hacía mucho calor así que me quede en tanga solamente, estaba muy distraído con el aseo, cuando de repente me doy vuelta y lo veo a Gabino parado en la puerta detrás de mí observándome de manera libidinosa, me asuste al verlo y trate de taparme con un delantal, entonces el me dijo – ¡tranquilo, que tu abuelo ya me conto todo!.
– ¡ y por Dios que no le culpo, yo hubiera hecho lo mismo, estas realmente riquísimo!.

Se quito el short dejando al descubierto una negra tremenda verga que aun dormida era monstruosa, asustaba al verla me dio un poco de miedo al pensar que iba a meter toda esa masa de carne en mi trasero, – ¡Gabino que haces si llega a venir mi abuelo se te va armar?.
– ¡tranquilo bebe tu abuelo fue al pueblo y va a tardar en venir, tenemos mucho tiempo para divertirnos!.

No termino de hablar cuando se abalanzo sobre mi como un desaforado – ¡ me vuelves loco pendejo, no aguanto más te quiero coger ya!.
agarrándome de un brazo me tiro sobre la mesa, arranco mi tanga de un tirón – ¡tranquilo mi amor papi después te compra otra bombacha más linda!.

Tomo una botella de aceite que había sobre la mesada, me lubrico el trasero con ella, luego metió su enorme verga lentamente, era como si me metieran un bate de beisbol por el culo, pero como él me gustaba tanto me la aguante toda sin decir palabra, luego de un rato comenzó a cogerme con furia, podía sentir sus enormes y velludos testículos golpeando mis nalgas mientras su verga entraba y salía de mi culo, yo estaba enloquecido de placer, gritaba y jadeaba, gozaba como una perra, entre el dolor y el placer empecé a mover mi culito al ritmo de cada embestida, le decía ¡si papito, cógeme que me gusta!.

, a lo que él me contestaba ¡te gusta putito, es toda tuya, te la voy a dar hasta inundarte con mi leche!.
, al rato cuando está por terminar, la saca me da vuelta, la introduce en mi boca y comienza acabar, era tanta la cantidad de semen, que no daba a tiempo para tragarlo todo, se chorreaba por la comisura de mis labios cayendo sobre mi pecho como una catarata de blanco semen, luego de debimos bañarnos y volvimos hacerlo bajo la ducha, pero esta vez le pedí que me acabara en la cola, al salir del baño aun desnudos nos encontramos con mi abuelo que nos había estado observando, lo miro a Gabino y dijo ¿qué tal estuvo, tenía razón que es lo mejor?.
Gabino le contesto ¡ si tenías razón, es mejor que una puta!.
– ¡yo le enseñe todo lo que sabe y más!.

Ahí comprendí que estaba todo preparado, el abuelo había salido a propósito, dejándome solo para que el negro entrara y me cogiera, no me gusto que lo hiciera porque me sentía usado, pero en vez de enojarme me puse contento, ahora tenía dos machos bien dotados que me satisfacerian a gusto cada vez que viniera de vacaciones, por supuesto en cierto ocasión llegamos a hacer un trío, los dos para mí solito, pero eso es otra historia.