Mi segundo gran error
Mi nombre es Natalia, y esto es lo que ocurrió un par de semanas después de haber pedido permiso para ir al cumpleaños numero 15 de mi amiga Susan.
Les dejo mi relato para que sepan como empezó todo: Mi inocente petición : mi gran error
Éste había sido un día normal de escuela, llegué a eso de las 4 de la tarde a casa, cansada, con la mochila pesada de tantos libros que debí llevar ese día.
Cuando llegué, estaba mi papá y mis 2 tíos, hermanos de mi mamá, que viven por la misma calle que nosotros. Mi tío Manuel, de 55 años y mi tío Néstor de 58, que vienen regularmente a ver el futbol a casa con papá.
Los 3 estaban sentados, con la mirada fija en la tv y tomando cerveza. Mi casa no es muy grande, por lo que inevitablemente tuve que cruzarme por frente de la tv para ir a mi habitación.
En lo que paso, mi tío Néstor da un silbido y me sigue con la mirada
Tío Néstor: Que linda que te ves Naty, que grande que estás.
Yo: Gracias tío – le digo con un poco de vergüenza y asco .
Mi uniforme escolar no tenía nada lindo, era un vestido azul oscuro, plano, holgado y sin mangas, una blusa blanca , zapatos negros que parecían de hombre, corbata y calcetas grises.
Sigo camino a mi habitación
Papá: Hija, ven a sentarte con nosotros a ver el partido
Yo: Me cambio y voy
Papá: después te cambias, acompáñanos
Por el carácter de mi papá, preferí no discutirle más, tomé una silla del comedor y la puse a un rincón para sentarme a ver el futbol.
No era muy fanática, pero entendía todo ya que mi papá siempre nos hacía ver futbol con él y mis hermanos.
Iba a preguntarle por mi mamá, pero recordé que la noche anterior nos dijo que iría a visitar a mi abuela y llegaría tarde.
Mis hermanos tampoco estaban porque tenían horario extendido de clases.
Tío Néstor: mi niña, quiere algo de tomar? una cerveza?
Yo: Jaja , no tío, no tomo cerveza
Tío Néstor: Ja!, es broma, si lo sé, te traeré un jugo. ¿Alguien quiere algo de la nevera?
Si! una cerveza, gritan mi papá y mi tío Manuel.
Pasó un rato y yo seguía sentada viendo al partido, con mi papá y mis tíos. Llevaba medio vaso de jugo bebido y me estaba dando mucho sueño. No me extrañaba ya que me había acostado muy tarde la noche anterior, por hacer tareas de la escuela y me había tenido que levantar muy temprano, por lo que estaba esperando terminara el futbol para ir a dormir una siesta.
Unos minutos antes de terminar el futbol, doy el ultimo sorbo de jugo y al mirar el fondo del vaso, veo que hay restos de alguna especie de polvo. Estaba un poco desconcertada pero al mismo tiempo tenía mucho sueño y no lograba razonar bien. En eso mismo logro ver que mis tíos, me están mirando, murmurando algo y riendo entre ellos mientras me veían.
Papá: Malo el partido!- dice mi padre ofuscado levantándose de su sofá – iré a dormir una siesta mejor, dejen cerrada la puerta cuando se vayan – les dice a mis tíos.
Se va a su habitación y cierra la puerta.
Yo: yo también iré a dormir una siesta – les digo a mis tíos intentado ponerme en pie.
Mis piernas no lograban sostenerme bien, estaba muy mareada y con sueño, me afirmé de la pared y comencé a caminar tambaleante, choqué al menos 3 veces con los muebles y las paredes. Solo sentía murmullos y risas de mis tíos.
Llegué a la puerta de mi habitación y cuando la abro, pierdo completamente el equilibrio y me voy de espalda. No alcancé a caer al suelo ya que atrás mío estaba mi tío Néstor, el que logra atajarme, abrazándome por la espalda y con ambas manos agarrando mis pequeños pechos.
Yo: gracias tío
Tío Néstor: que pasó mi niña? te hizo mal el jugo? – me dijo riéndose
Apenas en pie, termino de abrir la puerta de mi habitación, cuando siento que mi tío me levanta y con fuerza me lanza sobre la cama boca abajo.
Cuando me volteo, veo que el ya cerró la puerta por dentro, se está quitando el cinturón y desabotonando el pantalón. Lo más rápido que pude, me puse en pie y caminé tambaleante hacia la puerta, pero él me bloqueaba la salida con su cuerpo.
Sacó su torcida y venosa verga de sus pantalones, seguida de sus disparejas y peludas bolas, no era muy grande, pero la tenía bien dura y ya con la punta mojada. La tomó con su callosa mano derecha y con la izquierda me agarró del pelo por detrás de mi cabeza y me empujó fuerte hacia el suelo.
Mis débiles piernas no lograron hacer resistencia y caí de rodillas al suelo, quedando con toda su verga a la altura de mi cara. Solo atiné a gritar
Yo: Papáaaahhhhgggggg
fue lo único que logué decir antes que de golpe me metiera toda su verga hasta la garganta.
Me tomó la cabeza con ambas manos y con fuerza empezó a embestirme con su verga hasta el fondo de mi garganta, gimiendo como animal. Yo solo hacía arcadas intentando respirar e intentando de dar golpes de puño en sus piernas, con fuerza casi nula.
Estaba totalmente drogada, no podía razonar lo que estaba pasando, me costaba mucho respirar y no me podía el cuerpo, solo sentía como me corría la saliva desde la boca por la barbilla y el cuello, mojando todo el cuello de mi blusa. Fue lo último que sentí hasta que en un momento simplemente desfallecí y me desmayé.
No sabía cuanto tiempo había pasado, ni que cosas pasaron en el tiempo que estuve desmayada, solo supe que, cuando logré abrir algo mis ojos, solo veía el techo de la sala, a medida que iba recuperando algo de conciencia sentía como mi cuerpo se movía como un bulto al cual golpean repetidamente. Miro hacia un lado y veo a mi tío Néstor, desnudo masturbándose con la mirada fija en mí y sonriendo. Sigo mirando y me doy cuenta que estoy desnuda, solo con las calcetas puestas y uno de mis zapatos, estoy acostaba boca arriba sobre mi tío Manuel, el cual me tiene fuertemente aprisionada con sus brazos.
Sigo recuperando más los sentidos y me doy cuenta que tengo toda la verga de mi tío Manuel metida en mi culito. El movimiento de mi cuerpo es por cada embestida que el me daba, haciendo sonar como cachetadas de su pelvis chochando con mi culo.
No se si porque aun tenía mis sentidos a la mitad o por el tiempo que me estuvieron dando por atrás, pero me dolía muy poco, y a ratos solo sentía el sonido de fluidos revolviéndose por la entrada de mi ano por cada metida y sacada.
Tío Néstor: Que bueno que despertaste Natita, contigo despierta será mas divertido – me dijo mientras se acomodaba entre las piernas y mi tío Manuel y las mías. – veamos si te gusta esto.
Puso la punta de su dura verga en la entrada de mi conchita y me tomó con ambas manos desde la cintura
Tió Néstor: Toma mi niña!! – me gritó embistiéndome con fuerza, metiendo de golpe toda su verga en mi concha.
No atinaba a hacer nada, solo lágrimas salían de mis ojos mientras intentaba esbozar alguna palabra.
Cada uno a su ritmos, ambos tíos me metían sus vergas por el culito y mi conchita.
Mientras mi tío Manuel me tenia aun aprisionada con sus brazos, me gemía al oído y pasaba su lengua por mi oreja y mi cuello, mi tío Néstor se encorvaba para pasar su lengua por mis pechos y meterlos enteros dentro de su boca como queriendo succionarme entera.
A ratos, cuando ambos coincidían con sus vergas dentro de mi, sentía como chocaban entre si , como si se tocaran directamente.
Sentía como si golpearan y revolvieran mis órganos con sus vergas.
Estaba toda sudada, el pelo enredado y mojado, mi tío Néstor empezó a aumentar la velocidad de sus embestidas, me apretaba fuerte el cuello con una mano mientras con la otra me daba de cachetadas en la cara y los pechos. Se acercaba a mi y me escupía la cara y dentro de la boca
Tío Néstor: desde ahora serás nuestra putita – me decía mientras me golpeaba y me metía de golpe su verga
Mi tío Manuel también aumentó la intensidad de sus embestidas y mordía fuerte mi oreja
Cuando logré recuperar más mis sentidos y empecé a sentir el dolor, el sudor y el calor de los asquerosos cuerpos de mis tíos, logre sacar la voz y a llorar con fuerza, llamaba a gritos a mi papá
Tío Néstor: Cállate! – me dice dándome una cachetada – a tu papá no le importará que tomemos prestada un rato a su hijita
Me quitó la calceta del pie que no tenía zapato, la enrolló y me la metió en la boca, todo esto sin parar su ritmo ya acelerado.
Yo no podía parar de llorar, y por más que intentaba zafarme, nada podía hacer.
Tío Manuel: Cambio! – dice agitado
Tío Néstor: Si!, me toca el culito ahora!
Me toman como una muñeca y me voltean, quedando ahora boca abajo sobre mi tío Manuel.
Lo que pasó fue peor de lo que esperaba…
Al parecer mi papá todo el tiempo estuvo ahí.
Estaba sentado sobre su sofá, con la cámara en mano, grabando todo lo que me hacían, sin decir una palabra, solo masajeando su verga por sobre el pantalón.
Intentaba gritar y quitarme la calceta de la boca, cuando ya tenía nuevamente ambas vergas metidas dentro de mi, esta vez mi tío Manuel por la concha y mi tío Néstor dándome fuerte por el culo.
Después de unos minutos , mientras mis tíos me seguían embistiendo y dando de nalgadas, mi papá se para de su sofá, se acerca con la cámara hacia mi y me quita la calceta de la boca
Yo: Papáaa!!!! ayudame por favor!! – era todo lo que podía gritar mientras lloraba con fuerza
Mi papá solo acercaba su cámara a mi cara llena de saliva, mocos y lágrimas, para tomar primeros planos.
Luego dejó su cámara aun lado, sacó su verga de su pantalón y sin decir nada la metió hasta el fondo de mi garganta, callando mi llanto y reemplazándolo por una fuerte arcada y un montón de bilis que vomité de golpe
Después de unos minutos de violarme salvajemente, acabaron los tres dentro mío dando fuertes gemidos, comenzando con mi padre que con su verga al fondo de mi garganta bombeó chorros de semen que tragué y que también salieron por mi nariz y comisura de los labios, seguido de mi tío Néstor que acabó algo dentro de mi culo y sacó su verga para seguir acabando sobre mis nalgas y mi espalda y finalmente mi tío Manuel que con fuertes embestidas y jadeos bombeó varios chorros de semen dentro de mi conchita.
Yo ya no podía más.
Se pusieron de pie y me dejaron tirada en el suelo.
Mi papá me ayudo a ponerme en pie y me sentó sobre uno de los sofá.
Yo estaba toda mojada y cubierta de semen que seguía escurriendo de mi concha y mi culo, con el pelo despeinado y mojado.
Papá: Mira hijita – me dice acercándose con la cámara a la tv de la sala.
Conectó la cámara a la tv, rebobinó la cinta y puso play.
En el video se veía cuando el con la cámara entraba a mi habitación. Yo estaba inconsciente en el suelo, con el vestido escolar un tanto levantado que dejaba ver mis bragas blancas.
Se ve a mis 2 tíos que se acercan a mi, me levantan y me dejan acostada sobre la cama para luego besarme el cuello y la boca mientras con sus manos acarician mis piernas y mi conchita sobre mis bragas.
Me quitaron la ropa, mientras mi cuerpo lánguido se movía como un muñeco de trapo. Después uno de ellos me pasa la lengua por mi conchita, mientras otro pasa su verga por mi cara y mis labios intentando meterla en mi boca.
Tío Manuel: Que rica conchita la de tu hija, ¿es virgen? – le preguntó a mi papá, recibiendo solo una risa de respuesta
Al rato se recostaron uno a cada lado de mi inconsciente cuerpo y chuparon mis pechos al mismo tiempo que metían sus dedos en mi conchita y mi culito.
Luego se ve como mi papá les pasa una cerveza a cada uno, de la que beben y me echan en la boca y sobre mi cuerpo, para luego pasarme la lengua intentando limpiarme.
Mi tío Manuel, se acostado al lado mío, me toma y me acuesta sobre él, boca abajo, me abre las piernas , con su mano acomoda su dura verga en la entrada de mi conchita y empieza a violarme.
Mi tío Néstor terminó de vaciar su cerveza sobre mi culo y se la tomaba pasándome la lengua por entre las nalgas y con la botella ya vacía empieza a meterme el cuello de la botella por el culo.
Estuvieron un rato así, mientras mi papá se encargaba de grabar todo , lo mas cerca que pudiese.
Se acercaba con la cámara a mi cara inconsciente y me abría los ojos con los dedos, me metía los dedos en la boca y mostraba mis dientes, me apretaba los pechos y las nalgas con su mano libre. Mostraba como la verga de mi tío Manuel entraba y salía de mi conchita, toda humedecida de líquido blanco viscoso y mostraba que tan adentro entraba la botella que me tenían metida en el culo.
Luego se ve como mi tío Néstor toman una manta y una almohada de mi cama y les dice que me lleven a la sala para no desordenar mi dormitorio.
Ahí se ve como me ponen boca arriba sobre mi tío Manuel y me lo mete por atrás hasta que desperté y pasó todo lo contado..
Yo estaba ahí en posición fetal sobre el sofá mientras mi papá me terminaba de mostrarme el video en la tv.
Mis tíos se terminaron de vestir y se despidieron de mi papá
Papá: Espero hayamos quedado con la deuda saldada – le dice a mis tíos mirándome de reojo
Tío Néstor: No sé, yo creo que falta aun pagar otra mitad – dice mirando a mi tío Manuel
Tío Manuel: yo pienso lo mismo – dice encogiendo los hombros
Papá: está bien, ahí nos arreglamos con la otra mitad.
Mis tíos toman sus cosas y se van sin mirarme, como si nada hubiese pasado.
Papá: Natalia ordena aquí y tu dormitorio que tu mamá debe estar por llegar – me dice un tanto enojado, como si yo hubiese hecho algo malo
Se termina de vestir y se va a su habitación.
Yo un tanto desconcertada y algo drogada aun, no pude hacer más que obedecer.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!