Mi sobrina Raquel, su despertar sexual a mi lado – Parte III

Luego de que me apoderara de su culito, Raquelita ya no tenía límites. Es más, llegó a faltar al colegio para venir antes a coger. Y ayer apareció con su amiga intima, no fue una sorpresa. Era algo que se venía gestando desde que se empezaron a contar lo que hacían cada una con su macho..
Sonó el timbre y corrí a abrir para que nadie viera que ambas niñas entraban a casa. No sería raro, pero por si acaso. Raquelita y su amiga Ailin venían directamente del colegio. Estas niñas están en un momento de sus vidas que solo les interesa tener un buen pedazo de carne entre las piernas. No importa de quien. Y obvio que yo intentaba satisfacer todas sus necesidades en lo referente al sexo.

Ailén tiene la misma edad que mi sobrina, ambas están en séptimo grado. Es el momento donde el despertar del sexo junto al desarrollo del cuerpo de la mujer mejor se muestra. Día a día uno va viendo como sus nalgas se rellenan, sus pechos crecen, la verdad es que si uno les presta la debida atención las verá florecer. Y debo reconocer que desde que cojo con mi sobrina, no pierdo de vista ninguna niña. Pero aquí estábamos, Raque, Ailin y yo.

Merendamos, yo intentando restarle importancia al momento, las niñas hablaban susurrando entre ellas, yo me hacía el desentendido. Apenas las niñas llegaron me tomé una pastillita de las celestes. Ya con dos mujercitas necesitaba alguna ayuda para no defraudarlas. Yo sabía que mi sobrina tomaba la pildora anticonceptiva, por lo que en un momento la aparté de su amiga y le pregunté si Ailin tambien tomaba la píldora. Me confirmó que sí, mucho antes que Ella misma. Eso me tranquilizó, no había riesgo de embarazar a las pibas.

Dejé pasar un tiempito hasta sentir que la pildorita me hacía efecto, y mi pene comenzaba a endurecerse. Entonces le hice señas a Raquel, la que sin muchos tapujos se comienza a sacar la ropa quedando en bombacha y corpiño. Ailin al ver a su amiga casi desnuda con cara de intriga le pregunta por qué se sacó la ropa. A lo que mi sobrina sin recato alguno le dice, escuchame, estuviste de acuerdo en que viniéramos a coger. Ahora no te hagas la puritana y sacate la ropa que mi tío ya tiene la verga dura. Y era cierto. La amiga medio con verguenza comenzó a quitarse la ropa hasta que quedó también en ropa interior. Yo haciéndome el tonto, y no me sale mal, me desnudé y quedé solamente en slip. Claro que mi verga dura ya se notaba muy bien. Ailin le echó una mirada de costado, y al notar el tamaño abrió grande los ojos.  Convengamos que mis 18X6.5cmas no son para asustarse. Pero parece que las vergas que se comió esta piba han sido más pequeñas que mi rabo.

Semi desnudo como estaba, me encaminé al baño y abrí la ducha. Me metí a bañarme e invité a las niñas a acompañarme. Ambas lo hicieron previo sacarse la poca ropa que tenían encima, yo ya estaba totalmente en bolas, por lo que mi rabo apuntaba al cielo y estaba a la vista de ambas niñas. Comenzamos a bañarnos, yo enjabonaba a mi sobrina y Ella a su amiga. Pronto pasó de una ducha a un toqueteo y franeleo entre los tres.

Quiero aclarar que Ailin es tan hermosa como mi sobrina, una morocha de sangre tropical, de nalgas duras, pechos llenos y bien redondos, boca ancha y pelo negro enrulado, al igual que su pubis.  Lo bueno de todo es que ambas niñas tienen casi la misma altura, por lo que apoyarle la verga en el culito a mi sobrina y pasar rápidamente al culito de Ailin era simplemente cambiar de dirección. De pronto mi sobrina se arrodilla y toma mi miembro en su boca, golosamente comienza con una linda mamada. Su amiga al principio medio se inhibe, pero Raquel la apura y Ailin también se arrodilla y entre ambas comienzan a darme una mamada memorable. Encima con la excitación, mi tripa está pletórica. Bien gorda  y las venas sobresalen en su lomo. Como para una foto. Luego de unos 10 minutos de mamada, ya  las pendejas están calientes y se besan entre ellas.

Salimos de la ducha y nos encaminamos a mi pieza. Me tiro en la cama boca arriba y ambas vuelven a mamarme la verga, pasados unos minutos les digo que es mi turno de darles placer. Mi sobrina sabe lo que le espera, le encana cuando le chupo la concha y le meto tres dedos en el culo. Así es que enseguida se acuesta boca arriba a piernas abierta e insta a su amiga a hacer lo mismo. Finalmente tenía a las dos púberes para mi dispuestas a que las coja. Inicié mi acto de estimlación, un par de lamidas a cada una con incrustación de dedito en el culito de cada una. Ambas comenzaron a gemir y a suspirar. La que primero llegó a lograr su orgasmo fue Ailin, se ve que nunca la satisfacian como yo, ya que comenzó a temblar y cuando acabó gimíó como loca. Mi sobrina también acabó pero mas calma. Ya estaba acostumbrada a mi lengua.

Me arrodillé entre las piernas de Ailin, puse sus pies en mis hombros, y tomando mi miembro por el tronco, se lo froté suavemente buscando lubricarlo y cuando encontré su cuevita caliente le metí la cabeza y media verga. Suspiró fuerte, pero salió a mi encuentro y solita se metió toda la pija. Comenzó a moverse como una serpiente. Su concha no era tan estrecha como la de Raquel, pero lubricaba muy bien por lo que rápidamente nos acompasamos en el movimiento, y le puedo asegurar que se la enterraba toda, hasta los testículos, y rápidamente llegó a su orgasmo.

Para esto mi sobrina estaba meta dedo con su conchita, le levanté las piernas a mis hombros y la emperné hasta el fondo de una. Gimió fuerte, pero comencé a bombearla fuerte, y rápidamente estaba al borde de acabar, lo que logró cuando le metí dos dedos en su culo. Para esto mi verga estaba dura y dispuesta para hacerles el culito a ambas, así como estaban, tomé el ge lubricante de la mesita de luz, le puse el pico vertedor en el agujero a mi sobrina y apreté, llenádole su canal trasero de lubricante, Raquel sabía lo que se le venía. Ailin no estaba preparada y medio se enojó, pero no le hice caso, le llené su culito de gel, unté mucho gel en la cabeza de mi pija, y sin preguntarle si quería, volví a izar sus piernas a mis hombros, y cuando la tuve en posición, apoyé la punta de mi verga en su esfínte, estaba cerrado pero suavemente la cabeza de mi verga comenzó a entrar, ella se quejaba un poco, pero finalmente se la metí toda. La cojí por unos cinco minutos mientras le masajeaba el clítoris con mis manos, finalmente logró otro orgasmo que la dejó laxa y extaciada. Le saqué la verga y tomé a mi sobrina que ya estaba dispuesta, ella misma subió sus piernas a mism hombros, tomo la verga por el tronco y se la metió solita en su culito, yo solo aporte un mínimo esfuerzo y la verga entró toda, Raquel no duró ni cinco minutos y llego a su orgasmo. Yo le saqué la verga todavía dura, tomé a Ailin la hice ponerse boca abajo, y se la volví a meter por el culo. La cojí hasta que llegué a acabar llenando su culo de semen. Luego de que nos relajamos fuimos a bañarnos. Cuando ambas niñas se iban a sus casas, se da vuelta Ailin y me pregunta cuando vuelven. Estaba más que conforme con la cogida. Arreglamos para que mañana vuelvan. Que se le va a hacer. El saludo y el sexo no se le niega a nadie.