Mi suegra no creia que era atractiva – parte 3
Su hija nos descubrió y pasó lo impensable..
Luego de la brutal cojida que le dimos a Adriana, lo hemos repetido varias veces en algún motel. Alguna vez en grupo, otras veces yo solo.
Llegó un fin de semana en el cual mi suegro saldría otra vez de su casa un par de días, así que mi novia Flor y Adriana me invitaron a quedarme. Flor me dijo que hacia unos días, su mamá le confesó que sentía curiosidad por probar marihuana, asi que como sorpresa, lleve un poco.
Entrada la noche, unas horas después de cenar les mostré lo que había traído.
—¿Querías probar no Adri? Fumemos todos Flor.
Aunque se sonrojaron bastante, las dos aceptaron y empezamos afumar.
Pasados pocos minutos, la lujuria empezó a sentirse. Todos nos calentamos bastante. Flor empezó a besarme con su lengua a la vista, al lado de su madre, quien se notaba que se estaba aguantando.
Flor paró en seco y se paro para ir al baño. Apenas se perdió de vista, Adriana se sentó sobre mi y comenzo a besarme, metiendo su lengua en mi boca y dejandome tocar sus pechos.
Adriana corrió un poco mi pantalón y comenzó a masturbarme, pero justo en ese instante volvió Flor. Por un momento se me paró el corazón cuando habló, pero enseguida cambió todobel panorama.
—¿¡que hacen hijos de puta!? ¿No invitan?
Dicho eso se acerco y tuve mi beso triple soñado. Flor, Adri, sus lenguas mezclándose con la mia, lamiendo sus labios. Las dos me estaban agarrando el pene hasta que me sacaron el pantalón. Minutos después ya estabamos desnudos los tres.
—Vamos a tu cuarto mami, es más cómodo.
Abrazadas y besándose caminaron mientras yo las seguía. Al entrar al cuarto de mi suegra, me tiraron en la cama. Adriana se arrodilló y comenzó a chuparmelo, mientras que Flor subió a la cama y se sentó en mi cara, dejando que pase mi le gua por su conchita. Adriana vio eso y decidió parar de chupar y subir a sentarse en mi verga.
Al hacerlo, Adriana y Florencia quedaron cara a cara. No mediaron palabra y se besaron mientras yo las hacia gozar. Mi lengua no distinguía entre la concha y el ano de Flor, que no paraba de gemir.
Adriana paró y con un movimiento brusco me corrió y acostó a Flor. Inmediatamente se arrodilló y empezó a lamer su conchita como nunca vi. Yo me arrodille al lado de la cara de Flor y le meti la pija en la boca, hasta la garganta. Casi la atoro, pero siguió chupando. Un par de orgasmos después, Flor pidió cambiar así que hicimos lo mismo con Adriana. Yo ya sabía que toleraba bastante, así que me subí encima de su cuello y le penetré hasta el fondo de la garganta, dejandola sin respirar unos segundos. Su boca, llena de saliba, no paraba de saborear. Sus ojos con algunas lagrimas pedían que no pare.
Varios orgasmos despues, Adri habló.
—Vamos a exprimirle la piba hijita. Quiero compartir su leche contigo.
Adriana se puso en cuatro.
—Poné tu carita al lado de mi cola y abrí la boquita, vas a ver que rico.
Yo, parado detras de Adri entendí inmediatamente. Mi verga entró en la concha de mi suegra, dandole un orgasmo bastante rápido. La saqué y penetré la boca de Flor. Repetí eso varias veces, alternando las posiciones de Florencia y Adriana hasta que Adri me pidió por la cola.
—Dame por atras que quiero que Flor pruebe el sabor de la cola de su mami.
Así lo hice. Mi verga empezó a entrar en el ano de mi suegra, que ya estaba humedo y listo para cojer. Saqué mi pija y la puse en la boca de Flor.
Adri se dio vuelta, se agachó como Flor y la miró.
—¿Te gusta mi cola bebé? Otro día me la chupás ditecto.
Al instante comenzó a chuparmela junto con su hija, quien se excitó tanto, que hasta le lamio la cara a su madre.
Luego de un rato alternando bocas, avisé que iba a explotar. Ambas abrieron su boca y mi leche comenzó a llenarles la cara y la boca de blanco.
¿La imagen de la noche? Madre e hija besandose y compartiendo mi semen, lamiendose la cara y tetas antes de tragárselo todo.
Nos dormimos los tres juntos y al despertar, increíblemente no había tensión. Ya sin los efectos de la marihuana pensé que sería incómodo, pero vi que no cuando me levante y vi que Adri y Flor estaban besándose contra la pared.
Seguramente se repita. Muchas veces.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!