Mi tía favorita 2

Como unas vacaciones familiares se convirtieron el la mejor experiencia sexual de mi vida.

Me quedé perplejo con lo que dijo Karla, no entendía muy bien lo que me había dicho… mis tíos le pidieron que me invitara a bajar?

Yo: Cómo que ellos te dijeron que bajara? No estoy entendiendo.

Karla: Jajaja no se si eres tonto o te haces…pero venga, te explico después, ya lo entenderás. Quiero que me cojas en la cama.

Yo: …. Estás loca? Si con lo que acaba de pasar no quiero ni salir, y tu ahora me pides que tengamos sexo a lado de mis tíos? Vamos, dime de que va todo esto? No se con que cara veré a mis tíos mañana por la mañana.

Karla: Confia en mi, todo esta bien.

– Muchas emociones encontradas sentía en ese momento, los tíos que alguna vez vi como padres y a los cuales respetaba demasiado habían escuchado todo lo que había ocurrido en el baño, me quedé pensativo un momento, no entendía para nada la situación, karla tomó mi mano…-

Karla: Tranquilo hombre, es parte del juego. Venga te contaré un poco para que te calmes, no te lo tomes tan a pecho, quieres? De lo que te diga ni una palabra, tu actua normal.

Yo: Me estas asustando un poco, juego? De que me hablas? Necesito que seas más clara.

Karla: Si, allá voy, solo ten paciencia y escucha con atención. Tus tíos están metidos en una onda medio rara llamada swingers, no se si sepas a que de refiera, yo los conocí en ese ambiente hace ya unos años y aunque a mi me apetecen mucho las pollas jóvenes, pues con tu tío hubo mucha química y mi pareja de aquel entonces se sintió atraído por tu tía, así que entablamos una buena relación, algunos encuentros ocasionales, muy esporádicos, siempre que venían a la ciudad se daban una escapada para que tuviésemos un encuentro. Aunque los encuentros siempre fueron ocasionales, siempre fantaseabamos los 4, mi relación con tu tía se hizo más de confianza y yo le empecé a contar mi fascinación por las pollas jóvenes, tan a mano y para tu suerte, compartieron unas fotos en facebook de una fiesta familiar y te vi, y como buena caza jovencitos, empecé a investigar sobre ti, como no podía ser de otro modo, le pregunté a tus tíos por ti, en especial a tu tía. Le dije que me gustaste, que seguro tenías una verga muy rica, ella me dijo que nunca te había visto con otros ojos…

-Estaba muy atento a lo que ella me decía, sorprendido por que era un tema que desconocía por completo.-

Yo: A ver, espera… swin.. qué? De que va todo eso, no estoy entendiendo nada.

Karla: Swinger, intercambio de parejas. Mi ex pareja siempre fue muy abierto y bueno, como te digo, así conocimos a tus tíos. No me interrumpas para que puedas entender mejor las cosas, al final preguntas todo lo que quieras.

Yo: Esta bien…

Karla: Bueno, como te decía, yo empecé a preguntarle mucho a tu tía por ti, le conté que usaba mis consoladores y pensaba que era tu polla penetrandome, supongo que esto la hizo verte con otros ojos. Termine con mi ex pareja y me alejé un poco de tus tíos y francamente hasta dejé de pensar en ti, estaba tan deprimida, que en lo que menos pensaba era en sexo, pero hace un par de meses me escribió tu tía, y me dijo que vendrían, que si nos veíamos, les conté que no tenía pareja y que quizá sería después, parecía que ahí quedarían las cosas, nos despedimos ese día y durante la toda la semana estuve pensando en la invitación, tenía algo que proponerles, quería que tu vinieras, así que semanas antes de que vinieran, le escribí a tu tía y le pregunte que si seguía en pie la propuesta y me dijo que si, pero le dije que tenía una condición, ella se sorprendió un poco, porque nunca nos habíamos visto con condiciones, pero me pregunto de qué se trataba y le dije que quería que tu vinieras…

– En ese momento una extraña sensación invadió mi cuerpo, mi tía sabía que vendría a follar con una madura extraña, el morbo de saber que mi tía era cómplice de aquel acto me había excitado demasiado.-

Yo: Y que te dijo?

Karla: Pues como que que me dijo? Estas aquí, no? Obviamente accedió, no sin antes decirme que le diría a tu tío. Entonces después de eso me sentí más animada, mi tristeza se fue, me sentía más deseosa que nunca. Así que empecé a buscar a tus tíos días previos a su llegada, hacíamos videollamadas, hicimos un grupo, y yo les decía todo lo que quería que me hicieras…un par de días antes de que llegaran, tu tía me escribió de manera privada y me dijo que ella también tenía una petición que hacerme, me intrigue y le pregunte de que se trataba, dudo un poco en decirme, pero ella quería que follaranos y que ellos nos vieran.

-No podía creer lo que karla me estaba diciendo, el morbo de saber que mi tía quería verme follar con alguien más me empalmó de nuevo, estaba incrédulo pero enormemente excitado.-

Yo: No te creo, no creo que mi tía sea así, ella es muy seria, no se prestaría para este tipo de juegos, lo creería de mi tío, que todo el tiempo se la pasa viendo porno o morboseando a sus compañeras de trabajo, pero mi tía?

Karla: No tengo por qué mentirte, y parece que la idea de que tus tios te vean follar no te desagrado, solo basta con ver a nuestro amiguito. Ellos están despiertos aunque cuando salgamos fingiran seguir dormidos para ver como fallamos, por eso me recomendaron dejar abierta la puerta del baño con la luz encendida para que ellos puedan ver mejor.

– Dude un poco todo lo que me había contado, pero había algo en lo que tenía razón, no había motivos para que ella me mintiera, los cabos sueltos parecían estarse acomodando, ahora cobraba sentido el hecho de que mis primos no nos acompañaran en el viaje.-

Yo: No estoy seguro…

Karla: No tienes nada que perder, ya nos escucharon, es casi lo mismo, animate, que ya estoy muy caliente con todo lo que te conté y quiero que me vuelvas a coger.

Yo: … Vamos entonces.

Salimos del baño y Karla se tendió sobre la cama, yo no pude evitar voltear a ver a mis tíos, ambos recostados sobre la cama, con sus caras dirigiéndose hacia nuestra cama, me quedé pensativo un rato, los observé y parecía que seguían durmiendo.

Me recoste a un lado de Karla, empezó a besarme como si no hubiese un mañana, mientras me besaba con su mano derecha tomo mi mástil y lo movía de abajo hacia arriba, y yo incrustaba mis dedos dentro de su vagina, ella se retorcía y emitía gemidos muy fuertes.

Karla: Ahhhhgg! Metemela Ya!

…

Le abrí las piernas y me coloqué en medio dé ellas, la seguí besando, baje lentamente por su cuello, después por sus pechos y pose mi boca en medio de sus piernas, ahí estaba su cuca, limpia, depilada y brillosa, sus labios vaginales carnosos y grandes, un lunar justo en la entrada a la gloria, pose mi lengua en su clitoris y sus jugos llenaron mi boca nuevamente, me tomo de los cabellos y me aprisiono entre sus piernas, sentí que un chorro de su néctar salió con fuerza y me fue imposible beberlo todo, deje que se vaciara y me incorpore en medio de sus piernas, coloque mi falo justo en la entrada y lo introduje con fuerza, ella gemía, gritaba mientras se apretaba las tetas.

Karla: Aaaaahhhh, siii, dame por el culo, dame por el culo.

No lo dude, saque mi polla hinchada y a punto de estallar se la introduje en su orificio y sin piedad lo enterre una y otra vez, un grito ahogado entre dolor y gozo emergió de sus labios, mientras yo metía y sacaba mi polla, ella se daba placer con sus manos, la seguí penetrando hasta que una lluvia de sus fluidos salió disparado de su vagina y empapó todo mi ser, no me contuve, seguí bombeando dentro de ella hasta terminar, sentí el chorro de lefa caliente llenando su cavidad anal, hasta hacerla rebosar.

Terminamos exhaustos, me desplome justo encima de ella y nos fundimos en un beso apasionado, la deje en la cama, fui al baño a limpiarme y a cambiarme, cuando me ya estaba listo para irme, Karla apareció en la puerta del baño, seguía completamente desnuda, me besó…

Karla: Tu tía quiera que la veas, ellos no saben todo lo que hablamos, ahorita me pidieron que te acerques a tocarle las piernas, que le sobes el culo.

Mi corazón latía más fuerte, no creía lo que estaba pasando, después de tantas pajas dedicadas al nombre de mi tía, ella estaba esperando que mis manos tocaran su cuerpo. Por qué a pesar del respeto que les profesaba, mi tía Laura siempre habla sido mi más grande fantasía, una cuarentona de ojos verdes, cabello castaño y piel blanca, con unas tetas enormes y unas piernas que me volvían loco, con un par de nalgas bien paradas y grandes. Parecía que estaba soñando.

Yo: Y si es mentira? Si solo estás jugando conmigo, como le voy a hacer? Si mi tío lo sabe mada y de despierta?

Karla: Ya estás aquí, tienes la oportunidad, aprovéchala.

-Esas palabras me armaron de valor, salí del baño decidió a tocar tanto como pudiese el cuerpo de mi tía.-

Karla: Solo la vas a tocar, solo será en las partes que te dije, ese fue el trato, ellos fingiran seguir dormidos.

Yo: ok, guiarme entonces.

Ambos salimos del baño rumbo a la cama de mis tíos, mi corazón latía a toda marcha, escuchaba sus latidos, parecía que se saldría de mi pecho. Llegamos al pie de la gama, Karla tomó la cobija que cubría sus cuerpos y los destapó. Por primera vez veía las piernas de mi tía completamente desnudas, un calzón de encaje color negro cubría sus nalgas blancas. Cuando vi sus piernas descubiertas no dude ni un instante y me avalance sobre de ellas, las acaricie y pose mi boca sobre el culo y mordía sus nalgas con delicadeza, sentía que su cuerpo se estremecía y su piel se enchinaba, disfruté ese momento, cada segundo me supo a gloria.

Karla: Ya termina, nos vemos en el desayuno.

No quería dejar de sentir esa piel tan tersa, ni de saborear el fruto prohibido, pero Karla insistió, me tomo del brazo e hizo que me levantara, y me acompañó hasta la puerta.

Karla: Vaya que le traias ganas a tu tía, no? Que guarro me saliste. Lo disfrutaste?

Yo: Muchísimo, no quería parar.

Karla: Aprende a controlarte para que puedas llegar más lejos.

Yo: Esta bien, haré lo que tu me digas.

Karla: No te olvides, cuando nos veas en el desayuno actua como si nada.

Continuara…