mi tia y mis senos

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi tía siempre me ha atraído, ósea nose pero sentía algo especial por ella desde hace mucho, estábamos en mi casa porque era el cumpleaños de mi hermano mayor, estábamos pasándola muy bien y bebiendo entre todas y todos, yo de vez en cuando notaba que mi tía al pasar me miraba mucho, sobre todo mi escote, mire mi busto y no llevaba mucho escote solo lo normal ya que como mis pechos son grandes la mayoría de mis poleras se me escotan mucho, a mi igual me gustan las mujeres, y bueno con el alcohol, me sentía un poquito caliente al notar que mi tía me veía los pechos de vez en cuando.

ya se había echo tarde y la fiesta de mi hermano estaba cada vez más aburrida, pero no quería dejar de estar con mi tía porque me prendía la idea de imaginarme que pensaba al ver tanto mis senos, así que después de unos tragos más y de pasearme delante de ella con mi escote tan pronunciado, le dije que porque no nos íbamos a una discoteque, me dijo que me fuera a abrigar y que partiéramos, yo entre a mi pieza y me puse la polera más ajustada y escotada que tenía, no paraba de pensar en que mi tía se volvería loca por mis grandes pechos.

estábamos solas al final en la disco y fuimos a comprar unos tragos, yo y ella ya estábamos un poquito ebrias pero felices después de todo, me dijo que porque no íbamos a bailar, así que estábamos en la pista de baila, y bueno obviamente mis senos saltaban al bailar y ella solía vérmelas pero yo no le prestaba mucha atención, lo que notaba si, es que de vez en cuando sostenía mi cintura y como ella es más grande que yo, mis pechos rosaban sus manos algunas veces

Pero cuando me di cuenta que de verdad quería manosearme, fue cuando bailando me puse de espalda muy cerca de ella y ella me abrazo y puso sus manos obviamente en mi cintura, cuando estábamos haciendo ese paso de baile, note que sus manos se abrieron un poco para atajar mis pechos cuando rebotaban al bailar, la sensación de ver como sus manos sostenían por un momento mis pechos era riquísimo, pero más que eso no paso más, así que le dije que fuéramos por mas tragos

Estábamos en la barra pidiendo tragos y ella estaba muy lejos así que le dije que se acercara a pedir lo que ella deseaba, estaba tan llena la disco, que estábamos muy apretadas, así que ella se arrimó muchísimo en mi apretando mis pechos mucho contra la barra, le dije que no se acercara tanto que me apretaba los pechos ella me los miro y se dio cuenta que los tenía sobre la barra así que me pidió disculpas y se quitó poco a poco de mi sin dejar de mirármelos.

Cuando nos entregaron los vasos, le dije que volviéramos a bailar, tan solo quería sentir por accidente nuevamente las manos de mi tía en mis pechos, pero ella me dijo que estaba cansada, así que nos fuimos a otro lugar pero paradas porque no habían mas mesas desocupadas, le dije que bailaría en ese lugar por ultimo sola y comenzó a bailar delante de ella, y ella solo me miraba. Pero cada vez que quería decirme algo se acercaba a mi oído y sentía su mano con su vaso en uno de mis pechos cada vez que se acercaba, como hundía su mano en mi pecho.

seguimos conversando pero ella repentinamente dejo de poner su mano en mi pecho cuando me hablaba, así que en una oportunidad cuando se acercó, pesque su mano y la puse entremedio de mis dos pechos como oyéndola pero a la vez porque se sentía tan rico que lo hiciera, ella bajo su mirada y vio mis manos sosteniendo la suya y me dijo, hija tiene sus pechos acalorados y sudados, le dije si tía es que tenía mucho calor, y estaba emborrachada, me dijo que fuéramos al baño, yo me adelante y ella y tome su mano me siguió detrás mío. el lugar estaba llenísimo y estaba muy cerca mío detrás, de echo cuando nos detuvimos porque había un taco de gente, ella me abrazo fuerte por la espalda y yo pesque sus brazos, y ellos rodearon por completo mis pechos, podía sentir como sus dedos se movían un poco acariciando levemente mis pechos, era rica esa sensación aun la recuerdo, nos quedamos así por un momento para que la gente se dispersara y poder pasar, llegamos al baño y lo primero que hice fue sacarme mi chaqueta estaba suavísima, y el lugar era más iluminado y mis pechos se veían hermosos, grandes como siempre, me moje la cara y me acomode mis senos

cuando estábamos ahí, mi tía aprovecho de alagarme diciéndome que me veía preciosa, ella se escuchaba un tanto ebria, le dije que porque no nos íbamos a la casa a dormir mejor, me dice que esta ebria y que quisiera estar más conmigo, le digo que porque no tomábamos un taxi a mi casa que ya era muy tarde, salimos del baño y ella me tomo de la mano, pero entrelazando nuestros dedos, ya parecíamos pareja por todo lo que hacíamos en la discotequera, pero salimos de la disco y tomamos un taxi a casa.

cuando estábamos en el taxi ella, estaba muy muy ebria, la abrase porque se estaba quedando dormida y ella paso su mano por mi cintura y tenía su cara en mi cuello, la casa quedaba un poco lejos eso nos dejó un rato para estar abrazadas mucho tiempo, yo miraba hacia afuera y en un instante me percate que mi tía se acercaba más y más a mi cuello, tenía su boca en mi cuello por completo, no me besaba pero sentía su aliento, y de apoco se acercaba más a mi seno con su mano, que obviamente estaba por tocar

ella estaba muy muy ebria así que no la culpe, no habría sus ojos solo murmuraba cosas en mi cuello que no se entendía por el ruido del taxi, y sin pensarlo dos veces, comenzó a acariciar uno de mis pechos, ahora si no era un accidente ni nada, su manos jugaba con mi gran pecho como si hubiese querido hacerlo toda la noche, me apretaba y me acercaba más a ella, su boca se abría a veces y podía sentir su lengua un poco, y su mano recorría cada centímetro de mi pecho lo apretaba muchísimo. paso mucho rato teniendo a mi tía, manoseándome y besándome el cuello, pero ya nos teníamos que bajar, además justo el taxista se dando cuenta al parecer, le dije que nos bajáramos le pague al taxista y mi tía me espero en la puerta, me acerque a ella y ella estaba muy muy ebria, así que abrí la puerta de la casa y estaba muy oscura, entre yo, después ella y cuando estaba cerrando la puerta para prender la luz, ella se abalanzó sobre mi estando detrás mío, y sin preguntarme agarro mis dos pechos con mucha fuerza.

La luz estaba apagada no podía ver mucho, solo sentía las manos de mi tía jugando con mis enormes pechos los subía los bajaba me las apretaba, yo no aguantaba más la calentura, total me estuvo manoseando toda la noche, así que la deje hacerlo yo arquee mi espalda hacia atrás y ella puso nuevamente su boca en mi cuello y mis pechos estaban a su disposición, era tan rica oírla decir que ricos pecho mi amor, me encantan tus pechos

lo único que se escuchaba en el silencio de la noche, era su voz hablándome en mi cuello y el sonido de la tela de mi escotada polera por sus fuertes manoseos, estuvimos así por mucho rato yo estaba prácticamente acostada en mi tía ella apoyada en la pared y sus manos se devoraban mis pechos

Hace tanto tiempo que había deseado eso que me di vuelta y no pude aguantar las ganas de darle un beso con mucha lengua, ella obviamente perdida por mis pechos, sus manos volvieron a mis senos y comenzaron nuevamente a jugar, mi tía por lo borracha, me subió la polera rápidamente mientras yo la besaba, y mis pechos quedaron en su sostén y eran tan suaves y sentía tan rico las manos de mi tía, pero era demasiado, yo sentía que nos descubrirían.

Yo pensé en ese momento, talvez en la mañana no nos hablemos o esto nunca se vuelva a repetir, así que le dije al oído, tía acompáñeme, y la lleve al cuarto más lejos de mi casa, donde guardamos las cosas. Entramos yo cerré la puerta con pestillo, estaba todo oscuro pero de todas maneras nos veíamos un poco, y le digo a mi tía, tía, me las quiere chupar de una buena vez? ella me miro con su carita de ebria y me dice, si por favor, escuche por la puerta para que nadie estuviese viniendo donde nosotras.

me saque la chaqueta, y comencé a desabrocharme el sostén lentamente para no meter ruido, me saque el sostén por completo y mi tía comenzó a acariciar mis pechos por encima de mi polera sin sostén, se sentía tan rico, me decía muy calladamente, hija sus senos son tan suaves y pesados, me las toco así por un buen rato, y comenzó a sacarme un brazo de mi polera dejando al descubierto uno de mis pechos, tome la mano de mi tía y la deje en mi seno desnudo, y le dije esto es lo que quería tía?

Me responde que sí, que no había parado de notar cuando grande y hermosos eran mis pechos y que había tratado de tocármelos toda la noche, luego me saque el otro seno, para quedar con mis pechos grandes y suaves a su disposición, como ella era tan grande, le tome la mano y la senté en la cama que había en ese cuarto, ella estando sentada, me senté frente a ella, dejando mis pechos perfectamente frente a su cara

ella quedo un tanto callada, tan solo mirando mis pechos, pero ahora era yo la que no podía dejar de pensar en mi tía chupándome los pechos, así que pesque su cara con suavidad y la puse entremedio de mis grandes y suaves senos, estaban tibios por tanto manoseos de mi tía, y ella con sus manos comenzó a pasar y a acariciar mis pechos con toda su cara, cada rincón de mis tetas fueron acariciados y besados por mi tía, solo podía escuchar a mi tía hacer sonidos de excitación

Después de pasar por mucho rato su cara por mis suaves tetas mi tía por fin hizo lo que tanto quería, meterse mis pezones a su boca, sostenía uno de mis pechos con ambas manos y comenzó a lamer y a chupar como un bebe hambriento mi pezón y mi cuerpo se estremecía con tanta excitación, yo lo único que hacía era echarme para atrás y arquear mi espalda para ofrecerle por completo mi enorme seno, eran tan delicioso ver a mi tía devorándome mis pechos

Luego de chuparme tan rico mi pecho, pesque mi otro pecho y su cabeza y la lleve hacia ese pecho para que me la lamiera igual, mi tía inmediatamente comenzó a comérmelo como si fuera a acabarse el mundo, yo sostenía su cabeza con fuerza, pero ella hacia todo sola, con una mano tenía una de mis tetas y con la otra mano sostenía el que estaba lamiendo y lamiendo

Yo ya no aguantaba más la sensación de excitación, ver a mi tía chupándome las tetas esa noche, me tenía a mil, así que saque su cara de mis pechos y me levante de sus piernas, me acosté en la cama y mi tía se acostó sobre mi dejando su cara hundida en mis tetas y comenzó nuevamente a comérmelas pero esta vez mis senos se veían el triple de grandes y la sensación de ver a mi tía violando esos enormes pedazos de carne suave era indescriptible

Amaba como mi tía me estaba dejando los pechos sumamente mojados por su saliva tanto lamerlos y lamerlos, trataba de juntar mis pezones para echarse los dos al mismo tiempo a su boca, ponía su cara entre medio de mis tetas y apretaba fuertemente mis tetas contra su cara, yo comenzaba a mover mi entrepierna porque ya no podía mas de la calentura, y me encantaba rozar mi sexo contra su pierna

cada vez movía mas y más mi entrepierna en su muslo y comenzaba a quejarme despacito, mi tía no paraba de chupármelas, ni siquiera me miraba, cada vez que rozaba mi vagina en su muslo la intensidad de mi calentura comenzaba a subir, hasta que ya no pude esperar más y comenzó a moverme para poder tener mi orgasmo, no podía perder la oportunidad de tener a mi tía comiéndome mis enormes melones, así que comenzó a quejarme y a moverme muy rápido y fuerte, quería mi orgasmo si o si

era indudable que estaba mojadisima, porque podía sentir la pierna de mi tía rozando mi sexo muy deliciosamente, en eso mi tía se da cuenta para de chuparme los pechos y me se acerca a mí y sin soltarme los pechos me da un beso riquísimo y me pregunta, hija mía, quiere que le meta un dedito? yo no lo podía creer, aunque no quería porque era muy tarde y nos podían descubrir lo pensé un poco y le dije que sí, tenía tantas ganas de arrepentirme, pero esto era único,

al aceptar mi tía comenzó a besarme muy despacio, casi solo los labios y empezó a deslizar muy suavemente su mano bajando por mi estómago hasta llegar al botón de mi pantalón, lo abrió y finalmente llego a mi calzoncito, me dice, estas sonadísima mi amor, le digo que no era para menos tía, me dice esta lista, y yo no paraba de pensar en su mano en mi vagina, comienza a meter uno de sus dedos fácilmente dentro de mi vagina, y comienzo a gemir de inmediato

comienza a sacar y a meter su dedo de mi vagina muy despacio, yo trato de no gemir tan fuerte ella me da besos de cariño como calmándome, cuando después de un rato siento que voy a tener mi órganos, le pido que vuelva a mis pechos, me dice que encantada, sin sacar su dedo de mi vagina comienza nuevamente a gozar de mis enormes pechos, la sensación de su boca en mis pezones, sentir su lengua por todos mis pechos y su dedo que se adueñaba de mi vagina, comenzó a tener el mejor orgasmo que jamás haya tenido

tomo su mano para que no pare de masturbarme, y empujo su cara en mis senos monadismo por tanto que me las ha lamido y sigo con mi orgasmo tapando mi boca para no despertar a nadie, y por fin tengo lo que buscaba, mi tía me chupo un poco más los pechos y luego se levantó y me beso, le dije que nos levantáramos me dijo que bueno y comenzamos a vestirnos,, me ayudo con mi sostén y mi polera, la tome de la mano cuando se iba y la bese nuevamente y ella de inmediato comenzó a acariciarme, mis pechos estaban muy sensibles tanto chupármelos y acariciármelos, me apretó los pechos un ratito y me dice, que siempre había estado obsesionada con mis pechos, que nunca paraba de mirarlos y que lo que había pasado hoy lo había pensado siempre

Nos fuimos del cuarto, la lleve a su habitación pero antes de que entrara a su pieza para dormir, le tome la mano se devolvió me pregunta, que quiero? me levanto por completo mi polera y mi sostén y le digo, tía chúpemelas por última vez, mi tía no dudo en hacerlo y rápidamente y muy efusivamente me lleve la última chupada de tetas de mi tía, que delicia! Apreté fuertemente la cabeza de mi tía contra mis senos muy sensibles por todo lo que me había chupado y mi tía, finalizo comiéndome las tetas de una manera que no podría describir, sus manos apretaban mis senos y su cara pasaba por todos los lugares que ella quisiera mis suaves, blandos y gigantes pechos, fueron suyos esa noche. Después de ese inolvidable momento me beso por última vez y me dijo buenas noches.