Mi tio fisicocultrista me hizo su putita

vivia solo con mi abuelo y tio. tenia 5 años y desde allí siempre estuve con hombres.
Esto que les voy a contar paso cuando era muy pequeño, unos 5 años tenia creo. Vivía con mi abuelo (66) y un tío (28). Mamá estaba internada por adicciones y a mi viejo nunca lo conocí. Mi abuelo era un mecanico rustico y rudo pero conmigo muy cariñoso. Mi tío un vago que hacias fisicoculturismo, salidor y muy lindo. Yo iba al jardín pero ya estaba a punto de empezar con la primaria. Mis días la pasaba casi siempre solo en la casa o acompañado por mi tio que tenia armado un mini gimnasio en el garage y ahí hacia sus ejercicios con sus amigos. Siempre hablaban de sexo y mujeres, se la pasaban en cuero y mirando sus cuerpos como les iban quedando, se tocaban y a veces se quedaban en calzones y modelaban frente al espejo. Yo miraba, escuchaba. Mi tio se daba cuenta y a veces me decía cosas con sus amigos como “te gustan los hombres sobri? tenemos lindos cuerpos?” yo se ve que me ponía colorado y ellos se reían.

Un día entre a la habitación de mi tio cuando se estaba aceitando el cuerpo para ver como iban sus músculos y estaba sentado en la cama con una especie de tanga o zunga. Me quede mirando algo asombrado y él me hizo pasar y cerrar la puerta.

Veni bebe ayúdame – me dijo – frotame el aceite por acá – indicándome su pecho y abdomen.

Yo empecé a pasarle con mis manitos. El me respiraba en la cara mientras me miraba. Note que su bulto crecía y lo mire. Me dijo: que nunca viste el pito de un hombre crecer? Pasa eso cuando le hacen mimos y vos estas muy cerca. Y con sus dos manos fuertes agarro las mias y las llevo a su bulto, juntos lo masajeamos y cada vez se ponía mas duro. Se levanto y le puso llave a la puerta, volvió y me dijo: queres verlo (agarrándose el bulto)? Yo sentado en la cama no sabia que responder y rápidamente se acerco a la cama y lo saco. Estaba duro y parado hacia arriba. El tío necesita que también le pases por ah el aceite y me puso en las manos para que le agarre la pija. Y asi me llevo mis manos a la pija y la sensación me éxito. El se movía para adelante y para atrás con la cintura mientras sostenía mis manos con la suyas en derredor de la verga. Uy uy dijo en un momento y comenzó a salir algo blanco de la punta de su pija, me dio en la cara, me asusto. El me calmo y me dijo que era común, que salia siempre y era necesario. Me limpio y me dijo que otro día me seguía enseñando cosas.

Y así e fui algo perturbado y exitado. Los días siguientes le prestaba atención no solo a su bulto sino al de sus amigos. Cuando estaban haciendo ejercicio ellos me miraban y se masajeaban el paquete. Después supe que les había contado.

Un día se estaba bañando y me llamo a los gritos, fui y ahí estaba detrás de la mampara todo desnudo y musculoso con su verga dura, se la estaba tocando. Me ordeno que me desvista y me meta porque necesitaba ayuda. Asi lo hice una vez frente a él me dijo que necesitaba que jugara con su verga como el otro día. Él parado se puso la mano en la nuca y estiro su cuerpo hacia adelante mientras yo lo pajeaba con las dos manos. Cerraba los ojos y gozaba. Métetela en la boca me ordeno en un momento. Yo lo miraba. Dale bebe. Me agarro la cabeza con una mano y con la otra sostuvo su poronga mientras me la metia en la boca, al toque senti que me llenaba de esa espesa leche que le salió de la punta de la pija. Yo ahogado haciendo arcadas, el gozando. Se sento en el  borde de la bañera exhausto mientras yo me enjuagaba la boca. Me abrazo y me dijo: te quiero mucho, gracias bebe. Mientras me abrazaba senti como una de sus manos bajaba por la espalda y me acariciaba la cola. Algunos dedos se metieron entre los cachetes. Jabón y agua corrían por nuestros cuerpos. Escuchamos el portón. Era mi abuelo que llegaba. Rápidamente salimos y nos secamos.

Pasaron los días, el siempre muy amable y afectuoso me regalaba golosinas y cosas.

Una mañana jugaba yo en mi habitación cuando siento que me llama a los gritos. Mi abuelo trabajaba asique todas las mañana estábamos solo en la casa. Voy a su habitación y me dice, veni con el tio acostate que necesito mimos. Yo estaba solo en calzoncillos, me meti y  enseguida me abrazo. Al llevarme hacia su cuerpo note que la verga la tenia dura. Me dio unos besos en el cuello. Me decía lo lindo y bueno que era. Mientras me abrazaba con un brazo con la mano libre amasaba mi cola, la metio bajo el calzoncillo y cada vez de una manera mas brusca intentaba meter sus dedos. Yo inmovilizado. En un momento se humedecio con saliva los dedos y los volvió a llevar a mi cola. La estaba lubricando.

Asi tapados como estábamos me dijo que me diera vuelta y me hizo cucharita. Enseguida su verga dura estuvo apoyada en mi cola y me abrazo fuertemente contra su cuerpo. Yo sentía sus musculos en mi espalda y sus brazo aplastándome.

Empezó un movimiento y su verga apuntaba a mi ano. Se abria paso en mi cola. La baba facilitaba la cabeza de la chota que quería entrar. Yo empezaba a sentirme algo incomodo. Él me apreto mas, me beso el cuello y me dijo: quédate quieto que el tio quiero entrar en tu culito. Empujo nuevamente y yo pegue un grito. En un acto reflejo me tapo la boca. Quédate quieto te dijo el tipo y mientras pasaba su lengua en mi cuello empujaba mas la verga que se abria paso entre mis nalguitas. Era una bestia. Yo lloraba. El dolor me invadia. Bombeaba y bombeaba. Fueron unos minutos y exclamo: ayyyyyyy ay va la leche bebe hermoso seeeeeeee. Dejo de taparme la boca y de estar tenso. Me acariciaba hasta que me dio un beso y me dijo, vaya a bañarse bebe.

Continuara….