Mi verdadero amor es mi mama 2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Y durante unos minutos observo mi venga y le dije que hiciéramos un trato pues que fuera así cuarto y se pusiera la falda larga de mezclilla suave con botones y sin calzón y yo la dejaba tocar mi venga y ella me dejaba tocar su panocha peluda y se quedó pensando y me dijo que mi padre podía llegar en cualquier momento y nós podía encontrar en una situación muy incómoda.

Eran las 4: pm y mi padre estaba por llegar y mi mamá se acercó y me enjabono mi venga y después salió del baño y se quitó la falda que tenía puesta y se puso la falda que le había dicho y sin calzón y a poco rato llego mi padre y comió y se baño y se fue al pueblo pues poco le importaba como estuviese vestida mi mi mamá pues estaba seguro de su amor y que nunca lo engañaría pero mi padre estaba equivocado pues mi mamá estaba harta de sus aventuras amorosas y de sus borracheras y que no pudiera cumplirle bien cómo hombre.

Una hora después que mi padre se fue mi mamá me ordeno que cerrará con seguro las puertas y las ventanas y fue a mi cuarto y comenzamos a charlar y me pregunto si de verdad la deseaba tanto y que estaba dispuesto por estar con ella.

Le contesté que me casaba con ella y si se podía quería tener uno o dos hijos con ella y sin preámbulos se paro frente a mi y me incorporé y le desabroche los botones de su falda y ante mi quedó con su pancha peluda ante mis ojos y comencé a agarrarle los pelos de su panocha mentras gemía y me decía que ya se lo metiera pues estaba hirviendo de caliente.

Se acostó y abrí su falda y con su mano se puso saliva y puso otra poca en mi venga y me pidió que la penetrara con cuidado pues mi venga era muy gruesa y muy cabezona además de ser larga y así lo hice sólo le mi la mitad y me dijo que mi padre no estaba así de pitudo así como yo estaba.

Poco a poco se la metí y sólo la mitad aguanto y me pidió que parara un poco y después le metí toda y pego un grito y suavemente le metía y le sacaba la vergas y su panocha estaba destilando sus jugos y aumente el ritmo mientras nós besábamos y me agarraba de mis cintura y acelere el ritmo y le inunde su pancha con mis mocos y se mordía los labios y me pregunto cuantos palos le heche y le dije que tres sin sacar mi venga.

Me pidió que le chupara los pechos y así lo hice y se puso más caliente y se levantó y se puso en 4 patas y sin preámbulos se metí toda mi venga y se quedó quieta y me dijo que sentía que la partían en dos y acelere el ritmo y le agarraba sis pechos y tras unos 15 minutos frenéticos mi verga seguía clavada en su panocha.

Eyacule otra vez adentro de la pancha de mi mamá y ella gemía y se movía al recibir mi leche y me decía que era la gloria y que siempre había soñado con tener un macho así cómo yo y que ya era mi esposa y no me dejaría que otra mujer disfrutará lo que era solo de ella y de nadie más.

Y entre risas y palabras obscenas le termine de desabrochar la falda y me dijo que así le gustaba más coger pues se sentiabmas libre y más relajada y me acosté y se montó en mi venga dándome la espalda y me sentí en el paraíso al sentir su pancha húmeda y estrecha y sus movimientos infernales me hicieron terminar varias veces de un sólo golpe.
Lejos quedó la señora decente y puritana que siempre había sido ante mi.

Bañada en sudor gemía y pasaba con mi venga clavada hasta el fondo de su panocha peluda.
En ese momento dejo de ser mi madre y se convertía en mi mujer,mi esposa y mi puta particular.
Acaricie su vientre y mi mano se deslizó hasta llegar años vellos púbicos que cubrían su vagina y se siguió moviéndose y tuvo otro orgasmo y nós besamos y se acostó y me puse atrás de ella y levanto su piernas y así la volví a penetrar mientras apretaba sus pechos y le daba de nalgadas y tras unos 15 minutos mi venga estalló por última vez y nós besamos y limpio mi venga y se limpió su pancha y frente ami se puso su blusa y se acomodó su falda y se abrocho los botones y se puso su mandil y yo fui al baño y me dormí otro rato mientras mi mamá, mi esposa me preparaba un suculento desayuno pues me dijo que su macho tenía que estar bien alimentado.