MIREYA, Recuerdos con el conserje de la escuela

Siguen las peripecias de un tío obsesionado con cogerse a su sobrina y la agonía de descubrirla comí una insaciable sexual..
Genaro estaba caminando por aquel pasillo con luz tenue, el camino se hacía largo, sus piernas temblaban a cada paso, la emoción, lujuria y otros sentimientos encontrados se adueñaron de él, si es Mireya , la encararé, le gritaré que siempre fue una puta, le recriminare el por que no se dejó coger por mi primero, quizá llore, entonces la cacheteare, la tomaré y la tiraré, la desnúdare con rabia y mientras le grito lo puta que es, se lo meteré con coraje si, desfogare todo esto, alcanzo a ver la puerta, su corazón se aceleró.

3 años atrás, Mireya despertaba, aun tenía el sabor de alcohol en su boca, y una rica sensación en su concha recién desvirgada, pero, aun quería sentir, quería tenía la necesidad de volver a sentir como le entraba una verga dentro de ella, recordar esa sensación la mojaba de deseo, comenzó a tocarse desesperada, para calmar un poco la lujuria qué sentía, en su cabeza vino la imagen de la vez que su tío Generó entró al baño sin avisar y le vio su enorme verga erecta, se tocaba y metió un dedo en su tierna vagina imaginando qué era la enorme verga de su tío Género, gimió diciendo su nombre y temblando alcanzó el clímax, al tomar un poco de aliento, empezó a reír, y se dijo, pobre Genaro si hubiese entrado ahorita por esa puerta me hubiera dejado coger por el, jajaja imagino su cara, ni idea tiene de que ya me cogieron y el tantas ganas que me tiene, quizá lo deje cogerme un día de estos, se levantó y entro a tomar un baño y prepararse para la escuela, iba de salida cuando su mamá llegó y solo le deseo buen día.
<span;>   Rumbo a la escuela aun sentía ese rico calorsillo,  el cual empezó cuando su tío Genaro la quiso follar, instintivamente si pensarlo se detuvo en una esquina y sin saber por que comenzó a enrollar su falda escolar para que fuera subiendo y la enrollo hasta que logró que le quedara un poco arriba de el muslo, luego se desabotono un poco el suéter y la camisa blanca, se sentía como emocionada, no sabia por que, pero le gustaba, comenzó a caminar y noto que varios señores y jóvenes volteaban a verla y eso la emociono aun más, se empezó a sentir terriblemente exitada, de pronto sintió una mirada, volteo y ala distancia vio a dos tipos que la veían con lujuria y algo cuchichiaban, ella presa de esa exitacion y lujuria dejo caer un lápiz y se agacho para recogerlo dando un rico show a aquellos afortunados sujetos, ella siguiendo ese sensual y peligroso juego simulo no poder tomar el lápiz para tardar más en levantarse, haciendo que los tipos se les hiciera visible su ereccion por encima de su pantalon, uno de ellos al ver que la niña tardaba agachada, dejando ver ese calzoncito blanco que dejaba ver un culote redondo, se toco su pija por encima del pantalón y se envanlentono acercándose a ella, Mireya de reojo vio al sujeto acercarse y levantó rápido su lápiz para seguir a prisa su camino, ella también estaba que hervía, pero no se atrevió a que le hablaran, solo quería que la vieran, pero el ir caminando lento para lucir y el incidente de el lápiz, la hicieron que no se diera cuenta que iba muy tarde a la escuela, llego a la primaria y observo muy poca casi nadie ya de personas, la puerta ya cerrada , sintió miedo ya ahora, que hago, si regreso mamá me regañara y si voy con la abuela, creo que eso haré, quizá Genaro esté ahí y , en ese momento la pequeña puerta de emergencia de un costado, se abrió interrumpiendo los pensamientos de Mireya, poniendo atención de quien abría, saliendo con una bolsa el conserje Venancio un viejo de unos 40 años, algo conservado, con un físico delgado y correoso, piel quemada por el sol, El conserje saco la bolsa y la dejo a un costado, al parecer era basura, Hola señor Vena, el sonido de esa dulce voz hizo voltear la cabeza de él viendo a la pequeña Mireya, pelando los ojos y tragando saliva, Mireya, te llamas Mireya verdad de 5to, si así me llamo, jijiji contesto la niña, embelesado Venancio le pregunto al tiempo que su mirada la recorría de arriba a abajo, no alcanzaste a llegar a clases oh vienes de otra parte, dejando su mirada en ese hermoso par de tersas y blancas piernas, se me hizo tarde, le respondió la peque,  y estaba pensando donde ir, no quiero volver a casa, mi mamá me regañara, Mirándola con una lujuria y deseo total Venancio le dijo, por que no te quedas aquí, me puedes ayudar,nadie se va a dar cuenta y a la salida fingiras salir de clases normal, digo por si tu mamá viniera, La niña le dijo, pero si te ayudo me verán y si se darán cuenta, Venancio maquilando algo en su mente le dijo, bueno necesito que alguien me ayude a sacar el papel y bolsas y algunas cosas más de sus cajas y estarías en la bodega así nadie te verá, Mireya lo pensó un poco dudosa, observo a el conserje y se dio cuenta que la veía con lujuria, eso la éxcito de nuevo y ese calorsillo la hizo aceptar para ver que pasaba, entraron a la escuela y al ser la parte de costado nadie los vio, dirigiéndose a la bodega de la escuela, justo antes de llegar a un costado estaba la casita de conserjería donde vivía Venancio, presuroso le dijo a la niña, Sabes antes de ir a la bodega a trabajar te invito un café y un pastel, quieres, La niña sonrió y le dijo, donde, Venancio con un brillo en los ojos, le contesto al tiempo que la llevaba de la mano a su casita,aquí en mi casita, tengo de todo, abrió la puerta y entraron, dentro un cuarto, bien ordenado, una cocinita, una mesa, dos sillas, al fondo una camita hecha y un mueble con cajones, que bonita casa Vena, le dijo Mireya con voz melosa, te gusta, le respondió venancio, a mi me gustas tu, Mireya se puso roja y le dijo mentira,  si ni me volteaba a ver antes, Venancio le respondió, Por que crees que sabía tu Nombre y grado, siempre has tenido algo especial pero, hoy, comprobé que eres hermosa, Mireya le dijo, le parezco bonita, Venancio la jalo y abrazándola hacia el, le respondió antes de besarla, eres una chica tan hermosa y perfecta, claro que me gustas, Mireya sintió como la besaba y ella correspondió metiendo su lengüita dentro de su boca, sorprendiendo a el Venancio,quien también hizo lo mismo, enrollando su lengua sobre la de Mireya, así comenzó a caminar hacia atrás jalando a la pequeña hacia su cama,cayendo en ella de espaldas y la pequeña sobre el, sin dudarlo y sin dejar de besarla,  le empezó a acariciar sus hermosas piernas,
<span;>    Mireya volvió a sentir esa sensación en su vientre, esas cosquillas y las contracciones y el calor en su vaginita, presa de esa sensación ella sólita se quito el suéter y la blusa, Venancio le dijo,  hay niña se ve que ya quieres verga, si te mire desde que salí, andas pidiendo verga a gritos, al tiempo que la besaba y con una mano le empezó a bajar sus blancos calzoncitos, acariciando su suave pierna al mismo tiempo, Mireya, completamente poseída por el deseo, le desabrocho el pantalón dejando escapar un tiezo y grueso miembro, goteando de precum, de lo excitado, Venancio se levantó un poco y se jalo el pantalón, mientras Mireya le sacaba la camiseta, quedando desnudo, Mireya encima de el, solo se acomodo y con su mano agarro el duro garrote colocándole en su ya mojada vagina, Venancio al sentir el rose de esos húmedos labios, se estremeció, Mireya sin dudarlo, se clavo ella sola, dejándose caer, para meterse la dura verga de un solo, soltando un suave y sensual, gemido, Venancio sintió el paraíso, al entrar en esa húmeda y apretada cuevita, era el, la segunda verga que entraba en la casi virgen cueva de Mireya, Venancio quien se dio cuenta que su verga entró sin problema toda entera, le dijo al oído, así que ya te metieron antes la verga, pequeña putita, te voy a dar como me gusta, duro y salvaje,Mireya solo lo miro y lanzó un gemido ronco y sensual, cuando sintió como la embestia Venancio, sentía su cadera pegar contra ella, Venancio sentía enloquecer, oh chiquita decía bufando, aprietas bien rico, oh no sabía que las chiquitas como tu ya se comían la verga tan rico, lo que me estuve perdiendo, Mireya en su delirio movía sus caderas y gemia casi ronroniando,  suplicaba con una voz entre sensual eh infantil, más duro, más duro, Venancio se volvió loco y comenzó a embestirla más duro, casi salvaje, la niña movía sus caderas frenética, sentía morir de gusto, Venancio bufaba de placer, cuando de pronto Mireya lanzó un gemido, ronco y abrazo con sus piernas a Venancio, al tiempo que el sintió que esa apretadita cuevita le empezaba a dar aprentoncitos más duros en la cabezita de su verga como si la mordiera, y una sensación de placentera locura lo invadió, jamás había sentido algo igual en su vida, no pudo más y abrazando a la pequeña hacia el la beso enloquecido, buscando su lengua, acariciando sus tersas piernas, apretándolas al sentir que se venía, dejando escapar varios chorros de esperma dentro de Mireya, quien al sentirse inundada de ese caliente líquido en sus entrañas, mordiendo el labio de Venancio y arañando su espalda mientras lanzaba un gemidito , casi ronroneo,  un gemido sensual, infantil, al tiempo que se desmadejaba totalmente, quedando como ida, totalmente flojita,  Venancio saco su Verga de ese estrecho interior al tiempo que iba perdiendo su firmeza, dejando ver como le escurría una pequeña línea blanca en esa bella pero ahora abierta rosadita sin bello alguno vagina, sus labios rositas brillando y aun palpitando, Venancio se tumbo a un lado de la niña mientras ella aun seguía ahí sin reaccionar, respirando agitadamente, finalmente el primero en hablar fue venancio, sabes, me habían platicado de que algunas mujeres tienen lo que llaman perrito, pero tu, eres una niña, como es que, quien te coge, algún tío, primo, tu papá, Mireya solo río y le dijo, tu eres el segundo, el primero fue un amigo de mamá, pero yo ya quería sentir, hace semanas que despertó algo dentro mio, que me hacía querer probar, ahora que ya me cogieron 2, creo que no puedo esperar a probar más, me encanta, Venancio soltó una carcajada, y le dijo, pues aquí conmigo siempre tendrás verga segura, de paso me ayudarías con alguna de tus compañeras no sabes quien más coge, Mireya contesto, huy Vena,  pues ya casi todas, se las cogieron sus tíos oh primos, ellas también me metieron el gusanito de querer probar, pues le interrumpió Venancio, espero que me ayudes, lo van a pasar muy bien, jajaja claro, sabe, si no hubiese abierto la puerta hubiese ido a otro lado y ahorita ya se hubiera cumplido la fantasía de alguien que me tiene muchas ganas, pues que bueno que abrí y quien es el pobre que se seguirá quedando con ganas, Ella contesto, mi tío.

Continuara…………….