Mis hijastros 10
Compartiendo a Javiercito.
Javiercito me preocupaba un poco, más allá de su gusto por la verga, sentía que él se exponía demasiado con tal de que se lo follaran. No podía cuidarlo todo el tiempo y era claro que a cada oportunidad se dejaba coger.
Así que decidí que debía canalizar su culito a las vergas que yo decidiera y de las que estuviera seguro que lo más que le harían sería llenarlo de mecos hasta el fondo de su ano como le gustaba.
Total que después de un par de reuniones de amigos en casa, identifique a un par que les gustaba estar cerca del nene y supuse que con algo de ayuda estarían dispuestos a comerse ese culito. Con el primero de nombre Andres, era un cuarentón, de buen aspecto, mecánico de profesión y súper caliente siempre Ajjajaj todo el tiempo se la pasaba hablando de lo grande de su polla y lo rico que Coria viejas.
Andres, tres amigos más y yo estábamos entrados en copas, el nene tenía rato a su lado, y en ratos veía que Javiercito se le sentada encima y fingía jugar a montar un caballo, por lo que era obvio que estaba provocando con sus nalgas a mi amigo Andres. Este último lo único que hacía era voltear a ver a todos y disimuladamente acomodarse la riata, que en momentos se le veía ya abultada (supongo de tanto sentón que Javiercito le estaba dando) yo estaba atento a esta situación, el resto de mis amigos estaban tan tomados que ni en cuenta tomaban todo. Mi mujer y mi hija estaban en una de las recámaras.
En algún momento Andres me dice que iría al baño y dos segundos después vi que Javiercito salió también de mi vista, espere unos momentos y camine del jardín hacia la casa, para ver dónde estarían metidos ambos y escuché que Andres orinaba y Javiercito le decía: que grande la tiene Don Andres, está bien gruesa y cabezona. Y Andres le contestó: y avienta un chingo de leche y deja agudos los culos y soltó una risita. Javiercito dijo: me deja chupársela. Vi que Andres se asomó para ver si había alguien cerca (yo estaba escondido) y ya no escuché que hablaran más y solo oí el sonido de las mamadas que Javiercito ya le estaba dando a Mi amigo.
salí de mi escondite y volví al jardín. Pasaron unos dos minutos y vi que volvía Andres. Me dijo que se quería ir ya, por que se sentía cansado, le dije que si quería descansar lo hiciera en la recámara de Javiercito, que al fin el nene no era nada molesto. Lo vi sonreír y volteó a ver a los otros amigos, pero estos estaban súper tomados y se habían quedado dormidos. Me paré y llevé a Andres a la recámara de Javiercito, el nene ya estaba ahí recostado en su cama, en puro calzoncito. Le di una palmada a Andres y le dije: estas en tu casa, disfruta la noche. Andres entendió Perfecto todo.
volví con los otros amigos, y ahí estuve un rato haciendo tiempo. Después de una hora Andres llegó al jardín y me dijo que ahora si se Iría. Se acercó más a mi y me susurró: estuvo deliciosa la siesta, nl te imaginas como la disfruté. A veces soy medio rudo mientras duermo pero nada grave. Ambos sonreímos y despedí a todos mis amigos de casa.
ya solo y antes de subir a la recámara, revise las cámaras para ver que tanto le había hecho Andres a Javiercito y uffff ufff ufff que delicia de cogida le puso. Se lo Cogió en una silla posición, de perrito y le dio tanta verga que el nene en momentos ya no quería que se la metiera pero Andres lo sometió poniéndole el pie en su cabeza y con ambas mano aferró la cadera del chamaco y metió tantas veces la Verga y tan fuerte que el nene comenzó a lloriquear, pidiendo que se la sacara.
Andres sacó su verga y le aventó todo su leche en el culito y espalda. Se subió los pantalones y salió de ahí, momento en que fue al jardín a despedirse.
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