Mis hijastros 2
El insaciable de Javiercito.
En los siguientes días estuve al pendiente de lo que sucedía en mi casa por las noches, pero para mi sorpresa no Camilo no había buscado a Javiercito. Pensé que quizá solo había probado el culo del nene y se dio cuenta que no debió hacerlo y por eso no lo busco más o quizá simplemente no tenía ganas (lo que me parecía raro para alguien de su edad, ya que es cuando más ganas de coger se tienen), baje un poco la guardia pero seguía al pendiente. Tuve que aceptar también que más que la protección de mi hijastro, lo que me movía a querer verlos era el morbo de ver como Camilo poseía el pequeño cuerpo de mi hijastro y como el pequeño gozaba de tener la verga dentro de él.
No tuvieron más contacto sexual por un par de semanas (por lo menos no que yo los descubriera) hasta el día que fuimos a un centro acuático y esto fue lo que encontré.
El parque estaba semi vacío, no era temporada alta de visitas y era un viaje entre semana, que habíamos planeado mi esposa y yo, con el objeto de desestresarnos un poco y que los niños se divirtieran. Al llegar, nos instalamos en una de las palapas cercana a los chapotearemos, Camilo señalo que iría a los vestidores a ponerse el traje de baño. Lo vi alejarse. Javiercito corrió tras él y a distancia vi como Camilo lo mandó de regreso a la mesa con nosotros. Al regresar Javiercito le pregunté que por qué no había a acompañado a Camilo, y me señaló que le había dicho Camilo que lo dejara vestirse tranquilo. Yo con el morbo al 100% le dije a Javiercito que no le hiciera caso y que fuera a buscarlo a los vestidores. Anita reaccionó y dijo: yo también quiero ir a buscar a Camilo papi. Le contesté a Anita que no podía ir. Mi esposa se quedó desconcertada por mi comentario, pero no dijo nada.
Javiercito corrió contento, lo vi perderse y entrar en los vestidores. Espere unos minutos y le dije a mi esposa que iría también a ponerme cómodo, ella asintió y siguió atenta a lo que la pequeña Anita hacía. Fui sigiloso al entrar a los vestidores, di un vistazo y no había nadie, solo javiercito afuera de uno de los sanitarios tocando la puerta y diciendo: Camilo déjame entrar sí, prometo hacer lo que tu me pidas siiii. Me escondí bien para no ser descubierto y solo vi que salió Camilo a decirle: Ya te dije que no, que ahora ya tengo una puchita deliciosa que comerme, así que no. Javiercito insistió y le dijo: Anda, solo esta vez, siii. Camilo contestó: Si la puchita no se me da en un rato, te busco y te meto la verga, pero solo con una condición: que dejes que Marco y yo te cojamos juntos mañana. Javiercito le dijo que si muy emocionado.
Yo me quedé muy intrigado, que puchita tenia disponible, y mucho más, cual se le daría en un rato, si en el lugar estábamos solo mi esposa, los niños, él y yo, y otras dos familias de puros adultos que solo estaban tomando alcohol, quién demonios era Marco.
Camilo se salió de los vestidores, Javiercito se quedó en el sitio, yo estaba escondido hasta que javiercito se fuera también, pero no lo hacía. Pasaron unos minutos y yo me estaba desesperando, ya que quería seguir a Camilo para saber o mejor dicho descubrir a que puchita se refería. Entre esos pensamientos estaba cuando se escucho la puerta del vestidor abrirse, pensé que Javiercito ya se había ido, me asome desde mi escondite y vi que Javiercito seguía cerca de los mingitorios y vi que había entrado uno de los borrachos que estaban en el lugar. Vi que el tipo se puso a orinar y javiercito no le quitaba la vista al tipo, seguramente viéndole la verga. El tipo vio a Javiercito, volteo a todos lados, no vio a nadie y le dijo: que haces viéndome la verga chamaco puerco. Javiercito se quedó callado. El tipo volvió a decir: que tanto me ves la verga, eres putito, te gusta la verga o que pedo (todo ello mientras se acariciaba el bulto. Javiercito seguía callado pero su cara se veía de lujuría viendo el tremendo pito que el tipo tenia. El tipo se camino con la verga en sus manos, como dándola a desear, y se puso cerca de Javiercito, y volteaba a todos lados y le pregunto: te gusta esto (subiendo y bajando su mano a todo lo largo de su verga, que para ese momento ya la tenia parada), quieres chuparla. Siguió caminando hasta que llegó muy cerca de Javiercito. Lo jalo de la cabeza al niño y le dijo: ponte a mamar anda, disfruta de esta verga. Javiercito inmediatamente comenzó a tratar de comerse la verga, solo se escuchaban los sonidos de la mamada que el peque le daba a este tipo. Del tipo solo veía su cara de lujuría y una sonrisa perversa. Yo por mi parte tenía una mega erección, viendo como Javiercito disfrutaba la mamada que le estaba proporcionando a un completo desconocido. De pronto se escucho nuevamente la puerta del vestidos, el tipo se volteó como haciendo que seguía orinando y Javiercito se quedo parado haciéndose tonto. El tipo 2 que entro y el tipo uno intercambiaron un par de comentarios y se salieron de los vestidores. Javiercito se quedo un momento y después se salió de ahí.
En cuanto pude salí yo también del vestidor y camine a buscar a mi esposa, llegue y estaba ella ahí, pero no estaba ni Camilo ni Anita, ni Javiercito, la cuestioné y me señaló que Javiercito aun no regresaba de los vestidores (lo que no era posible por que yo lo vi salir) y que Camilo se llevo a caminar a Anita. Yo estaba completamente desconcertado. Le dije a mi esposa que iría a buscar a Camilo y a los niños. Eso hice y cuando estaba por preocuparme vi que ya venían caminando los 3 juntos, Camilo se veía molesto, se acercó y me dijo: le dejo a Anita, yo llevaré a los toboganes a Javiercito. Lleve a Anita con mi esposa, espere unos minutos y corrí a buscar a Camilo, sabía que estaría follandose a Javiercito y yo quería verlo. No pude acercarme mucho al sitio de los toboganes, pero a lo lejos vi los cuerpos de Camilo y Javiercito muy cerca en una de las orillas de la alberca. No había nadie en los alrededores, y yo aunque estaba escondido, estaba al pendiente de que nadie se acercara al sitio. Después de unos minutos de estar juntos, vi que ambos salieron de la alberca, caminaron en dirección mía, pero yo estaba bien escondido, cuando estaban cerca escuche que Camilo le dijo a Javiercito: Mañana en la tarde llevaré a Marco a la casa y pobre de ti que no te dejes meter la verga por los dos ahh, y tienes que obedecer ya que me echaste a perder la puchita que me comería hoy.
No inventes, la puchita era la de Anita? quién demonios era Marco? ya había ido antes a la casa?
En los próximos días despeje todas mis incógnitas.
Dejen sus comentarios.
Oye genial te felicito muy buen relato uff me puse caliente en solo pensar en la continuación del relato no tardes pq la primera y esta segunda parte uff genial
comos igue porfaovrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr
Me has dejado muy excitado esperando la continuacion del relato y ya quiero saber del misterioso marco. Te felicito
La cuestión es que Javiercito siguio mamando verga ya el nene esta dispuesto a comer verga a la hora que quiera muy bueno el nene pisa con pie firme para mamar verga y que se la metan
Wuuauuu que delicia de relato amigo enserio que goloso salió Javier cito y ese desdichado de Camilo se los está comiendo a los dos hijastro, oye seguiré von el 3ro, saludos 😁 😁 😁