Morbo con mi primo Dan.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Chaketo.
Hola amigos de sexosintabues, les saluda Rodrigo.
Una disculpa por dejar de escribir pero aquí me tienen de nuevo con esta nueva historia 100% real producto de mis vivencias.
Como siempre les digo, agradezco todos los comentarios que me dejan y también sus mensajes, son los que me inspiran a continuar relatándoles, sin más que decir comenzamos con el relato.

Esto me paso a mis 17 años con mi primo Adán a quien de cariño siempre le he dicho “Dan”.
Él y yo somos muy parecidos tanto que dicen que es una versión más joven de mí.
Dan era de piel clara, lampiño, delgado y de cuerpo normal mezcla de niño y adolescente.
En ese entonces él tenía 14 años y manteníamos una buena relación, lo veía como un hermano menor por lo que siempre andábamos juntos, íbamos al cine, jugábamos X-box, tuvimos esa confianza de hermanos tanto así que cuando empezó a tener curiosidad por saber de sexo acudió a mí para aclararle todas sus dudas.

Ya me había hecho enseñarle el pelo de mis axilas y del pubis.
La neta me daba morbo porque como dije era como enseñárselo a una versión más joven de mí.
Los dos somos lampiños pero le explique que su cuerpo se iba a desarrollar más, que le iban a salir pelos y le eche ese discurso del hermano mayor en cuanto a sexo se refiere, hablamos de la masturbación y hasta le regale unos condones, total que entre platica y platica hasta termine pasándole porno a su celular.

Paso el tiempo y no hablamos más del tema hasta que llegaron las vacaciones y como mis primos llegaban de visita nos quedábamos todos juntos en mi cuarto, a final de cuentas todos andábamos rondando por la misma edad pero Dan era el menor.

En esos días estaba muy caliente y no había tenido oportunidad de chaquetearme así que a veces sentía que se me iba a salir la leche por las orejas si no me masturbaba.

Una noche nos quedamos viendo películas hasta tarde con los primos, encontramos una peli erótica de esas que pasan en el canal Golden, echamos desmadre viendo la peli y diciendo guarradas, el ambiente se fue calentando hasta que decidimos dormir porque al otro día iríamos a la playa.

Esa noche Dan durmió conmigo en mi cama, yo acostumbro a dormir en bolas pero como habían visitas tuve que dormir en bóxer.
A Dan no le molestó porque no era la primera vez que dormía conmigo y teníamos mucha confianza así que él también durmió en interiores.

En algún momento me quede dormido y me despertó el movimiento de la cama.
Entre abrí los ojos y me di cuenta que yo estaba durmiendo de lado y Dan tenia apoyada su cola justo a la altura de mi paquete.

Me quede quieto, mi primo se movía de una forma deliciosa.
Me dio mucho morbo ya que en la habitación también se encontraban dormidos mis otros primos.

Volví a cerrar los ojos porque sentí como mi primo Dan bajaba mi bóxer dejando libre mi verga que a esta altura ya se encontraba dura y babeando liquido preseminal.
Mi verga mide 18 cms, con un par de huevos de tamaño normal y acostumbro a recortar el vello pues no me gusta traerla muy peluda.

Dan tomo mi miembro con una mano y empezó a masturbarme lentamente, me acariciaba los huevos y también los pelos de la verga hasta que se animó a darle un lametón a mi pito.

Yo me esforzaba por no hacer ruido, disfrutaba como mi primo de 14 años me chaqueteaba, me lamia el glande hasta que él solito se animó a meterlo todo a su boca.
Uff, fue delicioso.
No sé si era la primera verga que se comía pero la mamaba muy bien.

Me daba un chingo de morbo, estaba a oscuras con mis primos durmiendo en el mismo cuarto y Dan haciéndome una mamada de campeonato.
Iluminados solo por la poca luz que se colaba de afuera podía ver como Dan se comía todo mi pito, dejándolo bien ensalivado y cuando se cansaba seguía masturbándome mientras yo continuaba disfrutando.

Yo estaba muy excitado, Dan continuaba con su mamada y cuando supo que me iba a venir se detuvo.

Se acostó a mi lado, acomodo mi verga en la entrada de su culito e intento metérsela.
Se quedó quieto cuando entro la cabeza de mi verga.
Sentía su culito muy caliente y a estas alturas si el nene quería ser cogido no me iba a negar.

Lo tome de la cintura y de una embestida le metí toda la verga mientras el mordía la almohada.
Le besaba el cuello, lamia el lóbulo de su oreja y le decía al oído…

-Querías verga… verga te voy a dar.
Te voy a dar verga todas las veces que quieras.

Me movía despacio sintiendo como su culito le daba ricos apretones a mi pito.
Lo tenía bien ensartado mientras él se masturbaba.
Aproveche a tocarle esa verguita de adolescente sin ningún pelo pero bien parada, tenía buen tamaño y mientras se la metía y sacaba lo masturbaba.

Supongo que la excitación le ganó pues Dan se corrió en mi mano y sentí como su culito apretaba mi pene.

Lleve mi mano a su boca y le hice probar su semen, se lo comió y lamia mis dedos.
Le tocaba sus pezones, su pecho, su abdomen mientras me lo cogía.
Intentábamos no hacer ruido.
Yo también estaba muy excitado y estaba por correrme así que le hable al oído…

-Me voy a venir… ¿Te los hecho en el culito o los quieres en la boca?

-En… la boca…

Le saque la verga a Dan y rápidamente se la llevo a la boca.
Mientras seguía mamando sentí como mi verga se ponía dura y dejaba escapar uno, dos, tres chorros de semen que inundaron la boca de mi pequeño primo.
Pude ver como Dan saboreaba mis mecos y se los tragaba.

Me dejo limpia la verga.

Dan y yo nos levantamos al baño tratando de hacer el menor ruido posible, nos lavamos y volvimos a la cama.
Le acaricie el cabello y le dije al oído.

-Ni una palabra a nadie chaparro.

Dan asintió y se dio la vuelta para dormir, mientras yo continuaba sin poder creer la mamada que me había dado mi primo y la cogida que le había dado.
Al otro día hablamos de ello y me dijo que se encontraba muy caliente y que le habían dado ganas de experimentar.
Fue la primera y única vez que hicimos algo así.