Nancy siendo atendida por su Tío médico – (parte I)

Luego de sufrir un golpe en la piscina, Nancy es atendida por mí, su Tío. Una cosa lleva a la otra y finalmente el Tío la cura, pero no de la forma corriente..
Sol, calor, agua, yo y mis sobrinas. Esther de 10 y Nancy de 9. Todos en el agua dentro de la piscina que tenemos en nuestra casa en el campo. Las niñas son hijas de la hermana de mi esposa. Han terminado las clases y como todos los veranos, llegado diciembre nos trasladamos todos a nuestra chacra. Desde allí mi esposa y su hermana se van a atender el negocio de la familia, una farmacia – droguería. Se van por la mañana  temprano y vuelven bien entrada la tardecita. El padre de las niñas se separó de mi cuñada hace ya dos años. Eso la apegó más a nuestra familia, y la verdad es que no me molestó nunca. Isabella, así se llama la madre de las niñas es una hermosa mujer, al igual que mi esposa. Y sus hijas a medida que van creciendo se nota que serán igual a  su madre. Por ejemplo ya se les comienzan a notar sus pechos. Con pezones agresivos. Esther ya tiene un hermoso culito, es alta para su edad, la belleza que tiene es llamativa, mezcla de nórdica con centroamericana. Eso le otorgó un color de piel mate medio achocolatado, sus ojos verdes parecen esmeraldas. Y su pelo rubio pero enrulado la convierte en una preciosa mujercita en inicios de su erupción hormonal.

Nancy es igual a su hermana pero algo más gordita, no llega a ser gorda, diría rellenita. Obvio que cuando pegue el estirón de la edad, se volverá una mujerota impresionante, casi podría decirse que tiene el mismo tamaño de tetas que su hermana, de boca generosa, de ojos grises, mucho más simpática y cariñosa que su hermana, al menos conmigo. Y la verdad que al verlas en sus bikinis en el agua, ha comenzado a excitarme demasiado.

Yo me dedico a la cría de animales de granja, cerdos, gallinas, conejos, patos y gansos, tenemos algunas ovejas y un par de vacas lecheras con lo que hacemos quesos,  también tenemos algunas nutrias, ya que a unos 150 mts. de la casa grande pasa un pequeño río, habitat natural de estos animalitos y como no les hacemos daño se han aquerenciado en nuestra chacra, por lo que no es raro verlas jugar en familia en nuestra pileta y hay que correrlas para poder nosotros disfrutar de la piscina.

En fin, todo transcurría bastante bien hasta que jugando con una pelota Nancy se golpea fuerte la cadera en la pileta. Comenzó a llorar, me acerqué a ella con la intención de ayudarla y ver que le había pasado. Cuando llegué a su lado se me abraza con fuerza y medio llorando y quejándose por el golpe me dice que la lleve a la casa. obvio que le hago caso, le digo a su hermana que vuelvo enseguida al agua, que llevo a Nancy a la casa y la revisaré para ver que le pasó y si necesita atención médica. Alzo a mi sobrina en brazos y me dirijo a la casa, al entrar nos recibió el fresco del aire acondicionado. La llevo al baño, y comienzo a revisarla, la niña se deja hacer, le pido que se ponga de espaldas a mi, y lo hace, luego de frente a mi y también lo hace, y ahí descubro que sus pezones están duritos tirando de la tela del corpiño de la bikini. La niña no quita la vista de mi entrepierna. Es que sin darme cuenta, estoy empezando a tener una erección al ver esos pezones erectos. Y herramienta es del tipo para la cartera de la dama. Son 19×5,5cms. Ni siquiera es muy cabezón. Pero Nancy se dio cuenta de eso y se sonrojó. Yo sigo revisándola y eso me lleva a tocarle el cuerpo, que la cadera, que las piernas, y al revisarle la cadera también toco sus nalgas, son rellenitas y firmes.

Le digo que debo bajarle el calzón para revisarle bien la cadera, ella duda un poco pero al final me hace caso y poniéndose de espaldas a mi se baja la bombacha de la bikini, y eso me transportó a un espacio que no esperaba. Al ver ese rotundo culito juvenil la pija se me puso como un riel de ferrocarril. Para colmo la niña deja caer su calzón y al agacharse para levantarlo me da una hermosa vista de su gordita vagina y de su rosado ano. No resistí, debía hacer algo al respecto, me dolía demasiado la verga de lo tirante que estaba. Hago que Nancy apoye su pancita sobre la mesada del baño, eso hace que su culito quede parado hacia mi. Me aproximo desde atrás y comienzo a revisarla, bueno en realidad a acariciarla, y puedo ver por el espejo que la nena tiene los ojitos cerrados y está sonrojada. Sigo con mis caricias y me voy acercando a su oyito trasero, le abro los cantos con mis manos y allí está, su rodado y apretadito ano. Lo froto suavemente y veo como se le erizan los bellos de los brazos, meto mi mano por entre sus piernas y acaricio suavemente con uno de mis dedos sus gorditos labios vaginales. Todo esto preguntándole si le dolía. A lo que la niña respondía que no. Para mi sorpresa al tocar su núbil vagina la encuentro algo babosa, es que Nancy está excitada y ha lubricado su conejito. Aprovecho esa situación y me bajo el short liberando mi pija que salta al frente, le pido que abra un poco las piernas, ella obedece y me da lugar a ponerle la pija con la punta rozando sus labios vaginales y el tronco rozando su ano. La tomo por la cadera y comienzo a mecerla suavemente adelante y atrás, simulando que la estoy cogiendo, para esto ella colabora sin decir nada. La punta de mi tripa separa sus labios mayores y roza su clítoris lo que hace que la niña esté más caliente que una plancha y no sabe bien lo que le pasa. La sigo masturbando con mi tripa y  de golpe me dice tío, me hago pis. Y siento sus jugos salir y mojar mi tripa. Se le aflojaron un poco las piernas pero como yo la tengo sujeta por las caderas pudo seguir apoyada en la mesada. Aprovechando el momento, retiro mi palo de entre sus piernas, le pido que se abra los cachetes del culo con ambas manos, Nancy lo hace obedientemente, tengo la cabeza de la pija embadurnada con la acabada de la niña, tomo mi palo por el tronco y se lo froto en su rosado agujerito trasero, se lo apoyo bien en el centro y presiono, de a poquito su esfínter se va estirando y permitiendo que milímetro a milímetro la cabeza vaya entrando en su apretado culo, comienza a gemir y me dice, tío me duele, mucho. Yo me detengo, espero que se acostumbre al grosor de la tripa y vuelvo a presionar, no avanzo nada, se la saco, unto mucha saliva con los dedos en su agujero que ya se ve bastante dilatado y nuevamente se la vuelvo a presentar a su culito. Esta vez entra toda la cabeza y Nancy emite un gritito y luego un gemido. Ya está echo, ya el glande comienza a penetrar en el puerto trasero de mi sobrina. Por ser la primera vez solamente le meto unos cinco centímetros de tripa, su ano aprieta mucho, y sin lubricante puedo lastimarla. Me muevo despacito, la cojo suavecito con movimientos cortitos, así logro llegar a acabar llenándole el culito de semen con potentes chorros. Espero que mi rabo se achique y se la saco. Ella suspira fuerte. Al darse la vuelta puede observar mi pija a medio parar. Estira la mano y la agarra por el tronco, y como lo que es una nena, hace un comentario que me hizo sonreír, dirigiéndose a mi palo le habla y le dice que es un chico malo, que la hizo doler aunque ya al final le estaba gustando tenerlo adentro. La abrazo y le digo que la quiero mucho. Que perdone lo que hice pero es que ella me gusta mucho y no pude resistirme al verla desnuda. Esa alabanza la puso muy contenta. Me dice que ya no le duele el golpe en la cadera y que soy un médico bárbaro. Le pido que guarde el secreto y que cuando ella quiera podemos jugar juntos otra vez. Pero que no le puede decir a nadie, ni a su hermana. Me lo promete y subiéndose los calzones, sale hacia la pileta caminando medo de costado. Su hermana la recibe con una sonrisa contenta de que esté bien. A partir de este momento la niña no me saca la vista de encima, creo que se ha enamorado de mi.