Noche de película con mi hermanita

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Adriann27MX.
Noche de película con mi hermanita.

Hola a todos de nuevo estimados lectores, continuando con los relatos eróticos entre mi hermanita y yo que más bien son experiencias totalmente reales que viví con ella, acá les tengo la cuarta experiencia que más he disfrutado con ella, en realidad me estoy centrando en contarles las ocasiones que mejor nos la hemos pasado, ya que durante los casi 5 años de una relación incestuosa pasaron miles de cosas y pequeños encuentros que no se si contarles ya que son algo repetitivos, aun así díganme si les gustaría que escribiera una serie de mini relatos.

Era un fin de semana normal y aburrido, una tarde como siempre en casa alrededor de las 6pm yo estaba en la sala viendo películas, mi madre se estaba dando un baño muy temprano cosa que se me hizo raro, y mi hermanita estaba haciendo su tarea, la película comenzaba a aburrirme y yo estaba a punto de subir a mi habitación para ver un poco de porno y masturbarme cuando escucho que suena el celular de mi madre, a lo que ella responde apurada:

-Ya casi estoy lista amor, estoy terminando de bañarme, me arreglo y te veo en 20 minutos acá en la casa

Por la manera en la que contestó el teléfono imaginé que era mi padre quien le había llamado, no le tomé tanta importancia ya que andaba distraído con la película y mi madre estaba apurada vistiéndose y maquillándose cosa que volví a notar muy extraña ya que ella casi no solía maquillarse tanto y mucho menos demorarse tanto en arreglarse, minutos más tarde escuché como unos tacones de mujer hacían sonar el piso y como por arte de magia apareció mi madre!

Oh por dios! No podía creer lo que estaba mirando, estaba totalmente hermosa y buenísima! para ser honesto yo jamás había sentido atracción por mi madre y nunca se me había cruzado por la mente, ella tenía puesto un vestido negro muy entallado con un escote que dejaba ver parte de sus senos que los tenía algo aguados pero con el sostén de encaje que tenía ese día se le veían unos senos enormes!
El vestido era tan entallado que se le podía marcar la tanga que traía puesta, tenía unas caderas enormes y un trasero gordito hay que entender que ella es mare de 2 hijos pero a pesar de la edad estaba bien conservada, en pocas palabras era una gordibuena.

Bueno después de ese pequeño disfrute hacia mi madre, yo quede excitado y con una erección que tenía que ser calmada, mi madre bajó y nos dijo a mí y a mi hermana que estaba yendo al cine con mi ¨papa¨ cosa que nunca supimos ya que ese mismo día ella llegó ebria, pero bueno ese será otro relato.
Mi madre se notaba nerviosa y se asomaba a la ventana cada 30 segundos a ver si alguien ya había llegado, hasta que se escuchó el claxon de un coche y ella rápidamente de despidió de nosotros nos dijo que llegarían hasta la noche, salió corriendo sin decir nada mas; se subió a un coche que no pude alcanzar a ver y partió.

Después de haber morboseado a mi madre un poco, la idea de subir a mi habitación a ver algo de porno se me había olvidado y me centré en mi dulce hermanita, nos quedamos completamente solos y sabía que íbamos a disfrutarlo juntos.
Ella seguía distraída haciendo su tarea a lo que me le acerque tranquilamente y me ofrecí a ayudarle, ella aceptó sin pensarlo ya que era demasiada tarea y quería terminarla pronto.

Yo: ¿Ale quieres que te ayude con tu tarea?

Ale: Sii! Por fa es mucha y no se cómo hacerla

Yo: Esta bien, te voy a ayudar para que termines más rápido y podamos ver películas ¿Qué te parece?
Ale: ¿en serio? Si Esta bien ayúdame plis.

Claro que eso de ayudarla con la tarea era uno de tantos pretextos para acercarme a ella y tocarla, me senté a su lado y enseguida comencé con las caricias suaves recorriendo sus delgadas piernas, después de varios encuentros juntos ella ya sabía que en cuanto estuviéramos solos era el momento perfecto para disfrutar, pero no quería apresurar la situación, teníamos la casa sola y completamente para nosotros, así que deje de acariciarla y rápidamente terminamos las tareas.
Yo ya estaba ansioso por estar con ella; me pregunto emocionada que cual película veríamos a lo que yo le respondí que veríamos una película solo para gente adulta.
(Les adelanto que no era porno)

Entre las películas que tenía mi padre guardadas encontré una que se llama THE SECRETARY una película erótica de los 90´s que por cierto sigue siendo mi película favorita, la puse en el DVD y rápidamente me fui a la cocina a preparar palomitas de maíz caseras de esas que se hacen con aceite y sal nada más, a mi hermanita le encantaban y estaba tan emocionada por la película que se fue corriendo al sofá tomo unas sábanas y se sentó frente a la televisión ansiosa de que empezará.

Al principio mi hermanita no lograba entender nada ya que la película trataba de una chica que le gustaba el BDMS, ella me dijo desesperada:

Ale: ¡Que aburrida es esta película! ¡Quítala! (Me dijo con voz decepcionada).

Yo: Espera ya verás que se va aponer mejor no te desesperes por fa

Ale: Esta bien te voy a creer.

Nos acostamos en el sofá y nos cubrimos con la sabana de manera que ella quedó con su cabeza sobre mi pecho y su trasero a la altura de mi verga y cerca de mis manos, comiendo tranquilamente las palomitas recién hechas y bebiendo refrescos estábamos ahí los 2 en el sofá, parecíamos una pareja de novios totalmente enamorados, entre ratos le acariciaba el trasero que para ella eso ya era muy normal solo me daba sonrisas pícaras, la película avanzaba hasta que las escenas eróticas de sexo se hicieron presente y como estábamos completamente solos no me importo bajarle el volumen a la tv.

Mi hermanitas se ponía roja al ver esas escenas en donde a la chica le daban de nalgadas fuertes y la azotaban contra el escritorio, yo notaba como ella apretaba los muslos y comenzaba a excitarse y aproveché para comenzar a manosear su trasero, ella tenía puesto un short de mezclilla de una tela muy dura que para mí era un estorbo, así que poco a poco fui llevando mi mano de su trasero a la parte de enfrente de los botones de su short para comenzar a desabotonársela y deshacerme de ella.

Ella jamás opuso resistencia ante mis manos y caricias ambos sabíamos lo que iba a suceder, después de varias veces estando juntos ella ya había tomado confianza, mis dedos llegaron a la tela de su calzón a lo cual empecé a deslizar para poder sentir su cálida y suave vagina que tanto anhelaba tocar de nuevo, mi intención era calentar a mi hermanita poco a poco para que ella misma me lo pidiera.

Después de un par de minutos batallando entre el short apretado y su calzón pensé que era mejor quitárselo para así poder acariciarla mejor, suavemente desabotoné su short completamente y comencé a bajárselo poco a poco, ella sin oponerse me ayudo a quitárselo, una vez sin nada que pudiera estorbar mi mano continúe dando suaves caricias sobre la tela del calzón de mi hermana en su cuca, ella ya había cerrado los ojos y había comenzado a dar pequeños gemidos

Mi verga estaba atrapada entre mi bóxer y mi short de tela, parecía que quería atravesar todo lo que tuviera en frente, el líquido transparente y viscoso ya había mojado todo mi bóxer, tuve que quitármelo rápidamente para estar más cómodo ya que también el roce de la tela con mi verga me estaba lastimando, una vez retiradas nuestras prendas inferiores estábamos desnudos de abajo y nuestros cuerpos se estaba rozando piel con piel.
Tomé mi verga con la mano derecha que era la que tenía libre y se la puse en la entrada de la vaginita de mi hermana asi como estábamos mas o menos como en la posición de cucharita.

Al sentir la punta de mi verga mi hermana dio un pequeño gemido y con una mano me empujó un poco hacia atrás como queriendo decirme (despacito por favor), yo jamás quise lastimarla y forzarla a algo que no quisiese así que yo me adaptaba su ritmo, mi verga ya estaba totalmente lubricada por ese líquido transparente pero ella aún estaba un poco seca, con un poco de saliva en mis dedos combinado con mi liquido se la unté en su vaginita y le coloqué la punta de mi verga en su entradita apretada, ella seguida dando gemidos suaves y suspiros.

Nos colocamos de lado abrazados y comencé a darle besos por el cuello, detrás de las orejas, le daba mordidas por la espalda y le decía:
Yo: Hermanita me encantas
Ale: A mí también hermano, me gusta mucho esto que me estás haciendo (me dijo con voz tenue y gimiendo)
Le introducía la punta de mi verga y se la sacaba despacio y así estuvimos gozando unos minutos, yo estaba plácidamente cómodo y disfrutando cuando por sorpresa me dice:

Ale: Hermano me gusta mucho cuando me das mordidas ahí bajo, quiero que me hagas eso mejor.

Estaba totalmente sorprendido que mi hermana me pidiera que le hiciera sexo oral y no solo sexo oral como normalmente se hace, si no que quería que le mordiera sus pequeños labios vaginales, hasta la fecha no se si ella tenga una especie de sensibilidad en esa área, ya que disfruta más del sexo oral que la penetración.
Apenas terminó de decirme lo que quería y yo ya me había parado para acomodarnos.

Yo: siéntate en el sofá y quítate la blusa (le dije en tono de orden)
Ale: si está bien,
Yo: ahora abre las piernas y con tus manos quiero que abras tu cosita para que te pueda besar más fácil ok?
Ale: Si está bien (me dijo desesperada)

Sin perder el tiempo se acomodó como le había ordenado separó sus piernas y con sus manos abrió su linda vagina.
En serio que era una vista increíble una hermosa y tierna vaginita abierta antes mis ojos, me hinqué sobre una almohada para estar más cómodo y hundí mi cara en su deliciosa vagina que ya estaba toda mojadita y lubricada.

Y como ella me lo pidió esta vez comencé por mordidas más fuertes y bruscas en sus labios vaginales ella se retorcía y soltaba gemidos más fuertes como nunca antes la había escuchado.
El simple hecho de escucharla gemir ya me estaba haciendo eyacular, con mis dientes le frotaba su vagina y le daba mordidas, noté como eso le encantaba y me tomaba la cabeza para que no parara, estábamos tan concentrados que no nos dimos cuenta que ya se había hecho de noche pero nada de eso nos importó, solo queríamos seguir disfrutando de ese delicioso momento.

Continúe con lamidas y mordidas en su vagina durante varios minutos, tenía la cara toda pegajosa y la lengua cansada de estar en la misma posición, me dolían las rodillas y la boca.
Entre gemidos escuché que mi hermanita me decía que quería hacer pipí.
Yo estaba tan excitado que no quería interrumpir ese momento y no sé cómo es que le dije:

Yo: Hazte pipi en mi boca!

Ella seguía gimiendo y gimiendo, se retorcía en todas formas yo seguía con la boca en toda su cuca y en un instante sentí como brotaba una gran cantidad de líquido caliente y salado sobre mi cara.
Con la boca abierta me bebí todo lo que pude, y al mismo momento que eso sucedió yo terminé eyaculando hasta la última gota, 3 grandes chorros de semen caliente y espeso salieron disparados con potencia la mayor parte había mojado el sofá y el piso.
Yo no lo podía creer mi hermanita se había hecho pipi sobre mí! Pero debido a la excitación eso no me importó.
Ella dio un último gemido y con un suspiro dejo car sus piernas completamente rendidas y continuaba con los ojos cerrados yo creí que se había dormido.

No les voy a mentir me excitó muchísimo que ella se haya orinado sobre mi cara y más en mi boca! Después de eso me puse de pie y parecía que acababa de suceder una orgia o algo parecido, el sofá estaba completamente destendido, el piso mojado, la TV nadie la miraba y nosotros dos estábamos desnudos.

Con voz sigilosa le dije a mi hermanita:
Yo: Ale vamos a bañarnos que estamos todos mojados y tenemos que cambiarnos
Ale: (con voz débil) si vamos ayúdame a pararme
La ayude a ponerse de pie y nos dirijamos al baño para bañarnos y quitarnos el olor a sexo y pipi que teníamos por todo el cuerpo, abrimos la regadera de agua caliente, nos tallamos con el jabón mutuamente como si fuéramos una pareja de enamorados, nos dábamos besos en la boca bajo la regadera y nos tocábamos nuestros sexos mientras nos duchábamos.

Una vez limpios nos apuramos a trapear el piso, cambiar las sabanas y dejar todo como estaba y lo más limpio posible, después de que acabamos de limpiar la sala, la película erótica aún estaba en la la tv, decidimos terminar de verla, estábamos totalmente agitados y cansados nos cubrimos con una sábana limpia nos acostamos juntos como cuando comenzamos y le dije a mi hermanita con voz suave

Te amo Alejandra…la abrace y nos quedamos dormidos un rato hasta que escuchamos como un coche se estacionó frente a la casa, apresurados nos separamos y nos sentamos de manera normal, quite la película y puse un canal al azar nos dimos cuenta era mi madre que había vuelto de su salida ya entrada la media noche, estaba ebria toda despeinada y con el sostén mal acomodado.
Inmediatamente sabíamos que mi madre había salido de fiesta y a coger con alguien más.

Espero le guste mi cuarto relato amigos, si alguien desea ponerse en contacto conmigo pueden mandarme un mensaje privado y con gusto les daré mi numero o email para estar con contacto más cercano, saludos y nos vemos pronto en el próximo relato.

Abrazos!