Nuestra Primera vez (parte 2 de 2)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por william1177.
Hace menos de 3 semanas, ocurrió algo con dos de mis sobrinos.

Mi sobrina Antonia de 16 años, acuso a su primo, mi sobrino Manuel de 19, de haberla manoseado luego de una fiesta de cumpleaños.

Pues bien… esto ocurrió a la semana siguiente de ese altercado familiar.

Aquí en la familia, soy el que mejor sabe usar una computadora y demás artefactos electrónicos.

Así que cada vez que una PC, o un teléfono, o cámara de fotos, se rompe, o no saben cómo usarla, pues acuden a mí.

Así es como vino a mí, justamente, mi sobrino Manuel.

Quería que le arreglara algo con la tarjeta de memoria de 16 gb, de su celular nuevo.

Normalmente, hubiese bastado con re-formatear la memoria.

Pero ya me ha pasado más de una vez, que por hacer eso, sin revisar lo que hay en dicha memoria, se terminan perdiendo datos muy importantes.

Fotos, carpetas de contactos, vídeos…

Así que le advertí a mi sobrino que quizás sea mejor ver que tiene, antes de llegar y borrar.

Me dijo: “si, no hay problema.
Igual esta memoria la tenia mi hermana, me la había quitado.
Así que bórrale todo.
Fíjate si tiene algo importante, sino… chau, se jode por robarme mis cosas.
”

Por suerte estaba solo en ese momento, porque me encontré con una carpeta con propiedades ocultas, cuyo titulo me dejo sin habla y los ojos grandotes: “Jazmín Putita”.

Jazmín, es la hermana de 16 años de Manuel, y obviamente mi otra sobrina.

Una parte mía, intento razonar, ya que es así como se tratan entre si los adolescentes estos días, al menos por estos lados.

La carpeta tenia fotos… y solo pude ver una en donde estaba mi sobrina en topless, tapándose las tetas con una mano.

Eso basto para iniciar un morbo en mi, y evitar seguir viendo.

Copie dicha carpeta en mis archivos, ocultos, en donde guardo alguna foto secreta de alguna novia.

Solo que yo soy más cuidadoso y no solo son carpetas ocultas, sino también protegidas por contraseña y esas cosas.

Y termine por borrar todo, como me dijo mi sobrino.

Cuando mi sobrina Jazmín se entero, enseguida puso una cara roja…
Yo sabía que tenía miedo de que hayan descubierto sus fotos, las cuales aun no tenía tiempo de mirar.

Para su tranquilidad, le dije que yo había borrado todo, carpeta por carpeta, sin darle más detalles delante de mi sobrino.

Pero no me di cuenta de que la frase que use, “carpeta por carpeta”, le daba señales a ella de que quizás sí, yo habría visto su carpeta oculta… o quizás no.

Y para tranquilizarla, le dije que luego le daría una memoria de 8 gb que yo tenía por ahí sin usar, así se quedaba tranquila y no peleaban entre hermanos.

Esos dos días, no tuve tiempo para estar solo frente a la PC y revisar dichas fotos.

Y era casi una tortura.

El morbo me carcomía terriblemente.

Me sentía dividido.

Como comente en la primera parte, soy alguien de mente abierta que por lo general no juzga a nadie.

Mas allá de que yo no practique o comparta ciertas actividades y gustos sexuales.

Pero esto… me ponía en una situación que si bien me sentía sexualmente libre, no había analizado jamás de primera mano.

Mi primer contacto con el incesto, fue con mi prima Gloria ( de quien ya les conté), y mi mente casi borro esos recuerdos quizás por culpa.

En todo caso, eran cosas de niños tontos.

Esto ya era yo adulto, con una carpeta llena de fotos de su sobrina de 16 años, quizás totalmente desnuda.

O vaya uno a saber haciendo que.

Finalmente, llego el sábado, en donde por razones que no vienen al caso, me quede solo en casa.

Ahí ya no pude mas y vi las fotos, una por una.

Las primeras de la lista, comenzaban suave.

En ropa interior, luego quitándose el sostén pero tapándose con la mano…
Mi cuerpo era un manojo de nervios y completa calentura.

Mi verga no estaba parada del todo, pero si semi lubricada.

En todas las fotos, mi sobrina Jazmín, salía sola, tomándose las fotos.

Era todo una cosa de ella sola.

De ella siendo una putita.

No le conocíamos novio secreto ni mucho menos oficial.

Le enviaría las fotos a alguien más? Seria para su propia diversión?

Y es que la segunda mitad de esas fotos, ya empezaban a lo más atrevido.

Su conchita peluda… sus pequeños y rosados pezones en esas tetas enormes…
Esas caderas anchas en contraste con su dulce cintura diminuta.

Ese culito redondo.

Luego de ver varias veces sus fotos, y de ir descubriendo en cada una, los detalles de su cuerpo desnudo, la única foto que tenía más detallada, de su conchita, tenia los labios de su vulva cerraditos.

Seguía siendo virgen.

Pero que tanto quería con esas fotos así?
No pude mas y por supuesto, termine masturbándome frente a la PC, frente a las atrevidas fotos de mi sobrinita de 16 años.

Días después, ella me pidió la tarjeta de memoria que le prometí.

Así que una tarde que tuve un momento a solas, le prepare la tarjeta con las clásicas carpetas del sistema de los celulares android.

Las de Music, DCM, Videos y Pictures.

Y en la de Pictures, le copie las susodichas fotos, sin dejar ni una sola en mi PC, solo por las dudas.

Estaba caliente, no pensaba mucho realmente…
Sabia que no le diría a nadie, pero era arriesgado hacerle saber que vi sus fotos.

Como era de esperarse, el sistema de su teléfono asimilo esas carpetas a raíz y no las borro.

Lo que siguió, fue toooda una tarde y la mañana del día siguiente como una tortura.

Se habría molestado?
Pensaría que su tío era un degenerado?
Que me la quería coger? (lo cual en parte era cierto).

Que estaba pensando yo cuando decidí hacer eso?
Y si sale todo mal?

Trataba de confiar en que como eran sus fotos, tomadas por ella, no me iba a delatar con mi hermano o mi vieja.

Era como un secreto nuestro… pero no por eso ponerse contenta o aceptar mi “regalo”.

Menos mal que descarte la idea de ponerle una foto de mi verga en esa carpeta, o habría sido una tortura peor.

La idea me paso por la mente en plena calentura.

Más de 24 horas después, me volví a cruzar con Jazmín, y así tener una idea de lo ocurrido.

Nos saludamos normalmente.

No note nada raro, con lo cual asumí que para mi mala suerte, el tormento iba a seguir otro día mas.

Ella definitivamente no había visto las fotos.

Ya a la tarde de ese día Jueves, ella volvió.

Y para mi alivio, si, había visto las fotos.

Me entrego disimuladamente una nota en donde decía “tenemos que hablar”.

Bueno… al fin vio las fotos.
Y quería hablarlo en privado.
Ya descarto el que me denuncie.

Pero no decía si era bueno o malo.

Otra tortura mas.

Pero luego recordé… o me pareció ver que la nota me la dio con una sonrisa nerviosa.

Era bueno?
O solo era que ella aun no sabía cómo encarar la situación?

Mierda!!!!!

Llego el Viernes, en donde finalmente, tuvimos un rato casi solos.

Mi madre, estaba en la otra sala, viendo su telenovela.

Jazmín acudió a mí, con la excusa de que le buscara descargara la música que le había borrado de la anterior tarjeta de memoria.

Abrimos un block de notas aquí mismo en mi PC, y comenzamos a chatear disimuladamente, mientras buscábamos música.

El primer chat se borro.

Tuvimos que borrarlo cerrarlo cuando aparecieron los gemelos, mis otros sobrinos.

Pero aquí más o menos un resumen.

Jazmín: Hola.

Yo: Hola.

J: Que paso?
Y: Nada, por?
J: De que querías hablar?
Y: Yo? Vos querías hablar! Es sobre eso?
J: Bueno, sí.
Es que me da vergüenza.

Y:Lo estamos escribiendo, debería ser más fácil.
Solo escribilo.

J: No sé cómo decirlo.

Y: Decir qué? Tengo que adivinar?

En ese momento, llegaron mis sobrinos, los gemelos, de jugar al fútbol.

Luego se fueron, y ahí sí, pudimos terminar de chatear y esta vez sí pude guardar el block de notas, que paso a copiarles.

De los nervios, hay líneas que no sé si las escribí yo o ella.

A las que si estoy seguro, les agregue la J y la Y.

Y: Bueno, y??? me vas a hacer adivinar?
J: qisas
Y: Es bueno o malo
Y:?*
J: nose
Y: como no vas a saber si es bueno o malo.
Es sobre tus fotos en el celular?
J:ke foto
Y:????
(Acá me asuste cuando me dijo eso).

Y: Mierda…

J: es joda.
si.

J: si es por las foro
J: fotos
?: entonces?

(otro silencio mientras descargábamos la música que ella me pedía)(había que disimular)

Y: es por las fotos.
Eso es bueno o malo?
J:ya te dije nose
Y: Es bueno que yo las ahay visto?
J:quisas
Y: como que quizas?
J: te gusto
Y: si me gustaron las fotos? O si me gustas vos?
J: 2
Y: ¿??
J: las 2 cossas
Y: si.
Las dos cosas.
Soy malo?
J: porque malo
Y: por que me gustaron las foitos desnudas de una de mis sobrinas.
Eso esta mal visto.

J: nose.
no creo
Y: no crees que eso este mal?
J: sos hombre.
upongo que es normla
Y: quizás pero aun asi…
?: esta mal sentir cpsas
J: yo quese
Y: sentís cosas? Que scosas sentís?
J: cosas.
no soi una nena no soi tonta.
se lo que es cojer.

Y: supongo que es lo normal a tu edad.
Sentís deseo.

J: es normal por algien de tu familia
J: ?
Y: en serio? No creo.
No se.
Yo también siento cosas cuando vi tus fotos.
La sociedad esta mal.
Hay cosas que son tabu y otras que no.
Pero creo que
Y: pero creo que si es de común acuerdo, no debería haber problema.

(silencio de ella)
Y: por quien sentís cosas? se puede decir?
J: nose.
solo empese a sentir cosas.
cuando paso lo de mi hermanio y la Tonia (Antonia, mi otra sobrina), fue raro.

Y: por tu hermano? Eso sentís?
J: no.
No por manu.
solo caliente.
con ganas me entraron ganas cuando me entere de viste mis foto s desnuda
Y: Conmigo?
J: esta mal
J: ?

Ahí cortamos el chat… y aprovechando que quedamos solos un rato, le respondí cara a cara y le dije que no, que no estaba mal si ambos sentíamos igual.

Charlamos poco mas ese día.

Solo nos hicimos saber que ambos tenias ganas uno con el otro.

A ambos nos calentaba el morbo del incesto.

Me conto que hace dos años que se masturba, pero hasta que ocurrió lo de su hermano y su prima, no había pensado en el incesto.

Eso, sumado a que yo la vi desnuda en fotos, la altero mas y estaba con muchas ganas y deseos un poco encontrados.

Ambos estábamos nerviosos.

Ese mismo día, solo para confirmar lo que sentíamos, le pedí dos cosas:
La primera, un beso en la boca.

Pero eso le dio mucha vergüenza, estaba muy nerviosa.

Lo otro, le pedí si me dejaba tocarla.
Ya sea una teta o ahí abajo.

A cambio, le dije que me tocara el pecho o el cuello, o la pierna.

Mientras yo usaba mi mano derecha para amasar esas hermosas tetitas, ella me sorprendió yendo directo a agarrar mi paquete.

Realmente estaba tan caliente, que cuando eso paso, casi enseguida acepto a besarme en la boca.

Resulto que además de virgen, nunca había besado.

Sus dos novios solo fueron algo suave, simple.

Y ahí estaba, ya descubriendo su sexualidad conmigo.

Luego, tuvimos que dejar ese momento, porque yo estaba muy duro, y ella confeso que empezó a mojarse en forma abundante.

“Hace mucho te pasa eso? Sos de mojarte mucho?”
“Si, demasiado” me respondió.

Quien lo diría, mi sobrinita era de las que eyaculaban fuerte, aparentemente.

Mas días pasaron en donde no podíamos estar juntos.

Y la tortura ahora, era no poder estar con ella.

En esos días, en donde solo podíamos intercambiar una mirada caliente, o un manoseo de nuestras partes al pasar, me di cuenta de que no la iba a “perdonar”.

Su virginidad tenia los días contados y yo se la iba a romper.

Así que se lo hice saber cuando pude, solo de caliente nomas.

Mi mamá se encontraba en el baño, cuando apareció mi tierna sobrinita.

Y ni bien entro a saludarme, miro a todos lados y me planto un beso de lengua cuyo sabor fue… mmm…
Me encantaba como besaba.

Y me gustaba… me gusta mucho el sabor de su boca.

Es cierto que la boca es como un reflejo de la vagina de la mujer y la manera en como besan, es igual a como cogen.

Mi sobrinita Jazmín, me daba unos besos abundantes en saliva, la cual yo bebía encantado.

Y ni bien pego su boca contra la mía, y nuestras lenguas comenzaron a nadar en nuestra saliva mezclada, le metí una mano en su conchita, por encima del pantalón de lycra ajustado.

No fue mucho toqueteo cuando enseguida note que sus jugos, se querían escapar incluso por encima de la ropa.

Inmediatamente retire mi mano que ya estaba húmeda, y cuando nos separamos, pude notar una mancha en su ropa.

Efectivamente, estaba muy mojada.

Le hice señas de que acercara su oído, así le susurraba mi plan:
“Sabes que ahora no te me escapabas, te voy a romper la conchita, no? Te tengo que desvirgar”.

No alcanzo a responder, por que escuchamos a mi madre salir del baño.

Se tapo la humedad en su entrepierna con el mismo largo de la camiseta que estaba usando, y para cuando apareció su abuela, le hizo una pregunta de no recuerdo que, para disimular.

Yo hice lo propio mientras veía el estreno de Iron Fist, en Netflix.

Luego, al irse, y oculta ante la vista de mi madre, Jazmín me miro, me sonrió, me arrojo un besito, y me asintió con la cabeza.

Yo me perdí por un momento, pero luego me di cuenta de que estaba asintiendo a lo que le dije de desvirgarla.

Mis emociones estaban al límite.

Hacia esfuerzos sobrehumanos para no pensar en lo que haríamos con mi sobrinita, porque mis pensamientos me llevaban a calentarme y que se me notara el bulto en el pantalón.

Luego me entere de que ella tenía problemas similares, al punto de que empezó a usar una toallita femenina para no mojar su ropa.

Ella no tenia limites, claro.

Luego me enteraría que en más de una ocasión, casi tiene un orgasmo de solo pensar en cómo iba a ser su primera vez conmigo.

Los días iban normal, y cada uno por su lado, iba viendo en qué momento podríamos hacerlo.

Los días comenzaron a estar mas fríos por estos lados, y no podíamos ir a cualquier lugar.

Ya sea en mi casa o en su casa, siempre había algo de gente yendo y viniendo.

Finalmente, llego el sábado, en donde mi madre, fue a cuidar a mi abuela, y por su lado, mi sobrino Manuel se fue a un asado con mi hermano.

Así que tanto en mi casa, como en la de ella, quedamos solos.

Nos costó decidir en cual casa hacerlo.

Optamos por la mía, ya que tenía toda la noche libre.

Nos fuimos a mi habitación, y allí ella se arrojo de un salto a mis brazos que casi nos tira al suelo.

Comenzó a besarme desesperadamente mientras agarraba con fuerza mi bulto que me pedía salir del pantalón.

La calme… y le dije:
“Mejor planeemos un poco esto.
Primero, nos desnudamos, así quedamos libres de ropa, lista?”
“si, apúrate que no puedo más de los nervios y las ganas”
“tranquila… mira que te va a doler pero también te va a gustar mucho.
”

Mientras ella se quitaba la ropa a toda prisa, yo hacia lo mismo.

Varias cosas pasaban por mi cabeza.

Por un lado, me di cuenta de que con su juventud y energía, mi sobrinita, aunque virgen, tierna e inocente aun, me iba a dejar seco y exhausto.

Por el otro, pensaba que si se la metía de lleno, no iba a poder probar el sabor de su conchita virgen.

Y desde que la vi en las fotos que me moría de ganas de probar su sabor.

Especialmente beberme sus jugos sexuales.

Y por supuesto, quería enseñarle a que me la chupara.

Estaba pensando que mas adelante, si le encantaba coger conmigo, hasta podría desvirgarla del culo, rompérselo, cuando ella ya estaba completamente desnuda y se quería sentar en mi verga ya parada.

“Espera! Tantas ganas tenes de que te la meta?”
“Y a vos que te parece, tío?”.

“Primero, te voy a enseñar a chupar mi verga… y yo te quiero chupar la conchita, te parece?”
“nunca lo hice, así que dale.
Vos enséñame a coger, tío.
”
Y se sentó sobre sus talones en mi cama, poniendo su carita tierna, esperando a que yo le dijera que hacer.

Casi nunca usaba el termino tío conmigo, porque nunca tuve una relación tan formal con mis sobrinos.

Pero era evidente que le gustaba remarcar la relación incestuosa, ya sea para calentarme a mí, o a ella misma.
O ambos.

Procedí a acostarme boca arriba en la cama, y le pedí que ella se sentara sobre mi cara, poniendo su conchita ultra-mojada en mi boca.

Tan mojada estaba que le corrían unas gotas de sus jugos por una pierna y una gotita me cayó en la frente mientras se acomodaba.

Tenía ese hermoso asterisco rosado de su culo a pocos centímetros de mi cara.

Su piel blanca… su perfume a aceite de bebé…
Pero había otro olor particular que ahora mismo no puedo quitarme de mi cabeza.

Su olor a vagina.

Comenzaba a ser fuerte, profundo.

Era un néctar que no podía esperar a probar ya.

Pero me quería asegurar de que Jazmín estaba cómoda, ya que una vez que empezáramos, no íbamos a detenernos hasta acabar uno en la boca del otro.

“Y ahora, tío? Qué hago?”
“Ahora, si estas cómoda, con delicadeza, agarra mi verga con una de tus manos, y comenzó a chuparla como una paleta, suavemente.
No uses tu dientes, eso sí.
Y date el gusto, saboréame como quieras.
”
“estuve viendo unos vídeos porno, a ver cómo me sale esto.
”

Para mi sorpresa, procedió a mamarme la verga como ninguna mujer me lo había hecho.

Realmente me estaba chupando, succionando la verga, pese a que mi glande apenas le entraba en su boca.

Me la acariciaba con su lengua también.

Era un poquito torpe, pero estaba cumpliendo su labor.

Tanto, que casi me olvido de devolverle el favor.

No lo pensé mucho… y hundí mi boca, con mi lengua afuera, en su conchita, y le di un hermoso chupetón.

Casi me ahogo cuando Jazmín lanzo un quejido e inundo en mi boca!
La hija de puta acabo enseguida!!!

Me tomo por sorpresa… pero ni lento ni perezoso, me bebí todo su néctar sexual.

Dios, que sabor, que olor…
La nenita se retorcía del orgasmo que estaba teniendo, mientras yo estaba prendido como una sanguijuela a su conchita peluda.

Tal emoción casi me hace acabar a mi sin tocarme!

Estuvimos ahí un rato, mientras yo le acariciaba la espalda y el culo…
También extendía un poco mis brazos y le tocaba las tetas, mientras le preguntaba si estaba bien.

Solo estaba cansada y sorprendida, porque era el primer orgasmo explosivo que tenia.

Es decir, antes también se mojaba mucho, pero nunca largaba tanta cantidad de su néctar junto.

Y si no hubiese sido por mí que me lo bebí todo según lo iba eyaculando, la cama habría quedado inundada.

Luego de unos minutos, con tanta caricia a su cuerpo, le volvieron las ganas.

“Queres que ahora si te rompa la conchita? Queres que te haga mujer? Mi mujer?”
“si, tío…haceme tu hembra, rómpeme el orto.
”
“Prepárate que te va a doler…pero también vas a acabar como recién o peor.
”
“si, mi amor.
” Me respondió juguetonamente.

“bueno, como lo hacemos? Queres que yo tome el control? O queres tenerlo vos y sentarte en mi verga?”
“métemela vos, papito.
”

La acomode en la cama, puse mi almohada debajo de su culo para dejarlo más accesible, y comencé a frotar mi verga contra su concha peluda.

Subía y bajaba a lo largo de su raja.

Ella había empezado a calentarse de nuevo, a gemir.

A mí, se me había puesto la verga dura de nuevo.

“lista?”
“si, dale métemela ya”
“a la cuenta de tres, ok?”
“dale…”
“uno…”
“dos…” dijo ella y se la mande de lleno antes de llegar al tres, así de sorpresa y bien hijo de puta.

Lanzo un grito que no sé si lo habrán oído los vecinos o toda la cuadra.

Y es que la tengo ancha.

No larga ni monstruosa, normal… pero ancha.

Y en mi calentura, fui tan brusco que fue casi como una violación.

Ella en pleno grito de dolor, en ese pleno y fuerte ay!, quiso zafarse, quitarme de encima.

Pero yo estaba hecho un salvaje y seguía metiéndola más adentro.

Ella empezó a mover sus brazos, pegándome, tratando de sacarme.

“aaaaaayyyyyyjodeputasacalaquemeestaslasitimando!!!” decía casi en llanto.

Pero yo no, yo seguía empujando mas y mas adentro.

Ya casi mis huevos peludos tocaban su culito.

No recuerdo, pero en un momento, creo que le dije algo como “querías que te desvirgue, putita??”.

O eso me comento ella después.

Y es que estaba hecho un salvaje de las ganas que tenia de cogérmela.

Ahora pienso que podría haberme calmado un poco… después de todo, ella sigue siendo un caramelito dulce, tierna, inocente.

Creo que estoy enamorado de mi sobrinita Jazmín.

Sé que ella sí.
Ya me lo dijo.

Pese a mi salvajada, se enamoro fuertemente de su tío.

Habré hecho dos o tres movimientos de mete y saca, cuando no pude mas.

Si hubiera pensado mejor, la habría sacado, y habría acabado afuera.

Y no, no daba metérsela con condón… se hubiera roto.

Además, no es una puta cualquiera con enfermedades… es mi dulce y tierna sobrinita… tenía que ser piel con piel, No lo imagino de otra manera.

Así que con esos movimientos que la seguía lastimando, acabe dentro de ella.

Me vine abundantemente y con un gemido de placer casi doloroso.

Uno de esos pocos en donde sentís que descargas el mundo.

Ella insistió en que se la sacara, y así lo hice.

Se escucho un “pop” cuando se la saque.

Ahora puedo recordar que ella es ajustadita.

Y ni bien la saque, un borbotón de mi semen, sangre y sus jugos salieron derramándose sobre su culo y mis sabanas.

Ella cerro sus piernas y se quedo sollozando.

Yo me acosté a su lado, y la abrace.

Ella por supuesto me pego diciéndome “pelotudo, me dolió!”.

Luego, procedió a abrazarme también, mientras se calmaba.

Nos quedamos dormidos un rato.

Esos 15, 20 minutos que se sienten como dos horas…

Ambos nos limpiamos, limpiamos mi cama, y luego nos acostamos desnudos abrazados.

Estábamos muy románticos.

Nos besábamos mientras charlábamos.

Le conté que se despreocupe, que la próxima yo iba a ser menos salvaje y que una vez abierto el camino, ya no le iba a doler…
Ella ahí me dijo que si, a pesar del dolor, si sintió algo cuando acabe.
Aunque no está segura.

“cuando me llenaste con tu leche, me sentí muy caliente.
creo que acabe.
”

Para mí, se sintió como una nueva primera vez también, así que no solo ella se desvirgo, sino que yo también.

Y es que caigo en cuenta que jamás antes había desvirgado a una chica, a excepción de mi prima Gloria.

No lo pensé, podría haber tomado mas recaudos para hacerlo.

Ser mas gentil…

Ya paso más de una semana de eso.

No hemos podido hacerlo de nuevo, pero si intercambiamos miradas, besos y toqueteos.

Además de que estamos muy nerviosos, porque no sabemos si quedo embarazada o no.

Aun no sé si ha sido por la situación, ya que quedo algunos días adolorida, pero su ciclo menstrual esta raro.

O eso me dijo ayer.

No le tocaba hasta dentro de una semana más pero parece que lo tuvo en estos días.

Ni idea, no sé mucho de esas cosas de las mujeres.

Así que así estoy, analizando, asimilando todo lo que ha pasado.

Como dije, ella se me enamoro.

Ya no me dice “tío” en forma sexual, sino que cuando puede, me dice “mi amor”.

Ni papito, ni mi hombre, ni nada sexual, solo un romántico mi amor.

Y a mí me encanta que me diga eso.

Y creo que también estoy enamorado por qué no dejo de pensar en ella, solo pienso en besarla, estar a su lado.

Obvio que poder cogérmela de nuevo, en forma más normal.

Coger un buen rato y no tener las eyaculaciones precoces que tuvimos ese sábado por la calentura.

No vemos la hora de estar juntos de nuevo, aunque es difícil.

Veré si puedo compartir alguna otra anécdota ahora que nos deseamos… veremos que nos depara el futuro… en esto del incesto.