Obsesionado con mi hermana 4
Me he dado cuenta que la forma en la que he dividido los relatos es contar lo que viví en cada cada casa en la que vivimos mi hermana, mi madre y yo, así que empezaré este relato describiendo la casa en la que vivíamos durante los sucesos que con con.
Era una casa pequeña, se la entregaron a mi mamá como parte de un programa de asistencia social, tenía 2 cuartos, uno frente al otro y en medio de los dos estaba el baño, mi mamá dormía en un cuarto y mi hermana en el otro, a mí me tocaba dormir en lo que se suponía que era la sala, justo a un lado de la entrada principal estaba mi cama y al pie de la cama mi computadora que quedaba justo enfrente de la puerta del baño.
Cuando mi hermana me dijo que no quería seguir haciendo lo que hacíamos decidí buscar otra manera para satisfacer el deseo que sentía por ella, la solución que encontré fue espiarla mientras se bañaba, la puerta del baño estaba un poco alta así que si me agachaba y me pegaba a la puerta podía ver perfectamente lo que pasaba adentro. Mi madre estaba dormida casi siempre a la hora que mi hermana se bañaba, así que yo podía no solo ver tranquilo por debajo de la puerta si no también grabar con mi celular nuevo, la primera vez que vi a mi hermana bañándose ya tenía alrededor de 1 año que no la veía desnuda y había notado que sus pechos empezaban a tener forma así que estaba emocionado por ver de nuevo a mi hermana como Dios la trajo al mundo.
Lo primero que se quitaba era la blusa, no usaba aún nada abajo así que inmediatamente pude ver sus pequeños senos, eran tan hermosos como los recordaba, aún tenía esos pequeños pezones que me encantaban pero ahora estaban sobre unos pequeños senos abultados de niña comenzando su adolescencia. Después se quitaba el pantalón o faltada y por último los calzones, me lleve una gran sorpresa la primera vez que vi su conchita después de 1 año, los pequeños bultos en su pecho no era la única sorpresa que tenía, ahora también tenía un poco de bello sobre su vagina. No teníamos calentador así que para bañarnos calentabamos agua en la estufa y la veríamos en una tina pequeña de esas para bañar bebés, observé atento como mi hermana mojaba todo su cuerpo y después lo tallaba con algo de jabón para después volver a mojarlo, se bañaba rápido, pero siempre tardaba mucho en el baño y ahora podía ver porque, después de limpiar todo su cuerpo se recostaba en la tina, se veía muy linda con su cara y sus pequeños senos viendo hacia el techo, me daban ganas de entrar y hacerla mía como lo hacía antes pero pronto me di cuenta que no era el único exitado, mi hermana se llevó la mano entre sus piernas y empezó a masturbarse, sin duda ya no era la niña inocente con la que tuve mi primer beso y mi primer orgasmo, aunque físicamente seguia siendo una niña evidentemente lo que habíamos vivido había despertado en ella un apetito sexual a temprana edad. Casi todo los días se masturba después del baño hasta que mi madre la sacaba para meterse a bañar ella y al final me tocaba a mí, tanto mi hermana como mi madre dejaban siempre sus calzones sucios en el baño, bueno, en el caso de mi madre su tanga, claro que yo me masturbaba con los calzones de ambas y la lujuria que había sentido por mi madre renació así que comencé a espiar tambien a mi madre en el baño.
El ritual era el mismo que con mi hermana, pero la vista muy diferente, los pechos de mi madre ( de en ese entonces unos 33 años) no eran para nada los de una niña, había estado embarazada hace apenas 1 año de su tercer hijo y eso le había dejado un buen par de pechos grandes pero sin estar caídos, tenía los pezones evidentemente más grandes que los de mi hermana y más oscuros, muy diferentes a los de mi hermana pero me parecieron igual de hermosos. Cuando se despojo de su pantalón y si tanga pude ver el lugar de donde había nacido, una bella vulva un poco más oscura que el resto de su piel y encima una maraña de pelos negros, se dio la vuelta y también pude ver su culo, mi madre hasta el día de hoy tiene un muy buen culo, redondo y paradito. Después de eso me hice adicto de espiarla también a ella no solo en el baño si no también al vestirse en su cuarto, la puerta tenía un agujero que le hice con mi patineta así que era fácil asomarme y ver a mi madre desnuda buscando que ropa ponerse, todo eso era muy excitante pero pronto dejo de ser suficiente, necesitaba contacto físico para saciar mi sed.
Una noche mi hermana y yo nos desvelamos viendo Inuyasha en mi computadora y mi hermana se quedó dormida en mi cama, por supuesto que yo no desaproveche la oportunidad, le hablé para asegurarme de que estuviera bien dormida y cuando lo comprobé lo primero que hice fue tocar sus pechos por encima de su pijama, se sentían muy suaves, los apreté un poco y después hice lo mismo por abajo de su pijama, repetí el mismo proceso en su conchita, la acaricie encima de su de su pijama y después metí la mano, no tenía calzones así que fue fácil, lo primero que sentí fueron sus bellos púbicos, bastante delgados y suaves, baje un poco más la mano y acaricie un poco su clítoris pero se movió y saqué la mano rápido, espere un momento y volví a hablarle, seguía dormida pero no me quise arriesgar a despertarla así que solo me paré a un lado de la cama saque mi pene y me masturbe delante de ella hasta que me vine, mi semen cayó en su mejilla y en su blusa, ella reaccionó rascándose y se llenó también los dedos de semen, disfrute un momento la vista y después tomé un calcetín para limpiarla, limpie lo mejor que pude pero sin usar mucha fuerza así que el cachete aún tenía el brillo de mi semen cuando la abrace y la lleve a su cama.
Repetía eso cada que tenía oportunidad, algunas veces logré usar sus manos para masturbarme o hacerla que besara mi pene.
Y lo seguí haciendo hasta que nos mudamos a otro estado donde mi mamá tiene familia ya que mi papá regreso de USA y seguido iba a buscar a mi mamá, nos mudamos a la casa de un tío, para ese entonces mi hermana ya tenía unos 13 años pero lo que pasó en esa casa lo dejaré para otra ocasión.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!