PADRE E HIJAS (Ensayo) 1
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
PADRE E HIJAS (ENSAYO) 1
La fabrica de confecciones de mi padre había progresado con 17 costureras y además tenía una flotilla de 8 taxis, también había comprado una finquita de veraneo, precisamente un fin de semana nos fuimos para allá mi papá, María del Pilar que ya había cumplido los 9 años y yo 10 años y 8 meses.
Después de cenar mi papá se preparo un trago de licor y nos sentamos en la terraza a conversar
– Papito ¿usted porque no se volvió a casar? le pregunté
– Porque no le gustan las mujeres, dijo María del Pilar riéndose.
– No, no es eso, fue por no ponerles una madrastra que de pronto no me las quisiera ó las maltratara.
– Pero usted tampoco nos quiere ya, le dije con ironía.
– ¿Por qué lo dices?
– No por nada usted sabe, le contesté recordando las viejas caricias y lo de Mónica con el papá.
– A mi si, dijo Pili sentándose en sus piernas.
– Lo que pasa es que ustedes ya están grandecitas dijo mirando a Pili y arrugando el entrecejo.
– Recuérdenme mañana llamar al técnico del aire acondicionado, nos dijo, cambiando de tema. Yo le serví otro trago y le dije:
– Papá en esta finca me da miedo dormir sola, ¿nos dejas dormir en tu cama?
-Por mi no hay problema para eso la cama es grande.
– Si que rico dijo Pili dándole un besito en los labios. Le serví otro trago pero note que Pili se tomaba demasiadas confianzas con mi papá
El caso es que ya se había tomado como 10 tragos y estaba empezando a emborracharse
– Papito, no tome más, me voy a duchar para acostarme ya, le dije dándole un beso
– Vale mi amor hasta mañana enseguida va Pili. Se me olvido la toalla y cuando salí a cogerla por la cristalera vi a Pili y a mi papá besándose con lengua y mi papá le acariciaba los pechitos por entre la blusa.
Cuando salí de la ducha entró María del Pilar, mientras me alisaba el cabello la observé, las areolas hinchadas y los pezoncitos duros, su vagina con el monte de Venus mas grande que el mío y sus labios vaginales hinchados pero ya no los tenía rosaditos como los míos, la vi hacerse un aseo exagerado en su coño y me fui para la cama pensativa, sospechando cosas y me acosté, Al rato entraron mi papá y Pili abrazados y me hice la dormida. Pili envuelta en la toalla, mi papá en calzoncillos se acostó sin hacer ruido. María del pilar se quitó la toalla quedando completamente desnuda y le bajo los calzoncillos, se acostó a su lado, Pili le dijo al oído:
– Papá ya esta dormida, él la abrazó y comenzaron a tocarse los sexos. Yo sentí celos de mi hermana y rabia con mi papá. Vi cuando Pili empezó a hacerle la paja y el pene de mi papá se paro, me miraron para comprobar si ya estaba dormida y Pili le puso las teticas que apenas le sobresalían del pecho para que el las chupara haciéndolas endurecerse, mi padre se le montó dejando las piernas de él por fuera de las de ella, Pili guió su pene parado, más grande que el de don Jorge a su entrada, solo encogió las rodillas, mi papá empujo y se lo hundió sin dificultad, Pili gimió con la boca abierta y los ojos cerrados, en un gemido estiro las rodillas y empezó a mover las nalguitas. Procuraban no hacer ruido pero de todas maneras se les escapaban gemidos cuando ese trozo de carne palpitante de mi papá entraba y salía dentro de la vagina de su hija menor y follaron apasionadamente, él le susurraba: recuerda que eres mi putica.
– Aaaaahhhhhh que ricoooooooooooo Pili gimió largamente cuando mi papá se estaba vaciando dentro de su caliente vagina.
Yo ni se diga, me mojé en dos veces a pesar de mi enojo, pero me contuve y trataba de adivinar desde cuando mi papá follaba con mi hermana.
– Carmen ¿Qué te pasa? Me preguntó mi papá al otro día.
– Nada papá es que estoy como aburrida.
– ¿Quieres irte con Pili a la finca de Jorge? Mónica y Sandra, vienen a recogerla dentro de un rato en el coche.
– No papá yo me quedo aquí contigo. La cara me cambió de solo pensar que me iba a quedar sola con él. Al rato llegaron por Pili y Mónica me invitó.
– Carmen vente a dormir a mi casa que mañana llega mi mamá de Estados Unidos y vamos a hacer una fiesta.
– No…… más bien mañana voy, anda que el conductor te esta esperando. Cuando se marcharon entre a ducharme con intención de salir desnuda para que mi papá me viera, en esas llegó el técnico del aire acondicionado y no me di cuenta, al salir de la ducha con el que me encontré fue con el técnico de frente, yo quede como paralizada del susto y el técnico miraba mis pechos y miraba mi vagina y se puso colorado sin saber que hacer, al ver una niña de casi 11 años completamente desnuda, hasta que reaccione y entre a mi habitación y no salí hasta que se fue.
Se demoró como 2 horas en la reparación, tiempo que aproveche para vestirme y maquillarme, me coloqué una blusa blanca de seda sin mangas, sin botones y de amarrar en la cintura, muy escotada que resaltaba mis pezones y mis areolas hinchadas al no tener sujetador, una minifalda negra plisada, muy corta y me quedé sin bragas, unas sandalias veraniegas de medio tacón y por primera vez me pinte los labios de color rojo.
Salí y encontré a mi papá en su habitación disfrutando del aire acondicionado, al entrar el aire frío hizo que mis pezones se empitonaran inmediatamente, mi papá me miro con admiración y vio el deseo en mis ojos, no dijo nada pero abrió los brazos para que me acercara, yo coqueta me arrime con pasos de modelo y resuelta a entregarme al hombre que más deseaba en el mundo a mis 10 años 8 meses y 17 días: ¡Mi papá¡
Al fin entre sus brazos, mi corazón se aceleró bombeando pulsaciones a mi vagina, me beso largamente abriendo mis labios con su lengua después abrió mi blusa y me mamó los pechos dulce y largamente, sin prisas, sin brusquedades. Me recostó en la cama, su mano busco mi vagina aun virgen y yo le dije en un murmullo al oído:
– Papá estoy dispuesta a todo.
– Si hija lo sé. Sobraban las palabras mi cuerpo se fue haciendo liviano en alas del recuerdo de aquellas caricias que me hicieron vibrar cuando le pedí por primera vez que me apretara el botoncito con los dedos, él también lo recordó porque me hizo exactamente como yo quería, en un gemido me desmadejé y sentí brotar de mis entrañas el lubricante natural que mojó toda mi vagina, metió su cabeza entre mis piernas y su lengua tiesa se paseo por entre mi rajita al mismo tiempo que succionaba y saboreaba mis fluidos.
– Hija si quieres llegar hasta el final abre tu misma las piernas.
Yo con la calentura que tenia recordé las caricias de mi papá desde bebe, cuando el estando dormido hice que me metiera la punta de su pene, cuando mi papá se lo metió a Pili la noche anterior, también la ves que espié a don Jorge follándose a su hija Mónica.
Como hipnotizada con temor por el tamaño de su miembro, una fuerza extraña me pedía a gritos que las abriera, las abrí despacio, ofreciéndome, brindándole lo más preciado de mi cuerpo, incitando su mirada lujuriosa y mi papá se me montó.
Ya lubricada con mis propios fluidos guío su pene a mí entrada completamente virgen, él tenso el cuerpo y empujó pero no entró, al tercer intento se abrió un poquito de camino.
– Haaaaaaaaaaa papá ya esta entrando sigueeeee…. ¡no, no lo saqueeeeeees¡……..
– Así papito sigue, sigue, ya lo siento dentro, sigue Asiiiiiii……. otro poquito maaasssss…. maaasssss…. sentí que mi himen cedió sin romperse aún para abrazarle la parte lisa del pene como anillo de compromiso ¡! DESVIRGAME PAPAAAAAAAAAA ¡……… AYYYYYYYY…… ¡YAAAAAAAAAAAAAAAA… papito ya soy tuya para siempre.
Después de tanta tensión me entro un relax y como en sueños deje que mi papá hiciera de mi lo que quisiera, y sus metidas y sacadas me enloquecieron, adormecida le escuche gemir, su pene se engordo más y entre palpitaciones se le puso más tieso, busco la parte más profunda de mi ser y como un animal herido lanzo un quejido gutural en mi oído en el instante en que me inundo con ese chorrazo de caliente semen, del mismo que me había engendrado hacia casi 10 años.
Quedo extenuado encima de mí y sin sacármelo se acostó de lado acariciándome la cara.
– Gracias mi amor, me dijo besándome los labios.
– ¿Con quien te gusto más? con María del Pilar ó conmigo le pregunte mirándole a los ojos.
Sorprendido me respondió:
– Con las 2 pero como tu eres mayor y tienes los pechos mas grandes pues contigo me gusto más.
Después mi papá me lo sacó, en la sabana quedo la mancha roja de mi flor perdida, fuimos a la ducha y luego a preparar la comida.
Pasamos la tarde animados conversando sobre varios temas caminando por la finca hasta que mi curiosidad de mujer no se pudo contener.
– Papá ¿Cuándo lo hiciste por primera vez con Pili?
– Recuerdas que te fuiste 5 días en la excursión de fin de curso. Si, hace 8 meses, dijo pensativo.
– Esa mañana llego Sandra a jugar con Pili, yo estaba en el estudio haciendo cuentas……. cuando les oí una conversación que me puso cachondo, las vi pasar para el cuarto y después risitas y gemidos, comprendí lo que se estaban haciendo pero no las interrumpí.
Al rato Pili me pidió permiso para irse con Sandra y se marcharon juntas. Regresó para la hora de la comida, entro sonrojada y como excitada, se metió al baño y escuche el bidé funcionando, comió en silencio y cuando termino de lavar los platos se sentó horqueteada en mis piernas y me dijo:
– Papá tú ya no me quieres.
– Como así tesorito, ¿porque lo dices?
– Porque ya no me acaricias el coñito cuando estoy triste.
– Hija tú ya tienes 8 años y 5 meses exactamente, creo que eso no esta bien.
– Si me acaricias te cuento una cosa de Sandra con el papá, me dijo al tiempo que cogió mi mano y la llevó a su vagina, estaba sin bragas.
La curiosidad me picó y empecé a sobarla, su cara se transformó y se puso roja, yo también me excite y me comenzó una erección.
– Cuénteme pues Pili.
– Es que esta mañana Sandra le dijo a don Jorge que jugaran, que yo quería ver, él acaricio a Sandra, le chupo las tetinas y después la rajita, luego se quito la bata de baño y tenia el pipi parado, ella abrió las piernas y el se lo fue metiendo suavecito Sandra se puso como loca gimiendo cuando el papá lo metía y sacaba y a lo último don Jorge le hizo mas duro y se quedo quieto gimiendo.
– Papá ¿me haces un poquito por el culo? Le dijo Sandra.
– No hija delante de Pilar no.
– Después me cogió a mi y me chupo la vagina tan bueno que me orine y me dijo que cuando quisiera volviera.
Cuando Pili termino la historia yo estaba excitadísimo y más con ella rogando que le hiciera lo mismo, sentí como un vacío en el estomago cuando me resolví a cumplir sus caprichos y calmar mi pasión reprimida por 7 años, desde que murió vuestra madre, la conciencia me gritaba “con vuestra hija no” y los deseos punzándome “hazlo con ella porque otro va a aprovechar antes que tú y le puede hacer daño”, en esa lucha interna me debatía cuando la sentí hurgando entre mis calzoncillos y me acaricio el pene, de ahí en adelante fui como un potro desbocado.
La senté en la mesa del comedor, le chupe su vaginita tierna, le metí el dedo y desesperado puse mi pene en su rajita y empujé, cuando sentí mi pene penetrando y luego aprisionado por sus labios vaginales eyaculé precozmente, no la alcance a desvirgar, parte del semen se fue a su interior y otra parte chisgueteó sobre nuestros estómagos.
Ahí reaccione al escucharla:
– Hay papito tan duro no que me esta doliendo.
– Perdóname hijita, ven vamos a la cama para estar mas cómodos.
Ya en la cama con mis instintos controlados la penetré y te juro hija que al momento de romper su virgo la mire y vi a vuestra madre en el rostro de Pili y me vacíe otras 2 veces dentro de ella, todos los 5 días de tu ausencia la pasamos en una orgia desenfrenada y de ahí en adelante cada que tenemos oportunidad sin que tu nos vieras.
– ¿Papa y conmigo porque nunca lo quisiste hacer siendo que yo te brinde todas las oportunidades?
– No se Carmen, por respeto tal vez y porque tu siempre fuiste la niña de mis ojos, pero deseos nunca me faltaron y sufrí mucho controlándome.
– Papá espero que conmigo seas así de fogoso cuando lo volvamos a hacer esta tarde.
– A ti princesa lo que me pidas, me contesto.
CONTINUARA
Ya quisiera un papi así