Padre e hijo, la comisaría
Jesús y su padre tienen un encuentro sexual en la estación de policía donde su padre trabaja..
Después de que papá me descubrió teniendo sexo con el chacal de 20 años, me sentí un poco mal por el, papá siempre me ah querido mucho y yo a él, así que para contentarlo lo visite en su lugar de trabajo.
Me prepare y salí de casa rumbo a la estación de policía que es donde el trabaja, era una estación grande, con mucha seguridad, me refiero a cámaras y a guardias en las puertas de la entrada, los policías estaban siempre alerta por cualquier cosa que podría ocurrir.
Papá se encontraba en su oficina arreglando unos documentos sobre un nuevo preso que había llegado recientemente.
J: hola papá, te traje la cena
F: hola hijo, gracias no te hubieras molestado.
J: no es nada papá, es mi forma de decir que lo sintió.
F: por qué?
J: por lo que paso con el chico la otra vez.
J: así que pensé que tú también te mereces disfrutar de mi culo.
F: enserio?
J: si.
Cerré la puerta de la oficina de papá para tener más privacidad y me lance como perra en celo hacia el besando sus labios, sabían tan dulces.
F: estás loco, mis compañeros están afuera, nos verán.
J: lo se, eso me excita más.
Procedi a desabrocha los botones de la camisa de papá, para dejar su pecho al descubrirto, sumergí mi cara en sus pectorales, los limi, chupe y oli, estaba tan editado que no me di cuenta cuando papá me quitó mi pantalón y empezó a jugar con mi culo.
F: pero que culo más grande tienes hijo de puta, están bien abierto, de seguro es por todas las vergas que te han entrado.
J: te gusta mi culo papi.
Le decía mientras gemia en voz baja, para que no se escuchará nada.
F: su hijo, me eh vuelto adicto a tu culo.
Fue entonces que papá me puso en cuatro arriba de su escritorio y comenzó a chupar mi culo, mientas yo me tapaba la boca para que no salieran mis gemidos.
J: mmmmmmmm si papi que rico, mete tu lengua más a dentro.
Papá golpeaba mi culo, con una fuerza que me hacia llorar. Papá se para y agarro un condón, lo abrió y se lo coloco en su verga, mientas la sacudía, escuchamos que tocaron la puerta.
– oye Fernando todo bien?
Papá me jalo y me coloco en la puerta para evitar que se abriera,
F: si todo bien, estoy con mi hijo, estoy hablando con el.
Mientas papá decía eso me follaba el culo y me tapaba la boca, me agarraba del hombro y me metía su gran verga por mi culo.
– de acuerdo, no te tardes mucho, ya es muy noche y es peligroso que tú hijo ande solo por la calle.
F: no te preocupes en un rato lo llevo a casa.
Escuchamos que la persona se retiró, y papá me empujo de nuevo a su escritorio, pero está ves de frente, nos besábamos apasionadamente, mientas el me follaba y yo tocaba su cuerpo.
J: tu compañero tiene razón, es Muy peligroso que un joven como yo ande muy noche por las calles.
F: tu no te preocupes, para eso tienes a tu hombre fuerte que te cuida y lo mejor que también te rompe el culo.
Me dijo eso mientas me metía su verga con más fuerza, fue un milagro que no aya gritado.
Papá agarro mis manos y la coloco arriba de mi cabeza, después agarro sus esposas y me las coloco en las manos, dejando inmovilizado de las manos.
Papá me tenía a su Merced y podía hacer lo que quiera conmigo y así lo hizo, me besaba en todo mi cuerpo dejando marcas y chupetones en mi cuello muy evidentes.
J: si papá besame más, sus labios sabes muy bien.
Le decía eso mientras yo me sentía en el cielo, tenido de nuevo a mi padre sobre mi.
Papá me follaba con más ganas, y con mayor velocidad, me alzo y sus brazos y me follaba de una manera salvaje, ese hombre que me había criado desde niño, el mis hombre que me enseñó a andar en bicicleta, ahora me estaba penetrando de una forma magistral.
De repente sentí la leche de papá dentro de mi culo, donde me encantaba tenerla.
Terminamos sudados, y con un aroma a sexo en toda la oficina. Papá me quitó las esposas y nos cambiamos, mientas lo hacíamos nos besábamos y acariciaba mi culo y mis mejillas.
J: dios papá, esa última follada fue increíble, fue como si no fueras tu.
F: lo se, no se que me pasó, pero lo disfruté.
Salimos de la oficina y nos dirigimos al coche de papá, me sorprendió que nadie escuchará nada de nuestro encuentro sexual, que ausencia en sus narices.
Papá arranco el auto y nos dirigimos a casa, pero a medio camino, papá se calentó de nuevo e hizo que le chupara su verga, así lo hice y por 10 minutos chupe y disfrute de la verga de mi padre.
Papá se estaciono es medio del camino y me dijo que me quitará la ropa.
F: ponte en cuatro otra vez, te romperé el culo nuevamente.
No dude ni un segundo y me quite toda la ropa y me puse en cuatro en los asientos de atrás del coche, mientras que papá me metió nuevamente su verga y me comenzó a follar con la misma intensidad que hace algunos minutos en su oficina.
J: papá hazlo más rápido follame más duro, te lo suplico.
Papá me voltio y queramos cara a cara, y el empezó a darme cachetadas leves, en la cara, no sabía si era por qué sabía que eso me excitaba o era porque estaba enojado por qué me había visto cojer con otro hombre en su cama.
Cómo fuera, eso me está poniendo caliente así que le clave las uñas de mi mano derecha en su espalda y mi otra mano estába puesta en el cristal del auto, dejándola marcado por el calor que hacía adentro del auto. Terminamos esa sesión de sexo y dimos marcha a casa, pero papá no me permitió ponerme mi ropa, así que estuvimos desnudos en resto del camino.
Cuando llegamos papá me dijo que abriera la puerta de la casa, así que ambos salimos desnudos del auto y entramos a la casa, los vecinos no nos vieron pues ya era muy noche.
Papá me puso contra la pared y me dijo. Esto no ah terminado, y me alzo nuevamente en sus brazos y me llevo cargando a su habitación.
J: papá que haces, está sería la tercera vez que me follas en el mismo día.
F: no te eh follando en mucho tiempo y mis huevos están muy cargados, y tú tarea como mi perra es sacarme la leche.
J: de acuerdo papá.
Papá me follo nuevamente, está vez más lento, ya que no tenía prisa al parecer y yo estaba más que encantado de que sentir la verga de mi padre.
Montaba a mi padre, le daba saltos sobre su verga lo cual me encantaba,
F: te gusta mi verga hijo?
J: si papá, me encanta, me encantan las vergas,
F: también la de Emmanuel?
J: si, también esa, como me gustaría que estuviera aquí, quiciera que ambos me estuvieran follando en culo.
F: y que te impide?
J: la zorra de mi madre, ella es el único obstáculo que me aleja de Emmanuel, me da celos cada vez que la veo besando sus labios, tocando su cuerpo, y no logro separar a mi madre de Emmanuel.
Le decía esto a mi padre mientas seguía cabalgando su verga.
J: pero ya se que are.
F: que cosa?
Saque mi teléfono y comencé a grabarme a mi saltando en la verga de mi padre, » Hola mamá, espero que cuando veas esto estes con Emmanuel, quería enseñarte cómo se atiende a un hombre, como atender sexualmente a un hombre de verdad, no es así papá»
Alce el teléfono dejando ver la cara de mi padre con una expresión de placer y de miedo.
J: te gusta papi, te gusta como mi culo si aguanta tu gran verga?
F: si hijo, tu si sabes cómo atender a un macho.
J: lo ves, yo sí se como complacer a un hombre, y te aviso que también eh follando con Emmanuel, lo hemos hecho por mucho tiempo, tiene una verga exquisita y muy jugosa, me la mete cuando tú no estás, cuando te vas con tus amigas y lo dejas desatendido, yo soy quien le saca la leche de sus huevos, así que ya te puedes olvidar de el besos.
Deje de grabar y le mandé el vídeo a mamá junto con otro video donde papá y Emmanuel me follaban, (el cual ya les conté en otro relato)
F; eres una pequeña puta, enserio te atreviste a mandarle esos videos a tu propia madre y a robarle el novio.
J; tarde o temprano se tenía que enterar, aunque me hubiera encantado que nos hubiera encontrado teniendo sexo en su cama y ver su expresión.
F: eres increíble.
Me dijo mi padre mientras nos besábamos y nos quedábamos dormidos.
A la mañana siguiente me desperté con llamadas y mensajes de mi madre y de Emmanuel, pero ya se los contaré en otra ocasión.
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