PRIMERA FOLLADA CON MI MADRE

Acabé mi último año de estudios con muy buenos resultados y mis padres quisieron recompensarme con un viaje al exterior. Soy hijo único y mi padre considera soy un chico tímido y a cada momento me da consejos para conocer a chicas y todo eso. Mi madre le reprocha diciendo que ya lo tendré el futuro .
Acabé mi último año de estudios con muy buenos resultados y mis padres quisieron recompensarme con un viaje al exterior. Soy hijo único y mi padre considera soy un chico tímido y a cada momento me da consejos para conocer a chicas y todo eso.

Mi madre le reprocha diciendo que ya tendré en el futuro tiempo para eso. El caso es que en la época en la que acabé estudios yo estaba deseoso de tener mi primera relación sexual y mi padre sin duda tenía razón en eso de que era hora de intimar con chicas.

Como decía, nos fuimos al viaje y como no era temporada alta el lugar resultaba bastante aburrido dada la escasez de gente a la que podía conocer. Mis padres se daban cuenta que yo no me sentía bien e intentaban animarme, pero no lo lograban, más aún cuando llegaba la noche y nos íbamos a dormir, ellos a su habitación y yo a la mía, separada solo por una puerta que las comunicaba. Varias noches, de madrugada, unos jadeos me despertaron: eran mis padres follando como desesperados.

Mi curiosidad me llevó a asomarme abriendo ligeramente la puerta en la obscuridad a ver qué hacían y la verdad es que el espectáculo era sublime, lo mismo mi padre le comía la concha a mi madre, que ella le chupaba a él la verga o se la follaba por la concha o el culo. Varias pajas me hice sin que me viesen.

Un día fuimos los tres a la discoteca y a media noche mi madre se regresó a la habitación, luego me fui yo detrás de ella y mi padre se quedó hablando con una mujer que conocieron allí.

Al llegar a mi habitación sentí ruido en la habitación de mis padres y abrí ligeramente la puerta y vi a mi madre acostada con las piernas separadas y sobre ella estaba un joven alto rubio que había visto antes en la discoteca. Los dos follaban como locos, ella gemía y él respiraba agitadamente hasta que ella alcanzó el orgasmo y luego el tipo se corrió dentro de ella, quedándose los dos inmóviles.

Luego escuche que el tipo se fue y al rato llegó mi padre y también se follo a mi madre, pero antes les escuché esta conversación.

Mi padre: ¿Cómo te fue con el joven rubio?

Mi madre: Delicioso, con una verga enorme que casi me parte en dos, pero me gusto.

Mi padre: O sea que ya estas satisfecha

Mi madre: Noooo, ven que tu verga me fascina mas

Y comenzaron a follar.

Al día siguiente, pase a su habitación y me sentía algo de enfado con la actitud de ambos y creo que eso fue lo que me llevó a preguntarles con descaro:

– ¿El rubio se portó bien con mama? –

-¿A qué te refieres? – dijo ella ruborizada.

– Siento tener que hablar de esto con ustedes -les dije-, pero los he sorprendido desnudos follando como locos y anoche a mi madre con el joven rubio

. ¿Podéis explicarme por qué?

-Verás hijo, tu madre es una mujer atractiva y ya viste como iba vestida anoche, eso el joven rubio no lo pudo pasar por alto. Yo no soy celoso y hago cualquier cosa por verla feliz. El joven y tu madre se gustaron y yo lo noté, así que los animé a que disfrutaran del sexo.

-Me parece perfecto lo que haces, pero ¿qué pasa conmigo? ¿me dejas de lado? – Noooo, te hemos traído a este viaje para que cambies de ambiente, lo malo es que no hay mucha gente joven en este lugar.

¡Eso no me parece suficiente! -dije.

– Yo sé lo que él quiere- le dijo mi padre a mi madre-, y me parece justo, así que creo que no tenemos más remedio que ofrecérselo.

Dicho esto, mi padre se dirigió hacia mi madre y la abrazó por atrás, diciéndome »

¿Es esto lo que te gustaría hacer?». Y le comenzó a acariciar los hermosos senos a mi madre por encima de la camiseta y luego la besó en el cuello.

Mi madre, aunque complacida, se resistió un poco ante mi presencia.

«Contesta- me cuestiono mi padre-¿es esto lo que quieres?»

Yo no pronuncié palabra, pero moví la cabeza afirmativamente.

Mamá se quejó de la situación, pero mi padre la retenía mientras le decía que, si su hijo quería follar, iba a follar de verdad.

Ante mi atónita mirada le bajó el pantalón y las bragas y apareció la concha depilada de mi madre. Papá la acarició a la vez que se sacaba su verga con la mano que le quedaba libre. Yo hice lo mismo; también tenía mi verga en erección.

– ¿Quieres probar a mamá? – Sí-dije-, quiero probar lo que es el sexo.

– Hoy tendrás lo que quieras, para eso ya eres un hombre.

Mi madre lucía nerviosa y excitada a la vez.

Mi padre la invitó a chuparme la verga mientras él deslizaba su verga en medio de las nalgas de mi madre.

Me pareció deliciosa aquella mamada que me estaba haciendo mi madre.

Mi padre me recomendó que no me corriera, pues, si era bueno que me la mamase, mejor sería que probase follar la concha de mama.

Mi madre quiso evitar que la follara, pero mi padre le dijo que ya no había vuelta atrás y que disfrutaría de la enorme verga mía, aunque yo no sabía que realmente fuera tan grande como él decía.

Posiblemente a mi madre le daba pena que mi padre la viera follando conmigo, entonces él dijo, me retiro para que puedan disfrutar a gusto lo que quieran

«¡Adelante, es tuya!», dijo y salió de la habitación.

Me dio cierta pena ver a mi madre en aquella situación, pero recordé que con el rubio se había comportado como una auténtica puta, así que no dude y me subí sobre ella y comencé a chuparle los senos y ella comenzó a excitarse, entonces cuando acaricie su concha percibí que estaba bastante lubricada a lo mejor desde antes deseaba que yo la follara, pero quería mantener su dignidad frente a mi padre.

Cuando creí oportuno dirigí mi verga a su concha y fácilmente la penetré, al tocar fondo ella soltó un uhmmm, entonces recordé que mi padre tenía razón sobre el tamaño de mi miembro.

Ella comenzó a mover sus caderas en la medida que mi verga la penetraba una y otra vez y empecé a escuchar sus gemidos lo que me indicó que estaba disfrutando. Cuando sus gemidos crecieron estuve seguro que la debía follar con fortaleza como hacia mi padre para que ella alcanzara su orgasmo y después que la escuche que lo había disfrutado seguí follandola hasta que explote dentro de ella.  Me corrí en su interior como una bestia lanzando sonoros chillidos de placer.

Minutos después nos vestimos y salimos de la habitación a buscar a mi padre y al encontramos me dijo… veo carita de alegría, ¿disfrutaste follando a tu madre? Ella es maravillosa, ya veras cuando ella pierda la timidez contigo, conocerás  las cosas que ella sabe hacer.

Mi madre le replico…Oye que cosas le dices a nuestro hijo.

Y mi padre dijo… No te preocupes esposa mía tu sabes bien como disfrutas y haces disfrutar. Espera hijo, una de estas noches antes de irnos hacemos un trio con tu madre y te darás cuenta que lo que te digo es verdad.

En la noche los oí hablar. Papá le decía a mi mamá que no había nada de malo en lo habíamos hecho. Ella admitió que le había excitado mucho aquella situación y que si era necesario vivir aquel tipo de experiencias era probable que no le costase mucho esfuerzo acostumbrarse a ellas.

Y el día antes de regresar del viaje fuimos a la discoteca, por primera vez bebí un tequila y esto me hizo sentir más valor a la hora que fuimos a la habitación, los tres nos desnudamos y pude ver por primera vez el hermoso cuerpo totalmente desnudo de mi madre.

Los tres nos juntamos, mi madre en la mitad, mi padre en la espalda y yo de frente y mientas mi padre acariciaba los senos de mii madre, ella y yo disfrutábamos de un beso con lengua que fue elevando nuestra excitación y pronto sentí mi verga acomodándose en medio de las piernas de ella estrellándose con la verga de mi padre que venía desde atrás.

Los besos y las caricias nos llevaron con una excitación enorme a la cama. Mi padre me pidió me acostara boca arriba, luego mi madre se subió sobre mi pero antes acomodó mi verga en su concha y mi padre se situó detrás de ella y poco a poco le penetro el culo lo cual me hizo sentir mucha presión en mi verga. Cuando estuvimos dispuestos comenzamos a movernos y mi madre a gemir mas y mas como una gata en celo como dijo mi padre, pidiendo mas y mas verga y en ese momento confirme lo que había dicho mi padre que ella era maravillosa en la cama y efectivamente sus gemidos y palabras me excitaron tanto que explote antes que mi padre.

Al terminar, los tres quedamos extenuados, y me fui a mi habitación a dormir hasta el día siguiente, porque ya regresábamos a casa.

Pero ahora estando en casa, como aún estoy en vacaciones varias veces he llegado hasta dónde está mi madre haciendo algo, me pego a su espalda y comienzo a magrearla hasta excitarla y la llevo a mi habitación para follar en todas las posiciones que ella me ha enseñado y de premio le lleno su concha con mi semen que ella disfruta esparciéndolo por todo su sexo. Hasta aquí van las cosas.