Putito prematuro (hachi)
cap.8 .
Cuando comprendí la sensación final de masturbarme termino volviéndose un habito antes de dormir, me la jalaba y cuando me venia me tapaba la cabeza con el prepucio reteniendo las gotitas de semen que apenas era suficiente para mojar la glande y luego se me encogía cosa que al principio me daba risa porque era lo que veía cuando Carlos, Antonio y Manuel les sucedía cuando eyaculaban. En clases me daban erecciones repentinas al igual cuando iba en el bus por suerte usaba bolso de tipo mensajero y me lo ponía al frente para evitar roces accidentales. Cuando llegaba a la casa buscaba de manosear a mi madre para que me la chupara, pero desde la vez que probó una de mis primeras corridas no me la chupo otra vez y Andyuska se estaba quedando en casa de sus abuelos. Un día al llegar del liceo tenia altas ganas y cuando mi mama se fue nuevamente a atender el kiosco me la iba a jalar un poco mientras me vacilaba una buena porno pero antes buscaría uno de los juguetes de mi madre en esa que entro a su cuarto vi a mi hermanita durmiendo toda inocente, al verla toda abierta con una camisita y en ropa interior termino cambiando mis planes iniciales así que me le acerque y le di un besito en su boquita abierta luego me saque la verga y la metí en su boca después de unos segundos se despertó, al mirarme algo molesta por despertarla le hice “sshh…, no le digas a mamá”, como no vi signos de negarse continué lo que hacia y ella lo empecé a chupar un poco “eso Yesica, veo que te gusta” y sonríe con mi verga en su boca pero en la posición que estábamos era algo incomodo por lo cual la puse en cuatro y me senté frente de ella enseguida me la volvió a chupar (que suerte la mía tener una hermanita así), ya que lo estaba haciendo bien para su edad empecé a acaríciale sus nalguitas y pasar toda mi mano por toda su raja luego empecé a meterle un dedo hasta que tocaba si himen tras unos minutos ahí me dio por meterle el dedo en el culo y con el dedo ya lubricado gracias a su delicada vagina le entra mi dedo muy fácil y fue apretarme el dedo con el culo me pareció algo raro al intentar con dos dedos ahí si se quejó por lo cual continué con uno pero aun así era extraño esa actitud porque aún no había hecho suficientes cosas con ella para que estuviera acostumbrada a recibir cosas por el culo, minutos después mamándomela me dice “te sale algo amargo de aquí” y le digo “un momento esto será rápido, cuando te diga lo chupas rápido y duro” y empiezo a jalármela rápido no paso ni el minuto cuando ya le estaba diciendo “vamos, chupa y traga” toda obediente me la empezó a chupar “uy…, que rico anda trágatelo” y arrugo su carita cuando saboreo mi lechita “sabe feo”, -“pero me haces feliz porque no lo escupiste” le doy un besito en la mejilla y la dejo allí. Cuando Sali de la habitación vi a mi madre sentada esperándome, me quedé paralizado porque era obvio que me había visto y me dice “ven siéntate” una vez sentado al lado de ella.
– “quizás te preguntes por qué no te detuve ahorita, ya sabía que lo terminarías haciendo con tu hermana porque así te he criado mas no quería que se lo hicieras tan pequeña así que te propondré esto, te dejare tener sexo oral mas no tienes permitido es penetrarla, si llego a enterarme de que se lo has hecho te daré un verdadero castigo que no te gustara para nada”
Tal advertencia me asusto un poco y terminé accediendo, aunque era un permiso bastante extraño porque podía seguir cometiendo incesto, pero sin coito desde ese día las veces que estaba sola con mi hermana y yo no tenía tareas nos comíamos nuestro genital, adoraba el dulce sabor de su tierno coño muy diferente al sabor neutro de Andyuska y al fuerte sabor de mi madre, aunque el de mamá variaba mucho (una vez sentí que lamía un tubo metálico). Pasa el tiempo y mi hermana se fue acostumbrando al sabor de mi pene, un día antes de mi cumpleaños mientras me besuqueaba con Andyuska y le pregunto: “¿cuándo me la vas a dar?” esquivándome la mirada dice “es que eso duele”, – “eso solo es al principio hasta mi madre me lo dijo, anda regálamelo para mi cumpleaños” pero no respondió y terminamos hablando de otras cosas. El día de mi cumpleaños tenía intención de buscar un momento a solas con ella pero a la final no tuvimos un lugar ni tiempo, luego de un par de semanas me la encontré en la tarde que venia de comprar algo en la bodega y nos detuvimos unos minutos a hablar y de un momento a otro le menciono “no me regalaste nada en mi cumpleaños”, “no fue culpa mía tampoco lo iba a hacer frente a todos” me dice eso entre risitas, -“¿y ahora?, mi mamá está atendiendo el negocio y mi hermana está distraída en lo suyo” se queda unos segundos callada hasta que me dice “ahorita voy a tu casa”. Me fui rápido y busqué unos de los rotores de mamá, me lavé la verga y luego se llegó así que la hice pasar de una a mi cuarto y comenzamos a besarnos desinhibidamente el estar a solas no nos importaba nada luego se arrodilla e inicia una mamada “ay, tan rico como siempre” pero al minuto la detengo porque no me quería venir rápido y luego se me quitaran las ganas de continuar así que hago que se quite la ropa y acueste abriéndose las piernas apenas le veo su rosado coño me tiro sobre el a devorarlo, Andyuska jadeaba fuerte al verla como estaba encendí el rotor y lo metí sin avisar. “ay…, ¿qué es lo metiste…?” mientras se retorcía, “sácalo que se siente raro, mi cuerpo hormiguea” ya estaba gimiendo algo fuerte y le puse la almohada en la cara para silenciarla un poco, de repente veo que mi hermana abrió la puerta y me ve lo que hacía, le hice señas de que no hiciera ruido y le hacía con la mano que se fuera pero como vi que no me hacia caso le dije que se escondiera sin hacer ruido enseguida cerro con cuidado la puerta y se escondió en el cesto de ropa mientras Andyuska seguía ahogándose en el placer de su vibrante coño y retorciéndose como a babosa que le cae sal. Tras admirarla un buen rato le retiro el rotor y la pongo en cuatro ya con mi verga cerca de su coño por un momento pensaba como hacerlo si lento, rápido y que tanto gritaría por lo que hice que pusiera su cara contra la almohada y comencé a meterlo muy despacio al mismo tiempo yo exhalaba al ritmo que iba metiendo sintiendo como me apretaba su mojado coño, en el momento que toco su himen me dice con voz temblorosa “dejémoslo así, por favor”, en cuanto hago presión su espalda se arquea hacia arriba ya sin poder aguantar le doy una fuerte embestida poniendo todo mi peso sobre ella la empujo pegando su cara contra la almohada y con eso poder apagar su grito “¡ayayay…!, sácalo que me duele” era lo que le escuchaba a través de la almohada y había comenzado a llorar me asuste porque no era mi intensión pero sentir con toda mi verga como me pulsaba sus paredes vaginales y lo caliente que la tenía no quería sacarla mientras aguantaba mis ganas de moverme busque de consolarla sobando su cabeza y besándole el cuello a la vez le decía cosas lindas, cuando por fin se calmó le aviso que comenzaría a moverme. Minuto después de haber reanudado me vine dentro y me quede sobre ella sin sacarlo “¡perdón, no creí que fuera a terminar tan rápido!” no quería que acabara la cosa tan deprisa, en esa tomo nuevamente el rotor y se lo pego en el clítoris provocando que suele un pequeño gemido, como vi que le agradaba y mi pene se endureció por la vibración más como ella se movía por dentro y por fuera se lo deje un rato para que olvidara algo del dolor y de una aproveche de moverme poco a poco minutos después solo gemía así que puse el rotor en su mano por si quería mas entretanto yo la estaba machacando con un ritmo normal escuchando los chapoteos de su coñito a veces le sonaba como si soltara pedos (gasecitos). “¿aun te duele?”, con una voz suave casi susurrante dice “poco, pero no pares” quería darle mas fuerte pero no quería hacerla llorar otra vez sin contar que también quería verla retorcerse de placer mas estaba consciente que me vendría primero que ella así que la puse en cuatro y le dije que se pegara el vibrador, ya sintiendo la vibración le empecé a dar mas fuerte y ella buscando de no gemir fuerte se tapa la boca (uf que rica escena el cogerme una niña de casi 10 mientras mi hermana de 4 me observaba y yo con apenas 13 cumplidos hace poco). Y nuevamente se lo suelto dentro, una vez que me separo observo su coño lleno algo de sangre (por suerte no boto mucha) luego que recupero el aliento la ayude a ir al baño a que se lavara luego le pase su ropa mi hermana se había ido al cuarto de mamá y pasado unos minutos nos despedimos con un besito “nos vemos en la noche”.
Por suerte la mancha de la sabana era pequeña así que esperaba que mi madre no la notara luego mi hermana me pregunto que se veía doloroso y le recordé que se lo había dicho sobre la primera vez. Cuando anocheció todo transcurrió normal y después que nos quedamos los dos solo charlamos de lo que hicimos y con un golpecito en el hombro me dijo:
– “fuiste malo aun me duele, te dije que con cuidado y en un do por tres me habías atravesado”
– “si eres exagerada, cierto que fui brusco y me asusté cuando empezaste a llorar, no sabía qué hacer si continuabas llorando y decidías salir así”
– “es que era un dolor bastante agudo y también estaba asustada, pero luego sentía un cosquilleo y esa osita que vibraba se sentía delicioso todo cosquilleaba haciendo que me olvidara del dolor”
Continuamos hablando un rato del tema hasta que nuestros amigos empezaron a llegar nuevamente, al pasar los días tenia ganas de volver a darle pero no teníamos espacio ni tiempo y tampoco quería que la gente comenzara a chismosear si la veían entrando mucho a mi casa o si no las semanas que se quedaba en casa de su abuela luego empezó a pasar solo los fin de semana por acá, quería garchar y no podía tirarme a mi hermana aunque sus mamaditas iban mejorando de apoco eran un buen desahogo pero insuficiente sin contar que mi madre tampoco me dejaba hacerle nada, un sábado pro la tarde me bañaba un rato en la playa cuando veo que venía Andyuska a bañarse con su hermano por un rato nos pusimos a jugar y luego de como 2 horas su hermano se fue mientras nosotros continuamos en el agua. Nos dábamos besos bajo el agua para que no nos miraran minutos después le dije para hacerlo rápido entre las rocas así que fuimos nadando por la orilla cuando estábamos cerca salimos y nos escondimos, luego veo como Andyuska se apoya de la roca y con una mano se hace a un lado la parte baja de su traje de baño, su coñito ligeramente abierto me llamaba en esa me arrodillo y comienzo a meterle lengua poco después dice “métemelo que no tenemos tiempo” y sacándomela rápido se lo inserto hasta el fondo y ella comienza a moverse contra mi “ay si vamos dale rápido que tenía ganas de hace rato” luego como a los 3 minutos de darle me estaba derritiendo dentro de ella “¿ya? Tan rápido”
– “tú lo querías rápido”
– “pero esto fue demasiado”
– “para mí también fue demasiado al ritmo que iba”
Ella se veía deseosa de mas y se iba a poner a mamar, pero con solo tocármela se había puesto dura otra vez “por lo menos la recuperación también fue rápida”, esta vez me abraza con sus piernas y la vuelvo a penetrar una y otra vez mientras ella me sonreía jadeante pero el encanto acabo cuando escuchamos a lo lejos que su hermano la llamaba así que me apure hasta correrme empujando hasta el fondo, al bajarse me da una pequeña mamada limpiando sus jugos de mi pene y se va corriendo, me quede un rato y luego salí. Ese lugar se convirtió en nuestra zona sexual de los cuales cada fin de semana lo hacíamos, en las vacaciones no la vi porque se había ido de viaje y en septiembre mi hermana por fin cumple los 5 luego las clases vuelven a iniciar y en diciembre Carlos me destapo nuevamente ya estaba olvidando esa sensación pero en un solo día lo recordé y lo desee, en Enero mudaron a Yesica a mi habitación y cambiaron mi cama por una litera, mi relación con mi hermana seguía igual en ocasiones le comía el coño o la ponía a mamar pero eso cambiaria en unos meses.
Un día cuando regresaba del liceo y entro a mi cuarto y veo a mi mamá con Yesica en sus piernas mientras mama mantenía sus piernitas abierta mostrándome su tierna conchita y con un pequeño vibrador en su culito y ambas me dicen “feliz cumpleaños”, me quedo algo atónito por ese maravilloso recibimiento.
– “¿que se te olvido que cumplías hoy?”
– “me acordé ayer pero hoy ni pendiente”
– “pues aquí tienes tu regalo, ya le preparé su culito”
Sin preguntar mucho me baje los pantalones y mama le saca el consolador anal, por el rostro que me mostraba Yesica tenía bastante tiempo con eso dentro porque se veía deseosa de verga “métemelo hermanito” con esa dulce voz imposible negarse. Le toco su culito y ya estaba dilatadito y bien lubricado así que le puse mi verga en todo su culo y se la fui metiendo lento hasta tocar fondo “¡ja…! Que apretado” (con voz temblorosa) mi mama nuevamente había hecho un excelente trabajo con el culito de mi hermanita, Yesica solo me mostraba rostro de placer lo cual me excitaba en cuanto le daba mas fuerte solo jadeaba según la intensidad hasta que me corro, pero como aún seguía erecto se lo volví a meter mientras me besaba con mi madre y su lengua experta me violaba la boca, le chupaba la lengua y mordía suave sus labios luego continúe con el mete y saca a mi hermanita que jadeaba como toda una putita luego de repente me apreto fuerte y comenzó a temblar esa tembladera y como me apreto me hiso acabar “ah… si… como te amo Yesica” y le di un besito en la boca mientras jadeaba. “se vinieron al mismo tiempo” dice mi madre, cuando me separo y me limpio mi madre acuesta a la pobre de Yesica jadeando como perrita.
– “como te quiero mami, eres la mejor”
– “sabía que te gustaría así que de aquí en adelante te la puedes coger mientras ella quiera y con cautela por favor no te quiero ver ni enterarme de que andaba cogiéndotela por ahí que ya no eres un niño pequeño, ah y no le quites su virginidad todavía espérate a que crezca un poco más”
Cuando terminamos de hablar Yesica se había quedado dormida, mi madre antes de salir le limpio el culito y yo me fui a comer y luego hacer mi tarea, horas después que Yesica despertó me trato con normalidad casi como si no hubiese sucedido nada, en cuanto llego la hora de dormir ella me esperaba en mi cama, al principio no tenía ganas de hacerle nada pero recordar que mi madre me dio luz verde se me antojo darle antes de dormir. Cuando entra a despedirnos me mira como que (¿enserio otra vez?), “¿Por qué me miras así?, ella fue la que me esperaba en mi cama” continua a darle un besito de buenas noches a Yesica y antes de irse me susurra “ya sabes lo que te dije y otra cosa te deje algo en el cajón” y se va entretanto reviso el cajón y veo 2 de sus juguetes obviamente para usarlos en Yesica en fin le pregunto “¿quieres jugar?” me hace señas de que quiere y levanta su culo como si ella fuera un gusano así que prosigo en untarle lubricante y le voy metiendo suave el consolador pero le entró como si nada por lo visto mi madre ya tenía un tiempo entrenándole su ano y luego le metí un rotor en su coñito provocándole risitas, en esa escuchamos los gemidos de puta de mama entretanto ellos seguían cogiendo como si vivieran solo yo me senté frente de Yesica para que comenzara a mamarla ya lo hacia bastante bien. minutos después me dice “ya se te puso amargo” y continua chupando luego de unos minutos le digo “me voy a venir” y comienza a metérselo hasta la garganta en esa me corro lo cual la hace toser, cuando por fin se calma me la vuelve a chupar dejándomela limpia y nuevamente erecta así que la pongo de perrito en cuanto le saco el consolador le meto mi verga y le empiezo a dar como a una cualquiera mientras sus gemidos se ligaban con los de mi madre entretanto yo buscaba de no correrme pero era algo muy difícil su culito apretado y su suave piel lo hacia una misión imposible el correrse, luego de unos minutos le acabe otra vez ambos teníamos una respiración pesada nos tumbamos a un lado de la cama a tomar aire “eres la mejor hermanita del mundo”, “y tú el mejor hermano mayor” y nos terminamos quedando dormido.
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