Ración de leche de noche en la fiesta del pueblo
De noche sin ver…, pero sintiendo con el resto de sentidos.
A ver si no me eternizo. Venía a contar algunos sucedidos que se me quedaron grabados en la mente. Una vez que aprendí a chupar bien, mi hermano fue el receptor de mis chupadas, y yo la receptora de sus proteínas lácteas, jijiji.
El caso es que… Ahora ya no solo lamía su pene cuando ambos nos poníamos de acuerdo. Ahora me metía el pene en la boca hasta donde pudiese, más de medio miembro dentro de mi boca y garganta. Casi hasta tocar con mi nariz su cuerpo. No…, a eso no llegué, porque mi cabeza salía repelida hacia atrás. El caso es que él estaba en la gloria con semejantes aptitudes aprendidas en casa de mi amiga Sandra y su hermano.
Bueno: sucedido en el pueblo. Estaban en fiestas, hacía buen tiempo. Pueblo de los montes de Toledo, pasado Talavera. Pueblo de los padres de una tía…., pero que de vez en cuando nos invitan a ir, y allí vamos. Mi hermano está caliente durante el día y ya me lo hace ver. ¿Cómo nos escabullimos para ordeñar la polla de mi hermano y alimentarme? Bueno…. A la 1.30, la hora de las cervezas en el bar, todo el mundo va…., menos nosotros, que iremos después, jijiji. Antes de tomarme una cocacola en el bar, me voy a alimentar con la leche de mi hermano, que ya está deseando dármela. Solos en la casa, y controlando que nadie vuelva, se baja los pantalones, y empieza a crecer su polla. La toco y…, como si la pusiesen una corriente eléctrica, sube, crece, se ensancha… En menos de un minuto, el glande está hinchado y brillante, lo que indica que me lo puedo comer ya, jejeje. Adentro, a mi boca!!! Succión, lametón… y mi hermano empieza a mover su cadera, me la mete por la boca empujando. Qué sensación tener ese cacho de carne deslizándose por mi boca. Sí…., morbillo. Llegado el momento, me avisa y empieza a palpitar esa polla escupiendo su ración de leche de hombre, que trago con delectación. Lametones en su polla para quitar el exceso de saliva y de semen, y a subirse la ropa. Nos vamos al bareto del pueblo, a por mi cocacola y su cerveza.
Esa tarde…, a la hora de la siesta…… tras una cena calurosa………. Vaya…., todos están dormitando, unos en su habitación, otros ante la aburrida tele…. Mejor echémonos la siesta para aguantar la noche, que habrá tanto ruido en la plaza del pueblo que mejor disfrutar de la fiesta que no poder dormir, jeje…., pero para echarse la siesta, mi hermano dice que mejor que una mamada no hay nada igual, jajaja. Vaya…., tiene más semen en sus huevos…. Vaaaale, no es la primera vez que mi hermano se pajea varias veces al día. Él solo…, me lo ha confesado…., y pajeándole yo también un par de veces el mismo día, y siempre parece que sus huevos tienen leche que expulsar. Entonces…, habían pasado solo un par de horas, y de nuevo quiere que le chupe la polla. Vale. En silencio en la habitación más alejada y con escapatoria por si alguien viniera, allí vamos de nuevo. Esta vez solo se saca la polla, sin bajarse la ropa. Sí…., se la saca ya morcillona, y se endurece al momento. Hala, a darle a la boca, mamada va, mamada viene… Tampoco tardo mucho en recibir mi premio lácteo, que también es abundante. No sé…, pero me imagino que a esas edades, los testículos están a pleno rendimiento… Jajaja, tendría que montar una Central Lechera para comercializar su leche, jiji. Pues eso, me avisa, escupe su pene, y yo trago. Lamida, limpieza y todos a dormir para aguantar la noche.
Y la noche……. La tercera chupada, la tercera eyaculación en mi boca. Hasta entonces, nunca había recibido tres corridas en mi boca. Ese día sí que iría bien alimentada, jajaja.
Es de noche, ya hemos picoteado algo…., la orquesta de pueblo aporrea que se oye en todas partes…, pasan de las 12 de la noche, y yo no me esperaba que tomara otra ración de leche. Pero mi hermano…, parece que se excita sexualmente por alguna razón, porque me dice que si le miro la entrepierna, tiene la polla como un volcán. Vaya…., no hay mucha luz para fijarme bien, pero sí tiene la polla cruzada y abultando en su pantalón. Suerte que no hay mucha luz, para no llamar la atención. Me dice mi hermano que si vamos a la carretera que llega al pueblo, a dar un paseo….. y vamos. Está la noche preciosa, que se ve la Vía Láctea (en esos pueblos tan alejados de la gran ciudad, se ven muchas estrellas)…
Paseando a oscuras, un kilómetro del pueblo…, se ve a lo lejos las luces…, pero no vemos ni torta donde pisamos. Eso sí, se ve un cielo espectacular. Y es allí donde mi hermano me ofrece la última ración de leche para mi. La tercera del día. Jejejeje. ¿En la carretera? Siiiiiiii, pero está todo a oscuras. Salvo que viniera un coche y nos enchufase con sus faros…. Eso se arregla apartándose unos metros del asfalto en un camino de tierra. Pero no pasó ningún coche. Todo oscuro. Se baja toda la ropa…, y lo noto al rozar sus piernas y tantear su cuerpo tocando su culo. Sí…, no es como en casa: se ha bajado shorts y gayumbos. Sigo tanteando y…., un palo caliente y duro se encuentra en el trayecto de mi mano. Su pene ya está dispuesto. Lo agarro.
No veo nada…., pero el resto de sentidos se me agudizan. Huelo su polla, ese olor tan penetrante, que tanto me gusta, que tanto morbo me da. Sin ver nada, parece que huele más. Así que, ese palo duro, suave y caliente me lo paso por toda la cara, frotando su glande con mi nariz. Mmmmmm. Se oye su respiración acelerada, huele su polla a maravilla, el tacto con mi mano y con mi cara me excita……, todos los sentidos menos la vista los tengo al máximo. Y una cosa que nunca hacía… Como no veía, palpo más de lo normal. Cuando por fin me meto el glande en la boca, agarro a mi hermano de sus nalgas. Vaya….me gusta acariciar su culo…
Y empiezo a mamar. Chup, chup, chup, el sonido acuoso de mi boca, el jadeo de mi hermano, la oscuridad, el tacto de sus piernas y sus glúteos……. Mmmmm, hasta lo más profundo…., ahora es mi hermano quien sujeta mi cabeza con sus manos y me penetra en la garganta a base de bien. Chup chup chup. “Qué bueno”, va diciendo. No vemos nada, pero sentimos todo lo demás. “Cuidado, Sonia, que van mis chorros ahora”. Y…, en la ceguera que no vemos, empiezo a notar líquido caliente. Pero…, vaya…., no todos los chorros entran en mi boca, pues tengo la barbilla húmeda y goteando. Sí……, me lo reconoce él con grandes jadeos. Tras 2 corridas durante el día, la de la noche es corrida a lo bestia. Trago, y se me escapa mucha leche. Acaba. Mmmmm, tengo la mano empapada en semen, y me sale por la boca. Con el dedo intento limpiarme la barbilla y beberme los borbotones que tengo ahí. Con la otra mano termino de acariciar el culo que no veo, pero que sí siento….., y me levanto. “Vaya….”, digo, “esta vez ha habido mucha leche”…….., me gustaría verme en un espejo antes, no vaya a ser… Efectivamente, volvemos a casa sin pasar por la fiesta, me miro, y me limpio algunos churretones que tenía en la ropa. Algún chorrazo de leche tenía en la ropa. Jajajaja, imagina si me presento así delante de la gente. A ver qué excusa tendría que poner.
Bueno…. Luego él tranquilito sentado en el bar, tomando sus cervezas…… Esa noche dormiría muy tranquilo… Yo me fui antes a la cama. Estaba cansada, y ya había recibido mi ración super de leche de hombre.
Rico como lo chupaba y además de imaginar que le tocabas el culo y podías meterle un dedo en el ano y hacerlo acabar con más fuerza
que ganas de tragar leche me dieron!