Reencuentro con mi tío, quien me hizo mujercita
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esto que sucedió fue cuando yo tenía 12 añitos.
Era una beba, que no sabía nada del sexo.
Yo tengo un tío, que llamaré Marlon, y yo era su sobrina preferida desde que tengo memoria, siempre los mejores regalos y a quien llevaba a pasear fue a mi, incluso me llevó fuera del país, eso si con su familia.
A mi también me gustaba el tío y cuando se iba de la casa cuando nos visitaba yo lloraba siendo una niñita de siete u ocho años.
Pasaron los años y nuestra relación fue creciendo con mi tío.
Para las vacaciones casi era costumbre que yo pasara algunas semanas con la familia de mi tío Marlon.
Cuando tenía doce años, yo desarrollé, mis muslos y caderas se engrosaron y mi bubis fueron creciendo y tenían forma de volcancitos, mis nalguitas ganaron volumen y me di cuenta que mi tío se interesaba más en mi, solo que ahora sexualmente, eso fui descubriendo.
Mi tío, no lo había dicho, es un hombre bastante atractivo y guapo, además de caballero, siempre dice cosas que te gustan, y yo estaba enamorada de él, era mi amor imposible o amor platónico.
En las vacaciones de ese año, como siempre me fui unas semanas a su casa, con mis primos y su esposa.
Esa noche, la mamá de la esposa de mi tío Marlon agonizaba y ella se fue a velarla.
Esa noche todos veiamos una peli de miedo en la sala y de pronto mis primos se quedaron dormidos y mi tío los despertó para que se fueran a dormir a sus habitaciones, me quedé sola con mi tío.
El me abrazó y me dijo que ya estaba creciendo y que me estaba poniendo toda una señorita.
Me preguntó si tenía novio o había ya tenido novio, le conteste que de momento no tenía.
Me dijo que terminaramos de ver la peli en su recamara, y yo acepté, yo estaba nerviosa, pues ya saben que estaba enamorada de él.
Nos metimos a la cama y yo tenía puesta una falda y una blusa de botones.
Cuando terminó la peli, me pidió casi rogándome que me quedara con él a dormir, pues no quería dormir solo, yo acepté gustosamente.
Yo estaba dormida, todo estaba casi a oscuras, cuando me despertó que una mano de mi tio me acariciaba mis bubis sobre mi blusa, pues ni me había dado tiempo de ponerme la pijama.
La mano de mi tío se metió en mi blusa y luego abajo de un top, no era brazier, y tocó mis pezoncitos, los acaricio suavemente, que rico sentir sus dedos sobre mis bubis.
Mis pezones se erectaron y yo por primera vez sentí lo que es mojarse, mi panochita se fue humedeciendo y me estaba excitando.
Yo no abrí los ojos, me hice la dormida.
Entonces mi tío me fue desabotonando toda mi blusa, hasta abrirla.
Luego subió mi top, y ahora tenía desnudo mi torso.
El se movió y prendió la luz de su lampara, quería verme mis bubis.
Recuerdo que sentí su aliento cerca de mi rostro, luego fue bajando y le dio unos besitos a mis bubis.
Eso si me hizo abrir los ojos, ví a mi tio y le dije -qué me estas haciendo tío?-, él contestó -nada cariño!, solo quería ver lo linda que te estas poniendo!-, luego pregunto -te está molestando lo que te estoy haciendo?-, y yo inocentemente dije -no tío, me gusta lo que me haces-.
Esas palabras encendieron a mi tío y le daba permiso a seguir.
El bajó a mis senitos y los mamó, -oohhh que rico sentía yo sus labios chupando mis pezoncitos-, me hizo ver estrellitas.
Mis pezones se pusieron tan duros que pensé que estallarían.
Mi tio no solo mamó mis bubis, sino mi cuello, mi estomago y mis costados.
No aguanté y tuve que gemir de tanto placer.
Luego mi tío me besó en la boca, fue mi primer beso, vi como su lengua se movía en mi boca e imité lo que me hacía, yo repetía cada movimiento de su boca y de su lengua, nos dimos el mejor beso hasta hoy.
Mi panocha se estaba mojando mucho, sentí acuosa mi vagina.
Mi tío me fue quitando la blusa, el top, luego mi falda y me dejó en braguitas, él hizo lo mismo y se quedó en calzoncillos, yo podía ver el gran paquete que se le hacia, tenía su pene enorme para mi.
Con su boca recorrió mi cuerpo e hizo pausas en mi bubis, luego sobre mi cuquita, cubierta por mi delgada braguita.
Con su lengua y su nariz empujaba mi panochita y mi clitoris (en ese momento no sabía su nombre), yo lo tomé de los cabellos y me quejaba de placer, parecía que la habitación giraba conmigo; luego sentí que corrió mi braguita a un lado y pude sentir lo húmedo y caliente de su lengua sobre mi rajita, alli no pude más y creo que me corrí, casi lloré en mi primer orgasmo de mi vida, mientras mi tío no se detenía y me daba una chupada de cuquita que recordaré toda la vida, mi orgasmo asi tardó mucho tiempo y sentí que me desmayaría.
Luego, me quitó las braguitas, me dejó en ese momento desnuda, luego de saciarse de mi cuquita, el tío me dio vuelta, quedando mis nalguitas hacia arriba, el les dio mordidas suaves y luego me lamió la carne de ellas.
Después me abrió las piernas y se metió entre ellas, me puso una almohada por debajo de mi vientre, eso lograba que mis nalgas se empinaran y luego se puso a chuparme la rajita de nuevo, me puse a dar pequeños gritos de gozo, y sentí como su lengua empezó a subir y abriendo mis nalgas con sus manos me lamió y chupó mi ojete de culito, nunca pensé que tal cosa era tan placentera, me excitó como su lengua me tocaba mi ano repetidas veces, me mojaba la cuquita de nuevo y de nuevo ese sentimiento que me sofocaba, era pura excitación.
Era cuestión de tiempo que me llevara a otra corrida.
Eso sucedió cuando sentí sus dedos jugar con mi rajita mientras su lengua devoraba mi culito, en ese momento de nuevo casi lloré del climax que sentía.
-estas mojadisima!!- me dijo mi tío mientras se iba subiendo sobre mi, estando yo aún boca abajo.
Sentí que su duro pene tocaba mis nalgas y lo pasaba en medio varias veces, yo en ese momento, no sabía que era ser penetrada, pero quería que me lo hiciera mi tío Marlon.
Mi tío usando una de sus manos guió su pene hacia mi rajita, pude sentir bien cuando mi himen cedió, el dolor me lo avisó.
Luego su pene se fue introduciendo lentamente en mi vagina, mientras el me daba besos en el cuello y en la espalda, me decía que yo era su princesa y que me amaba mucho, que quería hacerme esto desde hace tiempo, pero que me esperó hasta que fuera una señorita.
La introducción a pesar de mis dos corridas, de la lubricación y de la dilatación de mi vagina, me dolió, pero era una mezcla de placer con dolor, primera en mi vida.
Sentí a un invasor en mi cuerpo, un pedazo de carne dura que ingresaba en mi rajita, luego mi tío se empezó a mover suavemente, empujando su pene hacia adentro y luego sacándolo.
El dolor iba mermando poco a poco, hasta solo quedar el placer.
Mi tío al ver que mi cuerpo se iba relajando, aceleró sus movimientos de su pene dentro de mi y ahora la cama se movía hasta rechinar, su pene ya entraba rapido dentro de mi.
También la excitación me fue embargando y finalmente me llevó a un orgasmo más.
Esta vez lo oí gritar y gemir, me sacó su pene y me esparció su lechita en mis nalgas y mis piernas.
Mi tío se acostó a mi lado, nuestras respiraciones todavía estaban elevadas, por momentos tosíamos.
Luego, me abrazó y me dijo que me amaba y que siempre había soñado con ser el primero en mi vida.
Nos besamos un rato y le dije que yo también estaba contenta.
Cuando desperté en la mañana, mi tío me había llevado a mi cama, pero me faltaba mi braguita, luego me diría mi tío que tuvo que lavarla pues tenía algunas gotitas de sangre, que no me preocupara que eso era normal.
Mientras no estuvo la esposa de mi tío, él me llevaba con el pretexto de ir a comprar helados o refrescos para todos, a un lugar solitario y me pedía que me subiera encima de él, asi podía chuparme mis bubis y luego se sacaba el pene y me pedía que me sentara sobre él, me penetraba y me cogía por varios minutos hasta que me hacía llegar aun orgasmo, aveces el no se corría y en otras si, incluso se corrió dentro de mi y cuando llegué a la casa corri al baño y pude ver como me salían gotitas de leche del tío de mi rajita.
Mis vacaciones se volvieron relaciones sexuales con el tío.
El me quería tener una o dos veces al día.
Hasta que llegó su esposa, al parecer había fallecido su madre.
Aún en el velorio mi tío dijo que iría a comprar flores y a encargar la lapida y me llevo con él.
Pude ver como entramos a un motel, me llevó a una habitación muy decorada y nos desnudamos y me besó todo el cuerpo como la primera vez, luego me penetró de varias posiciones, pude oir que mi tío se corrió dos veces en esa ocasión y me llenó mi cuquita de muchisima leche.
Luego nos vestimos y regresamos al velorio.
Mis vacaciones de mis trece años fueron parecidas, solo que mi cuerpo ya había desarrollado más, mis senos un poco más grandes y mi cuerpo había cambiado.
Mi tío Marlon me decía que estaba enamorado de mi.
Ahora me llevó a un departamento de uno de sus amigos y alli teníamos mucho sexo.
Yo estaba viviendo un sueño sexual, pues quedaba muy satisfecha de todo lo que me hacía mi tío, ahora me ponía a mamarsela hasta que lo hacía venir y me pedía, si lo quería un poco, a tomarme su leche, al principio no me gustaba hacerlo, pero para complacerlo, me la bebía toda.
Cierto día, oí a mi madre comentar que mi tío, por cuestiones de trabajo, se mudaría lejos de donde vivimos, lo llamé por telefono y me dijo que era cierto, pero que sería temporal.
Lo temporal duró casi seis años.
Hasta que no reencontramos.
CONTINUARA
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