Rescaté a una joven inmigrante y sus 4 hijos (1)
Los salvé del temporal y me demostraron ser muy agradecidos. .
El día del temporal tocaron el timbre de mi parcela, me extraño ya que nunca suena, vivo solo en el campo y entre casas muy lejanas por lo que generalmente nadie llama y ese día era raro ver a alguien en las calles por el mal clima.
Sali a atender y ahí los vi, era una joven madre con 2 niñas, un niño a su lado, y un bebe en los brazos, estaban todos mojados y llorando, me decía que necesitaban ayuda lo que sea, un poco de comida y algo de abrigo, que tenían mucho frio y estaban todas mojadas. Llorando me comento que habían sido expulsadas a la calle con sus 3 niños y su bebe, porque se había acabado el trabajo y ya no la podían tener alojando si no pagaba. Terminaron arrendando su pieza a quien la pudo pagar. Y ya llevaban caminando y durmiendo algunas semanas en las calles en pleno invierno, que es viuda y que a su marido lo habían matado en la cárcel, y que no sabía qué hacer.
Se tiro al piso llorando, me dijo que si no las ayudaba se tirarían al rio que queda a medio km de acá, pues ya llevaban varios días sin comer y ya no aguantaban más. Ella pensaba que eso sería mejor para sus hijos, que ya no tendrían tanta hambre y frio, la muerte era mejor que el infierno que estaban viviendo, pero se le ocurrió llamar a la última casa que estaba camino al rio, justamente esa es la mía.
Ella estaba aún arrodillada en el piso mojado y me acerque a ella como si fuera a consolarla, pero sin agacharme a su altura la abrace y le fui acercando mi cadera a su cabeza hasta que le junte mi paquete con su cara, ella noto mi miembro duro de inmediato, y se la pase por la cara moviéndome de lado a lado, presionando con su rostro y mi pene a través del pantalón atorándose con su nariz en cada pasada, se me había ocurrido esa muestra para saber que tan enserio hablaba, y me dijo, que si la ayudaba, podía hacer lo que yo quisiera y cuando quisiera.
Se estaba poniendo a llover más fuerte y más fuerte, era un temporal. Le dije que no me interesaba tanto solo ella, que quería a los 5 y que cada uno se debía portar bien. Ella ni se inmuto, y me dijo que, si le daba techo, abrigo y comida, los 5 harían lo que yo pidiera, me lo suplico llorando, me que dijo que solo querían vivir, pero ya no podían, si yo las rescataba sus vidas serian mías, me lo agradecerían por siempre…
Los invite a entrar.
El paisaje afuera era aterrador un temporal apocalíptico, lo habían anunciado en las noticias, iba a estar así 2 semanas seguidas por el efecto del Niño. Mientras que dentro de mi casa estaba todo muy tranquilo, limpio y ordenado, muy cálido por el aire acondicionado, hasta con música ambiente y todo perfumado. Afortunadamente tengo buena situación económica y mi casa es muy hermosa, aunque pequeña está bien equipada, pero tiene un solo dormitorio ya que vivo solo y no tenía plan de cambiar eso.
Los dejé realmente sorprendidos, me contaron que nunca habían estado en un lugar así, como de las películas, maravillados y todo no dejaban de llorar.
La madre se me acerco, me dijo que se llamaba Angelica que tenía 24 años y como podía ver ella había sido madre joven, sus hijos eran Ana de nueve, Marcos de siete, Cata de cuatro y el conchito, Tomas de apenas un añito. Y como había dicho afuera en el portón, si les daba techo y comida ella estaría más que agradecida y haría todo lo que le pidiera, se detuvo y se corrigió ella misma, que «los 5 harían todo lo que yo quisiera», que era eso o tirarse al rio, lo decía mientras sollozaba con la cara llena de lágrimas.
Espero un poco y dijo que no era necesario buena comida ni nada, sino lo que tuviera bastaba, igual eran 5 con él bebe, ya que por la desnutrición su leche no estaba siendo suficiente y la comida estaba muy cara, todos lo sabían. Además, agrego, que para dormir solo necesitaba un lugar seco, cualquier rincón servía, que ella sabía que la vida estaba muy cara y que sería muy agradecida y bla bla bla… Se veía que eran muy humildes.
Le dije que me esperaran en la entrada y fui por toallas limpias, se las pasé y ellos se abrigaron en la entrada de mi casa mientras no paraban de llorar.
Saque una bolsa de papas fritas y unos vasos de jugo y se lo pase, ellas recibieron con mucha timidez y devoraron de inmediato, al ver eso puse a calentar comida.
Ellos realmente apestaban, estaban muy sucias y no la podía tener así en mi casa, andaban con mochila, pero dude que tuvieran ropa limpia, se lo pregunte y así fue, les dije que se dieran un baño antes de comer, y sin hablar mucho se dirigieron al baño, hacían lo que yo les pedía ni más ni menos, se les notaba muy tímidos.
Les dije que se bañaran con agua caliente y que se tomaran su tiempo, que no quería que salieran de ahí apestando, me hicieron caso y todos en filita se fueron al baño.
No podía creer lo que estaba viviendo, era un sueño, me sentía un rey en mi casa de soltero antisocial y no se me bajaba mi erección.
Fui por nuevas toallas y ropa, solo tenía mi ropa por lo que les lleve busos para que estuvieran cómodos, sabiendo que a los 5 les quedaría grande, pues yo media 1,75, y Angelica 1,60 aprox, para que contar como le quedarías a sus pequeños hijos y al bebe, pero estarían abrigados, limpios y secos.
Entre sin golpear al baño y ahí los vi, ya se estaban secando, se habían bañado rápido pero bien, se les notaba, eran otras personas, Angelica era una jovencita muy delgada y muy guapa, melena rubia y de buena figura en general, muy delgada cabe repetirlo, tenía sus pechos y trasero no exagerados pero bien puestos, con razón le habían sacado 3 hijos a su corta edad, ella estaba secando a Tomasito que era una bebe varón, gordito y de pelo castaño cortito, al lado Ana estaba secando el cuerpito de la Cata, Ana era preciosa tenía una gran sonrisa y ya se le veía con buen ánimo, motivada, pelo negro largo, delgada como todos ellos, recién le estaban empezando a crecer los pechos y tenía un trasero chiquito pero bien redondito y paradito, y su hermanita Cata con su melena corta castaño claro era como una muñeca un poco panzona y chachetona, pero con unos ojos enormes, era tierna por todos lados. Y más atrás estaba Marcos secándose como podía él solito, era muy pequeño y se veía muy tímido, un poco más moreno que sus hermanas y de pelo rapado, le faltaban unos dientes de frente y eso lo hacía verse muy tierno.
Me tenía fascinado la escena, me reincorpore y ellos siguieron secándose sin taparse ni nada y Angelica recibió la ropa que les traía, me pregunto si quería algo, yo le dije que terminaran y fueran a comer, se largó a llorar diciendo que sí y apurando a sus chicos.
Me fui y les prepare un tremendo banquete, no quería ser mezquino, ellas se mostraban tan amables y yo no quería ser menos.
Salieron rápido del baño como pudieron, todos desarmados y vestidos con mi ropa y me volaron los sesos, eran hermosos, como una pasarela de modelos, eran un sueño, limpios se veían muy bien, de revista, la capa de mugre que traían no dejaba ver quiénes eran y en realidad eran todos muy bellos y parecidos a su madre.
Pasen a comer, les dije, toman todo lo que hay en la mesa, y los niños corrieron afirmándose los busos para que no se les cayeran o se tropezasen.
Me acerque con un biberón a Angelica y ella aun llorando y agradeciendo me paso al bebe, le puse el biberón y lo deje en un sillón frente a la tv con monitos animados, ella dejándome atrás se fue corriendo agradeciéndome mientras se acercaba a sus hijas, también tenía hambre. Me acerque a ellas, y las acompañe a comer, se veían muy contentas, no paraban de comer, solo Ana hablaba mientras comía, para comentar que rico estaban las cosas y para agradecer, parecíamos una familia, pero no lo éramos.
Angelica me comentaba que trabajo al final de la temporada en la agricultura, pero que pagaban poco, solo le alcanzaba a ella para que comieran los 5 y no pudo ahorrar. Termino la temporada y perdió el empleo, el arriendo, y de ahí que han estado en la calle, como estaban sucias nadie las recibía, no había donde bañarse, y por lo mismo tampoco pudo vender su cuerpo, todo se le fue abajo, limosneaba solo para comer y no les alcanzaba, el frio aumento la gente dejo de salir y ya no había limosnas, se quedaron solos en las calles heladas y con el padre de familia muerto. Me contaba de a poco, mientras tragaba lo que comía y lloraba, tampoco tenían familia en Venezuela, que allá todo era un montón de tragedias, de películas.
Era una trágica historia, pero con eso y todo, el mundo la rechazo y no tenía nada más que hacer que morir de frio o de hambre, y había tomado la decisión de ir a suicidarse hasta cuando se le ocurrió llamar a la última casa.
Dijo que me veía como un ángel, que ella y sus 4 hijos estaban a mi voluntad, ya que les estaba salvando la vida, que por favor no las votara a la calle, que ellos se esforzaran al máximo, bla bla bla… y que me debían la vida. Y realmente era así, por mucha aislación que tenía mi casa se podía escuchar el viento del temporal, afuera estaba hasta peligroso, esta familia desnutrida no hubiese pasado la noche, no les hubiera sido necesario el rio, de hecho, recomiendan en la tv no salir a exponerse.
Comieron hasta llenarse y se les noto a todas sus caras de sueño, ya que después de comer y con lo cálido que estaba su hogar, no pudieron aguantar lo mal que habían vivido el último tiempo, estaban felices, pero ya el ánimo se les estaba acabando, hablaban entrecortado y se pausaban.
Se me acerco Angelica y me pregunto si quería que me la chupara o hacer otra cosa, o con alguien más, estaba muy caliente disfrutando de la situación, pero por más que quisiese hacer algo, estaban vencidos, llevaban días sin comer y durmiendo en la calle con frio, no podrían hacer mucho, ya los más pequeños se estaban durmiendo.
Cuando los invite a acostarse, les pase 2 cepillos de dientes, era los que tenía, para que se lavaran antes y todos lo hicieron hasta Angelica y luego se quedaron parados afuera del baño, no hacían nada que yo no les dijera, eran muy obedientes, se les notaba contentos y entusiasmados pero exhaustos, muy cansados.
Quedaron muy sorprendidos cuando les invite a dormir en mi cama, una espectacular cama King, con unas cubiertas esponjosas en una pieza con alfombras suavecitas. Estaban fascinados, les dije que se acostaran y ya cuando se empezaron a acomodar algunos ya estaban demasiado exhaustos que se iban quedando dormido en el camino, entregados a lo que sea, yo era su salvador, inclusive Angelica, acomodándose me dijo «has lo que quieras, somos tuyos, nos salvaste la vida» mientras se iba quedando dormida en contra de su voluntad, antes que se durmiera le dije que su puesto sería en una orilla, y sin decir más se hecho en una orilla y se quedó dormida.
Como tengo aire acondicionado en toda la casa estaba todo muy calentito por lo que entre el cansancio y la comodidad ninguno se tapó y quedaron todos acostados quedándose dormidos mientras veían la tv en sonido bajo.
Me acomode por el medio de la cama y se me acerco Ana, la más habladora a darme las gracias diciéndome que por eso me quería mucho “tío”, yo le corregí, le dije que no me dijera tío, que me dijera papi, ella me dijo que bueno, en eso me baje los pantalones y salió mi pene erecto, y empecé a jalármela mientras la miraba a sus ojos y le hablaba. Le dije que, si había visto algo así y me dijo que si, el de su antiguo papi y me dijo que ella sabía, que no era virgen, eso me voló los sesos, por eso a Angelica no le importo mi petición y acepto sin más. Me siguió hablando y me dijo que era un secreto y solo me lo contaba porque yo ahora era su papi y también era su héroe.
Le dije que se la chupara a su héroe, ella sabía lo que hacía, se agacho, se me acerco a la entrepierna, y se metió de una el glande en esa pequeña boquita y empezó a mamar, a subir y a bajar su cabeza, chupándome todo el grande y un poquito de mi tronco, se veía tan bonita, tan tierna, se le notaba que no tenía mucho ánimo, se le veía el cansancio, los otros ya estaban durmiendo y yo sabía que no le podía pedir mucho aunque Ana se estaba esforzando, se notaba que ella no quería decepcionar a su nuevo papi, por dentro movía su lengua con fuerza refregándome el frenillo, eso me tenía a full, imagino eso se lo debieron haber enseñado. Le acariciaba la cabeza mientras chupaba, era tan pequeñita, que me daba sensación de fragilidad, eso con las lamidas y lo cálido de su boquita me estaba llevando al cielo, tal cual esta Angelica me había traído a unos verdaderos angelitos.
Estaba en el goce máximo, pero aun así note que la mamada se fue poniendo cada vez más fome por su evidente cansancio, pero su boquita tan pequeña, su calidez y suavidad me calentaban y verme a mí el doble del tamaño de ella y con tremenda verga encajada en la boca de la niña me calentaba mucho, aunque la mamada fuese fome. Eres una buena niña le dije a Ana y noté la alegría en sus ojos casi dormidos por mi cumplido y su intento de sonreír con mi pene en su boca le hiso toser. Se la saque y dio un suspiro corto de cansancio. Le dije que se fuera a costar con sus hermanos.
Ahí se me ocurrió el bautizo, si estaba dispuesto a hacer lo que iba a hacer debía probarlo. Primero fui a la orilla donde estaba Angelica, la madre joven, tan desdichada y tan guapa, me daba una pena, me acerqué y sin despertarla le fui abriendo la boca con mi pene y se la fui metiendo, ella despertó al acto, pero cambio rápidamente su cara de susto a alegría y/o placer, abrió la boca más para dejarme entrar y comenzó a succionar y mover su lengua. Empecé a metérsela y sacársela de su delicada boca, el sonido de saliva me excitaba, sonaba mucho más la chupada porque la boca de Angelica era más grande, por lo que el chapoteo me aumentaba mi calentura, obvio al lado de sus hijos, que ellos ya a esta altura estaban durmiendo.
Le dije que quería que todos me la chuparan, como muestra de fidelidad, lo que ella respondió intentando mover la cabeza de arriba a abajo con mi pene atorado en su boca.
Era tan bonita Angelica y sus hijos era muy parecidos a ella, se veía tan tierna y desvergonzada, mamando una verga recién conocida mientras tenía a sus hijos al lado, hacia que mi excitación siguiese en aumento. Chupaba como una profesional, claramente sabia chuparla, le manoseaba las tetas mientras se comía mi verga, se la seguí metiendo mientras ella dormitaba, veía a los 5 e imaginando un millón de cosas, se la saqué de la boca me subí a la cama y avance al siguiente.
El siguiente era Tomas, Angelica obviamente siempre lo tenía cerca de ella, me dijo que por favor lo tratara con cariño, que aún era muy pequeño. Ella le abrió la boca con su dedo y me hiso un gesto para que me acercara. Me acerque y le puse mi verga en sus diminutos labios, estaba tan calentito y suavecito, nunca había hecho algo similar, Angelica con la mano le apretó las mejillas y su boca se abrió aún más y ahí metí mi verga, solo la puntita del glande, de inmediato sentí la succión, ¿será que Tomasito pensara que mi glande es un pezón?, sentí como el con su lengua empezó a lamerme, me masajeaba la puntita de la entrada de la uretra tan suavecito que me ponía loco, chupaba y lamia, chupaba y lamia, no tenía claro en realidad si estaba durmiendo o despierto, pero yo lo estaba disfrutando y él estaba chupándomela, chupando y lamiendo. Fui metiendo y sacando tan despacito y tan poquito para no hacerle daño, que Angelica, que al principio estaba atenta, empezó a cabecear y quedarse dormida, mientras Tomasito chupaba la punta de verga gruesa como si fuera una teta.
Se la metía muy poquito y despacito, y con su carita angelical era más que suficiente, hasta que Angelica se quedó dormida soltando sus manos, Tomasito no se soltaba de mi verga estaba succionando fuerte tratando de sacar mi leche, y yo solo la movía apretando los nervios con tensión y de esa forma le terminaba moviendo toda su cabeza en una mini penetración desde su pequeña boquita, era lo máximo, me estaba calentando tanto que pensé en avanzar al siguiente, me levante y su cabecita se levantó por la tremenda succión que estaba haciendo su boquita con mi pene, ese acto fue suficiente, no pude aguantar y me corrí, fue tan fuerte que me afirme para no caerme sobre el resto y me corrí y me corrí y me corrí.
Le llene la boca de semen a Tomas y ahí con su boca rebalsando si me soltó mi verga que siguió botando semen en la cara del bebe, este trago y trago y trago todo lo que había caído en su boca, despacio fue desapareciendo el charquito de semen que era su boca, como si de leche materna se tratara, me reincorpore de a poco y me acosté al medio de la cama ente Tomas y Cata, mirando a Tomas y atrás a su madre, se veía tan tierno y degenerado con su cara llena de semen, que con mis dedos empecé a juntarlo para dárselo de beber. Casi por cuajo caía en la boca del bebe que no dudaba en tragar, una y otra vez trago, realmente aún tenía hambre, y así se terminó tragando todo mi semen, apague la luz, lo abrace y nos dormimos.
Que buen relato
🙌 gracias ❤️🔥
Esta muy bueno, ya me pique, espero que la serie tenga muchos capítulos
😁 buena, entonces seguiremos 😉❤️🔥
Uffff me dejaste muy prendido con el relato, pude verlo en mi cabeza cada que leia. Espero los demas me provoquen lo mismo