Sonia mi vecina de 5 años III
Mi vecina hace despertar todos mis deseos….
Cuando me estaba durmiendo, siento que alguien me agarra el pene, yo pensé que era un sueño, pero no era Sonia que se había dado vuelta hacia mí agarrándome el pene, eso me puso otra vez a mil haciendo que se me pare otra vez, ya que a esa edad siempre estaba al palo, así que le levante el camisón un poco adelante y le arrimé el pene a su vagina, ella como una reacción instintiva abrió su piernitas permitiendo que mi pene quede alojado entre sus carnes, empecé otra vez a moverme como si estuviese penetrándola, ella suspiraba y gemía despacito, le dije al oído ponte boca arriba.
Cuando se puso boca arriba yo despacito me puse sobre ella apoyando mi cuerpo en mis codos para no ahogarla con mi peso, ella abrió los ojos y me dijo me gusta mucho sentir tu pene en mi cosita, yo le dije se llama vagina, y ella me decía ahora somos novios verdad, yo le dije somos más que novio somos maridos y mujer.
Ella esbozó una sonrisa y dijo que lindo, pero yo le dije para que realmente seamos marido y mujer debes dejar que entre un poquito mi pene en tu vagina, ella abrió grande los ojos y dijo pero no va a entrar, hoy solo estaba un poquito y me quedo ardiendo, entonces suave le dije yo solo lo voy poniendo de a poco y si te duele lo dejamos ahí, ella dudaba un poco pero a medida que yo me iba moviendo y mi pene jugaba con su vagina me fue diciendo esta bien, pero cuando yo te diga que me duele lo sacas.
Así que acomode un poco mi pene en su entrada y despacito me empecé a mover como haciendo que la penetraba, ella como primera reacción cerró las piernas apretando mi pene, le dije tranquila que sino te voy a dañar, así que la agarre de las piernas y se la abrí, le restregaba la cabeza de mi pene en su vagina haciendo que ella empezara a gemir muy despacito, cuando estaba ella con los ojos cerrados y sus piernas abierta aproveché y le introduje apenas mi pene, quedando solamente la cabeza adentro de su vagina, era una sensación formidable como esa vagina pequeña rodeaba toda la cabeza de mi pene, ella intentó zafarse, pero yo la sostuve bien desde la cadera, me decía me duele, me duele mucho.
Yo le decía aguanta un poco, que más de eso no lo voy a poner, ella casi llorando me decía sacala que me duele, sacala que me duele, se empezó a mover de un lado a otro, y yo largué sus piernas para agarrar su cintura y que no zafe mi cabeza de su vagina, entre esos movimientos ella logro sacar un poco la punta de mi pene, pero cuando se movió para el otro lado de la cama, yo aproveche y deje caer un poco mi peso sobre ella dejándola inmóvil y haciendo que entrara un poco más que la cabeza de mi pene en su vagina.
Ella ya lloraba más diciéndome que ya no quería jugar más los esposos y que le dolía, yo empecé a besarla y le decía silencio mi amor que nos van a escuchar, cuando escucho a mi hermana que le dice al oído, no te muevas y aguanta un poco que la primera vez duele y después te va a gustar. Eso me dejo helado, ver a mi hermana cerca de mí viendo todo y por lo que había dicho, no lo podía creer.
Sonia al escuchar a mi hermana se quedo quieta, yo me acomodé mejor sobre ella, llevando mi mano a su vagina notando que había entrado un poco más de la cabeza en ella, le agarré la mano para que notara también como estábamos ensamblados. Ella me decía al oído me duele un poco, yo le dije aguanta que ya casi termino, a todo eso mi hermana me dice después tenemos que hablar, este también es nuestro secreto.
Yo con la cabeza le dije que sí, se acerco a mi y me dio un beso en los labios y se acercó al oído de Sonia diciendo deja que te la meta vas a ver que lindo es. Como yo había leído muchos relatos sabía que esa primera vez no la iba a poder poner todo el pene adentro así que empecé de a poco a moverme de adelante para atrás logrando que saliera un poco la cabeza y vuelva a entrar, era una sensación formidable, haciendo que esta chiquita me mirara con unos ojos de ternura, no aguantando más descargando unos cuantos chorros de leche en su interior.
Me dijo me orinaste adentro, siento algo caliente, lo que antes lo sentía entre las piernas ahora lo siento adentro me decía, cuando me bajo un poco la flacidez de mi pene lo empecé a sacar de su vagina, viendo entre la penumbra de la ventana como le había quedado esa conchita, roja, estirada y le empezaba a caer el semen, dame algo para limpiarme me dijo, le alcancé la toalla que habíamos usado antes y la limpié toda, recordé que mi mamá guardaba una crema que había comprado para las lastimaduras, fui a buscarla y le pase por toda la vagina a Sonia, me duele me decía, no tanto como antes pero me duele. Le comente que cuando se iba a levantar iba a dolerle un poco, y que tenía que decir que se había golpeado jugando.
Me acomodé a sus pies y me quede dormido igual que ella.
Que excitante saber los inicios de la pequeña susi, ya que es toda una putita experta
Siempre es excitante saber de los inicios sexuales en la niñez. Es algo exquisito