Soy un buen padre (cap 5)
La colita de la nena del casero.
La nena me miró con cariño, dejo de besar a Nancy y me ofreció sus labios para que la besara, yo entre la idea que tenía semen de caballo en la boca y que los padres nos podrían ver le dije que no.
“Don si se quedan mi mamá me deja atender los huéspedes en el dormitorio” Asombrado, le pregunté si eso era absolutamente cierto y asintió con la cabeza, “También si la señorita quiere jugar con uno o varios de mis hermanos, también puede”
Instintivamente abrace a Nancy, no tenía ningún deseo de compartirla, pero la nena tenía unas tetitas encantadoras, linda cola y le gustaba el semen de caballo, eso era suficiente para calentarme a mí.
Le consulté a Nancy a la que le caminaba la cabeza a cien por hora, primero volvió a los pies del caballo que no habia guardado del todo la pistola y tenía un gran hilo de esperma colgando de su glande, abrió la boca y succionó todo, ya le había perdido el asco, hasta parecía gustarle. Se acercó a mí y un poco con gestos y otro guturalmente me pregunto si me quería coger a la nena, le dije que sí de todas maneras posibles, entonces me agarro del cuello y me obligo a besarla…soporte el asquete de sentir el sabor amargo de leche de caballo, pero pensaba que valdría la pena, cuando Nancy tuvo la boca desocupada me dijo con voz baja “Fase dos con la nena, conmigo fase uno por ahora”
Nos prepararon un guiso y flan casero de postre, comimos mi hija y yo solos en la mesa, pero Nancy invito a la nena que se llamaba Florencia, pero le decían Flor o Florcita.
Solo para estar seguro le dije a la mama de Flor en una de esas pasadas por la mesa, si habia algún problema para que su hija jugara un rato con mi hija en el dormitorio, la señora con su vozarrón me respondió ¡“No don! ¡Ningún problema que juegue toda la noche y Florcita puede jugar con usted también si quiere!”
Apuramos el postre, fuimos al dormitorio de huésped y la vieja gritó “ahí se baña la Florcita y los acompaña”
Cuando quedamos solos aproveche de preguntar excitando sus mentiras eróticas,
“¿Alguna vez te chupaste una concha?” pensó y me dijo, “solo la de mamá una noche en que ella estaba muy en pedo”, sabía que eso era mentira, mi ex era totalmente abstemia. Jamás probaría una gota de alcohol.
Golpearon la puerta, las luces de la sala ya estaban apagadas, La nena vestía solo una bombachita de esas que tienen dibujos animados estampados, en su cotorrita tenía a Minie.
Los ojos de Nancy brillaron, le dije al oído “¿te calienta?”. Me miro y dijo varias veces si moviendo la cabeza, le toque la cotorra por atrás, dio un respingo, ¡la tenía totalmente mojada.!
Flor entró dando saltitos y se sentó en el borde de la cama y pregunto “¿A que les gusta jugar?”
Nancy fue como ciega hacia ella, se arrodillo, le abrió un poco las piernitas de la nena y metió la nariz entre sus piernas, y olió varios segundos… se dio vuelta y me llamó “Veni pá, sentí que hermoso olor!”
Mientras yo me acercaba Nancy le habia corrido un poco la bombachita y le pasó la lengua por el tajo.
Comprobé que era un aroma agradable y mejor sabor.
Nancy me pregunto si yo sabía cómo se hacían las “tijeras”, la nena no me dejo contestar, de un tirón se sacó sus calzones gritando “¡yo sí, yo sí!” le tironeó el pantalón a Nancy y ésta se lo quitó junto a la bombacha, la nena ágilmente se metió entre las piernas de mi hija y apoyó clítoris con clítoris o mejor dicho, vagina con vagina y empezó como a cabalgar desprolijamente,
Fui acercándome con la pija afuera y parada, Nancy giró un poco la cara, abrió la boca y sin chupar dejo que la moviera para todos lados, empujaba sus cachetes hacia afuera de uno y otro lado.
Florecita se dio cuenta que así no estaba logrando nada, así que metió su carita entre las piernas de Nancy y con mucha experiencia, lamió, chupó, mordisqueo y beso la rica concha de mi hija. Recien entonces Nancy entró en temperatura, agarro mi tronco con una mano y empezó a chupar con fuerza.
Creo que acabó, no lo sé a ciencia cierta…. Tomo la nena la a costó boca arriba, le abrió las piernitas, le miro el agujero de la concha y le preguntó “¿te bancas la pija de mi papá?”
La nena se rio a carcajadas diciéndonos: “Me banco la pija de Garbo”.
Hubo un silencio, pensé que no le haría ni cosquillas a esta nena con mi chota.
Nancy curiosa le repregunto: “¿Por el culo también te cogió el caballo?”
“! Nooo, por el culo no me cogen, porque me hago caca siempre que lo intentan, ya no lo intentan más!”
Nos miramos con complicidad con Nancy y nos apartamos para hablar.
“¡Lo primero es una buena enema” dijo ella, “si y algo para poner en la cama o en el piso por si se caga no ensuciar mucho!”
Fui excitado al lavadero, todos los demás dormían, encontré lo que buscaba, un pedazo de manguera de media, un embudo, que no se si me haría falta, alambre una pinza, y muchos trapos limpios.
Flor estaba un poco preocupada y quería saber que habia ido a buscar, Nancy solo le decía, “te vas a divertir.”
Cuando vio lo que traía, dijo que el baño de la habitación era muy chico, que mejor fuéramos al baño grande que solo utilizaban los dueños.
Nos encaminamos los tres a ese baño, la nena totalmente en pelotas fue al cuarto de uno de sus hermanos y trajo una colchoneta con funda de hule.
¡La traía arrastrando casi la pobre!
Cuando vi la bañadera tipo sauna me di cuenta que había traído todo al pedo.
Desenrosqué la flor de la ducha, llenamos un poco la bañadera, regulé el agua a tibia, las chicas estaban una frente a otras sentadas dentro y se pellizcaban las tetitas.
Le hice seña a mi hija que me ayudara, sin levantarse la hizo parar a Florcita y que se agachara a darle un beso, mientras Nancy le metía la lengua yo le metía la manguera en el culito.
La nena pataleaba, así que solo le metí dos o tres centímetros y abrí la canilla ya regulada a una temperatura ideal, empezó a entrar agua y la nena demostraba que no estaba a gusto.
Nancy le dijo que se relajara, que le iba a gustar, la nena miro hacia abajo y vio que se le estaba hinchando la pancita.
Le pedí a Nancy que salga de la bañera por suerte, cuando quite la manguera del culo de la nena un gran chorro de líquido marrón oscuro salió de su culo.
Desagotamos la bañadera, la enjuagamos, tres veces repetimos la operación, en la ultima la nena pidió que dejáramos entrar más agua, se puso de pie y se tocaba el vientre inflado, diciendo: “Así voy a estar cuando quede embarazada”
Esta vez el agua salió limpita y el agujero del culo de Flor estaba bien agrandado.
Nanci me escupió la punta del choto, se salivo la mano y coloco la saliva en el orto de Flor. Me agarro la pija, la hizo agachar a la nena, le hizo abrir bien las piernas y apunto al agujero marrón.
Empuje con la ayuda de la mano de mi hija y fue entrando, la nena empezó a decir “ayayayayayayay” y eso es todo lo que fue diciendo mientras Nancy me hacía meterle cada vez más mi pija. Con una mano empujaba y con la otra se salivaba el clítoris, cada tanto también salivaba el botoncito de Flor.
Sentir ese conducto tan apretado, fue una nueva experiencia para mí, hasta me dolió porque me tiraba el escroto para atrás.
Nancy me miraba la cara y gozaba con mis gestos.
“Te estas comiendo un caramelo papá!” dijo alegre. La apuré y le pregunte si ella también quería, dijo que por ahora no, yo sabía que el culito de mi hija sería igual de estrecho que el de Florcita. Eso me calentó y acabé en el fondo del rector de la nena.
Quien solo seguía con su “ayayayayay”, la saqué bien despacio, evitando lastimarla más aún.
Le chorreaba mi leche por los muslos y lloraba de dolor, dijo rápidamente, “¿me puedo ir señor?”
La dejamos que se fuera, tomó sus calzones de la pieza y se encamino para su habitación, caminaba con mucha dificultad, tanto que se cayó de rodillas dos veces en el trayecto, La habitación de al lado era la de sus padres, se abrió la puerta y se asomó el capataz desnudo con una pija enorme parada y durísima, atajo a su hija en el camino y la metió dentro de su habitación, entre que acomodamos la cama, escuchamos un par de gritos de la nena, el padre siempre le quiso hacer el culo y la nena se defendida cagandoles las chotas, ahora se la cogerían todos por el orto, (pobre nena)
Nos miramos con complicidad, estire la mano busque ponerla debajo de la cola de Nancy, me beso y me dijo “pronto papá, pronto, primero la fase dos”
excelente relato me dejaste como mastil, espero la continuación del mismo
Morbo lujuria y sexo, espero pronto la fase 2
Bravisimo!!! un culito menos virgen!!!