Tercero 8ª parte

Convencí a mi hermana a visitar a Paul y Grace. .
Después de varias semanas en las que yo iba al departamento de Paul y Grace a quedarme el fin de semana, mi hermana me dijo que la había dejado sola.

– Sabes que me tienes cuando quieras  – le dije.

– Si, pero antes salíamos juntos, íbamos a fiestas, al Mall, al cine, hacíamos el amor y éramos felices  –

– Si, disculpa, perdoname  – le dije abrazándola y besándola.

– Tanto te gusta coger con Paul? – me preguntó.

– Si, la verdad es que me gusta mucho, es un deseo que tengo toda la semana  –

– Te gusta más que coger con Grace? –

– No sé, lo que pasa cada vez que cojo con Grace, Paul me coge a mi y es el mayor placer que tengo  –

– Si, si me di cuenta, veía como Paul te cogia y tu lo gozabas  –

– Me gusta sentirlo adentro, me gusta que me lo haga fuerte aunque me duela un poco  –

– Y si compramos un dildo y yo te penetro? –

– Si, que buena idea, lo vamos a hacer – su mano acariciaba mi erección.

– Vamos a la cama, te necesito ahora  – dijo.

La verdad es que la amaba, lo de Paul se me había vuelto un vicio.

En mi habitación nos desnudamos rápidamente, me acosté de espalda, ella se puso entre mis piernas y comenzó a succionarme con fuerza, tuve que decirle que se detuviera, desde que le enseñé a hacerlo, no perdía oportunidad y yo hacía lo mismo con ella. Se montó encima y después de sentarse lentamente comenzó a moverse suavemente, disfrutando el momento, quejándose en mi oído, muy quedo para que nuestros padres en la otra habitación no nos escucharan. Aunque ellos sabían lo nuestro, preferíamos que no se notará. Unos años atrás habíamos tenido una conversación con nuestro padre cuando nos descubrió cogiendo. Entendió nuestra necesidad de adolescentes, nos explicó lo del incesto, pero sólo nos dijo que trataramos de que la mamá no se enterara, y que fuéramos discretos.  La sensación de culpabilidad desapareció desde ese instante, era como terner permiso. Cuando podíamos nos duchábamos juntos y cogiamos en el baño.

Una vez mi hermana se metió a la ducha cuando el papá se estaba duchando. Ella me había dicho que tenía ganas de hacerlo con él,  de manera que no me preocupé, todo lo contrario, estaba feliz de que ella cumplirá su sueño. Después de una media hora salió del baño y se fue a su pieza. En un momento de la tarde le pregunté cómo había estado la ducha. Me dijo que bien pero que no había pasado nada. Me extrañó y le pedí que me explicara porqué era éso. Me contó que durante la ducha se enjabonaron mutuamente, como lo hace conmigo, y que cuando le pidió al papá que se la cogiera, éste se negó, porque sería traicionar a la mamá, pero había logrado una penetracion.

– Insistí tanto que fuera una sola vez que me dejó hacerlo, me dijo que lo entendía pero que sería éso solamente. Después de uno o dos minutos abrazados y yo temblaba de deseo, me dijo que no más y lo sacó, pero como yo estaba mal, no podía dejarme así, de manera que comenzó a tocarme y yo a él, un par de minutos comenzó a eyacular sobre mí estómago y mi pelvis, tomé su mano la puse sobre mi pelvis bañada por sus jugos y la llevé hasta mi vulva dónde me masturbé con su mano, luego lo dejé y el siguió hasta que tuve mi orgasmo con sus dedos llenos de sus jugos,  fue delicioso, pero hubiera preferido que acabara adentro  –

– Lo entiendo, pero ya tuviste lo que querías, tenerlo adentro  –

– Si, estuvo genial  –

– Y cuál es la diferencia entre el de él y el mío? – pregunté.

– Ninguna, la única es que él es él y tú eres tú  –

– Bueno, siguiendo con el tema vamos a ir al departamento la próxima semana? –

– No sé, déjame pensarlo  – dijo levantándose y saliendo de la habitación.

La Grace me pregunta por ella cada vez que voy.

– Y cuando vas a traer a tu hermana? Sabes que la amo, me dejó encantada, nunca he amado a una chica y he tenido muchas, pero a ella la amo  –

– Lo sé y se lo dije, pero le tiene miedo a que le pase lo que me pasa a mí, que no puedo dejar de venir  –

Dos semanas después mi hermana me dijo: » Sabes? Este fin de semana voy a ir contigo

Ahí voy a ver que va a pasar…