Tío me inicio
Todo por un juguete.
Tenía 7 años y aún lo recuerdo como si hubiera sido ayer.
Mi tío Pedro tenía 22 años cuando esto sucedió por primera vez. Él era alto, moreno, agraciado físicamente y un poco musculoso.
La primera vez que tuvimos contacto sexual fue en casa de mi abuela (mamá de Pedro) eran como la 5 de la tarde y me comento Pedro que ya me había estado observando y que me había ganado un regalo; me quede sorprendido ya que él pocas veces me hablaba y menos me regalaba cosas, por lo que me puse muy contento, inmedianamente conteste que quería un Muñeco de acción.
fuimos al centro comercial y corrí a ver los juguetes, le indiqué cuál quería y al ver el precio, me dijo: uuy vas a tener que portarte muy bien conmigo y hacer todo lo que yo te pida para que te lo pueda comprar. no pensé en nada más que tener mi juguete y le dije que sí a todo.
De regreso a la casa, el venía manejando. No dejaba de decirme lo contento que estaba conmigo, y que le gustaba pasar tiempo a mi lado, y me acariciaba la espalda y las piernas. Una vez que llegamos a la casa, toda la familia estaba en reunión. Yo corrí a jugar con mi muñeco junto con mis primos y así pasó la tarde.
ya como a las 9, todos nos empezamos a acostar a dormir y mi tío le dijo a mi abuela que dejara que yo me quedara a dormir con él. Mi abuela acepto pero con la condición de que también mis otros primos se quedaran a dormir ahí. (Yo creo ella ya sospechaba algo de su hijo).
todos los primos nos acostamos en el cuarto de mi tío, pero él y yo nos quedamos en la misma cama. Me quede dormido hasta que empecé a sentir que sobaban mis nalgas, desperté desconcertado y era mi tío que abajo de las cobijas me estaba acariciando. Mi pijama y calzones ya estaban a la altura de mis tobillos. Me quede quieto sin saber que hacer y él me hizo la seña de que me quedara callado. Solo se acercó a mi oído a decir, esto es a cambio del juguete que te compre.
me quede inmóvil, sintiendo esas manos grandes y suaves sobre mis nalgas. Sentí como jugueteaba con sus dedos en l entrada de mi ano. Me volteo boja arriba y me empezó a besar, yo seguía inmóvil y sin saber que hacer con su lengua dentro de mi boca. De pronto recordé que estaban mis demás primos y me separé asustado y me asomé para ver qué hacían, pero para fortuna de mi tío Pedro, todos estaban profundamente dormidos y hasta roncaban.
pedro me jalo del brazo y me volvió a besar, agarro una de mis manos y se la aproximó a su verga. Por primera vez sentí en mis manos una verga firme y palpitante, solo atiné apretarla levemente y él seguía con los besos. De pronto se puso de rodillas y pude ver su verga morena completamente parada y con la cabeza rosita.
Nuevamente se acercó a mi oído y me dijo, quiero que lo chupes, o te quito el muñeco. No lo pensé y me acerqué a su glande, y le di una probada y no me agrado el sabor, me tomó del cuello y me obligo a chuparlo. Estuve así unos minutos y de pronto se levantó y me llevo al baño.
ahí estábamos los dos en el baño, con la luz apagada y el manoseándome completo. Seguía con el jugueteo de sus dedos en mi ano y con otra mano se la estaba jalando. El gemía un poco y me volvió a poner a mamarle la verga. Fueron dos o tres minutos que seguí lamiendo esa enorme verga (así la veía en ese momento) cuando sentí un sabor amargo que inundó mi garganta y me hizo querer vomitar (ahora sé que eyaculó dentro de mi boca) solo fue un momento y la boca me sabía salada. Me enjuago la boca con agua del grifo y me dijo, vas a ser el mejor de todos, ya vamos a acostarnos que mañana te tengo otra sorpresa. Y no se te ocurra decir nada que si no ya no te compro nada.
me acosté pensando en lo que había pasado y con una sensación de satisfacción que no lograba entender.
Al día siguiente, por la noche fue la misma situación, los besos, las caricias en la nalgas, su verga erecta y lubricada, las mamadas que me obligaba darle. Con la diferencia que esta vez sentía que algo tenía en las manos que era aceitoso. Y cada que se acercaba a mi ano sentía la presión de uno de sus dedos queriendo entrar. Yo me resistía pero él me presionaba con su codo hacia el colchón y veía su cara de enojado. Hasta que accedí a que hiciera lo que quisiera y su dedo por fin entro a mi ano, sentí que raro y un poco de dolor pero nada que no pudiera aguantar.
Con el dedo en mi ano empezó a meter y sacar y yo aunque inmóvil sentí un poco de gozo en ello, a Pedro le veía la cara de contento y su verga estaba dura dura. Esta vez fui yo quien se acercó a su verga y la empecé a mamar y succionar tanto hasta que sentí nuevamente el sabor amargo en mi garganta, pero esta vez no me dieron ganas de vomitar.
pedro sacó el dedo de mi ano y sacó su verga de mi boca, se acercó al oído y me dijo Mañana te compro otro juguete pero necesito que aprendas algo nuevo q te enseñare, va a dolerte un poco pero te va a gustar.
tercer día en casa de mi abuela, mis padres en su casa, los demás tíos en reunión en la sala mientras tomaban vino, mi tío me compro un nuevo muñeco de acción. Ya en la noche los demás tíos seguían de fiesta y bebiendo, mi tío y yo nos quedamos viendo tv en su cuarto y esta vez ya no había ningún primo, solo estábamos él y yo; mientras veíamos una película el me mandó a bañar y me dijo que me lavara bien el ano; estaba en el baño cuando escuche que entro mi abuela y le dijo a Pedro ¿que tanto haces con betito y por qué le andas comprando juguetes? Y Pedro respondió: nada, que voy a estar haciendo, a lo que mi abue le reviró: pos mas te vale ehh y quiero q duerman con la puerta abierta ehh. Ya no se escuchó ninguna respuesta de Pedro.
termine de bañarme y fui al cuarto de Pedro y me dijo apaga las luces y has todo lo que te diga, yo solo asentí. Me llevo a borde de la escalera, la cual daba al comedor y después estaba la sala, todos mis orientes estaba en la sala y desde donde yo estaba podía ver (sin ser visto) quien entraba al comedor o quien podría ir subiendo la escalera. Pedro me desnudó ahí en donde estaba y me empezó a desear inmediatamente, yo sentía un poco de dolor pero se puso mucho aceite que solo sentía como ese dedo entraba y salía de mi ano sin problema. Así estuvo un rato hasta que sentí que me metió otro dedo pero mi ano aunque lo resintió no me dolió, se acercó al odio y me dijo: ponte vivo y en cuanto veas que alguien viene me haces señas, y aguántate que te voy a hacer mi puta. Dicho esto me acomodo en posición de perrito y sentí como su lengua empezó a mamarme el ano, sentí una sensación placentera y húmeda, y lo siguiente que sentí fue la punta de su verga en la entrada del ano, sentí como la cabeza de su verga entro y mi ano empezó a palpitar; se acercó nuevamente a mi oído y me dijo: no pujes ni llores ehh que te voy a meter la verga y te tienes que aguantar. Dicho esto empecé a sentir como poco a poco su verga empezaba a entrar y me empezó a doler muchísimo y me quise parra pero me agarro de la cintura y me dio un golpe en la espalda, se me salieron unas lagrimas y volteaba y le decía que me dolía y él me dijo: ahora te aguanta que ya la tienes adentro y sigue cuidando que nadie venga.
dicho esto sentí como intentaba meterla más y a mi ano no le cabía más, escuche como escupió y sentí su saliva en mi culo, intento nuevamente meter más y mi ano accedió. Voltee a las escaleras y estaba uno de mis tíos en el comedor y le dije a Pedro y este solo aminoró el mete y saca y nos quedamos en silencio, yo de 7 años con su verga dentro de mi culo (que en ese momento sentía enorme) y aunque sentía dolor, también tenía una sensación extraña de satisfacción. Mi otro tío volteo hacia arriba (no me podía ver) y en eso se acercó a mi abuela y le preguntó: que tanto hace Pedro con Betito ehh, mi abuela solo lo agarro del brazo y se lo llevo. Le dije a Pedro que ya no se veía nadie y este continuó metiendo y sacando su verga de mi ano, a cada metida que daba pujábamos un poco y yo sentía como se abría todo mi cuerpo, cerré los ojos y me deje llevar por el bombeo y me sorprendió que ya no me dolía, solo sentía a ese enorme hombre jadeando dentro de mi hasta que dio un gemido más fuerte y se quedó quieto. Sacó de pronto su verga de mi culo y sentí que el ano me ardía y me tiré sobre el piso. Se acercó a mi oído y me dijo: que buena puta eres, te entro solo l mitad pero ya más tarde te la comerás completa. Ya vi que si la aguantas.
En eso abrí los ojos y uno de mis tíos estaba a media escalera e hizo un ruido fuerte y grito: Pedro donde estás. Pedro me levanto del piso corrimos a la recámara, me vistió de volada y nos acostamos como viendo la tv. Mi otro tío entro a la recámara y dijo: que hacen ehh, estuvo rica la película y Pedro solo contestó que sí, a lo que mi otro tío contestó: pues a ver si luego me la prestas para disfrútela yo también. Pedro solo sonrió.
el resto de la noche en otro relato
buen relato tienes mas relatos
Gracias. Ya mañana sale la continuación.
Pufffffff que excitante tu relato amigo, delicia, que morbo con la familia en casa y esa abue es cómplice ja ja, oye espero leer la otra parte que rico, se une el otro tio😏😏😏saludos 😁 😁 😁.