Todos juntos es mejor
Una familia unida por el afecto mutuo se convierte en un lugar perfecto para todo. .
La casa pintada de banco resaltaba entre el conjunto de viviendas de la cuadra del barrio Virgen del Rosario. Allí vivían desde hacía un tiempo Mabel, una mujer de unos 50 años, de cabellos negros, de un metro 65 de altura, con senos pequeños y unas caderas bastante voluminosas que llamaban la atención de los hombres del barrio, codiciadas caderas desde el punto de vista sexual. Mabel trabaja como chef en un restaurante llamado “Los amigos” y lo hace todos los días por casi diez horas a la jornada. Sus días de descanso son rotativos.
La hija de Mabel, Eliana, tiene 30 años y es, en parte, de similares características, aunque un poco más alta y en contra posición a su madre sus caderas eran menos llamativas, pero portaba unos senos espectaculares. Trabaja en una panadería llamada “la espiga rosada”. Y, al igual que su madre, labora unas diez horas diarias, pero el día de descanso es el domingo.
Con ellas vivía, además, el nieto de Mabel, un joven de trece años: Jeremías, recién había ingresado a primer año de la secundaria, es un joven apocado, de pocos amigos, estaba casi todo el día, salvo cuando va a colegio, en su casa, en las horas en que se encuentra solo, suele estar viendo en su teléfono celular películas y cortos pornográficos, y también se masturba con asiduidad, al menos dos o tres veces en cada oportunidad. Su único problema es que, al descargar grandes contenidos de semen, verdaderamente en este sentido el joven puede llegar a echar entre ocho y diez chorros de leche, esto no se convierta en un inconveniente que pueda llegar a delatarlo delante de su madre o de su abuela.
Eliana, usualmente se pasea por su casa en ropa interior sin ningún inconveniente y en ocasiones, suele hacerlo solamente con una tanga, deja al descubierto sus bellas tetas terminadas en dos hermosos pezones de un color marrón oscuro que las hacen aún más llamativas, más allá de contextura voluptuosa.
Mabel, por su parte, es un poco más pudoroso, suele colocarse un short, de color rojo, muy pequeño que deja al descubierto un aparte de sus glúteos cuando camina y mueve su enorme culo y en la parte superior usa remeras, sin copriño, que dejan que se marquen en la suave tela de las mismas sus puntudos pezones.
Jeremías que es un gordito corpulento y calentón suele hacerse, de cuando en cuando, algunas pajas recordando a su madre y también a su abuela.
Eliana trabajo desde la ocho de la mañana hasta casi las seis de la tarde, pero en una ocasión dejó su trabajo a eso de las tres de la tarde y se encaminó hacia su casa.
Jeremías estaba viendo una porno que le llamaba mucho la atención, por tanto, decidió desnudarse, a medida que se sacaba la ropa y al llegar al slip ya tenía la verga parada, que por ser un joven y aun con unos más de desarrollo se encontraba bastante bien dotado, por cierto. Se acostó sobre su cama y comenzó a masajear su verga erecta mientas veía ensimismado la película. No tuvo la posibilidad de escuchar que había llegado su madre y que Eliana se dirigió directamente a su cuarto, abrió la puerta de golpe y vio a su hijo masturbándose se asombró y en forma inmediata se sonrió. El joven dejó el teléfono y se cubrió con una almohada que tenía a mano. Eliana le dijo: ¿qué estás haciendo, Jere?
Nada mami, contestó él con voz que era casi un susurro y se había puesto todo colorado de vergüenza.
Eliana insistió, ¿qué estabas haciendo?
Nada mami, respondió de nuevo.
Te lo digo yo, le dijo ella.
¿Qué? Respondió el joven.
Te estabas pajeando con una porno, dijo su madre. A lo que siguió: Sacá la almohada de ahí, le dijo con voz suave pero como dándolo un orden. Jeremías se opuso con un movimiento de su cabeza. Ella insistió y le dijo que, si no lo hacía él, lo hacía ella iba a sacarla la almohada. El joven prefirió hacerlo él, sacó la almohada muy lentamente, su verga seguía ahí, erecta. Eliana la miró con una leve sonrisa y le dijo:
¿Querés que mami te la chupe?
Jeremías no dijo nada, quedó atónito ante semejante pregunta, nunca creyó que podría escucharla y menos de la boca de su madre. No respondió nada. Eliana se acercó, tomo la verga con su mano derecha, se inclinó y comenzó a mamarle la pija al joven que cerró los ojos y empezó a gemir.
Te gusta, hijo de puta, dijo ella con vos suave y siguió chupando.
Sí, mucho, dijo él, casi en un susurro. Ella siguió con su tarea y fue variando la mamada, con su lengua recorrió todo el tronco de la verga del joven, le chupó los huevos y luego volvió a subir hacia la cabeza de la verga para colocársela en su boca y subir y bajar con su boca, tal como si esa boca fuera una concha.
Jeremías estaba en un estado de éxtasis, ella abandonó su metier y delante del joven que por fin abrió los ojos, comenzó a sacarse la ropa, Jere ya había visto las tetas de su madre en más de una ocasión, pero le interesaban los agujeros, en eso radicaba ahora su interés y estaba verdaderamente excitado. Y llegó el momento que Eliana se sacó una tanga blanca para dejar al descubierto su vulva carnosa y rasurada, tal como el joven la veía en las películas, ahora restaba el agujero del culo. Por ahora le bastaba esa ranura que lo llenaba de deseo de meter su lengua y su pija en ella.
Eliana se arrimó hacia el joven, que estaba sentado en la cama y le acercó las tetas a la boca, Jere comenzó a succionar ambos pezones, no sabía cuál chupar primero, las tetas de su madre lo volvían loco, al tiempo que le metía dos dedos en la concha, que Eliana ya tenía muy mojada. Ella se acostó sobre la cama, recogió sus piernas y las abrió, así dejo expuesta su tentadora argolla rasurada, el joven arrimó su boca y comenzó a chupar y chupar, y meter su lengua adentro de esa ranura llamativa, Eliana gemía cada vez más fuerte y seguía acabando como una yegua, una mujer muy aguerrida y caliente, en el fondo y tras su apariencia, una verdadera puta.
El joven adolescente se arrodilló delante de su madre y tomándose la verga la introdujo en la concha de una mami caliente y comenzó a entrar y salir con fuerza inusitada. Y no podía ser de otra manera, el chico estaba debutando en estas lides del sexo. Su madre había sido fantasía de sus pajas y ahora la tenía allí, en bolas delante de él y ella retorciéndose como una víbora de placer con la verga adentro. ¡Qué otra cosa podía esperar! Era como tocar el cielo con las manos.
Eliana no dejaba de gozar y le dijo con un susurro, quiero que me cojas en cuatro patas y me la pongas por el culo, bebé, Jere sacó la verga de la concha, la tomó por la cintura y violentamente la puso en cuatro patas, se agachó y comenzó a meter su lengua en el agujero del culo de su madre que gritaba como una loca, Eliana estaba muy excitada, le pidió que se la metiera en el culo y así fue. Eliana pegó un gritó y le dijo, pará un poco, salvaje, agarrá el pote de crema que hay en mi cómoda, fue el joven rápidamente hacia la habitación de la madre y trajo el pote, le puso crema al agujero del culo y le metió la pija hasta el fondo, Eliana gimió fuerte, pero cerró sus ojos y se dedicó a gozar de la verga gorda de su hijo. El joven trató de extender el momento, pero no pudo más, allí comenzó a derramar su semen caliente a chorros en el culo de su madre, no podía dejar de acabar. Eliana le dijo sin mirarlo: ¡Vaya acabada, hijo!
El sacó la pija del culo de Eliana y se tiró a la cama junto a ella. No dijeron nada. Así estuvieron unos tres o cuatro minutos, ella se levantó y se fue de la habitación sin decir una palabra. Fue hacia el baño, se sentó en el inodoro para dejar caer la leche de su culo, quedo asombrada de la cantidad de semen. Es más, podría decirse que eso la calentó aún más.
La relación siguió delante de manera normal, el sexo era muy ardiente y al menos en dos o tres ocasiones a la semana. La intensidad de la misma rozaba, en ocasiones lo violento, esa violencia era desplegada por Eliana y mostraba en algunos arañazos en la espalda del joven Jeremías.
Pero en esta historia todavía falta la presencia de Mabel, la abuela, pero eso es para otra ocasión.
Buena Historia, calienta la forma del relato y motiva a una paja
Que bueno Boby, me encanta que te puedas incentivas con mi relato, te adelanto que el mismo es verdadero, están modificados los nombres de los protagonistas.