una madre, un video, un chantaje.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Mikes84.
Era increíble cómo había sucedido todo esto. Ni en el más loco de mis sueños hubiera imaginado todo lo que estaba pasando. Yo Nicolás o Nico como me dicen en casa, de solo 18 años, me encontraba sentado en el sofá de la sala con mis pantalones y bóxeres enrollados en los tobillos, tenía el cuerpo bañado en sudor, mientras a horcajadas sobre mí, portando un pequeñísimo hilo dental rosado estaba mamá cabalgándome. Sí, mi propia madre y no solo eso, me cabalgaba con un salvajismo demencial. El delgado hilo lo tenía corrido hacia un lado incrustado en una de sus grandes, enrojecidas, sudadas y sabrosas nalgas, también calzaba un par de zapatos abiertos con tiras y tacón de aguja altísimos color dorado. Mamá con ambas manos se separaba y azotababa fuertemente las nalgotas intercalandolas con violentos sentones sobre mi verga, incrustándosela en lo más profundo de su culo.

En un momento miré hacia un espejo que se encontraba en la sala y pude ver nuestro reflejo. Sus voluptuosas curvas se bamboleaban hacia todos lados, sus pesadas tetas chocaban contra la parte izquierda de mi rostro, y sus nalgotas vibraban como flanes mientras su apretado esfínter ordeñaba mi rabo en cada embate; un delicioso sudor escurría por sus exuberantes curvas, y todo esto era adornado con los ruidos característicos de la enculada, PLAS PLAS PLAS acompañado de un "así así!!! culeame mijito chulo, chiquito vergon me encantassss!!! ahhhhhhhh ahhhhhhhh hijooooooooo!!!!" el cuerpo de mamá se convulsiono y su esfínter empezó a dar espasmos a una velocidad endemoniada, apretando mi verga de una forma deliciosa para después de un intenso minuto desplomarse sobre mí. Mamá respiraba entrecortadamente, empecé a sentir como escurrían los flujos de mi madre sobre mis testículos e ingles, su respiración se escuchaba entrecortada, parecía como en shock, y así con mamá sobre mi, con mis manos recorriendo sus suculentas nalgas, con mi verga aun siendo prisionera por las entrañas de mi madre, comencé a recordar como había empezado todo.

Mi vida como la conocía hasta ese momento había terminado. Era lo que pensaba sentado en la oficina del director Díaz. Mis padres veían un video en donde el estúpido de mi aparecía entrando en casa del director para robar unos malditos archivos.

Después de un momento de discusión entre mis padres y el director, interrumpí tratando de decir algo a mi favor pero mi padre me grito que me callara, y no dije una sola palabra más.

"No solo lo voy a expulsar, también presentare cargos." dijo el director.

La cara de mi padre su puso completamente roja, empezó a manotear y a gritar pero fue ignorado. Los ojos del director estaban fijos en mamá y alcancé a escuchar un desesperado "No" saliendo de ella.

Escuchar esa desesperación en su voz hizo saltar mi corazón. Mamá es una persona muy tranquila y feliz. Ella es la que siempre me conforta diciendo que todo saldrá bien cuando las cosas se ponen difíciles. Pero ahora ella solo estaba sentada ahí, con una cara pálida y sorprendida, incapaz de mirar a los ojos del director que se mantenían fijos sobre el escote de mamá mientras papá se encendía de coraje.

Con angustia, irritación y celos, solo quería levantarme y gritarle al director que se fuera a la mierda y que se metiera su video por el culo. Pero mirando a mamá, no podía culparlo por mantener su atención en ella. Mamá portaba un vestido blanco, con el dobladillo a medio muslo, tenía un escote pronunciado también. Se había puesto unos tacones blancos, muy altos con tiras y sus piernas… sus piernas lucían espectaculares, blancas y firmes.

El nombre de mi madre es Nallely. Tiene 43 años, casi llega al metro setenta con tacones altos, tiene el cabello castaño y no muy largo solo un poco por debajo de los hombros, no tiene el abdomen plano pero definitivamente tiene un cuerpo tremendo. Es voluptuosa y tiene curvas por todas partes. Mis amigos siempre me molestan porque dicen que es toda una "milf". Llegué incluso a reñir con ellos por eso, aunque en el fondo sabía que tenían razón. Con sus pálidas y delicadas piernas sobre saliendo del vestido, las uñas de sus pies rosadas y enmarcadas por ese par de sexys tacones, se veía realmente espectacular.

Sacudí mi cabeza, reprendiéndome por estar analizando a mi madre como si se tratara de cualquier mujer que uno se topa en la calle, y sobre todo dadas las circunstancias. Entonces me di cuenta que todos me estaban viendo y mi papa estaba gritándome.

"¿no me escuchaste? ¿Dónde están los archivos?"

Solo pude tartamudear, "y… yo no puedo recuperarlos, lo siento."

El director gruño, "está decidido entonces."

El rostro de papa no podía estar más rojo y parecía estar al borde de decir algo pero en lugar de eso se paró y dijo. "nos vamos."

Mientras caminábamos a la puerta, giro su cabeza y le dijo al director "esto no ha terminado!"

"les doy una semana para que resuelvan esto. El próximo viernes iré a las autoridades.” dijo el director sonriéndole a mamá, lo peor fue que vi como mi madre se sonrojaba.

Papá me siguió gritando camino a casa mientras mamá iba en silencio. al llegar subí rápidamente a mi habitación, podía escuchar a mis padres discutiendo y me encontraba al borde de las lágrimas mientras escuchaba todo. Al pasar un rato se callaron e instantes después tocaron a mi puerta.

Mamá entró con su dulce expresión de siempre.

"Cielo, ¿porque lloras?" me pregunto con angustia en su mirada.

"no ma, lo siento. Sé que ahora si eche todo a perder" conteste tratando de calmarme y calmar mis lágrimas.

Mamá se sentó en mi cama poniendo una de sus palmas en mi mejilla. "cometiste un error pero te prometo que todo estará bien. Tu papá y yo nos encargaremos.

Al mirar sus bellos y grandes ojos color miel, realmente quería creerle. Pero, las palabras del director aun retumbaban en mis oídos. Traté de sonreír un poco, en respuesta mamá me jaló hacia ella y me abrazó fuertemente.

"ese es mi niño, todo va a estar bien cielo." dijo cálidamente

Ella aun usaba el vestido blanco de media tarde. Podía sentir el calor irradiando de su pecho, y sentía como sus dos grandes globos se apretaban contra mi. Mamá me dio un suave beso en la frente y de ahí se fue. Me quedé en el cuarto y me quede dormido sin darme cuenta. Dormí profundamente.

El domingo por la mañana mientras tomábamos el desayuno, el teléfono de la sala sonó. Mamá se levantó a contestar, después de unos minutos volvió. La miré y se veía confundida e incluso ruborizada, pero había algo más en su rostro, tal vez algo de esperanza.

"era el director, quiere hablar de la situación de Nico esta noche, durante la cena." dijo mamá mientras se sentaba a la mesa.

"¿qué? teníamos una semana. Le dije al hijo de puta que debía salir de viaje hasta el miércoles." contesto papá muy enojado.

"no… no creo que haya olvidado eso," mamá estaba sonrojada de nuevo, "de hecho me dijo, que sería mejor si iba yo sola."

Papá estaba callado, mirándola, después volteo a verme y dijo "Nico ve a tu cuarto, tu madre y yo tenemos que hablar."

Me levante rápidamente pero a medio camino cambie de opinión, me detuve fuera de la cocina, justo al lado de la puerta para poder escuchar.

"no entiendes, dijo que el rojo se vería mucho mejor en mis uñas que el rosado. Es escalofriante," dijo mamá

"Así que tienes bellos pies y no fue ilusión mía la actitud del marrano ese, ambos nos dimos cuenta de cómo te miraba." papá parecía hablar con calma ahora. "solo deja que se dé un taco de ojo, coquetea un poco con él y salva a nuestro hijo amor."

Mamá le contesto a papa incrédula y dolida, "crees que soy algún tipo de intercambio, eh?

"baja la voz. No te estoy diciendo que accedas a sus propuestas… es un viejo verde por Nallely. ¿Cuántos años tiene? ¿70? ¿80? Y tampoco se te va a aventar encima en el restaurant." dijo papá.

"te… tengo un mal presentimiento en esto amor." titubeo mamá

"por dios santo Nalle, no es demasiado difícil tener una cena con él." interrumpió papá, "solo es un viejo gordo con el ego demasiado alto. Adúlalo un poco y solo hazle ver la situación a través de tus ojos."

"ok! ok!" gritó mamá frustrada, "sé que es solo una cena pero, realmente me asusta, pero… está bien. Iré a cenar con él."

"esa es mi mujercita, y recuerda cielo. Nada de bebidas. Ya sabes lo que te pasa cada que bebes algo. No tendríamos este problema si te controlaras cada que bebes alcohol."

De algún modo sentí que con ese problema se refería a mí. Mamá más calmada dijo.

"todos cometen errores en la vida y más a esa edad. Solo es un niño, saldremos de esta."

Escuché que se levantaban de las sillas y salí corriendo a mi habitación. Mamá hablaba por teléfono pero no podía escuchar nada de lo que decía.

En la tarde me dijeron que mamá iba a hablar con el director en la cena. Aparentemente nos iríamos a las 7pm, mamá se iría en su coche y yo llevaría a papá al aeropuerto. Ella bajó vistiendo un impactante vestido rojo muy entallado, strapless y que dejaba ver algo del canal de sus pechos, y que llegaba cerca de medio muslo. Sus uñas estaban de color rojo y calzaba unas sandalias de tacón alto y finísimo del mismo color. no pude más que disfrutar la vista de sus caderas meneándose de un lado a otro en su cadencioso andar rumbo a la puerta.

"wow, estas impactante" dijo papá al verla.

Casi me da un infarto al escuchar la respuesta de mamá.

"gracias, pero el director me sugirió vestir así, dijo que podría ayudar en algo."

Después de su respuesta, mamá trató de coger las llaves de la mesita de la entrada pero estas resbalaron de su mano y cayeron al suelo, al agacharse por ellas pude ver como el vestido se incrustaba en su trasero y pude distinguir una pequeñísima tira en sus caderas y como se perdía entre sus nalgas, no había duda era una tanga tipo hilo dental. No daba crédito a lo que el asqueroso del director le había dicho am i madre y mucho menos que ella cumpliera a sus peticiones. Después de levantar las llaves tomó su bolso y salió por la puerta marchándose.

vi como papa fruncía el ceño, medio minuto después corrió para alcanzarla pero ella ya se había ido, así que nosotros partimos también. Camino al aeropuerto papá llamó a mamá por el teléfono celular.

"solo quiero saber que restaurant es, eso es todo!" papá trataba de reprimir su coraje.

Mamá debió de decirle el nombre porque colgó rápido sin antes decir unas cuantas groserías. parecía estar considerando algo por que después me empezó a decir la dirección.

"¿que se supone que hare con eso?" pregunté confundido.

"quiero que cuides a tu madre, solo síguelos." contestó

Ni si quiera pregunte el por qué, era muy obvio. Reconociendo el lugar entendí el porqué de su preocupación. Iba a ser en un lugar muy costoso. Incluso recuerdo a mamá esperar para poder ir ese lugar pero papa siempre decía "cariño, ahí es a dónde vas si estas desesperado para conseguir algo de acción." a mamá siempre le desagradaba esa respuesta y terminaba por no insistir más.

Antes de que papá se bajara del auto me dio un pequeño fajo de billetes, y agregando estrictamente dijo. "solo vigílala y que no te atrapen."

Conduje al restaurant y llegue tratando de mantener el perfil bajo. Mirando al rededor discretamente vi a mamá y al director sentados en una mesa alejada. Me senté en una mesa algo distante con una gran planta cerca que me cubría parcialmente y por la cual podría espiar sin mucho problema. Después procedí a ordenar lo más barato del menú y continué mi labor.

El director era ruidoso en exceso a leguas se veía que quería llamar la atención. Vi algunas veces como la comida volaba de su boca al reírse de manera exagerada. Mamá mantenía un semblante firme y muy político, se le notaba incomoda con toda esta situación. El trató de ofrecerle vino pero ella se reusó cubriendo la copa con su pequeña y delicada mano. Observé como el director extendía su pierna y tocaba la de ella, pero ella escondía sus pies debajo de la silla. Su rostro se puso rojo al instante.

En algún punto creo que ella sacó mi tema a relucir, ya que el semblante del director cambio a serio de repente. Intercambiaron palabras por un rato y note como mamá ponía cara de tristeza. Todo lo que pude captar de lo que hablaban fue la palabra "casada". De repente mamá se levantó de la silla diciéndole algo con una dureza en su rostro, rápido empezó a caminar hacia la salida. Mi corazón latía a mil por hora al darme cuenta de que no había podido hacerlo cambiar de opinión. El director no tuvo si quiera que levantarse de su asiento para llamar la atención de mama una vez más, solo le basto con decir la palabra "cárcel".

Mamá se detuvo de golpe, después giro y se dirigió al sanitario. No tenía idea de por qué el director tenía esa sonrisa en su rostro. Mire como el bastardo llenaba la copa de mamá hasta el borde con vino.

Después de unos minutos mamá regresó a la mesa y sacudió la cabeza al contemplar su copa de vino llena. El la miro y le dijo algo a lo cual ella ocupo otra vez su lugar en la silla. A sorpresa mía, ella levanto la copa y le dio un sorbo, el director la animo para que se tomara la copa de un solo trago y sin perder tiempo el la volvió a llenar a tope.

La atmosfera alrededor de ellos empezó a cambiar lentamente. El director seguía con su actitud egocéntrica como siempre, pero el semblante de mamá fue cambiando poco a poco. Era evidente que se sentía más cómoda cada vez que daba un nuevo sorbo a su copa. Calculo que llevaba alrededor de 3 copas grandes cuando vi que mamá ahora se encontraba recargada en la mesa, con los codos sobre ella. y era notorio lo que ahora veía el director ya que su mirada se encontraba fija hacia abajo y no al rostro de mi madre. Mamá ligeramente volteo su cabeza y por un instante pensé que me había visto, pero no fue así, simplemente tenía su mirada perdida y su rostro era completamente rojo. Después se volvió a recargar sobre la silla.

Pude oír con claridad la risa del director e incluso a ella soltando unas cuantas risillas. Después el volvió a extender su pierna una vez más tratando de rosar las de mamá bajo la mesa. Esta vez, ella no evito el contacto, se quedó quieta mirando fijamente su plato. Él dijo algo y ella levanto la vista para verlo fijamente a los ojos. Después para sorpresa mía mamá discretamente con su mano se quitó uno de sus altos zapatos.

Confundido, mire al director. Él hablaba mientras su enorme barriga temblaba del esfuerzo que hacia al reír y hablar. Fue ahí cuando percibí que el pie de mamá no estaba en el suelo. Me estremecí al darme cuenta que lo debía tener la pierna extendida y que su pie debería de estar recargado sabrá Dios donde.

Ambos estaban en silencio ahora, mamá miraba firmemente su plato mientras el director la miraba a ella. El director dejo de comer y seguía con la sonrisa en su rostro, después note como mamá se deslizaba hacia delante sobre la silla. Sus nalgas apenas descansaban sobre el borde del asiento y era obvio que su pierna se movía constantemente. Mi cabeza daba vueltas, "¿mamá está masturbando al gordo asqueroso con su pie?". Pensé yo. Estuve a punto de pararme e ir corriendo a detener esa asquerosidad pero no estaba completamente seguro de lo que sucedía. ¿Qué pasaría si no hacían lo que yo pensaba?, solo quedaría en ridículo y después iría directo a prisión.

En vez de eso me quede sentado, observando. El director busco debajo del mantel y al mismo tiempo las caderas de mamá se detuvieron, también note que la falda se le había corrido considerablemente dejando algo de sus nalgas a la vista. Vi que el director tenía algo blanco y delicado entre sus manos, mientras mi mente trataba d procesar todo esto, el director meneo su cabeza. Esa debió de ser una señal porque después de eso mamá regreso su pie a su lugar y se puso la zapatilla de nuevo. Mamá ingirió una copa más de vino.

Me encontraba sentado inmóvil, la comida quedo intacta. No sabía si había visto a mi dulce madre tocar el bulto al director de mi escuela. Era tan irreal y podía sentir mi estómago revolverse. Ella había bebido alcohol a pesar de que papa le advirtió que no lo hiciera, ¿a qué se debía eso? de repente una imagen llenó mi mente, el delicado y exuberante cuerpo de mamá se encontraba debajo del director, con su vestido arremangado en la cintura y la verga de él desapareciendo entre sus piernas.

Sacudí mi cabeza con furia al darme cuenta que me estaba excitando con esa imagen. La cárcel era algo grave, pero tenía que parar esto antes de que fuera demasiado tarde.

Cárcel y expulsión de la escuela, una voz en mi cabeza añadió. "no, no tengo que interrumpir, seguramente mamá no lo dejara llegar a eso," trate de convencerme y me sentí un poco aliviado.

Después gire a verlos y vi como mama se levantaba lentamente, sus rodillas lucían temblorosas, mamá había bebido demasiado alcohol, lo sabía, y sentía alivio de que todo esto estuviera a punto de terminar. La imagen del director abusando de las curvas de mi madre flashearon en mi cabeza una vez más y volví a sacudir la cabeza para borrarla de inmediato. El director dejo algo de dinero sobre la mesa y coloco su brazo en la cintura de mama, guiándola a la salida. Pedí la cuenta inmediatamente cuando ellos atravesaron la puerta. Después los seguí discretamente al estacionamiento.

Los vi caminar hacia el carro del director. "mierda" quise gritar, "déjala ir a su auto," pero incluso en esas instancias, sabía que mamá no podría manejar en ese estado.

El director había bajado su mano hasta las nalgas de mamá, agarrándolas y frotando su enorme y peluda mano sobre ellas. A mamá no le importo o pareció no darse cuenta. Tenía suficientes problemas tratando de mantenerse en pie. Empecé a maldecir entre dientes, esto había ido demasiado lejos.

"Se está sobrepasando, solo lléveme a mi casa por favor" escuche que dijo mi madre mientras recargaba su espalda en el auto. El había puesto ambas manos sobre el coche, una a cada costado de ella, aprisionándola mientras miraba directo a sus pechos.

"¿qué espera? mi familia me está esperando." dijo y a la vez dio de manotazos.

Estaba a punto de salir corriendo y taclearlo de costado cuando escuche que el director dijo. "Así que ¿así será? ¿Vas a mandar a tu hijo a la cárcel?"

El director seguía aprisionándola. Eso me hizo detenerme, me quede quieto y con indecisión por un momento, después lentamente me cubrí en otro auto.

"yo… yo… ahh váyase a la mierda" grito mamá. "soy una mujer casada y he hecho mi mejor esfuerzo para que se viniera."

No sé qué me impacto más, escuchar a mi inocente madre decir groserías o que hubiera intentado que el asqueroso gordo se viniera.

"pero no lo hiciste, ese fue nuestro acuerdo. Vamos Nallely, ni si quiera estoy tratando de profanar tu matrimonial coño. Solo haz que me venga como tú puedas."

A este punto él se inclinó sobre ella y el enorme bulto de sus pantalones se incrustó en la suavidad de su estómago. Vi sus manos introducirse en el vestido por la parte de los pechos y estrujarlos. Por cómo se quejaba ella y por como el pesado globo de carne se movía, intuí que estaba siendo demasiado rudo en su escarceo.

Otra vez me llego un impulso de correr allí, pero mamá se quejó un poco más y lo empujo mirándolo a los ojos, como tratando de decidir algo. lo que hizo a continuación hizo que explotara mi cabeza.

Extendió su delicada mano y bajo la cremallera del director, miro al rededor y se inclinó discretamente.

"podemos ir a mi casa si no quieres hacerlo aquí," dijo el director aun de pie pero recargado en el auto.

"¡a la mierda con eso!" dijo mamá evidentemente algo tomada, "esto se termina aquí bastardo"

Vi la mano de mamá desaparecer dentro de la trusa después la saco de nuevo pero apretando la gorda verga. Incluso desde donde yo estaba podía ver que era bastante grande. Su otra mano estaba en el hombro del director mientras trataba de mantenerse en pie.

Mamá tenía los ojos cerrados ahora, su respiración era intensa mientras jaloneaba la verga con furia. Me senté ahí impactado. Su delicada y blanca mano, hacia un contraste impresionante con la venosa erección del director. Daba la impresión que de los tres que estábamos contemplando esto solo el director parecía estar calmado. Estaba parado allí, muy quieto, mirando a mi madre. Yo rezaba en silencio para que eso terminara lo más pronto posible.

De repente mamá abrió los ojos y levanto la cabeza, "¿por qué… por qué no se viene?"

El director no contesto pero sujeto a mamá por la cintura con ambas manos casi levantándola del suelo. Después empujo su boca sobre la de ella. Mamá agito sus brazos un poco, pero después repentinamente sujeto el cuello del director y pude observar con asco como la lengua de el presionaba entre sus labios tratando de penetrarlos.

Mamá trato de decir algo a pesar de la lengua serpenteante, "mmmm espere", y trato de empujarlo una vez más. El director se detuvo mirándola una vez más.

"no entiendo," mamá le dijo confundida.

Se inclinó de nuevo para agarrar el miembro, pero el la tomo por la muñeca. Lentamente el director levanto su mano libre con sus dedos extendidos. Después con calma los empujo dentro de la boca de mamá. Ella solo se quedó quieta impactada y sorprendida, sus labios estaban firmes mientras los dedos salían y entraban lentamente. Mamá quito la mano de un manazo y casi se cae al hacerlo.

"Eso es, ¿ese el costo de terminar con esto?" pregunto mientras trataba de mantener el balance.

Vi al director asentir con la cabeza.

"ok, ok mierda, pero dejara a mi hijo en paz y a nosotros si se la chupo?"

El director seguía callado mientras aceptaba con la cabeza. Después puso sus gordas manos sobre los desnudos hombros de mama. y la debió de haber empujado poco a poco hacia abajo por que vi como mi madre descendía lentamente. Cuando sus rodillas tocaron el suelo el empujo su pelvis hacia adelante, al hacer esto la gorda verga se deslizo sobre una de las mejillas de mama.

Ella gritó, "¡no! ¡Aquí no!"

Fue el director quien ahora se puso nervioso por un momento, mientras miraba al rededor a ver si alguien los había visto. Después abrió la puerta del coche bruscamente y la metió en el asiento del copiloto. Me apresuré a mi auto para poder seguirlos.

Seguía sin poder creer todo lo que se había desencadenado debido a mis actos, no podía dejar que eso pasara, simplemente no podía. Papá me había dicho que cuidara a mamá y estoy completamente seguro que "cuida a tu madre" es no dejar que el marrano del director le metiera la verga en la boca. Lo más increíble es que ella había aceptado. No puedo creer que haya escuchado de su boca las palabras "te la chupo", tan inocente, tan recatada, y lo peor es que sé que lo hacía no por que quisiera si no porque ese marrano egocéntrico no le dejaba otra salida.

Me retrasé un poco debido al tráfico, así que cuando llegue a la casa del director su auto ya se encontraba estacionado frente a la casa.

Instintivamente dejé mi carro unas casas más adelante. Tenía que moverme rápido, eso era seguro. Pero ¿qué hacer? debería golpear la puerta del coche y ¿exigirle a mamá que se viniera conmigo? pero entonces ella sabría que los había estado siguiendo, y también que había sido testigo de todo lo ocurrido en el estacionamiento. Qué tal si él hubiera obligado a mamá a entrar a su casa y para esas instancias ya tuviera su asquerosa verga dentro de la boca de mamá? tampoco podría dejar que eso pasara, sacudí mi cabeza con frustración, a la vez que la imagen de mamá tratando de meterse esa monstruosidad en la boca me inundaba la cabeza. El simple pensamiento me hizo decidirme y corrí hacia la puerta principal de la casa. Toque pero no hubo respuesta.

Recorrí el patio, con miedo de lo que podría encontrar a través de las ventanas. La casa estaba vacía. ¿Dónde estaban? de repente me llego la respuesta. Corrí al frente de la casa de nuevo pero toda mi determinación se desvaneció al girar en la esquina y ver a través de la ventana abierta del auto. Me escondí en la esquina de la casa y observe.

La cabeza de mamá subía y bajaba, su cabello estaba hecho un desastre. Por los guturales sonidos que ella hacia no era difícil adivinar que su boca estaba llena de verga. La cabeza del director estaba reclinada en el asiento con los ojos cerrados, instintivamente me agache pero después caí en cuenta de que todo estaba oscuro y volví a mi posición original.

"así Nallely, sabía que eras una putona come vergas jaja" dijo el director jadeando.

Vi a mamá alzar la cabeza y su cara quedó a la vista de perfil, sus carnosos labios brillaban y tenían hilos de saliva, o algo parecido colgando. Algo más abajo sus tetas aparentemente estaban fuera de su vestido, se podrían apreciar dos globos blancos bamboleándose con libertad.

"nunca dije que podías dec-," trató de decir, pero el inmediatamente puso sus manos sobre la cabeza de mamá y de manera brusca la empujó hacia abajo sobre la verga para así acallar los reclamos, y desaparecer del primer plano. Fue tan fuerte el empujón que las nalgas de mamá se alzaron poniéndose a la vista, justo a la altura de la ventana y quedando al aire ya que el vestido se le había corrido hasta la cintura, podía ver los suculentos montes de carne que obscenamente servían como marco para un delgado hilio de tela rojo que se perdía entre ellas, contrastando con la blancura de las nalgazas.

"No quieres entrar a la casa, entonces termina tu trabajo puta." después de decir esto acto seguido el director le dio un sonoro azote en una nalga que se escuchó hasta donde yo me encontraba, y pude ver como vibraron las nalgas de mamá a la vez que quedaba marcada la mano del director en la nalgota.

Hubo sonidos guturales de succión mientras mamá continuaba el movimiento de bombeo y el continuaba gimiendo. Lo más perturbarte era que mamá había comenzado a emitir gemidos mientras chupaba, podía escuchar como el director empezaba a decirle, zorra, putona, perra y de todo lo inimaginable.

Me quedé paralizado un rato, no supe cuánto. ¿Debería detener esto?

Digo, fallé al dejar que mamá se la chupara. La verga ya había profanado sus bellos labios. ¿Haría una diferencia si el inundaba la boca de mamá o no? si los detenía ahora sería por nada, aun iría a prisión, pero, si me quedaba allí y guardaba silencio, hasta…

Como contestando mis pensamientos escuche al director gemir ruidosamente y a la vez vi como alzó su cuerpo del asiento, vi todo, vi la boca de mamá envolviendo la gorda verga, su mandíbula trataba de contener todo el rabo, sus labios rozaban los pelos púbicos y sus asquerosas bolas.

Sus ojos se abrieron como platos mientras trataba de zafarse, pero el director la tomo fuerte de la cabeza, vi como la garganta de mamá se hinchaba y fue allí cuando el exploto dentro de ella. Su garganta se movía ferozmente tratando de tragar pero parecía ser demasiado. Hilos blancos de semen se escapaban por la comisura de los labios mientras el director no paraba de venirse. El llenaba la pequeña boca de mamá mientras yo seguía allí inmóvil. Me percaté de que estuve a punto de correrme también.

Mientras el soltaba la cabeza de mamá y la dejaba libre, estuve a punto de regresar a mi auto. Mi mente estaba en blanco. Terminó, todo terminó. Escuché toser a mamá y respirar con dificultad. De repente tuve una visión, no iba a ir a la cárcel, pero al recordar la garganta de mamá moverse furiosamente tragando la leche del marrano ese y viendo que su corrida debía estar reposando en su estómago, mi corazón sucumbió de nuevo. Todo esto era mi culpa.

Esperé a que salieran del auto. Mamá temblaba tratando de bajarse el vestido y buscando su bolso.

"¿qué haces?" dijo el director.

"llamare a Nico para que me recoja," contesto mamá irritada, "tenemos un trato, ahora déjalo en paz."

"ok Nallely, un trato es un trato. Pero, ¿Estás segura de que quieres que tu hijo te vea en ese estado?"

Ahí me percaté de que sus tetas colgaban fuera del vestido, aparte era obvio que había semen en su vestido y en su rostro. Su cabello totalmente revuelto completaba el cuadro.

"¡entonces consígame un taxi idiota!" mamá trató de cubrirse los pechos pero el escote se resbalaba por la cantidad de semen y fluidos que tenía en las tetas.

"solo entra y límpiate en el baño, después te llevare a tu casa. Hiciste lo necesario para salvar a tu hijo Nallely. Solo achácaselo a un pequeño error y olvídalo." sonó casi caballeroso, pero un ligero tono de desesperación se podía distinguir también.

Mamá estaba parada tapándose los pechos y mirándolo. Quería ir corriendo y gritarles pero no lo hice. El director podría romper el trato fácilmente.

Solo murmuré, "¡mamá! ¿Qué haces? sal huyendo de ahí."

Gruñí con desesperación al escuchar su respuesta "está bien, pero no trate de pasarse de listo adentro. Una mamada es una cosa, pero… soy una mujer casada por Dios santo!"

No supe si lo decía para recodárselo a ella misma o al cerdo del director.

El la condujo hacia la casa y mientras rodeaba la casa hacia el patio trasero casi me descubre el director. Se había acercado a la ventana trasera para abrirla. Después de que el director se quitó me asome un poco y podía ver todo el lugar, que era como una especie de sala de estar. Mientras mamá estaba en el baño el asqueroso de director puso un par de vasos en la mesa y los llenó con vino.

Alcancé a escuchar a mamá que decía "no, no más alcohol."

"solo este vaso y te llevo de vuelta a casa. Sirve que te quitas el mal o buen sabor de boca jajaja" dijo sínicamente.

Mamá se había compuesto el vestido lo más que podía, incluso medio amarro la parte superior para cubrirse los pechos. Se peinó el cabello y lo había acomodado en una coleta. Lucía como la madre que yo conocía, propia, decente siempre y cuando no prestaras atención al remedo del vestido que parecía a la altura de sus pechos.

"además. No parece que te haya disgustado el sabor, es más parece que lo disfrutaste," el director volvía a burlarse de ella.

"¿qué? ¡Usted! mamá exclamó.

"solo dije que lo disfrutaste. Ni si quiera te pedí que tragaras mi leche, pero lo hiciste."

Él se acercó a ella y le dio el vaso. Mamá se había sentado en el sofá que cruzaba la sala. Tenía las piernas cerradas, solo sus pies se movían ligeramente, se denotaba que estaba incomoda. Tomó un pequeño sorbo antes de responder algo más.

"¿que se supone que iba a hacer? era demasiado y además váyase a la mierda, no lo disfrute."

"¿de verdad? hasta llegue a pensar que en cualquier momento de ibas a venir de solo mamarme la verga," dijo mientras acomodaba un brazo alrededor de mamá.

“No… Yo no." contesto ella.

Mamá tomo un buen trago de su vaso y vi que casi lo había vaciado por completo. El inmediatamente lo relleno con más vino. Mamá pareció considerarlo de nuevo por un instante, pero se empino el vaso de nuevo y sorbió.

El movía su mano sobre sus hombros, poco a poco la fue bajando hasta tocar sus tetas. No podía creer lo que pasaba, pensé lo peor, pero me sentía incapaz de detenerlo. Mamá era la única que podía parar todo esto, pero a estas alturas no sabía si incluso ella quisiera hacerlo.

"entonces, ¿por qué estas húmeda?"

Su mano amasaba su pecho con descaro mientras su otra mano estaba posada en la desnuda rodilla de mamá. El director iba moviendo su mano lentamente hacia arriba, de pronto esta se encontraba bajo su vestido. Podía ver como mamá presionaba sus piernas para mantenerlas juntas mientras la mano intrusa se acercaba cada vez más a su objetivo.

"no estoy húmeda usted, usted…. aahhhhh!"

Mamá se retorció. Podía ver como la cerda mano se movía entre las piernas de mi madre y de repente la saco y levanto. Se veía brillosa y llena de los jugos de mamá.

"¡Ves!" dijo burlonamente para después empujar sus dedos entre los labios maternales.

Para mi asombro ella abrió los labios de buena gana, sus mejillas comenzaron a hacer movimientos de succión.

"solo déjame devolverte el favor Nalle, nadie te lo recriminara."

"¡yo lo haría!" pensé sin esperanza alguna ya.

"no… no puedo dejar… Que me coja. Estoy casada."

Sus piernas estaban ligeramente separadas ahora. La otra mano del director había sacado ya la pesada teta de mamá y le acariciaba y pellizcaba el rosado pezón con insistencia.

"no te culeare, solo hare que te vengas en un rico orgasmo. ¿Te parece bien?" dijo tranquilamente.

"ohhh… mmm… está bien." mama balbuceo cubriendo sus ojos con su brazo, "pero no me la puede meter". Ella quedo tapada al ponerse de pie el director. El debió de haberla recostado para quitarle el vestido porque cuando el gordo director se hizo a un lado, tuve la mejor y peor vista de mi vida.

Mi cariñosa madre que respiraba profundamente, se encontraba recostada casi desnuda por completo en el sofá. Sus pechos adornados por unos bellos pezones rosados a plena vista y por primera vez en la noche, me di cuenta de que ella no se había puesto brasier. Debió de haber pensado que podría coquetear con el viejo un poco, pero no pensó que el tiro le podría salir por la culata.

Ella tenía los ojos cerrados mientras una vez más él se inclinó para separar las piernas de mamá. Bruscamente se puso en medio de ellas, se sacó rápidamente la asquerosa verga y comenzó a pasarla sobre la minúscula tanga de mamá justo a la altura de sus labios vaginales.

"¡No! espera, no me la vayas a meter…!”

Los ojos de mamá estaban abiertos completamente mientras empujaba el peludo pecho del director con sus manitas. La enorme y asquerosa panza de el reposaba sobre el estómago de mamá mientras el frotaba su verga hacia arriba y abajo.

"no te la voy a meter nalle, solo la estoy frotando." dijo el director.

Pronto mamá empezó a gemir delicadamente y después lo empezó a hacer con más intensidad. Mientras ella aumentaba la intensidad de sus gemidos el director frotaba la verga cada vez con más lentitud.

Después de unos minutos así mamá grito.

"Ohhhhh! déjame terminar," pero el siguió cada vez más despacio.

Podía ver como mamá miraba resignada al horrendo gordo que se encontraba entre sus piernas, sacudía su cabeza hacia los lados con frustración mientras contemplaba la situación en la que se había metido.

Mamá bajo su mano, imagino que para poder tocarse el clítoris o algo, pero apenas se iba a acercar el director tomo ambas manos de mamá y las sujeto por las muñecas con una sola de sus grandes manos y las elevo hasta que quedaron por encima de la cabeza de mamá. El director aprovecho esto y con la mano que le quedaba libre empezó a jugar con sus pezones, jalándolos de nuevo.

Así paso un largo tiempo, cerca de 15 o 20 minutos hasta que finalmente mamá susurro.

"¿Tiene un condón?"

"¿qué dijiste? no te escuché." contesto el director.

El seguía moviendo sus caderas mientras mamá retorcía todo su cuerpo debajo de él.

"¡un condón! necesito que…!" ni siquiera alcanzó a terminar la oración mamá.

"Tal vez tenga algunos, pero pensé que habías dicho que no dejarías que te culeara."

El director se quedó mirándola mientras permanecía entres sus piernas, observaba lujuriosamente el voluptuoso cuerpo de mamá. Y ella comenzó de nuevo a sacudir la cabeza incapaz de verlo a los ojos.

"ponte un condón y ¡métemela! cuélamele!!!" mamá de repente grito, y volvió a suplicar, "culeame."

Esto me golpeo como un terremoto.

Mi decente y hasta ahora fiel madre acaba de suplicarle a este gordo, asqueroso y viejo hombre que se la cogiera o mejor dicho en palabras de ella que se la culeara. Esto fue demasiado para mí, y trate de gritar que se detuvieran, pero solo un pequeño hilo de voz salió de mi boca.

Mientras el director tomo el brazo de mamá volteándola bruscamente sobre su estómago en el sofá.

Parecía un animal ahora, un depredador que acababa de cazar su presa para devorarla. Se posó sobre ella e inmediatamente le abrió las nalgas y le corrió el hilo de la tanga sobre una de las gordas nalgas. Mamá jadeo mientras él se recargaba con todo su peso en ella, tratando de clavarle la picha entre los cachetes traseros.

"¡Espérese! me está aplastando! protesto mamá, a la vez que el trataba furiosamente de meter su verga entre las delicadas nalgotas.

Ella movía el culo también, como tratando de evitar la penetración; debió de darse cuenta lo que pasaba por qué dijo.

"espere, dije que se pusiera un condón…"

Repentinamente mamá gimió a media oración y dejo de moverse, de hecho se quedó paralizada. Después dio un ruidoso gemido y fue allí cuando los supe. La verga del director de mi escuela estaba dentro del coño de mi madre. El gordo, peludo y viejo cuerpo abarcaba todo el pequeño cuerpo de mamá. Arremetió hacia adelante con su pelvis y la penetro más hondo cada vez. Mamá jadeaba y gritaba mientras yo contemplaba la horrenda verga desaparecer entre sus nalgas. Las rodillas de mamá se doblaron y sus pies quedaron levantados del sofá.

El respiraba ferozmente, ahora recostado sobre ella, su verga estaba enterrada hasta lo más profundo. Pensé que comenzaría a penetrarla con movimientos rudos y bruscos pero no lo hizo. Por lo menos al inicio. Solo se mantuvo allí con la verga hasta el fondo pero sus caderas se movían en círculos lentamente. Mamá había recuperado la calma y ahora se encontraba en silencio, también vi que se mordía sus labios para evitar que algún ruido se le escapara nuevamente.

El director comenzó un movimiento de penetración lento, la saco y la volvió a meter, esta vez un gemido salió de la boca de mamá. El continúo culeandola aumentando la velocidad a cada embestida. Mamá gemía de forma más constante y ruidosa, era como un animal en celo.

Después de algunos minutos observe como mamá trataba de empujar su culo hacia arriba para acoplar las embestidas del gordo director.

"siiiii!!! asiiiiii!!! oohhhhh!!! culeameee asiiii!!! Gritó mamá entre gemidos.

En respuesta el director la empezó a embestir con mayor velocidad y fuerza. El director la presionaba hacia abajo con sus manos en la espalda mientras se la culeaba infernalmente. Mamá solo pudo quedarse acostada mientras sentía como la gorda barra de carne entraba y salía.

"¡despacio ohhhh! ¡Más despacio por favor!" suplico mamá pero el gordo tenía otra idea.

Tomándola de la coleta y tirándola del cabello comenzó a culearsela aún más rápido. Su cuerpo chocaba contra mamá cada vez que el la penetraba.
Las nalgas de mi madre vibraban y se formaban ondas en su piel de la fuerza de la culeada. Después de este tiempo el cuerpo de ambos estaban cubiertos por completos con sudor.

Una cosa sería ver a tu madre en una película porno. Creo que eso debería ser bastante devastador, pero esto no era una película, esto parecía incluso un documental de natgeo. Parecía el film de dos animales copulando con fervor. Las palabras de papá comenzaban a resonaban en mi cabeza. "cuida de ella." obviamente había fallado.

Muy pero muy tarde también me di cuenta que toda esta visión había hecho mella en mí, ya que sin darme cuenta había comenzado a frotarme la verga. Me recargue allí furioso, frustrado y enojado, pero increíblemente excitado a la vez. Fue como si el tiempo se hubiera detenido. Mamá se mordía el labio y trataba de empujarse con ayuda de reposabrazos del sofá mientras el director la taladraba como una máquina. Los gemidos de mamá se volvían gritos cada vez que el la penetraba hasta el fondo.

Entonces pasó. El director gruño escandalosamente y deliberadamente la penetro unas veces más. Mamá trato de agarrarse con fuerza ya que casi la derriba al suelo. Repentinamente el jaló con fiereza el cabello de mamá empujándole a su vez la verga lo más profundo que pudo, se quedó allí quieto mientras mamá seguía empalada en su verga. Siguió gimiendo como un animal y mamá soltó a su vez un gran grito de placer. Entendiendo que él estaba llenándole el desprotegido coño a mamá de semen, también me corrí. El cuerpo de mamá quedó paralizado por un instante y después comenzó a correrse también de una forma muy escandalosa.

Se quedaron acostados allí por un momento, la cara de mamá enterrada en el sofá, roja no sé si de lujuria o de vergüenza.

"quítese." escuche que susurro.

Él se quitó de ella, su verga salió del coño de mamá con un húmedo sonido.

Ella solo se quedó allí con la cabeza en el sillón mientras e director se dirigió al baño. Después ella se incorporó lentamente, mirando todo el desastre que estaba entre sus piernas. No podía creer la cantidad de semen que había salido del director. Grandes gotas de semen escapaban del coño de mama y caían al suelo. Ella tomo su ropa y lo miró mientras regresaba a la sala de nuevo, desnudo.

"Es usted un bestia, un maldito animal ¿lo sabe? ni si quiera estoy tomando anticonceptivos." dijo mamá sosteniendo su vestido.

"si y tu dejaste que este animal profanara tu matrimonial coño." dijo en tono burlón el director, y sin intención alguna de vestirse se sentó en el sofá.

"¿porque mierda no se viste? prometió llevarme de vuelta a casa. Olvídelo, ¡tomaré un taxi!" dijo mamá enojadísima y se dirigió al baño.

"aún no hemos terminado putona," dijo el director fijando la vista hacia su miembro, tratando de poner dura la verga con su mano. Mamá se paralizo y se giró para mirarlo. Él se mofó viendo como mamá veía la monstruosa verga aun flácida."

"No te preocupes perrita, me tomare una píldora de las azules, bueno tal vez dos… ok ok, tres." y soltó una carcajada desagradable.

Mamá pareció no escucharlo y grito furiosamente "esto fue todo! si usted se atreve a decirle a alguien lo que paso aquí hoy, le juro, que diré que me obligo. No se acerque a mi o a mi familia ¡nunca más!" mamá trataba de sonar fuerte pero en el fondo sabía que no podía más.

"¿De verdad zorrita? ¿No recuerdas el video de tu hijito? de ¿qué cuarto crees que obtuvo esos archivos? él dijo extrañamente divertido y fue cuando entendí lo que decía. ¿Cómo pude haberme olvidado por completo de eso?

Mamá parecía no comprender nada porque se quedó parada allí mientras otro borbotón de semen caía de entre sus piernas hacia el suelo.

El director tomó unas pastillas azules del cajón, sacó un par y se las metió a la boca, después se las pasó con lo que le quedaba en el vaso de vino. Inmediatamente a esto comenzó a bombear su semierecta verga mientras decía. "casi dura de nuevo. ¿Acaso no te parece familiar esta habitación?"

Él tenía una cámara escondida! era muy tarde, carajo demasiado tarde. Todo había quedado grabado en video y yo… solo me quedé allí viendo como ese cerdo usaba a mi madre como su juguete. Empuñé mis manos con frustración y presione fuertemente la pared con ellos del coraje.

La habitación quedo en silencio unos instantes; creo que mamá acababa de darse cuenta de todo a este punto. Sus ojos parecían escanear la habitación, como tratando de encontrar el lente de la cámara.

El asqueroso director se paró con orgullo sosteniendo su erecta y pútrida verga con la mano. Todo era silencio hasta que el con su rasposa voz rompió la quietud. "Bueno nallely, quiero que vemgas hacia mi a en cuatro patas como una buena perra y me chupes la verga, a menos que quieras que te abra el culo sin lubricante“ dijo el director cínicamente.

Mamá puso los ojos como plato y la cara se le puso roja, no se si de coraje o que pero no emitió palabra alguna.

¿o me vas a decir que el puto de tu marido nunca te ha enculado? Jajajajaja.

Escuchar esas palabras fue como recibir un golpe en el estómago, todo comenzó a nublarse lentamente y mi cabeza empezó a dar vueltas, me estaba desmayando, pensé en mi madre y sabía que para el momento en que pudiera recuperarme mamá estaría estaría siendo enculada por el cerdo del director.

Continuara…