Veo a mi hija cogiendo con mi vecino maduro

Resulta que un día llegué muy temprano de la oficina, ya que más tarde tenía que ir a recoger mi auto que estaba en el servicio, en esos momentos no estaba en casa mi hija y mi esposa aún no llegaba de trabajar, entonces me metí a mi recamara y como tenía que hacer unas llamadas y confirmar algunos correos cerré la puerta, después de más o menos una hora escuché que abrieron la puerta de la casa me asome por la ventana y vi que era mi hija y se había quedado platicando con nuestro vecino, momentos después ambos entraron a la casa, no salí de mi recamara por qué aún no terminaba lo que estaba haciendo, poco despues escuche cómo subían las escaleras y cómo se abría la puerta de la recamara de mi hija en ese momento no le dí gran importancia pensando que era solo mi hija quien había subido y entrado a su recamara, no escuché que se cerrará la puerta y de pronto empecé a escuchar voces y risas, claramente escuché la voz de nuestro vecino el cual le decía a mi hija, no sabes las ganas que tenía de volver a estar contigo putita, de escucharte gemir y pedir que te coja, que te meta mi verga y que me grites que eres mi puta, a lo que mi hija con la voz entrecortada, supongo que ya muy caliente le contesto siiiiiii, papi quiero ser nuevamente tu puta, que me cojas cómo solo tú sabes hacerlo, quiero sentir toda tu rica y delicosa vergota dentro de mi y que me hagas gritar y gemir de tanto placer papiiiiii.

Escuchar todo eso en un principio me causo mucho coraje tenia ganas de salir  entrar a la recamara de mi hija y decirle al vecino que dejara a mi hija, pero al mismo tiempo sentí mucha excitación y morbo, así que sin hacer ruido abrí mi recamara y me asome cuidadosamente a la recamara de mi hija y la vi solamente en tanga mientras nuestro vecino estaba totalmente desnudo, ví que tenía una gran verga, larga, gruesa y llena de venas, sus huevos también eran grandes y le colgaban de una manera que hacían que se le vieran aún más grandes, en esos momentos vi que el tenia los dedos dentro de la panochita de mi hija, entraban y salían haciendo que ella se retorciera por el placer que sentía, entendí el por qué de su voz entrecortada y al mismo tiempo ella le acariciaba la verga y huevos con sus lindas manos, diciéndole ay papiiiiiii no sabes las ganas que tenía de sentir tu verga y huevos, tocarla, acariciarla y sentirla dentro de mi boca y panochita papiiiiii, mi vecino le dijo lo sé putitaaaaaa y por eso estoy aquí para que te la comas toda y también me hagas sentir mucho placer, así que empieza ya a comertela putitaaaaaa, se sentó en la orilla de la cama, la tomo de los hombros y la hizo ponerse de rodillas en medio de sus piernas, ella comenzó a besar sus piernas sin dejar de acariciar esos tremendos huevos y de pronto comenzó a besar y lamer la cabeza de esa gran verga, claramente ví como pasaba la lengua al rededor de la cabeza y le daba besos.

Poco a poco fue metiendo toda esa gran verga en su boquita mientras mi vecino la tomaba del cabello y le decía siiiii, siiiiii, asiiiii, asiiiiii putitaaaaaa tragatela todaaaaa, todaaaaa hasta el fondo putitaaaaaa, aaaaaah que ricooooo lo haces putitaaaa, su verga entraba y salía de la boca de mi hija, mientras que al mismo tiempo acariciaba sus huevos y el le acariciaba las tetas y las nalgas, de pronto se sacó por completo la verga de la boca y volteo a verlo y le dijo te gusta? Te gusta como lo hago papiiiiii? Siiiiii siiiii sabes que me encanta como me la mamas putitaaaaaa ella le sonrió y volvió a meter toda esa rica verga en su boca, se la estuvo mamando por un muy buen rato hasta que de pronto mi vecino le gritó que se venia, yaaaaa, yaaaaaa, me voy a venir putitaaaaaa, aaaaaaah, aaaaaah y le saco la verga solo para ponérsela en la lengua y comenzó a arrojar chorros de leche los cuales fueron directo a la boca de mi hija, se trago toda esa leche que me imagino estaba caliente y hasta rica por la forma en que se l estaba tragando, no dejo de chuparla hasta que supongo le saco hasta la última gota luego le limpio la verga y el le dijo ven putita ahora te toca a ti disfrutar de una rica mamada, se acomodo en la cama y el comenzó a chupar sus tetas, bajo besando todo su cuerpo hasta llegar a su panochita, comenzó a lamer de arriba a abajo y ella retorciéndose de placer le acariciaba la cabeza gimiendo y gritando le decía que no parara, papiiiiii, papiiiii que ricooo, que ricooo, sigueeeee, sigueeeee, la hizo tener un gran orgasmo mojandole la cara con sus jugos.

El no paro de chupar su panochita y entonces ella le gritó yaaaaa, papiiiii, yaaaaaa méteme tu vergaaaaa ya metemelaaaaaa, ya te quiero sentir dentro de mi, por favor, por favor papiiiiii cogemeeeeee yaaaaaa, yo para esos  momentos ya estaba súper excitado muy caliente y tocando mi verga que no es ni la mitad de la de mi vecino, entonces dejo de chupar su panochita y la jalo hacia la orilla de la cama, puso sus piernas en los hombros y le dejo ir toda su verga de un solo empujón, mi hija grito y le dijo aaaaaaaay papiiii que ricooooo me la metiste, que ricooooo, que ricooooo papiiiii, el comenzó a meter y sacar su vergota de la panochita de mi hija haciéndola nuevamente gemir y gritar cada vez más fuerte, asiiiii, asiiiii, asiiiii , que ricoooo, que ricoooo me cogessssss, aaaaaah papiiiii, papiiiiii que ricoooo que ricooooo, mmmmm papiiiii, papiiiii me estás cogiendo delicioso, mi vecino también le decía, aaaaaah que ricooooo aprietas mi verga putitaaaaaa, aaaaaah que rico te la comes eres toda una zorraaaaa, toda una putitaaaa, traga vergassssss y le empezó a decir quien es mi putaaaaaa, quien es mi putaaaa, mi hija con toda su verga dentro y muy muy caliente le contestaba yoooo, papiiii yoooo, yoooo soy tu putaaaaaaa, no podía creer lo que estaba viendo y escuchando mi pequeña princesa siendo usada y tratada como una puta por mi vecino y ella lo disfrutaba a más no poder, por mi parte ya estaba más que excitado y con mucho morbo sin dejar de observa todo lo que ocurría y tocando mi pequeña verga disfrutando de tremendo espectáculo.

Antes de pedirle que se pusiera en 4 la hizo tener por lo menos 2 orgasmos, cuando se puso en 4 el se colocó rápidamente detrás de ella y le dejo ir nuevamente toda su vergota de un solo empujón, al mismo tiempo que se la metía le daba de nalgadas haciendo gozar aún más a mi hija quien no paraba de gritarle que era su puta, en esa posición la hizo tener por lo menos 2 orgasmos más antes de que el se viniera y le diera una vez su leche en la boca, cuando le aviso que estaba por venirse ella se sacó su verga de la panochita y se puso de frente a el para comenzar a chupar su verga, en esta ocasión se la metió hasta el fondo y cuando la tenía toda adentro de la boca lanzo un fuerte grito diciendo aaaaaah me vengooooooo putitaaaaaa y le aventó toda su leche en la boca, ella no paro de tragarse toda esa leche caliente hasta la última gota, mientras se venía le masajeaba los huevos y al terminar de venirse sacó su verga y ella nuevamente la limpio por completo le volvio a sonreír completamente satisfecha le dijo que rica lechita tienes papiiiii, me encanta, el le acaricio la cara y le dijo siiiiii lo se se putitaaaaaa y será tuya las veces que quieras, entonces se recostaron en la cama, el le acariciaba las tetas y se las chupaba mientras ella le acaricia su enorme verga que aún estando flácida se veía imponente, pasaron solo unos minutos y le dijo ya papiiiii tienes que irte por que no debe tardar mi mamá o mi papá y no se que pueda pasar, el con todo el descaro del mundo le contesto no te preocupes putita que tengo verga para ti, para ella y por qué no hasta para el y se empezó a reír, en esos momentos me fui rápidamente a mi recamara y antes de que ellos se dieran cuenta de algo sali de la casa.

Fui por mi auto al servicio y al regrese a casa mi vecino estaba afuera de la suya, al estacionar mi auto y bajar para abrir el portón del garage se me acercó, me saludó y en voz baja me dijo, espero que te haya gustado el espectáculo de esta tarde vecino, no creas que no me di cuenta de que nos estuviste espiando todo el tiempo y no perdiste detalle de como se comía mi verga la putita de tu hija, así como también me di cuenta que no patabas de observar mi verga, no podía creer lo que me estaba diciendo y mucho menos sabía que decir, estaba atónito a todo lo que me decía, tienes una hija muy buena y muy putita cabrón, eres un papá cornudo y por lo que vi pito chico, por si quieres volver a ver a tu putita hija bien ensartada en mi verga mañana me la voy a volver a coger a la misma hora, ah y si quieres también para ti tengo y diciendo esto se acaricio la verga sobre su pantalón, se fue sin decir alguna otra cosa dejándome ahí parado y sin poder articular palabras alguna, dentro de mi comencé a sentir cierta excitación por todo lo que me dijo y mi pequeña verga reaccionó, al llegar a su casa instintivamente gire el rostro hacia el, al verme sonrió y volvió a acariciar su verga sobre el pantalón.

Se metió a su casa y yo a la mía pensando en todo lo que me había dicho, sin duda me había dejado muy caliente todo lo acontecido ese día.

Espero le haya gustado este mi primer relato de muchos que estaré publicando, ah por cierto mi hija se llama Brenda, mi esposa Elvia y yo soy Erick servidor y amigo.

Así mismo les dejo mi correo por si gustan comentarme algo.

Un saludo a todos.