Viaje de Trabajo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por porqueria15.
Tome el elevador, había sido un día bastante pesado y realmente quería llegar al apartamento que la compañía había puesto a mi disposición para poder descansar, camine despacio por el corredor, el complejo de apartamentos se miraba tranquilo, por la hora me imagine que todo el mundo estaría dormido, mire mi reloj, las 20:00 horas, bueno tarde no era, pero bueno, realmente la mayoría de apartamentos se veían como habitados por familias, así que bueno, de plano que si estaban dormidos.

Los apartamentos tenían ventanas amplias, la mayoría resguardando la privacidad de su interior con cortinas gruesas, otras pues abiertas de par en par, aunque las luces apagadas.
Se notaba que la seguridad que las familias era un bien muy preciado ya que no desconfiaban de que algún voyeur llegaría a interrumpir su privacidad.

Justo el apartamento que quedaba a la par del que me asignaron, las luces estaban encendidas, y se podía oír el bullicio de una familia, al pasar por la ventana que da al pasillo, pude ver sin problemas y confirmar lo dicho, una hermosa familia, el Papa de unos 30 años, jugando UNO con su esposa y su pequeña hija, una criatura hermosa de tal vez unos 8 años.
Estaba sentada de cara a la ventana y el papa estaba a su izquierda a la cabecera de la mesa, la esposa me daba la espalda, pero pude notar que tenía puesto una especie de pijama como la que usan las enfermeras o doctores de hospital.

Pase de largo y llegue a la puerta del apartamento, abrí y pase al apartamento, tal y como lo recordaba desde la última vez que llegue ahí hace un año, todo igual, aseado, limpio, como una habitación de hotel, a diferencia que el apartamento tenía 3 habitaciones, cocina, comedor y sala.

Bueno, me quite los zapatos, y estire mis dedos de los pies, me sentí cómodo, luego me prepare para el descanso, un poco de comida a domicilio, conectar mi notebook, conectarme un rato al www.
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com, chatear un rato con los compadres, talvez intercambiar un poco de juguetes, luego acceder a mi cuenta secreta y poder ver mis videos preferidos mientras “ahogo al ganso” un rato hasta que escupa toda la leche y así poder dormir placenteramente.

Tenía todo listo, en mi notebook ya se mostraba en la pantalla el video y yo tenía mi verga en la mano y realizaba el clásico movimiento con la izquierda mientras que con la derecha exploraba entre mis juguetes de mi cuenta secreta, pero de repente note por la ventana del apartamento una pequeña silueta que se asomaba, y a pesar que estaba seguro que dese afuera no podían verme, ya que tenía la luz apagada, mejor guarde mi verga en mis calzoncillos y me levante acercándome a la ventana, y vi como la silueta pertenecía a la niña de la familia del apartamento vecino.
¿Qué estará haciendo afuera?, luego me percaté que en la puerta de su apartamento estaba su papa, dándole un beso a su esposa y mama de la niña, parecía que la señora iba de salida, y vi que llevaba una bata blanca sobre el pijama verde que le había visto recientemente, ok, era doctora y como que iba a su trabajo, de plano turno de noche, mire mi reloj, eran las 21:00 horas.
La niña estaba correteando por el pasillo y luego corrió y dio un beso a su mami y luego se fue la señora y el hombre y la niña entraron a su apartamento.

Bueno, regresé a la mesa donde tenía mi equipo y como me habían cortado el ritmo dispuse volver a conectarme al chat de www.
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com , y entonces mientras me encontraba compartiendo juguetes con los compadres sucedió…
A través de la pared escuche una especie de quejido, casi imperceptible, pero estaba seguro que había escuchado algo, me despedí de los colegas del chat y me retire, luego corrí a la cocina y con un vaso grande lo coloque en la pared contigua al apartamento… y escuche… era claro que eran … pujidos, tenues, casi imperceptibles pero estaba seguro… eran pujidos… sonidos típicos de que alguien estaba cogiendo a alguien… lo primero que me paso por la mente fue… ve que cabron, el papa de la niña de plano que espero a que se fuera la mama para meter a la amante al apartamento…
Luego me puse a pensar, los apartamentos son similares, así que, por la posición del sonido, debería estar cogiéndosela en la sala, y pensé… a ver qué tal, ¿será que podre ver un poco de acción?
Así que me puse un pants y en calcetines para no hace ruido salí del apartamento y despacio me asome a la ventana, la cual para mi suerte no tenía bien corrida la cortina, pude vislumbrar la silueta del tipo, el muy cabron estaba cogiéndosela en la sala para que la niña no se diera cuenta, afine la vista y entonces pude ver bien quien era la amante… lo cual dicho sea de paso, me provoco una erección casi instantáneamente.

El tipo estaba desnudo, solo tenía puestos los calcetines, no era un tipo atlético, pero no estaba completamente descuidado, una pequeña panza pero nada de qué avergonzarse, estaba inclinado hacia delante de pie, delante de la mesa de centro de la sala, su amante estaba sobre ella, en posición de perrito, y él la tenía aferrada con sus manos por su cintura, su verga, nada del otro mundo, talvez de unas 5 a 6 pulgadas, está entrando y saliendo de su amante… se veía que la penetración era intensa y profunda, lo hacía con mucho cuidado, y bueno… no lo puedo culpar, se notaba que la estreches de esa puchita debía ser increíble, y es que la amante del tipo no era otra que … la hermosa princesa con quien estaba jugando UNO hace unas horas… su HIJA.

La preciosa nena estaba desnudita, con su pelito suelto sobre su cabecita, que levantaba con cada empujón que su papito le estaba propinando, era ella la que emitía esos deliciosos pujidos con cada envión de su papito dentro de su puchita, la cual lo recibía casi por completo.

¿Qué hago?.
me dije… me voy, me quedo en la ventana, lo cual a todas luces no era lo más lógico ya que me podían ver desde afuera de otro apartamento y seguro que me pondrían de patitas en la calle por fisgón.
¿Qué harían ustedes?
Pues me dije a mi mismo, el tipo tiene que saber que hay gente en otro apartamento, ¿o no me vio pasar cuando iba hacia allá?, no hice mucho ruido cuando saque mis cosas y me prepare para mi sesión de masturbación, así que tal vez no sepa que hay gente del otro lado de la pared y por eso decidió cogérsela en la sala.

Bueno… que hago, que hago…, mientras pensaba en ello, la vida como siempre me daba una señal, el tipo saco su verga de la puchita de su hija y la movió del mesa para acostarse él y quedar con su tolete apuntando al cielo, luego la nena como ya sabiendo que procedía, se subió sobre él a horcajadas, y poco a poco se comenzó a meter todo el miembro de su papi, pujando como hasta ahora lo había estado haciendo, él le tenía sujeta de su cinturita que prácticamente le rodeaba con sus manos de hombre adulto… y yo podía ver claramente como su culito quedaba expuesto… Bueno… me dije, ¡eso es todo!, la última señal para mi será si la puerta está sin llave, así que me acerque sigilosamente y muy despacio gire la perilla de la puerta… ¡Oh por Dios! Estaba sin llave, eso me excito tanto que mi verga estaba a mil.

Abrí despacio la puerta sin hacer ruido y entre en la sala, la luz que tenían era la de una pequeña lampara que si bien iluminaba toda la habitación, no era muy brillante así que todo estaba en semi penumbra, ya a esa distancia pude sentir el olor de los sexos en plena faena, me quite el pants y el calzoncillo y avance lentamente hacia la pareja, la nena no podía verme ya que me daba la espalda y el tipo igualmente no tenía visión de atrás de su hija ya que la tenía cabalgándolo de frente.

Me acerque un poco más, y entonces entre en el campo de visión del tipo… aquí podrían ocurrir dos cosas: 1.
Se detenía el tipo y nos liábamos a golpes, por lo que mi entrenamiento en el ejercito me serviría de mucho o 2.
El tipo consentía.

Cuando el tipo abrió los ojos que tenía cerrados en un rictus de disfrute pleno ya que en ese momento su verga estaba casi por completo dentro de su hija, me vio a la cara, sus ojos se sorprendieron, y se sorprendieron más cuan bajo la mirada y se encontró con un cipote a todo su potencial, creo que de inmediato noto que le superaba por lo menos en una pulgada, y mi pene era ligeramente más grueso, lo tenía en mi mano y me masturbaba lentamente.

El tipo volvió a ver a su hija y atrajo su cabecita sobre su pecho, y ella seguía sus pujidos con cada entrada de su verga en su puchita.

Le vi a los ojos, y entonces le hice una inclinación de cabeza, como pidiendo permiso para incorporarme a la fiesta.

Entonces mi noche se realizó… el tipo solo me devolvió una sonrisa y no tuve necesidad de más.

– Clarita, necesito que te pongas suavecita, ¿sí? – le dijo el tipo de forma muy dulce.

– Porque papito, ya estas adentro, ¿no te gusta así?
– Si mija pero necesito que te pongas más sueltecita confía en mí, ¿sí? – insistió el papa, a lo que para mí fue mi señal de proceder.

Me acerque por detrás y pude apreciar el culito que estaba a punto de disfrutar, me ensalive bien el cabezón de mi verga, y como si estuviéramos sincronizados, el papa de la niña le sujeto de sus nalguitas, abriéndolas y brindándome una preciosa vista y acceso al anito de su hija.

Así que me acerque, apunte y coloque la punta ensalivada de mi verga en el botón de su anito, eso automáticamente hizo reaccionar a Clarita – ¿Papi? ¿Qué me estas poniendo en mi culito?
– Tranquila Clarita, es un amigo que se unirá a nuestra fiesta y te va a coger tu culito, ¿ok?, te recuerdas como lo hicimos con el abuelito, pues será igual así que flojita y cooperando – le dijo el papa, eso me puso a mil, el muy suertudo ya se había cogido en doble tándem con su papa a la niña, uff.

Mi glande hizo presión en el botoncito del culito de Clarita y sentí como poco a poco la frontera fue siendo vencida, mi cabezón se deslizo, y sentí la presión de sus paredes anales, fue grandioso.

– Uyyy papito, es… es más grueso que el abuelitooooo, aaahhggggg, me presiona todaaaa.
– exclamo la nena.

– Tranquila nena, ya va entrando, siento como resbala y topa con mi verga por dentro, ¿lo disfrutas? – le dijo el papa a la nena mientras empujaba su verga dentro de puchita, y tenía razón, yo también sentía algo duro en la parte baja de mi pene, y creo que era la verga de él, en poco tiempo tenía casi todo mi tolete dentro del culo de la pequeña y sus nalguitas rebotaban en mí.

Comenzamos un ritmo delicioso entre los tres, el entraba, yo salía, el salía yo entraba, y en un momento los dos estábamos dentro, la nena no podía más que pujar y pujar, fue maravilloso.
Estuve penetrando por más de 15 minutos, pero me traicione a mí mismo ya que las pajas previas no me permitieron aguantar mucho, y en momento sentí que explotaría, y se los dije.

– Ugg, ufff, me vengo, siento que exploto… – de inmediato como impulsada por un resorte la niña se desabotono de los dos, y se puso de rodillas, el papa se puso de pie entendí el movimiento, y me puse a la par del hombre, la nena tomo con sus manitas ambos toletes, y se lo metió a su boquita, masturbándonos, era toda una succionadora, se alternaba entre la verga de su papito y la mía, era maravillosa.

Levante la vista y choque la mirada con el papa, y solo atine a decirle: – Que linda hija tienes, eres un hombre con suerte – El sonrió y me respondió – Si lo sé, desde los 5 años la vengo entrenando, si vieras que alegre se pone cuando vamos a la casa de mi papa, hacemos unas fiestas alegres con mis hermanos y sus hijas.

– La imagen en mi mente fue demasiado, y en el momento en que estaba la boquita de Clarita en mi falo, le sujete su cabecita y empecé a soltar la leche.

– Ohhh, ahhhgggg que delicia, tómala nena, toma mi lechita.
ufff – y le solté los lechazos más intensos que había podido sentir hasta ahora.

– Voy mija voy yo tambiéeeeeennnn, ahhhggggg, – y el papa empezó a soltar lechazos también, y la nena como toda una experta atrapo varios en el aire.

Con todos los mecos en la boquita y algunos regados en su carita, la nena solo hizo el buche y se tragó todo.

– Wow, muchas gracias, – fue lo único que atine a decir.
El papa se sentó en el sillón, y la nena se sentó a la par de él.
Su verga había perdido dureza se estaba reduciendo.

– Pues de nada amigo, ya sabes, cuando quieras y la nena esté disponible, te esperamos.

Me puse mi pants y estreche la mano del tipo, y a la nena le sobre la cabecita, a lo cual solo me respondió con una sonrisa, aunque todavía tenía lechita en la comisura de sus labios.

Sali de la casa y luego me fui a acostar… Wow, realmente cuando la vida se pone de tu lado… se pone de tu lado.

FIN.

N.
A.
el relato pasado es puramente fantasia del autor.