Vida de incesto I (De fiesta con mi tia Adriana)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por FenixDante.
Mi tía Adriana es delgada de curvas anchas, un trasero grande y de pechos un poco grandes, tiene cabello castaño un poco rizado y mide aproximadamente 1.70, vive sola con mi prima ya que mi tío tuvo que ir a trabajar a los Estados Unidos.

Un año después, cuando mi prima salio del jardín de niños mi tía decidió hacer una fiesta, invito a toda la familia pero la verdad no tenía ganas de ir, era el típico fin de semana en donde después de una semana de escuela solo quería pasar un rato jugando en línea, mis padres insistieron en que tenía que ir a la fiesta y como no dejaban de molestar acepte.

Al llegar a la casa de mi tía vi a todos reunidos en el comedor menos a mi tía Adriana, salude y me dirigí a la sala a ver un poco de tv, unos minutos después vi bajar a mi tía, se veía muy hermosa, llevaba puesto un vestido largo entallado de color rojo muy escotado, después de unas horas mis padres regresaron a la casa, les dije que yo me quedaría un rato más, a medida en que fue avanzando la fiesta poco a poco la familia se iba retirando hasta llegar cerca de la media noche, fue entonces que solo quedamos mi prima, mi tía y yo.

Mi prima se había quedado dormida y mi tía me pidió que la llevara a su recamara ya que ella no podía cargarla y subir por las escaleras debido a su vestido, después de dejar a mi prima en su cama fui al cuarto de mi tía para decirle que me retiraría a mi casa,

-Bueno tía, ya me voy a mi casa porque ya es muy noche

-Quédate un rato más Angel, vamos a platicar un poco

-¿Y de que platicaremos tía?

-No sé, ¿qué tal vas en la escuela?

-Pues bien, creo

-Eso es bueno

-jejeje si ¿y tú como has estado tía?

-Bien, pero últimamente me siento,… no sé cómo decírtelo

-¿Sola?

-jajaja si, algo así

-No sé cómo mi tío es capaz de descuidar a una mujer tan hermosa como tu

-jajaja no digas tonterías que me las voy a creer

-Pero es la verdad tía

-Pues gracias, oye, aprovechando a que estas aquí ¿me podrías hacer un favor?

-Claro tía, ¿que necesitas?

-Pues hoy fue un día pesado por lo de la fiesta y me caería muy bien un masaje

-¿Quieres que te de un masaje?

-sí, ¿me harías ese favor?

-Pero soy muy malo

-No importa, ándale

-Está bien

-Bueno, ayúdame a bajar el cierre de mi vestido

Entonces mi tía se paró y se puso frente a mi dándome la espalda para que le ayudara con su vestido, le baje el cierre y ella poco a poco fue bajándose su vestido, tenía puestas unas bragas blancas un tanto diminutas que hacían lucir ese trasero tan maravilloso que tiene, como no tenía sostén, con una mano se tapó los pechos y con la otra se quitó los tacones y se recostó sobre la cama.

-Ok Angel, ya puedes empezar

Comencé con el masaje, vi como sus pechos sobresalían un poco por los lados, a los pocos minutos mi tía empezó a gemir, escuchar sus gemidos con la voz tan dulce que tiene hizo que tuviera tremenda erección, seguí dándole masaje por unos minutos más hasta que vi que sus bragas se estaban mojando, entonces ella me miro y se dio cuenta del bulto que tenía en el pantalón.

-Angel… veo que tienes un pequeño problema

-¿De qué hablas tía?

-Del problemita que tienes en el pantalón

Entonces me di la vuelta cubriéndome

-Perdón tía, pensaras que soy un pervertido, pero es que el estar con una mujer tan hermosa como tu hizo que me pusiera así

-Tranquilo, no pensé eso

Ella me jalo tomándome por el cuello, me dio un beso y me quito mi playera

-Espera tia… ¿que haces?

-Se que dirás que soy una puta o una zorra por querer hacer esto con mi sobrino pero es que no aguanto mas las ganas de tenerte conmigo, lo he deseado desde que empece a notar que me veías con lujuria

-Pero… ¿que hay de mi tío?

-El ya no me da la atención que me daba antes, ya han pasado 6 años desde la ultima vez que tuve sexo

-¿Pero por que yo tía… por que conmigo?

-Por la forma en como eres, por la forma en como me tratas y si voy a tener una aventura quiero que sea contigo

Entonces sin dudarlo y por el calor de la situación me quite el pantalón y el bóxer, recosté a mi tía y le quite sus bragas,
ella dijo que esperara, se levanto y saco un condón del cajón de su ropa interior para dármelo.

-Tía, no savia que te gustaban los condones de frutas

-Ya, no te burles y pontelo

Tome el condón y me lo puse, mi tía se recostó nuevamente y yo le abrí sus piernas poco a poco.

-Tía Adriana… ¿estas segura de querer hacerlo?

-Si, quiero que me tu me quites esta soledad

Sin dudarlo más introduje mi pene en ella, al hacerlo ella soltó un pequeño gemido

-Vamos… mételo todo

En ese momento comencé con un leve movimiento y aumentando el ritmo mientras escuchaba los gemidos de mi tía, notaba lo excitada que ella estaba, mientras aumentaba el ritmo le tocaba los pechos y la besaba, ella solo pedía mas, me decía que no parara, sus gemidos aumentaban mas y mas.

-Tía… mi prima nos puede escuchar…

-No te preocupes… ella no despertara… no pares… sigue… sigue…

Mientras me decía eso, ella me apresaba con sus piernas alrededor de mi cintura, continuamos por un buen rato mas llegando al clímax, mi tía inesperadamente soltó un espasmo mientras daba un leve gemido, ella había tenido un orgasmo mientras yo me corría, mi tía quería soltar un grito pero lo reprimía por miedo a despertar a su hija. Ella me abraso y comenzó a besarme.

-Gracias por este momento Angel

-Tía, no des las gracias

-Dime una cosa, ¿Te gusto estar conmigo?

-Claro que si tía, fue grandioso

-Pues espero que se vuelva a repetir

-¿Entonces lo haremos en otra ocasión?

-Si, solo tenemos que ocultar muy bien esto que hacemos

-Si, todos se volverían locos

-Lo se, bueno, párate y ven conmigo

-¿A donde vamos tía?

-Quiero tomar un baño contigo

Esa noche mi tía y yo tomamos un baño juntos, me quede a dormir con ella, mi tía se veía feliz, no podía creer que las fantasías que tenia se habían hecho realidad esa noche