Violada por papá

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi nombre es Angélica, mi edad 20 años, mi historia no sé si es común pero encontré este sitio y creo que es un buen lugar para desahogarme.
Mi familia era normal o eso pensaba yo, mi padre un hombre que actualmente tiene 45 años bien conservado y de aspecto atractivo, mi madre de su misma edad siempre atenta y cariñosa.
Soy hija única y desde que tengo memoria mi padre es un hombre recto y estricto, detesta las impuntualidades y la desobediencia sobre todo si es hacia su persona.

A los 12 años, mi madre entro en mi habitación para decirme que se iría de la casa, pero que no podía llevarme con ella, por más que le roge para irme a su lado me dijo que no podía pues mi padre enfurecería si eso llegaba a pasar.
Me dio un beso en la frente y me pidió que me cuidara mucho, que esperara a mi mayoría de edad para que ella viniera a buscarme.
No entendía nada de lo que estaba pasando pero eso me dolió bastante, verla partir de esa manera.
Desde ese momento notaba las miradas de mi padre a veces lascivas…
Mi adolescencia transcurrió bastante rápido pero sin demasiadas libertades, el me exigía mi presencia en casa y cumplir con mis obligaciones de ama de hogar, yo siempre acataba sumisamente a todo lo que me pedía, su malhumor era de espanto asi que responder afirmativamente a cada una de sus propuestas era lo mejor que podía hacer para evitar algún inconveniente.
Todo daría un cambio radical un día que me llamo a hablar en la sala a mis 13…
-Angélica tenemos que hablar de algo muy serio.
En tono severo.

-Dime padre
-Eres una niña muy hermosa y delicada
-Gracias padre
-Sabes que desde que se fue la malagradecida de tu madre no he tenido mujer.
Su tono cambio al igual que su mirada, se sentó cerca de mí acariciando mi pierna.

-Si padre eso lo sé, respondí algo nerviosa por sus caricias.

-Eres todo un ejemplar de hembra… Y las hembras como tu deben saber cuál es su lugar… Están en este mundo para satisfacer a machos como yo
Me aterre y trate de levantarme pero se colocó sobre mí, dejando caer su peso yo luchaba pero era inútil podía sentir esa gran erección chocando contra mi panza.

-Padre deje por favor… Decía entre llanto
-A ver puta, eres una hembra y yo un macho y las putitas como tu deben ser montadas por machos de verdad
Metió su lengua en la mía dándome un beso brusco, duro sus manos rasgaron mi ropa a paso que yo comenzaba a resignarme.
Saco mi corpiño casi arrancándolo y lastimando mi piel, con su palma abofeteo mis tetas, yo daba pequeños grititos de dolor cuando pellizcaba mis pezones, temblaba y su mirada me atemorizaba.
Me bajo el pantalón con las bragas de un tirón y yo grite de la impresión mi chochito con pocos pelitos hizo aumentar más sus ganas de montarme.

-Uff que rico chocho tienes puta.
Me lanzo una palmada en el.
Como voy a disfrutar rompiéndote
-No padre por favor no lo haga
-Mira zorrita mientras más te quejes más duro te dare, entiendes perra?
Mi cuerpo virgen estaba siendo violado por mi padre, mordia mis tetas y su palma sobaba mi chocho mojado, no lo pude evitar esas caricias groseras me hicieron mojar.
Se bajo el pantalón mostrando una gran verga de unos 21cms
-Abre la boca puta aprenderás como es una verga de verdad
Tomo mi cabeza y la acerco, no quería abrir mi boca pero continuo hasta que cedi, no tuvo reparo me cogia la boca con fuerza, un mete saca profundo me ahogaba y tosia por las estocadas que me metía, cuando más no podía la saco reluciente de baba.
Me tomo y me hizo ponerme en cuatro, azotando mi culo
-Uff que buenas estas perrita, como gozare abriéndote esos agujeros de puta que tienes
Me dio otro azote, su verga se acercaba a mi chocho virgen lo rozo un rato y sin aviso me la metió completa de un envión, sentí como si me partia en dos el dolor era insoportable, le suplicaba que se detuviera pero no me hacia caso, la metia hasta el fondo yo lloraba pero algo raro sucedió luego de un rato de ese vaivén un placer se produjo, mezclado con el dolor pero me gustaba
-Que puta eres! Te gusta ser clavada por tu padre?
-Siii uff me encanta cabron dame!! Decia siendo otra me converti en una perra deseosa de verga
Mi padre no se detuvo hasta que se corrió en mi chocho, luego saco su verga flácida llena de mis jugos, leche y sangre.
Me sento en sus piernas acariciándome, a pesar de no haber querido al principio lo disfrute al final y seria el comienzo de muchas aventuras a su lado