Violo a mi hermanita súper rico 2
Lo que siguió con mi hermanita después de aquella ocasión tan deliciosa.
No podía comprender completamente lo que había pasado con mi hermanita pero si tenía seguro que me había encantado y que deseaba más y decidí tener más ocasiones de pedir permiso para que durmiera conmigo y así pasaron unas tres ocasiones sin que hiciera nada para que no me descubrieran hasta que una noche que dormimos juntos mi hermanita y yo en el cuarto de mis papás me decidí a hacerlo de nuevo pasaron las horas y como a eso de las 2 de la mañana cuando todos dormían me levanté y comprobé que nadie estuviera despierto.
Al confirmarlo puse manos a la obra y comencé a tocar a mi hermanita primero sentí sus piernas y poco a poco subí mi mano hacía su culito para sentirlo y de ahí a su vaginita así estuve tocándola como unos 5 minutos, mi pene cómo era de esperar estaba que explotaba de la excitación entonces baje su calzoncito puse un poco de saliva en mis dedos y masajeé su apretado agujerito introduciendo mis dedos uno a uno cuando sentí que ya estaba sencillito me acomodé de manera cómoda tomé mi pene y lo llené de saliva también lo puse justo en su agujerito y me dispuse a comenzar.
Lentamente le daba empujones presionando mi pene para que entrara no tenía éxito y le eché un poco más de saliva e hice más presión pero esta ves levanté una de sus piernitas un poco para mejor espacio yo moría de lo rico que se sentía y me daban ganas de darle sin piedad pero claro no podía pues mis padres estaban ahí durmiendo.
Cuando por fin después de mucho intentarlo sentí una pequeña succión y el cómo si tronara algo y mi pene entro como si nada hasta el fondo mi lujuria se desbordó y la embestí sin piedad subiendo la fuerza poco a poco.
Ella sin movimiento alguno ni señal de que despertará recibía mi pene completito era tan delicioso ver cómo entraba y salía de su culito, saber que me estaba cogiendo a mi hermanita como loco y así estuve por media hora dándole y dándole hasta que sentí algo húmedo dentro de su culito y miré me sorprendió al ver que era sangre pero no dejé de darle pues al mirar la sangre saliendo me provocó un deseo incomparable tomé aire y le empecé a dar con todo.
El sabroso gusto que sentía al darle sabiendo que le había desgarrado el ano a mi hermanita me motivaba a no parar quería destrozarla la tomé de su cintura y la levanté sin hacer ruido y cargándola la saqué de la habitación hacía la sala con mi pene clavado ya en la sala no tuve compasión de ella y estando más confiado me la cogi con todas mis fuerzas yo quería que despertara y que así sintiera lo que le estaba haciendo y que gritara de dolor para que solo provocara más excitación en mi, quería que viera que la estaba haciendo mi puta que su hermano metía su pene y deseaba con locura violarla.
Y entonces pum me vine dentro de ella le rellené su culito de lechita y caí rendido al lado pero por más grande que fuera mi cansancio mi deseo quería más y después de unos segundos de tomar aire me arrodillé frente a ella y chupe su vaginita saboreando cada rincón y su culito derramando mi lechita lo limpié un poco y también lo chupe metía mi lengua probando su rico sabor me enrolé tanto que no noté que ella se despertaba un quejido me avisó volteé a verla y solo dijo.
Ella: qué haces hermano, que se siente muy bien.
Yo: ammm, solo juego que comía gente jajaja
Suena tonto pero que le decía en ese momento que me moría de preocupación.
Ella: jajaja pues sigue por que me gusta, siento rico.
Yo: claro hermanita como tú gustes.
Imagínense mis ganas y deseos al haber escuchado esas palabras chupe como loco y me di gusto completamente.
Cuando sentí que ya estaba por venirme de nuevo tomé me pene me quite de sus nalguitas y dirigí mi miembro duro a su boca ella no supo que hacer y le dije que haría.
Yo: hermanita abre tu boca y meteré mi pene en ella, cuando esté dentro chúpalo como una paleta.
Ella: bueno hermano haré lo que digas.
Metí mi pene en su boca y como le dije comenzó a chuparlo era tan rico el cómo lo hacía que parecía que ya fuera experta tomé su cabeza y le di más rapidez a sus chupadas la dejaba adentro ahogándola un poco y la sacaba para seguir dejando que me la mamara hasta que me vine y se hizo hacia atrás escupiendo mi leche.
Ella: que hiciste que me echaste
Yo: mi lechita hermanita pruébala y te gustará
Ella: pues sabe un poco rara pero si me la tengo que tomar para chupar tu palo durito lo haré.
La limpié y también yo vimos que nadie se hubiera dado cuenta y nos fuimos a dormir sin problema alguno.
Si quieren más díganme bandita
te dire me encanta como has relatado asi que espero mas de estos relatos amigo
Riko espero y se una el padre
deliciosos, me excito mucho, espero que continúes amigo…