Ya soy abuelo
de como logre que mi hijo preñara a su mamá, mi esposa.
YA SOY ABUELO
Cuando era joven y recién terminaba de estudiar en la universidad, me juntaba a jugar domino con el papa de una novia y sus amigos, me invitaban cuando faltaba alguno de ellos.
En las platicas mientras jugaban, el Sr. Gustavo que era el de mayor edad de esos amigos, nos contó una anécdota que me dejo marcado. Nos narro de lo que supo de un cliente el cual contaba que le gustaba compartir a su esposa con su hijo. Todos expresaban sus puntos de vista, que había un dicho antiguo en que nunca se debería de compartir la esposa, el caballo y la pistola. Era un sinfín de comentarios de todos los presentes.
Pero si me dejo una profunda huella de lo excitante que seria compartir a la esposa con su propio hijo.
La vida paso, la novia se compartió en esposa, no funciono y nos divorciamos. Pero ya con 36 años conocí a una mujer divorciada ella, sin hijos y decidimos probar que tanto funcionábamos como pareja.
Después de un par años de convivir se logró embarazar y nació nuestro primer hijo. Luego vino el embarazo de una niña.
De plano no había reparado en esa platica que escuche de joven y me vino a la mente cuando mi hijo tenia 12 años, el notar como le iba cambiando la voz me hizo reflexionar que ya era un jovencito adolescente y notar que lo mas seguros es que comenzaba a tener necesidades sexuales.
Así que empecé a ejecutar un plan. Obviamente no contaría con mi mujer como colaboradora de mi plan. Quería compartirla con mi hijo…el primer paso que di fue que aprovechando que uno de mis empleados trabajaba de tiempo parcial como guardia de uno de los mejores antros de la ciudad, le encargue si me podría traer las gotitas que les ponían a las chicas americanas que entonces venían a esos antros y con las cuales eran víctimas de abusos sexuales.
El segundo paso que ejecute, le propuse a mi mujer que quería que tuviéramos otro bebe, así que seria bueno que se quitara el dispositivo intrauterino que utilizaba como método anticonceptivo. Con muchas dudas sobre si seria una buena decisión, fue con la ginecóloga y se lo quito. Ella dudaba porque ya tenia 43 años y sentía que era un riesgo. La doctora le dijo que seria bueno que tomara un tiempo de reflexión.
Así que continue con el plan, una noche le pedí que me sentía indispuesto del estomago y que mejor me quedaba a dormir en la recamara de mi hijo y que el se fuera a dormir a mi cama. Así lo acepto y al mismo tiempo le puse las gotitas de escopolamina que me había conseguido el empleado. Al estar bajo sus efectos le ordene que se dejara únicamente un camisón cortito y se metiera a la cama cuando mi hijo ya se había quedado dormido, se pusiera de posición de cucharita junto al cuerpo de mi hijo y le empezara a tocar su pene y colocara las manos de el sobre sus pechos, así lo hizo, le ordene que acariciara suavemente el pene de Jr. por encima de su boxer, automáticamente empezó a tener una erección en su pequeña verga. Desde la entrada de nuestra recamara iba supervisando su acción. Me daba muchísimo morbo y yo también comencé sentir como se me paraba mi verga.
Aprovechando que el clima era algo caluroso por ser primavera así que se destaparon de sabanas y cobijas, yo tomaba mientras fotos y video de su accionar. Ella le sobaba y acariciaba el pequeño pene y sus testículos a mi hijo. El medio despertaba …pero se volvía a dormir.
Eso fue durante la primera noche. No sabía que tanta escopolamina había que darle que darle a mi mujer y por cuanto tiempo le hacia efecto. Los deje así y me fui a dormir. Al día siguientes continue con mi idea de quedarme en la recamara de mi hijo. Les comenté que había dormido bien a pesar de lo “indispuesto del estómago” que me encontraba. Repetí la rutina y ahora la instrucción incluyo que le quitara los pantalones del pijama a mi hijo. Siguió acariciándole el pene y testículos, pero me di cuenta que como todavía no eran muy grandes, las nalgas de mi esposa que si son voluminosas no permitían que le acercara el pene a la entrada de su vagina. Eso me indico que tenía que cambiar de posición, pero lo que si pudo hacer es que le guiaba las manos de mi hijo a que las pusiera sobre sus senos y pezones. Mi hijo ya empezaba a reaccionar al tocarlos y vi como su pene se levantaba, era únicamente cuestión de tiempo y algo de guía para que instintivamente supiera que hacer con el cuerpo de su mama. Ella a pesar de estar drogada se le ponían los pezones duros y se le marcaban hermosamente a través de su fino camisón.
Esta rutina siguió por un par de días más. Yo hable con mi hijo y le dije que por favor no comentara con sus compañeros o compañeras y ni con su hermana, que se quedaba a dormir con su mama. Que era nuestro secreto. Que luego se podrían burlar de el diciendo que tenía “mamitis”. Así lo entendió el y me dijo que no lo comentaría.
Seguí platicando con mi hijo y le empecé a preguntar que si podía dormir bien con su mama. Le pregunte directamente que si le gustaba tocar el cuerpo de su mama, esto hizo que se pusiera rojo y algo turbado. Ya lo tranquilicé y lo comencé a alentar a que la tocara más. Hice hincapié en que su mama era muy bonita y muy sexy. Mi hijo al escuchar mi platica y ver que lo animaba a tocarle y verle como mujer, conociendo que sus hormonas se estaban activando, se sintió con mucha más confianza y de alguna forma, ya no lo vi como niño…lo vi como un hombre pequeño. Le comenté que a mí me gustaba tocarle los pechos, pezones y abdomen y como le gustaba también a ella que se los tocara, que le diera de besitos en el cuello, eso la ponía cachonda.
Al ver que mis palabras despertaban en mi hijo esa actitud de machito, me animo a preguntarle que si sabia que su mami dormía sin pantys. Él me dijo que no lo sabía. Que le veía que usaba el camisón corto. Y entonces le di instrucciones de cómo debería de subirle el camisón y que pudiera tener una buena vista tanto de las nalgas de su mamá y que podía verle su conchita poco peluda porque se la depila. En ese instante vi cómo le brillaron los ojos con una chispa de libido que no le había visto anteriormente.
Así que a partir de entonces le daba indicaciones dentro de la recamara en cuanto le empezaba a hacer efecto la escopolamina, mi hijo solito empezaba a acariciar los pechos y ahora todo el cuerpo de su mama, yo mientras tanto le indicaba a mi mujer que se arremangara su camisón y en otros días una delgada camiseta que usaba para dormir, esto sucedió hasta que una noche le dije que se desnudara, cosa que ella obedeció. Recuerdo perfectamente la expresión que tuvo mi hijo al ver el cuerpo desnudo de Lulu su mamá. Fue cuando le ordene que le enseñara su preciosa vagina y le di instrucciones a mi hijo de cómo debería de besarla, lamerle y meterle la lengua en su rajada.
Ella se retorcía cuando mi hijo le besaba su clítoris y yo aprovechaba para tomar muchas fotos de la acción. Mi verga estaba a punto de explotar. Entonces le dije a mi mujer que se pusiera boca arriba y abriera las piernas, le dije a mi hijo como debería de meter su verga dentro de la vagina de su mama y ella ayudaba a orientarlo. Fue un momento mágico, fue ahí cuando se me vino a la mente que la preñara. Lo fabuloso que seria que quedara embarazada por nuestro hijo. Me pareció maravilloso que me convirtiera en abuelo. Le pregunte a mi hijo que, si sentía esa sensación como de orinar, porque él no había tenido hasta ese momento alguna eyaculación. Con las caricias y toqueteos de mi mujer solo alcanzaba a ponerle duro su verga. Entonces le dije como mover las caderas y que se pusiera entre las piernas de su mama. De hecho, le detenía las piernas abiertas haciendo con ellas la V mientras estaba boca arriba y mi hijo le empezaba a penetrar. No duro mucho cuando ya vi que estaba eyaculando en su madre, cuando lo saco, alcanzo a escurrir algo de semen y mantuve las piernas de mi mujer levantadas al sostenerlas de sus tobillos. No quería que el semen de nuestro hijo se escurriera afuera de la panocha de mi mujer.
Yo también me vine nada mas de ver, no fue necesario ni masturbarme.
Afortunadamente alcance a tomar fotos del acto al dejar la cámara grabando y sostenida en el tripie. Así que lo continúo haciendo durante los siguientes días en que sabía Lulu estaba fértil. A mi hijo todas estas experiencias le hicieron cambiar su actitud y creo que hasta su físico. Lo vi crecer en muchos aspectos muy velozmente. En los siguientes días, ya mi hijo era quien le ordenaba como colocarse, le pedía que le besara la verga, mientras el le acariciaba su coño o sus pezones. Le gustaba besarlos y darle pequeñas mordidas. Mientras le tomaba videos.
Así estuvo durante un mes y medio, fue cuando hicimos una prueba rápida de embarazo que resulto positiva…pero para estar seguro lleve al laboratorio la muestra y nos lo confirmo. Yo estaba eufórico. Mientras mi hijo ya tenia dominada a mi esposa y se la cogía en varias posiciones, la ponía de perrito, esta me encantaba ver como se le movían los pechos, primero le besaba su rajada y su ano, me dijo que si Lulu se los podía depilar. Que no le gustaba sentir los vellos. Así que procedí a sugerirle a Lulu que se rasurara. Durante todo este tiempo la actitud de mi mujer cambio. Parecía que estaba como algo desorientada y como que no se concentraba. No cuestionaba nada de lo que le ordenaba aun sin estar bajo los efectos de las gotitas.
Durante todo este tiempo ha asaltado una duda de que no me obedeció mi hijo y de que mantuviera el secreto. He tenido la sospecha que lo ha comentado con alguno de sus amigos o compañeros. Porque llego a ponerla encima de él, de lado, en posiciones que yo no se las pedí ni mostré.
Por fin llegamos al punto en que por estar confirmado su embarazo ya no fue posible suministrarle la escopolamina a mi mujer, pero creo que, si se le quedaron ciertas instrucciones en su subconsciente, como el que únicamente usara vestidos cortos, amplios y sin ropa interior mientras estábamos en cas. También ya me fui a dormir a nuestra cama matrimonial y solo algunas noches se dormía Jr. con nosotros. Cuando estaba profundamente dormida, nuestro hijo aprovechaba para acariciar a su madre, besarla y meterle los dedos en su vagina y ano. Eso si le enseñe a que mojara los dedos dentro de la panocha de su mama y servía de lubricante.
Durante el embarazo mi hijo tuvo que dejarla de coger y fue entonces que yo cumplí con mi papel de marido. Era delicioso para mi el poderla penetrar sabiendo que mi nieto crecía en su vientre. Lo diferente es que mi hijo veía a su mama como mujer, si hice una labor de convencimiento con ella para que le permitiera admirarla sin sentirse incomoda, se sentaba enfrente de el sin cuidarse de mantener las rodillas juntas, así que muchas veces por no decir que siempre mi hijo podía ver la concha de su madre. Me daba un morbo especial.
Afortunadamente él bebe llego bien, es un varoncito, aunque a decir verdad, si temía que el bebe naciera con algún problema, por ser hijo de su hermano y por la droga suministrada durante el proceso para embarazarse mi esposa.
Cuando estaba lactando varias veces dejo que mi hijo bebiera también de su leche nuevamente, aunque ahora tenía doce años…siempre será para ella su bebe… doce años y ya es padre. Aunque no está consciente de ello. Sobre todo yo estoy orgulloso como padre y como abuelo.
Espero algún dia nos compartas unas fotos que tomaste