YO Y MIS PEQUEÑOS SOBRINOS Pt.2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por ScullyMortalis.
———————————————————–CAPITULO II————————————————————–

—————————————————-“Vacaciones de Verano”——————————————————-

Finalmente llegaron las siguientes vacaciones, mi hermano tenía pensado ir a la playa, yo lo único que quería es estar cerca de mis sobrinas, sin embargo intentaba disimularlo, sería extraño que todos notasen una repentina actitud cariñosa hacia mis sobrinas, la cual nunca había sentido, mi madre me pregunto que si me gustaría ir a la playa con mi hermano para que no me aburriese en casa todas las vacaciones, y yo rápidamente le conteste “Si”.

Empaque mis cosas y mi hermano pasó a recogerme en el auto, mis sobrinas al verme (Con voces entre mezcladas) dijeron:

-Daniela y Gabriela: Tío!, va a viajar con nosotras?

-Yo: Si, su papa me invito.

-Daniela: Nos vamos a divertir jugando en la playa.

(Yo pensando dentro de mí, -Claro que nos vamos a divertir, espere durante meses este momento)

Al llegar nos hospedamos en un hotel, después de eso fuimos a conocer un poco los lugares cercanos, al siguiente día fuimos a la playa, yo personalmente jamás sentí algo al ver a niñas pequeñas, ni si quiera en bikini, al punto que ni si quiera sentía algo al ver a mi sobrina Gabriela en traje de baño, pero cuando vi a Daniela, con quien he deseado tenerla y llegar aún más lejos, no pude evitar excitarme, al punto que aprovechaba cada oportunidad para cargarla con ese traje de baño, la ponía sentada entre mis piernas y me movía como loco para así frotar (No de manera directa) mi pene, ella pensaba que estaba haciendo caballito, a esa edad piensas que todo es un juego, pero me producía más emoción saber que aun lado estaba Gabriela viéndonos, y que ella no sabía cuál era mi intención, de todos modos ponía cara de excitado, igual pensaban que estaba jugando.

Horas pasaron y decidimos ir al hotel después de una tarde en la playa, todos tomaron un baño para quitarse la arena del cuerpo, mi hermano me dijo que compartiría la cama con mis sobrinas.
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ni si quiera me negué, pero estaba tan cansado que me quede dormido.

Cuando desperté note que mi sobrina Gabriela estaba al lado de mi durmiendo, me levante de la cama y en la otra estaba Daniela y mi cuñada dormida, mi hermano había salido a comprar recuerdos que vendían cerca de la playa, yo no podía esperar hasta la noche así que decidí poner en marcha mi plan, mi sobrina Daniela se encontraba boca arriba, y para mi sorpresa estaba durmiendo solo con la ropa interior, el momento no podía ser más perfecto, tan solo el hecho de que mi cuñada estuviese ahí mismo durmiendo dándome la espalda, no me importaba mucho, al contrario, sentía más adrenalina.

Saque mi pene y comencé a frotárselo en los labios, esta vez ni si quiera me di a la tarea de moverla para comprobar que tan dormida estaba, al parecer cada vez me importaba menos tomar esas precauciones, comencé a meter mi pene en su boca, podía sentir su lengua en la punta del pene, al mismo tiempo, toque sus pequeños pezones, me acerque a lamerlos y chuparlos, volví a meter mi pene en su boca y con la otra mano empecé a tocarla por todo el cuerpo incluyendo su vagina, con mis dedos hice a un lado sus panties, así de esta manera si mi cuñada despertaba, no tendría que hacer un movimiento brusco subiéndole las bragas, seguí con mi pene en su boca por varios minutos, decidí abrir un poco sus piernas para poder meter un poco mis dedos en su vagina, era tan suave y un poco húmeda, me acerque a su vagina y con mis dedos abriendo sus labios, comencé a lamer, ella empezó a mover una pierna pero no me importó, seguí haciéndolo hasta que en ese momento mi cuñada empezó a girarse, yo me aleje rápidamente, como disimulando que me acabo de despertar, ella solo se giró, pero seguía muy dormida, al punto que roncaba, me acerque a Daniela, y nuevamente volví a poner mi pene dentro de su boca.

Mientras hacía unos movimientos de cadera, adelante y atrás, miraba fijamente al rostro de mi cuñada, durmiendo y roncando con la boca abierta, la baba casi saliéndole y yo con el pene dentro de la pequeña boca de su hija, ese momento fue cuando descubrí mis pensamientos más pervertidos, por si lo anterior no fuera suficiente, comencé a pensar “Aquí está tu hijita que tanto descuidas, a punto de beberse mi semen, a segundos de tomar un poco de leche desde el envase”, en ese momento eyacule, no fue directamente en la garganta o la lengua, si no en la mejilla interior, fue tanto semen que salía por su boca mientras mi pene se encontraba aun adentro, volteé a ver mi cuñada y dije en mi mente: “A ti te escurre saliva mientras duermes, y a tu hija semen, tal para cual, ambas se atragantan con fluidos.
”, guarde mi pene y la deje ahí, fui al baño a orinar, y mientras orinaba escuche que alguien tosía, al salir del baño me di cuenta que era Daniela.

Paso como una hora y llego mi hermano, mi sobrina dijo:

-Daniela: Papi, ya quiero desayunar.

(A lo que respondí interviniendo):

-Yo: Pero si ya acabas de desayunar.

-Daniela: Cuando?

-Yo: No, es mentira jeje.

(Ella solamente sonrió)

Aquel increíble suceso volví a repetirlo unas cuantas veces más, pero más excitantes que la primera?, no, después me di cuenta que lo más emocionante, era el hecho de que puedo ser descubierto, así que tuve una idea para saciar mis instintos más lujuriosos, intentaría hacerlo con mi sobrina mientras esté despierta, talvez no reaccione de mala manera, siendo que es tan inocente.

Tenía que llevar a cabo esa idea, después de ser paciente, el día llego, estaban por ir a la piscina que tiene el hotel, Daniela aún estaba dormida, mi cuñada menciono algo de despertarla, porque no podían dejarla sola en el cuarto, yo le dije que no iría porque no tenía ganas, ella me dijo:

-Marisol: Te importaría cuidarla, si se despierta me hechas un grito.

-Yo: Por supuesto.

(Nuevamente no podía detener mis pensamientos pervertidos, solo pensaba: “Si no puedes cuidarla tú, entonces yo la cuidare y le enseñare cosas nuevas”)

Todos se fueron a la piscina y yo estaba por empezar a divertirme con mi sobrina, hasta que veo que se despierta, ella me pregunto:

-Daniela: A donde fueron mis papas.
y Gabriela?

-Yo: Fueron a la piscina, pero dijeron que volverían por ti.

(En ningún momento le mencione que tendría que ser yo quien le avisara a su mama que ella ya despertó.
)

Era en ese momento que tenía que llevar a cabo mi idea, le pedí a mi sobrina Daniela que jugáramos, pero le advertí que era un juego que a sus papas no les gustaría, podrían castigarla, le dije:

-Yo: Daniela

-Daniela: Que.
?

-Yo: Quieres jugar a algo?

-Daniela: Si

-Yo: Es más como un reto, pero tus papas no pueden enterarse porque te pueden castigar.

-Daniela: de que es?

-Yo: Te reto a que te quites la ropa y corras por todo el cuarto.

(Solo tenía puesto la ropa interior)

-Daniela:.
?

-Yo: Lo harás?

-Daniela: No se

-Yo: Si lo haces te dejo jugar con mis juguetes que tengo guardados en mi casa

Daniela: Bueno, si lo voy a hacer.

En ese momento se quitó las panties y comenzó a correr por todo el cuarto, solo sonreía, y yo la miraba con lujuria, después de eso la detuve y le dije:

-Yo: Dani

-Daniela: Qué?

-Yo: Estas más cómoda sin el calzón?

-Daniela: (Respondió que “Si” con la cabeza)

-Yo: Quieres que te haga caballito?

-Daniela: Si

La cargue y la puse sentada entre mis piernas, empecé a moverme y ya tenía el pene erecto, pase de tomarla por la cintura a poner mis manos en su pecho y masajear, ella tomo un muñeco que estaba en la cama, aprovechando esa distracción, me baje el short y el bóxer lo suficiente, para que mi pene pudiese salir, así comencé a frotar mi pene en su entre pierna, ella no se daba cuenta, solo seguía jugando con su muñeco, le dije que si nos recargábamos en el regazo de la cama, contesto que “Si”, yo estaba acostado con las piernas flexionadas, ella encima de mi pegando su espalda en mi pecho y su pequeño culo en mi pene completamente erecto, le pedí que cerrara un poco las piernas, de esta manera podría frotar mi pene entre sus piernas, al mismo tiempo que rozaba con su vagina, era tan placentero, y más el hecho de que esta vez lo estaba haciendo con ella despierta, y los más importante, que ella no sabía lo que estaba pasando, no podía controlar mi emoción, el hecho de saber lo que estaba por venir, ahora lo podría hacer todo el tiempo, siempre y cuando ella y yo estuviésemos solos y estuviese distraída, como era de esperar fue tanta excitación que acabe por eyacular entre sus piernas, ella miro hacia abajo, yo rápidamente me la quite de encima y guarde mi pene, ella se tocó la entrepierna y me pregunto que era esa cosa blanca, yo le dije que era jabón líquido, le pase un poco de papel para que se limpiara, ella se olió las manos y dijo que olía raro, yo solo reí, y esos pensamientos volvieron: “De ahora en adelante, voy a limpiarte el trasero con semen”.

Las vacaciones llegaron a su fin, yo estaba satisfecho por todo lo acontecido, ahora no sentía desesperación, sabiendo que cada vez que me encontrara solo con mi sobrina, tendría un poco de diversión, sin embargo había días en los que no venían de visita y tenía que descargar mis instintos morbosos y pervertidos, salía a la calle y me masturbaba detrás o cerca de chicas muy atractivas físicamente, sin que nadie se diera cuenta, les dejaba semen encima si era posible, después de algún tiempo me entere que no era el único que tenía ese extraño fetiche, pero aun así, lo que sentía al hacer eso con mi sobrina era inigualable, hasta que llegaron las próximas vacaciones, la rutina que tenía con mi sobrina cambiaria, en unas cosas para bien y en otras para mal.